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Nacho Villoch

NACHO VILLOCH Coaching y Revolución Tecnológica

una entrevista de jorge salinas, comité organizador congreso internacional coaching ejecutivo aecop españa

Nacho Villoch, autor de “La Aventura de Diana” y “El Desafío de Yago” participó con gran éxito en nuestro pasado congreso. En esta entrevista, nos habla de cómo tiene que evolucionar el coaching en el contexto actual de la revolución tecnológica y la era de la Inteligencia Artificial

Te dedicas a la Innovación hace muchos años,pero…, ¿realmente sabemos de qué hablamos cuando hablamos de Innovación? ¿No hemos quemado un poco ese término? .

Efectivamente, hay términos que desgastamos de tanto usarlos: le ha pasado a Innovación, Talento, Emprendimiento, Sostenibilidad…, una vez que pasan a forman parte del léxico corporativo, -y de muchos políticos- se banalizan, se descontextualizan, pierden su significado original, y esa sobre exposición nos inmuniza y acaban por formar parte del paisaje. No hay un CEO o Directivo que se atreva a decir que no le interesa la innovación, el Talento o la Sostenibilidad, aunque ni lo practique, ni lo tenga en la agenda ni en el presupuesto… y cuando le preguntes por ello te responda, con suerte, balbucean

do eslóganes o misiones corporativas.

Eres reconocido por tu libro “La Aventura de Diana” ¿por qué utilizas la metáfora de la Aventura para hablar de Innovación?

La Aventura es una metáfora muy poderosa. Etimológicamente, viene del latín Ad -venere, “Lo que está por venir”, es decir el porvenir, el futuro. Y la Innovación entre otras cosas es diseñar y fabricar ese futuro, ese provenir. Además, como actitud, la de Aventurero nos lleva a asumir riesgos, como mínimo a resultados no esperados, a ampliar -o dinamitar- la zona de confort, a descubrir, a explorar y estar esperando lo mejor, pero preparado para lo peor. Todo eso es Innovación. Si los resultados van a ser ciertos, seguros, medibles y predictibles. no será innovación, y con toda seguridad no será una aventura. Además, no conozco a nadie que no se emocione ante la perspectiva de vivir una aventura, así que ¿qué mejor recurso para embarcar a un equipo en un proyecto de transformación innovador?

¿Cuales son los mayores desafíos que tienen las personas -y las organizaciones- a la hora de innovar?

En las organizaciones está perfectamente diagnosticado, y tiene que ver con la gestión del corto plazo, de la inercia del “porque siempre se ha hecho así”, porque es lo que indica la norma, el procedimiento o el manual. De hecho, está tan claro, que hasta tiene un nombre “la Ambidextreza

«Si los resultados van a ser ciertos, seguros, medibles y predictibles, no será innovación»

corporativa”, es decir encontrar el equilibrio entre explotar los recursos disponibles (capital tiempo y talento) y explorar nuevas alternativas -con resultados inciertos-. Esto no es nuevo, Maquiavelo en el s. XVI ya vaticinaba que quien aspire a cambiar el status quo -el innovador- encontrará la feroz resistencia de aquellos a quienes les va bien, y el tibio apoyo de quienes les podría ir mejor. Es decir, la resistencia del “establishment” ¿A quiénes les va bien en una empresa y se van a resistir numantinamente? A menudo los equipos directivos…

A nivel particular, un gran obstáculo es la resistencia al cambio. Los Homo sapiens somos animales de costumbres, de hábitos y nos cuesta introducir nuevos patrones, de conducta. Nos sentimos más cómodos en el pensamiento reproductivo, que en el pensamiento productivo. Repetir patrones, nos ahorra energía e incertidumbre. Por eso, necesitamos un coach a menudo.

¿Y cuál es el mayor activo a la hora de innovar?

Sobre este tema hay abundante literatura y tesis doctorales. Intuitivamente pensaríamos que hace falta un abultado presupuesto en I+D+i , o laboratorios de experimentar, o acceder a sofisticadas tecnologías… pero sin embargo el factor más importante, está perfectamente identificado y cuantificado: Está en las personas, y especialmente vinculado al optimismo: Solo los optimistas, los que creen que el futuro que viene es mejor, hacen lo posible por diseñarlo, abrazarlo u hacer que suceda; en el otro polo, los pesimistas, los que creen que lo que viene es peor van a hacer lo imposible por evitarlo, boicotearlo y sabotearlo…por mero

instinto de supervivencia. Esto abre un esperanzador horizonte al (auto)liderazgo positivo en clave de identificar y aprovechas oportunidades.

En esta época de tecnología exponencial, de inteligencia artificial, big data... ¿qué espacio quedan para las personas? ¿Vamos a ser reemplazados por robots?

Has puesto justo el dedo en la llaga con esta pregunta tan incisiva. Efectivamente todos estamos viendo con creciente ansiedad que muchos puestos de trabajo corren el riesgo de ser automatizados, en aras a la competencia y la productividad. Y simultáneamente hay un creciente interés por el Humanismo digital, por introducir factores de “ética” que inspiren o modulen a la Inteligencia Artificial. En este nuevo renacimiento tecnológico cobran un creciente protagonismo las “softskills”, las llamadas habilidades blandas como la comunicación, la colaboración, el pensamiento crítico, la creatividad y la curiosidad. La Inteligencia artificial es muy buena dándonos respuestas, pero no lo es tanto haciéndose preguntas. Las preguntas inteligentes, recibirán respuestas inteligentes, y eso va a requerir de mucha curiosidad y creatividad

Y en este nuevo contexto, ¿cómo debería evolucionar el coaching que se practica en las empresas?

Creo que, coherentemente con las respuestas anteriores, debería dirigirse hacia ese optimismo vital y actitud positiva ante los cambios, a entenderlos e interiorizarlos como el escenario en que desarrollarnos, A asimilar que esto ya no es solo una época de cambios,

«La Inteligencia artificial es muy buena dándonos respuestas, pero no lo es tanto haciéndose preguntas»

sino un cambio de época, y activar a los equipos para ser parte de ese cambio, desarrollando esas habilidades blandas, que les hagan resilientes y fluidos ante el cambio. Reza un milenario proverbio chino de renovada vigencia que “cuando soplan vientos de cambio, mientras unos construyen muros, otros construyen molinos” Me parece una manera muy poética de identificar esa actitud ante los cambios, sobre todo en este “cambio de fase”, en el que lo viejo todavía no ha dejado de funcionar, y lo nuevo todavía no funciona del todo.

Eres un facilitador de talleres de creatividad ... ¿no está sobre valorada la creatividad?

¿Sobrevalorada? ¡¡Al contrario!!; De hecho, está tremendamente infravalorada. Haz la prueba de preguntar a un colectivo si se sienten creativos. Verás como lo niegan, y si alguien asiente, será casi con vergüenza. En muchas empresas se ha circunscrito al departamento creativo, quizás en el área de marketing, a unos tipos más o menos excéntricos, con barbas de hípster y gafas de pasta. Arquetipos e iconos a parte, el hecho es que todos fuimos creativos… hasta que fuimos a primaria. El proceso de educastración que comienza en la escuela a base de repetir patrones, y recompensar las respuestas correctas y estigmatizar las erróneas, va inhibiendo la creatividad hasta anularla. La creatividad, según Einstein, es la inteligencia divirtiéndose, y parece que está mal divertirse en el trabajo.

Escribiste “El Desafio de Yago:El Viaje a las Fuentes del Talento”, ¿las has encontrado?

Digamos que he encontrado aquello que me hace singular,

PREMIO A LA EXCELENCIA EMPRESARIAL 2020

PREMIO EUROPEO 2018 A LA EXCELENCIA

El Instituto para la Excelencia Profesional (IEP) ha otorgado a AECOP España el Premio a la Excelencia Profesional 2020. Reconocimiento a nuestra asociación por ser “la única asociación de nuestro país que se ocupa exclusivamente del coaching ejecutivo, de su promoción y difusión en el tejido empresarial considerándolo elemento clave de la cultura de la empresa”.

«La IA se ocupará de las tareas más repetitivas, rutinarias, y aburridas»

único y especial -mi “elemento”, según Ken Robinson, y estoy trabajando mi ikigai, mi propósito en la vida. Creo que todos nacemos con ese elemento que nos hace singulares y especiales, pero también creo que muchos -la inmensa mayoría- mueren sin haberlo llegado a identificar. Pero más allá de es talento innato, natural, también lo he encontrado en la constancia y la perseverancia de la disciplina. Me ha perecido muy interesante la distinción entre Exigencia y Excelencia, que en el mundo del coaching está muy establecida, y es poco entendida en otros ámbitos como el empresarial y educativo dónde a menudo se confunden con nefastas consecuencias.

¿Cual es tu relación con el mundo del desarrollo del talento, del coaching...?

Sigo con interés y admiración a coaches de diversas escuelas y trayectorias como Rubén Turienzo, Enrique Jurado, Pilar Jericó, o Ignacio Isusi de los que aprendo cada día. Personalmente me he desarrollado más en el mundo del Mentoring –el primo del coachingy llevo más de 10 años mentorizando emprendedores en varias organizaciones como la MET Community, SEK Lab o Héroes Club. Algo que he podido verificar en mis mas de 30 años de experiencia profesional es que la actitud ante los desafíos y la cohesión de los equipos es lo que marca la diferencia, y un buen coach tiene mucho que aportar en esos procesos. En el mundo deportivo hace mas de 25 años que soy DiveMaster (asistente de instructor de submarinismo) y he guiado a muchos aspirantes a buceadores fuera de su zona de confort a descubrir el fascinante “mundo del silencio” bajo la superficie ¿eso cualifica como coach? Y como padre de tres hijas, trabajo intensamente en que desplieguen todo su potencial y sean la “mejor versión de lo que puedan llegar a ser”… y me siento muy orgulloso del resultado.

¿Se debe practicar un coaching diferente en España que en Singapur o USA?

Habiendo vivido en esos países, creo que hay obvias diferencias culturales, marcadas por prioridades como el individualismo propio de las culturas occidentales y el sentimiento más gregario y social de las orientales. Además, hay ámbitos de actuación y territorios de intimidad que conviene entender bien. Los españoles somos muy expansivos a la hora de comunicar nuestras emociones, y abrazarnos y tocarnos, y eso es chocante para otras culturas.

Pero más allá de estas idiosincrasias culturales, al final las personas, los homo sapiens, funcionamos con los mismos algoritmos bioquímicos que rigen nuestras preocupaciones, inseguridades y ansiedades, nuestra “rueda de la vida” de querer prosperar, asegurar el bien estar de la familia, encontrar reconocimiento por nuestro desempeño… Sí que es muy interesante a nivel de PNL las diferencias entre idiomas; La forma de hablar refleja una forma de pensar, una “arquitectura mental”, en la que por ejemplo, para los españoles va primero el sustantivo, la esencia, y luego el adjetivo que lo califica; Para los ingleses, por ejemplo va primero el adjetivo y luego el nombre; -y el orden de los factores importa- En el caso de la cultura china, los pictogramas encierran ideas riquísimas de gran complejidad que funden significante y significado de modo que los occidentales no podemos comprender.

¿Eres activo -o activistacon algunas causas, desde medioambientales a temas de Talento Senior como #NoCaduco o la Revolución de las canas…, etc. ? ¿Qué te mueve?

España,con una demografía muy complicada, - con una bajísima natalidad, y una de las mayores longevidades- no puede permitirse el drenaje de talento que supone prescindir de la riqueza y diversidad que supone la experiencia. España “es país para viejos”, pero sin embargo sin oportunidades. Creo que el desafío no es la extensión de la vida, en la que somos unos campeones, sino la expansión de la vida, en calidad y actividad. Creo que en este campo hay una enorme oportunidad para los coaches “para seniors” que les ayuden a ser la mejor versión de si mismos también en esa etapa de la vida. Como dice Woody Allen, a mi el futuro me interesa porque es donde pienso pasar el resto de mi vida. Y espero seguir siendo un elemento valioso y productivo de la sociedad dentro de 25 o 30 años

Hablando de Innovación ...,¿Qué papel va a desempeñar la inteligencia artificial en relación con el coaching del futuro?

No tengo una bola de cristal, pero extrapolando lo que ya está pasando en otras áreas, la IA se ocupará de las tareas más repetitivas, rutinarias, y aburridas, dejando más espacio a las relaciones de persona a persona, a la empatía y la inteligencia emocional. Igualmente para las personas, si consiguen liberarse de esas tareas tendrán más tiempo para invertir en su desarrollo personal, físico y emocional. ¿Podrá un día una IA como Siri o Alexa o Cortana aplicarnos una sesión de coaching? . ¿veremos un coach robot?... Sinceramente espero que no.