Boletin de la Comisión de la mujer de Ademys

Page 1

BOLETÍN

DE LA COMISION DE LA MUJER DE Ademys

Ademys

Asociación docente

info@ademys.org.ar www.ademys.org.ar

Tel: 4381-5400 // 4382-2697

Solís 823

ademysprensa @ademysprensa


Como el último 8M, hagamos temblar la Tierra por nuestros derechos! El movimiento de mujeres convirtió al Segundo Paro Internacional en una jornada global: millones de mujeres en todo el mundo se manifestaron haciendo oír sus reclamos, volviendo al 8M un día histórico. Bajo la consigna #NosotrasParamos, mujeres de más de 57 países y cientos de ciudades con realidades muy diversas salieron a las calles: desde la Huelga en España, pasando por las movilizaciones en Argentina, hasta la corrida de mujeres en Arabia Saudita, las mujeres hicimos temblar la tierra. En nuestro país, más de 600.000 personas nos movilizamos en todo el territorio contra el ajuste de Macri y los gobernadores, los despidos, la violencia machista, y muchos otros reclamos. Con una gran presencia de mujeres trabajadoras, entre ellas las docentes y de los sectores populares, el reclamo contra la desigualdad salarial -que en Argentina llega al 27%-, se hizo sentir. A partir del histórico #Pañuelazo que se realizó en febrero por el aborto legal, seguro y gratuito el gobierno se vio obligado a dar “luz verde” para que se discuta en el Congreso Nacional. Por eso, la consigna “Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir” fue uno de los ejes del movimiento de mujeres y fueron miles las que marcharon con sus pañuelos verdes, símbolo de la lucha por este derecho.Hoy en día, todos los martes y jueves, expositores a “favor y en contra” del derecho al aborto participan del debate parlamentario, mientras cientos de mujeres nos movilizaciones en las puertas del Congreso. En la segunda semana de junio se discutirá en la cámara de diputados.


El Proyecto de Ley de Interrupción Legal del Embarazo de la Campaña Nacional por el derecho al aborto, se presentó por séptima vez en el Congreso Nacional este año. Es decir, durante años el PJ, FPV, el PRO, la UCR y todos los bloques mayoritarios han negado este derecho. Mientras tanto son las mujeres pobres las que mueren por abortos clandestinos. Son nuestros jóvenes secundarixs los que no acceden a educación sexual, laica y científica. Durante la década kirchnerista, se sancionaron la ley de Educación Sexual Integral y la Ley de Salud Reproductiva pero ninguna de las dos ha resuelto la demanda y las problemáticas cada días más crecientes en las escuelas. La ley de Educación Sexual Integral no puede brindar herramientas para decidir, tal como lxs estudiantes secundarixs lo expresaron en las tomas del 2017. La razón es que es una ley consensuada con La Iglesia Católica. Esto se evidencia no sólo en su artículo 5 (y artículo 8 de su reglamentación en CABA) donde se contempla la adaptación de los contenidos a la cosmovisión de la comunidad que la imparta, sino también en su redacción, plagada de vaguedades y ausencias de contenidos (como la diversidad sexual y el aborto) y de una materia específica obligatoria sobre el tema. Por otro lado, la ley de Salud Reproductiva también es incapaz de brindar anticonceptivos en un marco de vaciamiento donde el acceso a la salud es cada vez más difícil. Ni el macrismo ni el kirchnerismo en el Congreso son aliados de las mujeres trabajadoras en esta pelea y no se puede confiar en sus votos pasivamente. Sólo la imprescindible lucha en las calles logrará conquistar este derecho y que esta victoria se transforme en la punta de lanza que propicie una separación verdadera de la Iglesia del Estado. La posibilidad de acceder a la interrupción del embarazo de forma legal y en condiciones sanitarias acordes debe ser entendida como parte de una lucha mayor que tenemos las mujeres trabajadoras para superar las múltiples opresiones y violencias que sufrimos cuando no podemos acceder a una educación laica y científica, a anticonceptivos, a licencias especiales, a igual salarial, etc. Si este paquete de reclamos no se asocia al de la separación de la Iglesia del Estado y al de condiciones materiales de vida que nos permitan desarrollarnos y poder decidir plenamente, cualquier ley no será otra cosa que una versión desdibujada de aquello por lo que estamos luchando. A pocos días de un nuevo aniversario del #3J nos preparamos para seguir en las calles para seguir levantando los reclamos de las mujeres por NiUnaMenos, contra toda forma de violencia de género y sexual, contra la discriminación salarial y contra el ajuste de gobierno de Macri y los gobernadores. Entendemos que no hay Entendemos que no hay #NIUNAMENOS si avanza el ajuste, la reforma laboral y el endeudamiento con el FMI.

En un gremio integrado de forma mayoritaria por mujeres, Ademys se pone al servicio de potenciar todas estas luchas. Por eso, te invitamos a organizarte junto a nosotras por:

*Educación Sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir. *Construcción de Escuelas Infantiles para nuestrxs niñxs. *Licencias por Fertilización Asistida que nos permitan acceder a la maternidad cuando la deseemos. *NiUnaMenos, basta de violencia de género. Por plata para la Ley 26.485, la educación y la salud, no para el FMI y la deuda externa. *Ampliación de las licencias por maternidad y paternidad. *Basta de discriminación salarial de las mujeres! Igual trabajo, igual salario. Salario equivalente a la canasta familiar, para poder sostener económicamente a nuestras familias.


Las docentes decimos basta de aborto clandestino, sí al aborto legal, seguro y gratuito Las docentes fuimos una vez más parte de lasmiles de mujeres que frente al Congreso nos pronunciamos a favor del proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) ante el comienzo de su tratamiento en comisiones, desde el 10/4. La presencia masiva en las calles muestra la continuidad de un método de lucha que venimos protagonizando las mujeres desde hace años con el movimiento de #Ni una menos y los últimos 8M bajo la consigna “Paro Internacional de Mujeres. Aborto legal ya. Basta de ajuste y despidos”. Estas inmensas movilizaciones populares permitieron que el proyecto de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto se tratara luego de 12 años de estar cajoneado. Este propone resolver el problema del aborto clandestino, al permitir el acceso al aborto en el sistema público, obra sociales o prepagas durante las primeras 14 semanas de gestación.Es de público conocimiento que los abortos clandestinos provocan miles de muertes por año. El debate continuará martes y jueves hasta finales de mayo con cerca de 1000 expositores ante 4 comisiones que fueron conformadas por el PRO con posterioridad a que los 71 diputadxs firmaran el Proyecto de IVE. Esto dejó afuera a muchos de los propios diputadxs impulsores del proyecto. La negativa histórica de macristas y kirchneristas a reconocer este derecho es una manifestación del rol disciplinador que tiene la legislación actual sobre el cuerpo de las mujeres y su derecho a ser o no ser madre. La ilegalidad del aborto se ha convertido en una herramienta política más para un sometimiento de la mujer que comienza muy tempranamente ya desde la escuela y expresa la necesidad cada día más urgente de la separación de la Iglesia del Estado. Entre los lobbies clericales en curso se impulsa, en paralelo al tratamiento del aborto, una ley de “libertad religiosa” que, entre otras cosas, amplía la objeción de conciencia a todos los cultos y a todas las instancias de la vida civil. Esto no sólo serviría para bloquear de hecho el aborto frente a su posible legalización, sino también para consolidar las escuelas clericales y bloquear el dictado de contenidos de educación sexual en las escuelas. Estos recursos clericales ya se encuentra actualmente en la ley de aborto no punible así como también en el art. 5 de la ESI que condiciona el dictado de los contenidos al ideario institucional y a las convicciones de sus miembros. La conquista del aborto, junto con las demandas de anticonceptivos gratuitos y educación sexual científica y laica, depende de nuestra permanente y creciente organización, conciencia y masividad. Para eso es necesario que impulsemos el debate abierto en las escuelas y la movilización docente en las calles. En ese sentido, te invitamos a participar de esas iniciativas y además sumar tu firma al pronunciamiento a favor del aborto legal, seguro y gratuito que impulsamos desde la Comisión de mujeres de Ademys.


¿Por qué creemos que hay que separar a la Iglesia del Estado? Una de las responsabilidades del estado, es la de garantizar salud y educación a conjunto de la población, para ello debe destinar los recursos necesarios para las instituciones encargadas de brindar estos servicios funcionen adecuadamente. En un contexto de caída de los presupuestos destinados a salud y educación, se dilapidan importantísimos recursos para subsidiar al clero y a las escuelas confesionales. La iglesia Católica recibe de manera directa 130 millones de pesos destinados al pago de los “sueldos” de los obispos por año y muchos millones más a través de los subsidios a las escuelas católicas y otras instituciones. También financia obras de infraestructura. Esta caída presupuestaria se materializa en las escuelas que se caen a pedazos, las viandas paupérrimas y las paritarias docentes a la baja y contrasta con los jugosos subsidios que recibe la iglesia. Mientras un docente no alcanza a cubrir con su sueldo la canasta básica un obispo cobra 45.000 pesos por mes. Además de ello, la Iglesia Católica es una institución que se opone a los derechos de las mujeres, tanto impidiendo una educación sexual científico y laica con perspectiva de género, como posicionando en contra del derecho al aborto legal. Desde Ademys entendemos que cada credo tiene que abordar sus propias finanzas y garantizar su funcionamiento. Creemos que este financiamiento estatal desnuda la complicidad con la iglesia para imponer sus ideas con el objetivo de someter al conjunto de los trabajadores en general y a las mujeres en particular en un contexto de ajuste brutal. Desde este lugar nos pronunciamos por la separación de la iglesia del estado.


Para que no haya “ni una menos”, tenemos que ser “una más” en las calles Cuando hablamos de violencia de género, enseguida nos representamos a una mujer golpeada o asesinada por un hombre violento. Sin embargo, esto es sólo una parte. La más terrible, sí. La que emerge porque es noticia desgarradora. Pero son las otras violencias -esas que para muchas mujeres no lo son, porque son tan cotidianas como respirar-, las que construyen los cimientos sobre los que se asienta la punta del iceberg que es el femicidio. En comprender esto nos va la vida. Violencia es que midan nuestra inocencia por el largo de la pollera que usemos. Es que te culpen por quedar embarazada, como si la anticoncepción fuera cosa sólo de mujeres; como si el placer fuera sólo cosa de hombres. Es que te dejen sola con el crío “porque te gustó abrirte de piernas”. Violencia es que te paguen menos por el mismo trabajo; que te amenacen dejarte sin trabajo si no accedés a hacerle favores sexuales al jefe. Violencia es que te manden a lavar los platos cuando estás manejando o que te digan cosas por la calle que no pediste que te las digan y violencia es que te digan “loca frígida, marimacho” si reaccionás cuando te las dicen. Si somos sumisas, nos pegan. Si los enfrentamos, nos pegan. Pegan con puños, con palabras, con chistes, con gestos. Nos pegan como a sacos de boxeo. Porque sí. Porque pueden. Y pueden porque un sistema los avala. La opresión fue cambiando sus formas, pero siempre mantuvo vigente su esencia: la dominación sobre la mujer. Un modelo que afecta también a los varones, imponiéndoles estereotipos de masculinidad, so pena de ser tachados de “mariquitas” si no los asumen. Puestas a elegir, hemos elegido pelear,aunque nos peguen; dijimos “NO” y “NI UNA MENOS” y nuestra lucha ha visibilizado nuestros reclamos y nos ha fortalecido. Tenemos leyes y tenemos prensa. Pero, todavía, no alcanza. El Estado, que debiera ser garante de la integridad física, psíquica y emocional de quien realiza la denuncia y de las personas involucradas, dice, pero no hace: no hace seguimiento de las denuncias, no sólo no garantiza el presupuesto necesario para montar una red de refugios para que la mujer se aleje de la situación violenta, sino que rebaja el existente, ya insuficiente, para atender esta problemática. Como se ve, no es un slogan, es una verdad a gritos: EL ESTADO ES RESPONSABLE. En el gremio docente, ocho de cada diez somos mujeres,cabeza de hogar y organizadoras familiares. No escapamos de esta realidad: los trabajos que emplean más mujeres son peor pagos, por lo que debemos sobrecargarnos de turnos para parar la olla, ni contemplan nuestras necesidades en sus condiciones laborales. Y tampoco somos ajenas a la violencia de género. Además, nos explotan en la cara las situaciones de violencia que padecen nuestrxs chicxs y sus familias. Si queremos que nos traten como personas, debemos asumir primero que somos mujeres y que, por el sólo hecho de serlo, nos discriminan. Esto es posible porque nos comen la cabeza y nos sumamos al coro enjuiciador que culpabiliza a la víctima y le exige pruebas de inocencia. Sólo así una mayoría mundial puede ser dominada por una minoría. Pero podemos romper esta cadena. Para que no haya “ni una menos”, tenemos que ser “una más” en las calles, en las casas, en los lugares de trabajo dando la pelea. Y nos necesitamos. Te invitamos a sumarte a la Comisión de la Mujer en Ademys, para que juntas nos informemos, elaboremos y enfrentemos la violencia de género.


Comisión de Mujeres de Ademys: un breve recorrido diversas actividades Desde la comisión venimos, desde hace años, desarrollando es trabajadoras de la vinculadas a la lucha y reivindicación de los derechos de las mujer y organización para educación. Conformamos un espacio de encuentro, elaboración adoras nos afectan. abordar el conjunto de las problemáticas que como mujeres y trabaj manera activa en los En este sentido, organizamos diversas actividades para intervenir de ámbitos coordinados distintos espacios educativos que transitamos a diario, así como en ipó en los últimos años con otros sectores y agrupaciones de la sociedad. La comisión partic l de Mujeres 8M, y en en las convocatorias del #NIUNAMENOS, en cada Paro Internaciona es. las distintas movilizaciones de la agenda del movimiento de mujer ntros Nacionales Así también, participamos con delegaciones de docentes, de los Encue iencias políticas de de Mujeres, llevando nuestros materiales pedagógicos y exper organización. Género – el artículo En 2016, las docentes conseguimos la Licencia por Violencia de la conquista de esta 70 Y-. Desde Ademys, impulsamos esta campaña que se coronó con os peleando por la Licencia y su reglamentación en 2017. Más allá de este triunfo, seguim continuamos exigiendo necesidad de incorporar la opción de traslado por la misma razón y y paternidad, por el reconocimiento de la ampliación de la licencia por maternidad tratamiento de fertilidad y trámites de adopción.

y gratuito ya que Además, levantamos el reclamo por la Legalización del Aborto seguro a de las mujeres, sin se trata de un derecho fundamental en lo que hace a la salud públic de género, científica dejar de exigir la aplicación de una Educación sexual con perspectiva derechos y y laica, para construir relaciones que promuevan la igualdad de oportunidades para todas las personas, al tiempo que seguimos reclamando recursos de parte del Estado. Nuestro aporte está plasmado, además, en nuestro material “Tiza en Mano” que trabaja con propuestas de secuencias y materiales para las aulas con perspectiva de género. Ante los numerosos casos de desaparición de estudiantes, participamos en la lucha por su aparición, ya que el Estado no se hace cargo de los derechos vulnerados. Acompañamos activamente a docentes, escuelas y a las familias para exigir y lograr que regresen a su hogar. Para seguir abordando estas y otras problemáticas que vayan surgiendo y para continuar construyendo este espacio, te invitamos a participar de las reuniones y de las actividades que tenemos por delante.



Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.