6 minute read

Únicas en su especie

Únicas en su especie

En Gipuzkoa hay especies de plantas en peligro de extinción, algunas, ejemplares únicos

Advertisement

Amaia Núñez

Cuando paseamos por el monte o por la playa, pocas veces nos fijamos en esas plantas y flores que hay alrededor. En algunos casos existe la tentación de llevar una ramita de esa bonita flor que huele tan bien. Y aunque nos parezca una flor cómo otra cualquiera, puede ser que sea un raro ejemplar y que este en riesgo de extinción. En Gipuzkoa alrededor de 100 especies están amenazadas, y casi la mitad tienen peligro de desaparecer. «Muchas veces se habla de extinción de especies a nivel global, y en Gipuzkoa y Euskal Herria también han desaparecido especies», incide Joseba Garmendia biólogo del departamento de Botánica de la Sociedad de Ciencias Aranzadi.

Joseba Garmendia en Aizkorri recogiendo muestras. ··· Maddi Otamendi

Maddi Otamendi

El riesgo de extinción afecta por igual a especies de costa como de montaña, con factores muy diversos como causa. «Los que están en peligro de extinción muchas son de costa», al igual que en el caso de las que han desaparecido, «sobre todo por temas de destrucción de hábitat». Ese es el factor «más importante» de la pérdida de especies.

Hugueninia tanacetifolia subsp. suffruticosa, en Aizkorri.

Joseba Garmendia

Además de la amenaza de las personas, las plantas dependen también de las plantas invasoras que compiten por su espacio, el cambio climático y, en relación a esto, la desincronización entre flora y fauna. Esto puede causar que los insectos no polinicen bien las plantas y ese año no se consigan semillas. El cambio climático «evidentemente va a afectar a las especies. Hay especies que se van a poder amoldar mejor y otras peor».

Asimismo, Garmendia admite que «también puede haber factores intrínsecos de la especie. Muchas veces hay especies que son raras, porque llegaron en su día, se quedaron en una zona y siguen ahí». Las poblaciones únicas pueden tener problemas genéticos. Es el caso de Hugueninia tanacetifolia en Aizkorri, que ocupa unos 70 metros cuadrados, florece todos los años pero no da ninguna semilla. Para estos casos, el trabajo se centra en la propia genética. «Muchas veces cuando conservamos, más que la especie, lo que intentamos conservar es la genética de una población. Si se extingue o si una población es muy rara, no se traen ejemplares de otras localidades para reforzar esa población, intentamos que la genética que se conserve sea la local».

Conservación

Aun con la amplia lista de especies en peligro, la principal labor de la sección de Botánica de Aranzadi no se centra en salvar todas las especies. Lo primero suele ser realizar un estudio para determinar cómo es la especie y cuál es su situación. Una vez que tienen la información, «muchas veces es simplemente hacer un seguimiento, porque no está especialmente amenazada, o por ejemplo, con plantas de roquedos, son roquedos verticales, inaccesibles en principio, y la idea es hacer revisiones de cómo va la especie. No podemos hacer mucho más ahí».

En otros casos dan prioridad a la gestión del hábitat, todo ello sin tocar la especie. En los casos más extremos sí que trabajan para dar continuidad a la especie. Para ello, colaboran con el banco de semillas de la Diputación de Gipuzkoa, en Fraisoro.

«La idea es recolectar semillas de esas especies. Una parte conservarla para el futuro, para tenerlas como reservorio, la otra, se puede utilizar para temas de investigación», explica, y añade que, «muchas veces con las especies amenazadas nos falta información. Puedes tener la semilla, pero si no la sabes germinar, no te sirve de nada. Tienes que sacrificar unas semillas para investigar cómo». La germinación de semillas y su cultivo es la última fase que se lleva a cabo cuando se decide reforzar las poblaciones. «Si tu refuerzas una población pero las amenazas siguen ahí, con la construcción de una carretera por ejemplo, puedes hacer un esfuerzo enorme pero no tiene sentido».

Gipuzkoa cuenta además con poblaciones únicas en la península. Es el caso de Galium arenarium y Alyssum subsp. loiseleurii en las dunas de Iñurritza, en Zarautz, y la mencionada Hugueninia tanacetifolia en Aizkorri. «El caso de Gallium es emblemático», comenta. Quedan solo dos ejemplares después de que un fuerte temporal se llevara los otros 17 ejemplares en el 2014. «Justo el año anterior recolectamos semillas. Ahora tenemos material» con el que seguir trabajando. Aun así, Joseba Garmendia admite que «no es una especie ni fácil de hacer germinar ni cultivar, pero por lo menos esa herramienta nos da la posibilidad de no dar por extinta casi prácticamente la especie, porque con dos ejemplares poco se puede hacer».

Alyssum loiseleurii subsp. loiseleurii en las dunas de Iñurritza. ··· J. Garmendia

Joseba Garmendia

La pérdida de una especie no siempre se nota. «Muchas veces, la extinción de una especie no es importante pero sí la perdida continuada. Muchas veces son pérdidas locales, pero esa pérdida local repercute también en el entorno», admite. Por ello, hoy en día existe un movimiento para empezar a proteger y conservar las semillas, especialmente de plantas silvestres que están relacionadas con cultivadas hoy en día. «Esas especies silvestres, en muchos casos amenazadas, pueden guardar información genética que en un momento pueda ayudar a, por ejemplo en el caso de los manzanos, ser más resistentes a diferentes enfermedades, a variaciones climáticas, etc.». En Tolosaldea hay otro ejemplo de especie silvestre «que es emblemática», Carpinus betulus, carpe en castellano. Quedan nueve ejemplares en Gipuzkoa y hay algunos más en Navarra, aunque en Europa está bastante extendido.

Galanthus nivalis, no se ha encontrado en el último siglo en la CAV (está citado en Eskoriatza). ··· Joseba Garmendia

Joseba Garmendia

Paris quadrifolia especie amenazada que se encuentra en algunos montes de Gipuzkoa. ··· Joseba Garmendia

Joseba Garmendia

La catalogación de las especies es importante y en estos momentos trabajan en un proyecto a nivel pirenaico, FloraPyr. El objetivo es conocer las especies y su situación en cada zona, y para ello trabajan conjuntamente con entidades francesas, de Andorra, Cataluña, Aragón, Navarra y País vasco. «Lo que vamos a tener con ese proyecto es una fotografía global de la flora del Pirineo y podemos determinar especies, no ya que sean raras en Gipuzkoa, Navarra o en los pirineos atlánticos, si no que son raras a nivel pirenaico y que se puedan integrar en la conservación de cada región».

Galium arenarium en flor. ··· Aranzadi

Aranzadi

This article is from: