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I.T.A
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El apego a la agricultura de José Ramón Arcos, Ingeniero Técnico Agrícola de SUCA Almería, le viene de familia, ya que sus abuelos eran agricultores y sus padres, aunque no de forma directa, también lo han sido a tiempo parcial. “Desde el principio consideré que la agricultura tiene una estrecha vinculación con el medioambiente, tanto por ser un sector intensivo en utilización de recursos, como por su capacidad para influir en el mantenimiento y cuidado de los mismos, y eso fue lo que me hizo decidirme a estudiar ingeniero técnico agrícola’, empieza diciendo José Ramón.
Para José Ramón, “la agricultura desempeña un rol absolutamente fundamental como fuente de producción de alimentos imprescindibles para la vida y la salud de las personas. Sin embargo, la contribución del sector agrícola no se limita a la importancia de su función como proveedor de productos básicos de alimentación, sino que la actividad agrícola también genera importantes beneficios para la economía, la sociedad, el territorio y el medioambiente”.
En algo más de cincuenta años, el paisaje de esta zona ha cambiado radicalmente, siendo muchos los agentes que trabajan en una misma cadena perfectamente sincronizados con un motor común. “Almería y la costa de Granada son hoy un gran clúster agroindustrial. Es una concentración de empresas e instituciones que se agrupan alrededor de una actividad común, la agricultura intensiva. Aquí se encuentran las cooperativas, la industria auxiliar, el sector de la investigación y desarrollo, la logística, la distribución, la comercialización, el márketing, etc, etc., y todo ello en un engranaje perfectamente articulado que cuando hablamos de agricultura, y sobre todo si hacemos referencia a nuestra provincia, el principal valor a destacar es la persona que realiza esa labor: el/la agricultor/a”.
En ese mecanismo, además del agricultor, contamos con otra figura fundamental ya que, como afirma Arcos, desde sus inicios la agricultura intensiva y todo el sector, contó y cuenta con soporte técnico (ingenieros técnicos agrícolas) importante que les ayudó y les ayuda en la toma de decisiones, con el objeto de elevar el nivel de producción y la calidad de la misma.
En cuanto a los avances tecnológicos vividos en el sector hortícola almeriense, José Ramón destaca, desde el riego por goteo, el cultivo hidropónico, el control biológico o el cultivo ecológico o de “residuo cero”, suponiendo todos ellos importantes mejoras incrementales y radicales en los métodos de producción.
Modelo de respeto ambiental
Igualmente el técnico de SUCA destaca como en la actualidad la horticultura protegida de Almería es un modelo de respeto ambiental, “como queda reflejado en el altísimo grado de implantación de la producción integrada como método de cultivo y el incremento de las hectáreas en producción ecológica”.
A su vez, “la horticultura de Almería y costa de Granada es un sector que ha evidenciado un firme dinamismo tecnológico, pues ha demostrado un incremento progresivo de la productividad de forma sostenida en el tiempo y lidera el nivel de exportaciones dentro del sector agroalimentario en Andalucía”.
José Ramón Arcos finaliza diciendo que “la sociedad, una vez más, da mayor importancia a los indicadores verificables sobre las diversas actividades humanas, así que en el futuro tendremos que dar más, se nos va a exigir más. Algunos de los parámetros de los que se empieza a hablar son medioambientales (huella hídrica, huella de carbono, etc...) y Almería, y en general todo el sector agrario, está capacitado para demostrar que se puede ser líder”.
