PREHISTORIA

Con Perspectiva Femenina

La prehistoria ha sido un periodo difícil de representar en los libros y museos. Los restos que quedan son, muchas veces, difíciles de situar en un contexto.

Así pues, las representaciones gráficas y relatos son un instrumento importante para permitir a las personas imaginar el pasado y la vida de los ancestros.

Sin embargo, surge un problema cuando esas imágenes se crean, ante la falta de más datos, teniendo como base una serie de prejuicios, asunciones y convencionalismos.

El primer prejuicio que condiciona las representaciones gráficas sobre la prehistoria, es el de la normatividad del hombre, considerado como el estándar o lo neutro Los varones aparecen más, con más protagonismo y en papeles centrales.

Incluso en la composición visual, las mujeres aparecen muchas veces en segundo plano o como un “elemento de fondo”, mientras que los hombres actúan con mayor frecuencia como elementos principales.

Aún más ausente está el hombre en las actividades de cuidado. Es prácticamente imposible encontrar hombres adultos cuidando de niños, y menos aún, cargando a neonatos o niños muy pequeños.