en el cual se nos permiten ambos, ver y hablar proféticamente. Para hacer esto, primero debemos edificarnos a nosotros mismos por "esperar en el Señor", y por nuestro "hablar en lenguas", mientras somos vivificados por el Espíritu Santo. IV. La Oficina del Profeta, Y Dios puso a algunos en la iglesia, primeramente apóstoles, luego profetas...I Corintios 12:28. El Señor necesita profetas en nuestros días. Un "profeta" es alguien que habla una palabra específica, en un lugar específico, en un momento específico. Habla en nombre de Dios, como Su portavoz. El oficio profético es un ministerio limitado (Son todos profetas? Vea I Corintios 12:29), y es muy diferente del don de la profecía. Este es un ministerio muy costoso, aquellos llamados a este ministerio deben someterse a una vida de disciplina y orientación. V. El Espíritu de Profecía, ... Porque el testimonio de Jesús es el espíritu de profecía. Apocalipsis 19:10. Este es el Reino más alto de lo profético, y funciona a través de "relación", más bien que como un "don”. El "don" de la profecía requiere sólo nuestro rendirnos al Espíritu Santo para la función, pero no es necesariamente una indicación de la vida recta, como es el "Espíritu de la profecía." A medida que maduramos espiritualmente, nuestras vidas reflejan una mayor calidad de espíritu con su expresión resultante, trascendiendo el Reino del don del ministerio. El Espíritu de Profecía expresa una vida que se ha convertido en un "testimonio del" Señor, no simplemente un "testigo" de Él. Va más allá de las palabras, mientras nuestra vida se convierte en la expresión de Sus pensamientos y sentimientos, como si fuéramos El. Pero nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Espíritu del Señor. II Corintios 3:18 A medida que nos hacemos uno en unión con Él, nuestras vidas se convierten como un "espejo" que refleja la persona y la presencia del Señor Jesús. Ahora, "el testimonio de Jesús, que es el espíritu de profecía", será visto y oído, en nosotros como "espejo" de Él. El Señor desea traer "vencedores" en este nivel de relación, en el cual, el "espíritu de profecía" se convertirá en una fuerza creativa que afectará en gran medida el mundo en la manifestación exterior de los propósitos de los últimos tiempos del Señor. Wade Taylor Por: Nancy Taylor Warner (Nanjemoy, MD, USA)
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