AARTI
| La guía sana de Ibiza
La entrevista
Joan Roig Ribas, terapeuta de Biomagnetismo Médico y director del Centro Budoka
¿Puedes darnos unas pinceladas generales sobre ti para conocerte un poquito mejor? Raíces ibicencas, nacido en Ibiza… ¡vamos! Un pagès «aborigen» (ja, ja). Desde muy joven se me despertó un gran interés por las Artes Marciales y de Salud, atraído por su contenido espiritual y el autoconocimiento que deviene de ellas. Estudiante de Kárate/KickBoxing y Reiki/Reflexología desde los 16 años, tuve la suerte de aprender con los referentes de estas disciplinas a nivel internacional. Hace 24 años que vivo de mi vocación y hace 20 que fruto de ella... nació Budoka, en aquel momento un ingenuo y alocado proyecto que llevo impulsando desde diferentes ámbitos hasta el día de hoy. Eres ibicenco, ¿qué es lo que más echas de menos de la Ibiza de antes? Lo auténtico de Ibiza, la esencia… casas payesas sin Budas, playas sin DJ… los productos de la tierra, la lengua… las historias de femeliars al lado de la chimenea… Somos una especie en extinción, vendida o permitida al mejor postor por nosotros mismos, muy triste. Eres el director del Centro Budoka, ¿cuál es la filosofía del centro? Como empresa, la filosofía del equipo Budoka es ser un poco más profesionales cada día, mejorar día a día… aprendiendo de los errores. Y para eso contamos con los mejores «maestros», que no son otros que nuestros usuarios/clientes.
Una de las principales actividades es la enseñanza de Artes Marciales. Pero ¿qué pretende enseñar más allá de la preparación física de dicha actividad? Niños y niñas desde los cuatro hasta los ciento veinte años aprenden jugando… valores como: disciplina, autocontrol, respeto, canalización de la agresividad, psicomotricidad, defensa personal… Educamos en valores a través de las Artes Marciales, los instructores son educadores, no entrenadores. Es una labor apasionante en la que el Arte Marcial es un medio, no el fin. Eres terapeuta de Biomagnetismo, ¿cómo llegó esto a tu vida? Uno de mis exsocios de Budoka se puso muy enfermo al regreso de un viaje a Nepal y a través de su hermano se hizo una sesión en Valencia con unos señores que se habían formado con un doctor mexicano… El caso es que un diagnóstico de gravedad quedó en curado. Animado por mi exsocio, empecé a traerles una vez al mes a Ibiza, al Budoka, y los resultados han sido impresionantes… de forma que contactamos con el doctor Goiz, padre del Biomagnetismo Médico, e iniciamos la formación con él. ¿Por qué decidiste hacer del Biomagnetismo tu profesión? Me enamoré… Es la terapia más pragmática y efectiva que conozco, además de tener una base científica tan sencilla como consistente. Siete años después todavía me sorprenden sus resultados.