Decálogo taller de tratamiento periodístico no machista 2015

DECÁLOGO TRATAMIENTO PERIODÍSTICO DE LA VIOLENCIA MACHISTA

Material realizado para el Taller de Tratamiento Periodístico de la Violencia Machista, organizado por el Centro para la Participación y el Desarrollo Humano Sostenible CEPAD y la Universidad Privada de Santa Cruz de la Sierra - UPSA Noviembre de 2015

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La violencia contra las mujeres es una violación a los derechos humanos

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Los hechos de violencia contra las mujeres no son delitos aislados

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Evitar los modelos de mujer que lesionen la dignidad de la mujer

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Respetar el derecho a la intimidad Usar lenguaje informativo y sensible No publicar imágenes o textos de carácter humillante, insultante o agresivo para la víctima Evitar aportaciones irrelevantes No buscar causas, justificaciones o motivos para el delito Rechazar la explotación comercial del suceso Procurar seguimiento

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La violencia contra las mujeres es una violación a los derechos humanos y un atentado a la libertad y dignidad de las mujeres como personas y ciudadanas

Los y las profesionales de la información deben transmitir enfáticamente este mensaje en los contenidos que produzcan sobre el tema. Además deben estar conscientes de que la violencia psicológica y emocional tiene graves consecuencias y secuelas, a pesar de que se argumente como difícil de probar.

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Los hechos de violencia contra las mujeres no son delitos aislados, sino que constituyen un histórico problema cultural y social

La información no se debe limitar al delito o suceso en sí mismo, sino que debe ser contextualizada como un grave problema social que no distingue clases sociales, nivel educativo, edad, nacionalidad u origen étnico. Por tanto, en cada nota se debe incluir información sobre los mecanismos de auxilio existentes para las víctimas (teléfonos de emergencia, contactos de oficinas públicas para denuncia y grupos de apoyo).

(NOTA: Este ejemplo demuestra el escaso interés en el tema, ya que una denuncia tan grave, apenas es contextualizada y no recibe mayor tratamiento ni espacio, que una columna)

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Evitar los modelos de mujer que lesionen la dignidad de la mujer

La industria de los medios de comunicación difunde un modelo de mujer que atenta contra su dignidad: sexuada, objeto, víctima, dominada, pasiva, cuidadora (madre). Esta violencia simbólica puede revertirse transformando y ampliando la representación de las mujeres: como personas independientes con diversos proyectos de vida, como referentes en los diversos ámbitos de la vida en sociedad, como profesionales, etc.

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Respetar el derecho a la intimidad

En los casos de violencia denunciados no se deben utilizar nunca las imágenes ni las identidades de las víctimas. Se debe respetar la presunción de inocencia de los agresores sospechosos, sin que eso sea un obstáculo para informar sobre el caso.

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Usar lenguaje informativo y sensible

Evitar los adjetivos. Utilizar sólo los términos de ‘violencia contra las mujeres’ y ‘violencia machista’, jamás ‘violencia intrafamiliar’, ‘violencia doméstica’, ‘violencia de pareja’ o ‘crimen pasional’.

Evitar calificativos como ‘celoso’, ‘bebedor’ o ‘persona normal’, o frases como ‘salía con amigas’ o ‘tenía un amante’ desvían la atención de las verdaderas causas de la violencia machista.

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No publicar imágenes o textos de carácter humillante, insultante o agresivo para la víctima

Las notas deben ser informativas, sin juicios de valor, procurando obviar los detalles del crimen. Los hechos que abunda en detalles escabrosos o los primeros planos de caras amoratadas o llorosas, no ayudan a identificar el problema y sólo provocan morbo o la conmiseración de la víctima. No confundir morbo con interés social.

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Evitar aportaciones irrelevantes

No entrevistar a familiares o vecinos que no hayan sido testigos directos del hecho. Debe evitarse la difusión de comentarios despectivos o peyorativos sobre las víctimas u opiniones positivas o que justifiquen a los agresores. Se sugiere recoger las declaraciones de condena contra el crimen por parte de personas relevantes en la sociedad. Los testimonios de víctimas de violencia machista sólo serán incluidos cuando éstas no se hallen en situación de emergencia, en shock o bajo cualquier tipo de presión

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No buscar causas, justificaciones o motivos para el delito

La causa de la violencia machista es el control y el dominio que determinados hombres ejercen contra sus compañeras, por lo tanto, deben obviarse las circunstancias personales de los y las implicadas, y evitar relacionar, consciente e inconsciente, la violencia contra las mujeres con prototipos como alcoholismo, celos, drogadicción, situaciones de riesgo de exclusión social, etc. La violencia contra las mujeres es un delito, no un “hecho pasional”, y el consumo de alcohol o drogas no puede exculpar al agresor. También deben eliminarse los estereotipos de nacionalidad o condiciones socioeconómicas, ya que la violencia contra las mujeres se produce en todas.

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Rechazar la explotación comercial del suceso

No se utilizará a las personas agredidas para explotar comercialmente y mejorar audiencias: en todos los casos se buscará únicamente el beneficio social derivado de la actuación informativa. La noticia deberá ser tratada de forma rigurosa y exenta de morbo, dando voz a las víctimas y a personas expertas en violencia contra las mujeres, especialmente de asociaciones y organizaciones que trabajan en este ámbito.

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Procurar seguimiento

Una vez que se conoce fehacientemente quién es el agresor o asesino/feminicida, los medios y profesionales de la información deben identificarlo e informar periódicamente cómo avanza el proceso de investigación o juicio para que el mismo no quede en la impunidad. También se deben dar noticias positivas como historias de mujeres que logran salir de la violencia, sentencias ejemplares e iniciativas, proyectos y campañas sobre el tema, a nivel local, nacional y mundial.

Fuentes

• Bandrés G., Elena (2011) Propuesta para el tratamiento eficaz de la violencia de género. En IC-Revista Científica de Información y Comunicación 2011, 8, pp.113-138.

• Diario Público (2008) Público se compromete: Decálogo para informar sobre violencia de género.

• PAR (2008) Decálogo para el tratamiento periodístico de la violencia contra las mujeres. Buenos Aires: Periodistas de Argentina en Red por una comunicación no sexista.

• RTVE (2002) Mujer, violencia y medios de comunicación.

Dossier de prensa. Madrid: Instituto Oficial de Radio y Televisión RTVE. • Tapia T., Gloria (2011) Derechos Humanos, violencia contra las mujeres y feminicidio. Guía para periodistas. La Paz: CIDEM • UNFPA (2011) Comunicación, género y prevención de violencia. Manual para comunicadores y comunicadoras. La Paz: Fondo de Población de las Naciones Unidas, UNFPA