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Opinión Georgina Gutiérrez: Pura Vida

GEORGINA GUTIÉRREZ RODRÍGUEZ Mujer Ganadera lavidalactea1@gmail.com

Escribo estas líneas en domingo. Un día tranquilo, después de estar activa celebrando el Día Internacional de las Mujeres Rurales (15 de octubre) y el Día Mundial de la Alimentación (16 de octubre) que hubieran sido el tema de este artículo de no ser porque hoy ha sido un domingo diferente. Hace unos momentos (y por eso esperé a escribir esta colaboración hasta hoy, ¡casi en la fecha límite!), acaba de terminar la transmisión del primer Earthshot Prize, una iniciativa lanzada por el Príncipe Guillermo, para que en menos de 10 años cambiemos y salvemos al planeta. El nombre hace referencia al Moonshot del Presidente Kennedy, que lanzó la carrera espacial para llegar a la luna hace varias décadas. Y es que, desde hace varias décadas, la condición del planeta no ha hecho más que empeorar, y el tiempo para revertir estos daños se nos termina. El premio aborda 5 categorías, con 3 finalistas cada una. Los 5 ganadores reciben un premio de 1 millón de libras, y sin duda mucha más atención para que más gente los conozca y apoye y claro, más proyectos salgan a la luz. Las categorías son: 1) reparar el clima, 2) crear un mundo sin desperdicios, 3) revivir los océanos, 4) limpiar el aire y 5) proteger y restaurar la naturaleza.

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No voy a profundizar sobre cada una de ellas, mejor los invito a conocer los proyectos nominados y a los ganadores, porque de verdad me parecieron brillantes y sin duda hicieron de este domingo cualquiera, un día esperanzador. Imaginen poder frenar el desperdicio de alimentos en una de las ciudades más importantes de Europa, o detener las quemas agrícolas en comunidades rurales en India, para dejar de contaminar el aire y convertir esos desperdicios en algo productivo en un proceso libre de humo… Cuando las personas nos decidimos podemos lograr cosas extraordinarias, pero para que tengan un impacto real, tienen que ser bien diseñados y tener una estructura sólida, pero lo suficientemente flexible para poder adaptarse en el tiempo. Las ocurrencias deben quedar fuera, porque además, estas cosas llevan tiempo y claro, se necesitan compromisos y recursos para poder ver resultados reales. El ganador de la categoría proteger y restaurar la naturaleza es un país, Costa Rica. “Pura vida” ha sido su lema desde hace varios años, y ahora será conocido en todo el mundo. Del sitio web de Earthshot: “Los bosques son el hogar de la mitad de nuestras plantas y animales, y de tres cuartas partes de nuestras aves. Absorben el carbono del aire y devuelven el oxígeno que respiramos. Sin embargo, en 2020 se han talado más árboles que nunca, provocando el 10% del calentamiento global.

En la década de 1990, los vastos bosques de Costa Rica fueron devastados, llegando a la mitad de su tamaño anterior. Pero el pueblo de Costa Rica y su Ministerio de Medio Ambiente tenían un plan para salvarlos. Sus programas pagaban a los ciudadanos para que protegieran los bosques, plantaran árboles y restauraran los ecosistemas. Los resultados fueron extraordinarios. Los bosques de Costa Rica duplicaron su tamaño. La flora y la fauna prosperaron, lo que provocó un auge del ecoturismo, que aportó 4000 millones de dólares a la economía. El gobierno está aplicando este enfoque en las áreas urbanas. Opina que el 30 % de las tierras y los océanos del mundo podrían protegerse también de esta forma. Ganar el Premio Earthshot ayudaría a compartir esos conocimientos y prácticas a nivel mundial, especialmente en el Sur Global. El lema de Costa Rica es «pura vida. Estas palabras podrían hacerse eco pronto en todo el mundo”. Seguramente esto les suena familiar, porque el gobierno del presidente López lanzó Sembrando vida, como un proyecto prioritario del sexenio. La idea, obviamente, no es mala, ahí está un país que ganó un premio por hacer esto mismo. Además, el proyecto en México tiene un doble propósito. Por un lado, combatir la pobreza a través del empleo para la gente de zonas rurales; por otro, combatir el cambio climático a través de la reforestación de regiones que sufren daños ambientales. Aunque dudo mucho que este gobierno, que ha demostrado su negación del cambio climático, lo haya considerado para ese segundo propósito. Más bien creo que sólo fue pensado para poder repartir dinero. Una lástima. De acuerdo a estudios del Instituto de Recursos Mundiales (WRI), el proyecto no ha funcionado y de hecho, tuvo un impacto negativo en las coberturas forestales (más deforestación) y el cumplimiento de las metas de mitigación de carbono del país. Además, esto último se agravará de aprobarse la contrarreforma eléctrica, porque la CFE no tiene la capacidad de producir electricidad limpia porque no ha invertido en ello, lo cuál nos colocará en una posición muy difícil ante los países con quienes nos comprometimos a reducir las emisiones en el país y hacer una transición energética. Mientras el mundo avanza en el combate al cambio climático, y reconoce, celebra y apoya proyectos positivos para la naturaleza, parece que nuestro país retrocede e implementa proyectos que en teoría son buenos, pero en la implementación son meras ocurrencias, sin importar las consecuencias en el medio ambiente, las personas y la prosperidad de las futuras generaciones. Nos urge ver en el gabinete gente más capaz, que no necesariamente tienen que ser menos leales, para que un proyecto que ha funcionado y transformado un país completo, también nos ayude a tener una transformación en el nuestro. Si el presidente quiere pasar a la historia, que lo haga con proyectos positivos, pensando en el futuro, porque no nos queda tanto tiempo, y México será un país muy afectado por fenómenos naturales causados por el cambio climático. Algo positivo que vi en la transmisión de hoy fue que en ninguna de las imágenes apareció la ganadería cuando se hablaba de contaminación, y es que, como he dicho antes, las vacas no son el problema, son parte de la solución. Las imágenes de contaminación eran las ciudades, las fábricas, los coches, lo cuál me dio esperanza, pero a la vez sentí tristeza porque ese es el futuro que imagina nuestro presidente, que sigue viendo las refinerías y la quema de carbón como algo positivo y hasta futurista. El futuro se nos acaba y aunque hay acciones individuales a tomar, el peso de los grandes actores sigue siendo más importante, y por ello debemos exigirles más. Ojalá ellos piensen en sus hijos para de verdad hacer algo, porque como bien ha apuntado el Príncipe Guillermo, debemos enfocarnos más en hacer algo por este planeta antes de pensar en otros. También le doy la razón a Greta Thunberg, ya nos cansamos de puro “bla bla bla” y puro “cuá cuá cuá” (o como sea que suenen los gansos). Tenemos que unirnos para reimaginar y construir un futuro más sostenible. Debemos estar sembrando vida, sí, pero hay que hacerlo bien.

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