RCI ene-feb 2022

ENERO - FEBRERO 2022

RED LATINOAMERICANA DE PROTECCIÓN CONTRA INCENDIO

AÑO 6 nO. 40

REVISTACONTRAINCENDIO.COM

EDITORIAL E

ncontrarse frente a la oportunidad histórica de revolucionar y transformar un sector es algo que no sucede muy a menudo, por ello, tener la posibilidad de construir una industria fortalecida, con características de primer mundo, normada, actualizada y a la vanguardia, es un reto que pide valor, compromiso y unión.

Los involucrados en la cadena de valor del sector contra incendio en Latinoamérica se encuentran en ese punto de inflexión, entre las prácticas del pasado y la implementación de cambios trascendentales ante una modernidad que ya nos alcanzó. Por lo anterior, la unidad se ha convertido en el potencializador que puede desarrollar la industria en la región.

ENERO - FEBRERO 2022

RED LATINOAMERICANA DE PROTECCIÓN CONTRA INCENDIo

RED LATINOAMERICANA DE PROTECCIÓN CONTRA INCENDIO

AÑO 6 nO. 40

Esa característica de transversalidad que tiene la industria de protección contra incendio, es una de las grandes ventajas que le permiten moverse de buena manera en un contexto regional en el que la industria manufacturera ha seguido siendo uno de los principales empleadores, concentrando el 12.8% del empleo en América Latina y el 12.6% del producto interno bruto (PIB) (OIT, 2020). En México, por ejemplo, estas cifras ascienden al 16.6% y 17.3%, respectivamente, esto según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

En materia de flujos comerciales, la manufactura concentra el 45.2% de las exportaciones totales de la región. Por ejemplo, a nivel de los países, esta industria abarca el 80.0% de las exportaciones totales en México, el 31.5% en Brasil y el 20.8% en Argentina (INDEC, 2021).

Cuyo mayor volumen de exportación está encabezado por computadoras, televisores y monitores, camiones y coches pequeños y medianos.

Aunado a ello, según datos del estudio “Perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe”, también editado por la CEPAL, en los primeros ocho meses de 2021, las importaciones de bienes de Estados Unidos, la Unión Europea, China y Japón mostraron un importante dinamismo, tanto en términos de valor como de volumen, ambos elementos han impulsado la recuperación de las exportaciones de América Latina hacia dichos mercados. En general, las mayores tasas de crecimiento de las importaciones en las cuatro

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principales economías mundiales se han producido en la minería, la energía y los productos vinculados a la manufactura pesada, en tanto que las adquisiciones de productos minerales metálicos y no metálicos, petróleo y minería aumentaron más del 50%.

Todo este contexto regional permite vislumbrar condiciones favorables para un sector en crecimiento, que se mueve de manera transversal y que busca la unidad en favor de construir una Latinoamérica segura para las industrias, permitiendo el desarrollo económico, pero también, segura para la vida de las personas.

Te invitamos a recorrer el mundo contra incendio, a leer a los expertos en la materia y ser parte de una nueva etapa en la que renovamos nuestra imagen, buscando nuevos públicos, permeando en otros sectores y estableciendo un diálogo regional.

¡Promoviendo la Cultura de la Prevención!

Los editores

Comentarios: lectores@revistacontraincendio.com

CONTENIDO

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Gerardo González P. Tel. 01 55 78.27.37.37 / 01 55 55.75.47.94

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www.revistacontraincendio.com Revista Contraincendio es una publicación bimestral, fecha de impresión enero-febrero 2022, editada por Ronit Marielisa González Pérez como editor responsable, producida por el Centro de Desarrollo Profesional ACTIVA, S.C., con número de Certificado (en trámite) de Reserva de Derecho al Uso Exclusivo del Título que expide el Instituto de Derechos de Autor, número de certificado 17334 de Licitud de Título y Contenido, WTC, Montecito Nº 38, piso 28 oficina 16, col. Nápoles, alcaldía Benito Juárez, C.P. 03810, ciudad de México, impresa por Preprensa Digital en Caravaggio N° 30, Mixcoac, ciudad de México, C.P. 03910 Alcaldía Benito Juárez.

Autorización SEPOMEX PPO9-02037 “Revista Contraincendio” es Marca Registrada. Hecho en México.

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LATAM PCI

Una sola voz, por un

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mundo sin víctimas de fuego

CHILE

Autoridad competente y su rol

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en el sistema normativo de NFPA

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mayor seguridad

MÉXICO

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PERÚ

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COLOMBIA

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El proceso de una revolución

Actualización constante

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Código contra incendios, una necesidad

PERSPECTIVA

Fortaleciendo la seguridad contra

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incendios en México

ECUADOR

Currículum del profesional en ingeniería contra incendio, un esfuerzo

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latinoamericano

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LATAM PCI

Una sola VOZ

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por un mundo sin

VÍCTIMAS DE

FUEGO

Darle formalidad a LATAM PCI como una corporación sin fines de lucro, le permitirá solvencia para continuar avanzando en sus principales objetivos, mejorar el actual estado regulatorio en la región, apoyar la investigación de extinción de incendios, educar y asesorar a los gobiernos locales en temas de supresión y seguridad, además, de influir en la normativa que requiere protección contra incendios.

POR: CARLOS MORETT

L

a creación de LATAM PCI permitirá trabajar de manera oficial y con personalidad jurídica, un proyecto que se pensó desde 2018 con la idea de crear una organización regional que permitiera compartir experiencias entre los países miembros y encontrar formas de mejorar sus mercados. Una de las principales actividades de LATAM PCI es promover la mejora y el desarrollo de la regulación en esta área, a través del fortalecimiento de códigos de seguridad contra incendios y de construcción, educando a los reguladores, funcionarios públicos y al público sobre las ventajas de la aplicación de los mismos.

Con el objetivo de tener un mundo a salvo de las víctimas de incendios, LATAM PCI ha buscado una subvención para trabajar en la creación del Día Internacional de la Prevención de Incendios, lo que permitirá caminar como un solo equipo, en una sola dirección y con la misma bandera: salvar la vida de las personas, proteger su propiedad y la interrupción del negocio.

CONDICIÓN ECONÓMICA Y PROYECCIÓN DE LOS SISTEMAS DE SUPRESIÓN EN LATAM

Cada año, hay aproximadamente 250 millones de rociadores instalados en el mundo, que cuentan con aprobaciones internacionales (FM, UL, VDS o LPCB), de los cuales, 2.5 millones se instalan en Latinoamérica, esto representa el 1% del total de instalaciones en una región que tiene el 8% de la población mundial y el 8% del Producto Interno Bruto (PIB). Esta solución comprobada está muy por debajo del promedio que debería estar en América Latina. Realidad que deja ver una enorme brecha en comparación con los promedios mundiales, especialmente, con aquellas economías de altos ingresos donde los rociadores son ampliamente utilizados y donde vive el 17% de la población mundial, que representa el 49% del PIB internacional, mostrando una reducción significativa en los daños de incendios.

El problema incrementa en la región a causa de la comercialización e instalación de 100 millones de rociadores que provienen de China y no cuentan con estándares internacionales que prueben su funcionalidad.

Ante ello, la misión de LATAM PCI será transformar la forma de enfrentar el problema del fuego en América Latina, haciendo de la protección contra incendios un tema relevante desde el punto de vista social, técnico y regulatorio. Estableciendo una visión que le permita a LATAM PCI ser reconocida como el agente de cambio e intermediación que unifica la industria latinoamericana de protección contra incendios. Su creación coincide con los esfuerzos y estrategias de las diferentes asociaciones, que promueven el crecimiento del sector a través de la implementación de los sistemas en la región.

EL GRUPO Como concepto, LATAM PCI nació en 2018 y estaba integrada por ABSpk de Brasil, ADPCI con origen en República Dominicana, AMRACI de México y ANRACI que surge en Colombia;

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LATAM PCI 8

“CADA AÑO, HAY APROXIMADAMENTE 250 MILLONES DE ROCIADORES INSTALADOS EN EL MUNDO, QUE CUENTAN CON APROBACIONES INTERNACIONALES, DE LOS CUALES, 2.5 MILLONES SE INSTALAN EN LATINOAMÉRICA, ESTO REPRESENTA EL 1% DEL TOTAL DE INSTALACIONES EN UNA REGIÓN QUE TIENE EL 8% DE LA POBLACIÓN MUNDIAL Y EL 8% DEL PRODUCTO INTERNO BRUTO”.

desde entonces, hemos trabajado para unir miembros en la región, logrando 14 organizaciones de 11 países. Entrado el 2019 decidimos tener una junta directiva y crear comités para trabajar en las siguientes áreas:

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REGULACIÓN EDUCACIÓN VISIBILIDAD ÉTICA EN LOS NEGOCIOS

Durante 2020 y 2021 el entorno global de pandemia nos condicionó a reuniones directivas y conferencias telefónicas mensuales con los actores clave, involucrados con la seguridad contra incendios en México, República Dominicana, Costa Rica, Panamá, Colombia, Brasil, Ecuador, Perú, Honduras, Chile y Uruguay.

a efecto de tener una mejor comprensión del panorama local y regional, y con base a sus resultados, podríamos proponer iniciativas que mejoren el nivel de regulación de incendios en Latinoamérica.

Al interior del comité de regulación se desarrolló un proyecto de investigación que denominamos “Primer enfoque del estado actual de la regulación de seguridad contra incendios en América Latina”, que consiste básicamente en la elaboración de cuestionarios para desarrollar una imagen mejor definida de cómo está organizada la legislación en la materia y cuál es el estatus de la región. Algunas de las primeras conclusiones son:

De forma paralela, en 2020 desarrollamos varias conferencias virtuales en México, Brasil y Colombia promoviendo y compartiendo experiencias sobre el futuro de nuestra industria, potenciando la importancia de las regulaciones, los códigos de construcción y de un código contra incendios, así como de las normas técnicas. De forma paralela, educamos a los profesionales de protección contra incendios, cubriendo más de 10,000 asistencias. Estas acciones, le permiten al concepto de seguridad contra incendios, ganar importancia en América Latina. Asimismo, el uso de sistemas automáticos de rociadores contra incendios se ha ido expandiendo gracias a las acciones que estas asociaciones llevaron a cabo en sus respectivos países.

Todos los países participantes, con México como excepción, requieren el uso de sistemas de rociadores. Las diferentes normativas exigen el uso de este tipo de protección en nuevas edificaciones, de acuerdo con lo siguiente:

En un entorno globalizado, las alianzas a través de redes son recursos que brindan un efecto multiplicador o dominó para promover conocimientos, compartir experiencias, así como buenas prácticas en la regulación de la seguridad contra incendios. Para avanzar en este objetivo, es fundamental conocer previamente el estado actual de la regulación a nivel regional y sus problemas de aplicación en cada uno de los países representados en la Red LATAM PCI. Desarrollamos cuestionarios con este propósito,

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EXISTE CONSENSO EN REQUERIR ROCIADORES EN HOSPITALES Y CENTROS COMERCIALES. PARA EDIFICIOS ALTOS, EDIFICIOS COMERCIALES, SUPERMERCADOS, EDIFICIOS DE REUNIONES PÚBLICAS Y HOTELES, TODOS LOS PAÍSES REQUIEREN ROCIADORES, EXCEPTO CHILE. PARA LAS CÁRCELES U OTROS LUGARES DE CONFINAMIENTO, TODAS LAS REGULACIONES DE LOS PAÍSES PARTICIPANTES REQUIEREN ROCIADORES, EXCEPTO BRASIL. LAS REGULACIONES DE COLOMBIA Y COSTA RICA INCORPORAN REQUISITOS PARA INDUSTRIAS Y ALMACENES, MIENTRAS QUE BRASIL SOLO PARA ALMACENES.

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“LA RED LATAM PCI HA SUMADO ESFUERZOS DE 14 ORGANIZACIONES, LATAM PCI

PERTENECIENTES A 11 PAÍSES

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DE LA REGIÓN”.

JUNTA DIRECTIVA: CARLOS MORETT

Presidente - LATAM PCI, expresidente de AMRACI

ALEX RODRÍGUEZ

Vicepresidente - LATAM PCI, presidente de ANRACI Colombia

JOSÉ PAIVA

Vicepresidente - LATAM PCI, director de ABSpk Brasil

EDWARD BRITO

UNIR LAS VOCES Crear la Red LATAM PCI legalmente nos dará credibilidad ante las autoridades de la región y permitirá influir en los gobiernos locales para mejorar sus códigos de seguridad contra incendios. Unir las voces de América Latina por la incorporación de los sistemas de protección contra incendios a base de agua en las regulaciones locales y el fortalecimiento de estándares, incrementarán el mercado para nuestra industria.

Contar con un modelo que actúe como un cuerpo coincidente y catalizador de esfuerzos, es vital para acercar las experiencias y mejores prácticas de otros países a las propias y viceversa. Esto permite a las distintas asociaciones compartir e imitar los avances que se van produciendo.

Un cuerpo colegiado apoya la imagen y el prestigio de las organizaciones locales, dando mayor visibilidad al tema del fuego y su impacto, lo que permite proyectarse con mayor credibilidad como cuerpo de referencia para los países de Latinoamérica.

Esta iniciativa está perfectamente alineada con los objetivos de IFSA:

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FOMENTAR EL DESARROLLO DE ORGANIZACIONES NACIONALES Y REGIONALES CON OBJETIVOS SIMILARES DESARROLLO DE SISTEMAS DE INFORMACIÓN PARA PROTEGER LA INTEGRIDAD DEL PRODUCTO Y LA IDENTIDAD DE LA INDUSTRIA. MEJORA DE CÓDIGOS, NORMAS Y LEGISLACIÓN.

Ahora bien, ante todo este camino de acciones, consideramos como fundamental la creación del Día Internacional de la Prevención de Incendios; hecho que establecerá un hito para todo el sector y nos permitirá ir como un solo equipo, con un objetivo, en una sola dirección y con la misma bandera: salvar la vida de las personas, proteger su propiedad y la interrupción del negocio. “Es nuestro único mundo, trabajemos juntos para protegerlo”.

Secretario - LATAM PCI, presidente de ADPCI República Dominicana

VÍCTOR ESPINOLA

Coordinador - LATAM PCI, director general de AMRACI

HUGO TORRES

Coordinador de comunicación y medios - LATAM PCI, director ANRACI

FELIPE MELO

Consejero - LATAM PCI, presidente de la ABSpk Brasil

MARCELO LIMA

Consejero - LATAM PCI, director del Instituto Sprinkler Brasil

DAVID MORALES

Consejero - LATAM PCI, presidente de CONAPCI

JUAN JOSÉ CAMACHO

Consejero - LATAM PCI, presidente de AMRACI

ALEJANDRO RAMÍREZ

Presidente de la Asociación de Protección contra Incendios de Chile

RAÚL DUARTE

Presidente de la Asociación de Protección Contra Incendios de Perú

SANTIAGO DURAN

Colegio de Ingenieros Mecánicos de Ecuador

CARLOS MORETT PRESIDENTE DE LA RED LATINOAMERICANA DE PROTECCIÓN CONTRA INCENDIO.

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Autoridad competente y su rol en el sistema normativo de NFPA El uso de códigos y normas de la NFPA es cada vez más frecuente en los países de América Latina, dado que proporcionan requerimientos mínimos de diseño, construcción y mantenimiento, que permiten asegurar y tener confianza en el alcance de objetivos en materia de seguridad contra incendios, en ellos, se encuentra inmerso un concepto que hoy desarrollamos, la Autoridad Competente.

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uando se utiliza por primera vez alguno de los documentos de National Fire Protection Association (NFPA) se descubre la gran cantidad de referencias a otros códigos y normas, que conforman un conjunto de exigencias complementarias, lo que obliga a conocer y utilizar más de un documento para completar de forma satisfactoria un proyecto. Por lo anterior, es que nos referiremos al conjunto de códigos y normas de NFPA como a un sistema normativo.

El desarrollo de un sistema normativo, como el que se describe líneas arriba, es difícil de lograr en Latinoamérica, razón por la cual, existen países que han adoptado algunos de sus códigos, como NFPA 101 Código de Seguridad Humana y sus normas complementarias, y otros que han elaborado exigencias propias, pero que incluyen referencias a normas de diseño e instalación, como NFPA 13 y NFPA 72, por mencionar algunas. Así, de un modo u otro, ya sea por adopción o por referencia, en Latinoamérica utilizamos el sistema normativo de NFPA. El uso de dicho sistema normativo en Latinoamérica, no obstante, presenta algunos desafíos que no son explícitos y que, de no

ser resueltos, pueden generar dificultades en la correcta aplicación de sus requisitos. Uno de estos desafíos corresponde a la definición de las responsabilidades y atribuciones que deben tener las distintas partes involucradas, existiendo, en particular, una figura de vital relevancia, que corresponde a la Autoridad Competente.

La expresión corresponde a una traducción del término en inglés, Authority Having Jurisdiction (en su acrónimo AHJ que emplearemos en adelante), cuya definición oficial de NFPA la encontraremos en el Capítulo 3 de Definiciones de cada una las normas, y en la mayoría en el punto 3.2.2, donde se define como “una organización, oficina o individuo responsable de hacer cumplir los requisitos de un código o norma, o para aprobar equipos, materiales, una instalación o un procedimiento”. Es importante aclarar que el término Competente de la traducción al español se refiere a la Jurisdicción, que deberíamos interpretar como la figura que tiene la potestad de la autoridad, en el contexto de los códigos y normas, no teniendo relación la definición con la pericia, aptitud o idoneidad que la autoridad tiene con respecto al tema, sino al ámbito legal y a las atribuciones que le corresponden por su incumbencia. Ahora

POR: CRISTÓBAL MIR GACITÚA

bien, es claramente deseable que la autoridad con la jurisdicción sobre el tema, tenga los conocimientos técnicos necesarios para cumplir de forma adecuada con su responsabilidad.

Dentro del material aclaratorio de NFPA se agrega “La frase autoridad competente o su acrónimo AHJ se emplea de manera amplia en los documentos de NFPA, dado que las jurisdicciones y agencias de aprobación varían, como también varían sus responsabilidades. Donde la prioridad es la seguridad pública, la autoridad competente puede ser un departamento federal, estatal, local o regional, tal como un funcionario superior de bomberos, un jefe de bomberos, un jefe de una oficina de prevención de incendios, departamento de trabajo o departamento de salud; un funcionario de la construcción; un inspector eléctrico; u otros con autoridad estatuaria.

A los fines de los seguros, la autoridad competente puede ser un departamento de inspección de las compañías de seguros, una oficina de clasificaciones u otro representante de una compañía de seguros. En muchas circunstancias, el propietario o su representante designado asume el rol de la autoridad competente; en las instalaciones gobernantes, el funcionario comandante o el funcionario departamental puede ser la autoridad competente”.

A partir de la definición de la AHJ se aprecia cuan amplias son sus labores y responsabilidades y estas pueden recaer en más de un estamento, organización o persona durante las distintas etapas de un proyecto. Un ejemplo de esto corresponde a un proyecto de construcción de una bodega o almacén para una compañía internacional, donde el diseño de los medios de protección contra incendios queda en manos de profesionales locales.

Primeramente, es esperable un proceso de inscripción y aprobación del proyecto por una tercera parte gubernamental, como un ministerio, municipio, alcaldía o el término que mejor aplique en cada país; otra alternativa, es que esto sea responsabilidad de un departamento de bomberos, incluso pudiese darse el caso de que tengan implicancia ambos y, en este caso, se

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CHILE

identifican para un mismo proyecto dos AHJ. Por otra parte, como suele ocurrir en algunas grandes compañías internacionales, puede existir un lineamiento corporativo que sea responsabilidad de algún departamento de seguridad o de protección interno, lo que se interpreta como una tercera AHJ. Finalmente, es muy probable que dicha infraestructura debe tener una póliza de seguros, por lo que la compañía de seguros también velará por la adecuada protección contra incendios y, puede establecer requisitos adicionales, constituyéndose en una cuarta AHJ para un mismo proyecto.

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La o las AHJ variarán de proyecto en proyecto y también entre sus distintas etapas. El éxito de un proyecto implica la adecuada y temprana identificación de la o las Autoridades Competentes involucradas desde la etapa de planificación, siendo vital su participación al momento de establecer los objetivos y estrategias

El término Autoridad Competente corresponde a una traducción del término en inglés, Authority Having Jurisdiction que NFPA define como “una organización, oficina o individuo responsable de hacer cumplir los requisitos de un código o norma, o para aprobar equipos, materiales, una instalación o un procedimiento”. de protección, donde incluso puede ser necesaria su incorporación al equipo de trabajo. Para identificar correctamente la AHJ se debe evaluar el marco regulatorio, la ocupación a proteger y las partes involucradas.

La AHJ se encuentra involucrada de forma transversal en todo proyecto de protección contra incendio, teniendo relevancia no solo para garantizar la correcta aplicación de los códigos y normas aplicables, sino que también es un apoyo frente a posibles interpretaciones y, además, tiene directa injerencia y la potestad para definir cómo deben abordarse diversos aspectos críticos. Algunos ejemplos de la intervención de la AHJ son los siguientes.

Ante la posibilidad que los requisitos prescriptivos indicados en los códigos o normas no sean factibles al momento de cambiar el tipo de ocupación de un edificio existente o bien cuando se pretende utilizar un sistema innovador, el cual no se encuentra comprendido en las normas y no puede ser probado según los procedimientos requeridos, la AHJ tiene por norma la facultad de aprobar dichos proyectos mediante un proceso de equivalencia, donde mediante una evaluación técnica documentada se realiza un análisis de ingeniería, que permite demostrar y garantizar que en el escenario de un incendio se logra un nivel de seguridad contra incendio igual o mejor al que se hubiese obtenido en el caso de aplicar y cumplir con los requerimientos del código.

El involucramiento de la AHJ en el diseño de una red de incendio abarca desde lo general, teniendo que presentarle todos los planos de trabajo para su aprobación y cualquier modificación debe requerir de su permiso; hasta lo particular, teniendo incluso que ser consultada respecto a la cantidad y tipo de mangueras a ser instaladas en las casetas que se instalen junto a los hidrantes, en caso de que estos sean considerados para el uso de personal de la planta o de una brigada de incendio.

Algunas normas como NFPA 25 define que las inspecciones, pruebas y mantenimiento deben ser llevados a cabo por personal calificado, lo que corresponde a una persona competente y capaz que ha cumplido con los requisitos y el entrenamiento para un determinado campo, aceptable para la AHJ, siendo uno de sus roles definir los requerimientos de formación, experiencia, entre otros.

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Como se ha detallado, no debe entenderse a la AHJ únicamente como el responsable de la aprobación o aceptación final de una instalación, ya que debe estar involucrada de forma participativa y resolutiva desde la etapa inicial de un proyecto, para aprobar o rechazar el uso de normas y códigos o de métodos de diseño alternativos, para la calificación de personal, uso y provisión de equipos o materiales específicos, y para la excepción o definición de requerimientos adicionales, entre muchos otros.

Es necesario mantener la existencia de una o más AHJ durante toda la vida útil de una instalación, con el propósito de garantizar el cumplimiento en el tiempo de los requisitos de los códigos o normas, lo que es responsabilidad del propietario, en especial cuando se realizan modificaciones a la instalación o a su contenido y también para las labores de inspección, pruebas y mantenimiento sobre los medios de protección. Si esta figura no existe, se requiere la definición por parte del propietario de una AHJ independiente, no gubernamental, interna o externa, para verificar la permanencia de los cumplimientos reglamentarios y normativos, con la consideración que no es recomendable que esta función de verificación recaiga directamente en el responsable de la realización del trabajo a controlar o verificar.

Finalmente, uno de los desafíos que implica la utilización de códigos y normas NFPA en Latinoamérica es la necesaria incorporación, en los correspondientes marcos regulatorios, de una clara definición de la AHJ en cada una de las etapas de un proyecto de protección contra incendio y durante toda la vida útil de una instalación, así como las responsabilidades de todas las partes involucradas, para poder cumplir adecuadamente con los objetivos de seguridad humana y protección contra incendio requeridos.

El éxito de un proyecto implica la adecuada y temprana identificación de la o las Autoridades Competentes involucradas desde la etapa de planificación, siendo vital su participación al momento de establecer los objetivos y estrategias de protección, donde incluso puede ser necesaria su incorporación al equipo de trabajo.

CRISTOBAL MIR GACITÚA ESPECIALISTA CERTIFICADO CFPS DE NFPA. GERENTE DE LA INTERNATIONAL FIRE SAFETY CONSULTING IFSC CHILE. VICEPRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN NACIONAL DE PROTECCIÓN CONTRA INCENDIOS ANAPCI.

TRANSVERSAL 18

Muchas sonrisas, mayor seguridad En un entorno en el que, según datos del CONEVAL, 20 millones de niñas, niños y adolescentes habitan en hogares que experimentan algún tipo de pobreza en México, generar iniciativas que cambien su desarrollo psicosocial y velen por su seguridad, será fundamental para el desarrollo del país en los próximos años.

POR: REDACCIÓN

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stablecer lazos de cooperación que sumen a las acciones y los esfuerzos realizados en favor de la sociedad, es una de las banderas, que desde el día uno, ha fortalecido a una de las campañas con más impacto en el entorno mexicano, el Juguetón, es una iniciativa de Grupo Salinas y TV Azteca dedicada a la colecta y donación de juguetes para niñas y niños que viven en situación vulnerable.

Consientes de la importancia que tiene dicha iniciativa, los integrantes del Consejo Nacional de Protección Contra Incendio (CONAPCI), han decidido sumarse a través de un importante donativo de juguetes para la campaña 2021. Establecido como un primer acercamiento que abra la puerta para una cooperación más sólida, en la que se cuide el desarrollo integral de las niñas y niños del país, pero también, su seguridad a través de la prevención de incendios.

A lo largo de 26 ediciones, Juguetón ha logrado entregar más de 258 millones de sonrisas.

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PROVOCAR SONRISAS El calendario marcaba el año de 1995 cuando Jorge Garralda fundó el Juguetón, con el apoyo de Ricardo Salinas Pliego, presidente de Grupo Salinas, lo que comenzó como una anécdota y un gesto noble con dos pequeñas de Coscomatepec, Veracruz, un año antes, se consolidaba como una campaña real, que a la postre y con el apoyo de miles de personas, instituciones y empresas, ha logrado donar juguetes en México, Estados Unidos, El Salvador, Guatemala, Ecuador, Honduras y Nicaragua.

Actualmente se posiciona como la campaña, en su tipo, más grande del mundo. A lo largo de 26 ediciones, ha logrado entregar más de 258 millones de sonrisas.

TRANSVERSAL 20

Mediante la iniciativa se busca para la niñez: Desde el primer momento trabajaron con la misión de regalar un juguete a la mayor cantidad de niñas y niños en situación vulnerable, buscando que tuvieran un desarrollo integral para enfrentar su futuro de manera más equitativa. Esto, a través de una distribución cada 6 de enero, en el tradicional “Día de Reyes”.

La mirada del Juguetón y su trabajo, se centró en convertirse en una campaña reconocida por el apoyo al desarrollo de los niños en situación vulnerable, fortaleciendo su niñez y sus reacciones ante la vida cotidiana a través del juego y actividades lúdicas.

▶ Fomentar el desarrollo adecuado en su vida diaria.

▶ Influir positivamente en su comportamiento. ▶ Incentivar la formación de aptitudes y expectativas.

▶ Desarrollar su imaginación y creatividad de manera lúdica.

De forma paralela, el impacto positivo se incrementa si consideramos la importancia del juguete en el desarrollo de un niño, incentivando factores como el desarrollo psicosocial, la formación de su personalidad, su desarrollo físico, despertando su creatividad, educando en ciertos casos o brindando aptitudes para su expresión y evolución.

La lógica operativa de Juguetón comienza con: La colecta. Empresas, asociaciones y público televidente realizan donativos en especie, redondeo o efectivo.

Acopio y clasificación. Los juguetes se clasifican de acuerdo a tamaño y género en el Centro de Acopio del Juguetón. Para lograrlo, cientos de voluntarios suman sus manos y esfuerzo.

Distribución. A través de sus aliados, los juguetes se distribuyen estratégicamente a todo el país.

Entrega. El 6 de enero, millones de niños reciben la visita de los “Reyes Magos”.

Extendiendo sus lazos y sus alcances, en 2019 Juguetón y UNICEF firmaron una alianza

que benefició a niñas y niños migrantes, con la entrega de juguetes y artículos didácticos a casi 70 centros de atención migrante en México. Su objetivo fue generar confianza, prevenir la despersonalización y ayudar en el reconocimiento de sus emociones.

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Un proyecto de tal magnitud necesita ayuda de muchas formas.

Por ello, suma de manera estratégica a cualquier empresa que pueda ayudar con materia prima para el empaquetado, confección de uniformes para los involucrados, alimentación de los voluntarios, transporte de los juguetes a las comunidades, difusión de la campaña y de cualquier manera que sume al objetivo de generar sonrisas para conseguir un mundo mejor.

(686) 556 0090 - Mexicali (442) 629-6550 - Querétaro

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TRANSVERSAL

“Acercarnos al Juguetón es la puerta de entrada para edificar un futuro que tenga una cultura sólida en materia de prevención, fomentada desde nuestra organización y difundida por los medios de comunicación”.

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Un sector empático El ADN de CONAPCI está conformado por un grupo de especialistas que buscan un cambio dentro del entorno social, su gremio, no solamente salva vidas humanas y protege inmuebles, fortalece el aspecto social, a través de diversas acciones que promueven la cultura de la prevención de incendios y que también invitan a la sociedad civil a participar en una campaña de concientización. Es quizá, ante tales aspectos y filosofías coincidentes, que deciden acercarse al Juguetón, como un aliado estratégico que vele por el futuro y la seguridad de la niñez mexicana.

“Todo tiene que evolucionar, hoy estamos en el mejor momento para impulsar nuestras iniciativas. Acercarnos al Juguetón es la puerta de entrada para edificar un futuro que tenga una cultura sólida en materia de prevención, fomentada desde nuestra organización y difundida por los medios de comunicación. Haber contribuido al aspecto social, es importante, porque el tema de los niños es trascendental para todos, sin embargo, nuestro enfoque va más allá de un juguete, también piensa en la seguridad de esas futuras generaciones”, apuntó Esteban Martínez, asesor de la presidencia CONAPCI-AMRACI. “El objetivo es generar alianzas y sumar, el Juguetón es una campaña que tiene un objetivo social de integración muy relevante, llevando felicidad a los niños que no pueden tener acceso a ella, a través de cumplir un sueño y recibir en esta época algún regalo, algún juguete. Lo hacemos muy emocionados y con la esperanza de poder contribuir más allá de la sonrisa, fomentando la seguridad de estos niños y conformando una alianza con la parte social de TV Azteca, para multiplicar la cultura de la prevención. Pienso que las causas nobles tenemos que sumar y en eso estamos”, manifestó Juan José Camacho, presidente de la Asociación Mexicana de Rociadores Automáticos Contra Incendio y vicepresidente de CONAPCI, ante esta sinergia que podrá establecer mejores condiciones de vida para las generaciones futuras.

MÉXICO 24

EL PROCESO DE UNA

REVOLUCIÓN POR: JUAN JOSÉ CAMACHO GÓMEZ

El camino a la consolidación de una industria joven en el país, está enmarcado por diez años de trabajo regulatorio, educativo y en la conformación de proyectos de visibilidad que han de generar un hito en la cultura de la prevención y protección de incendios.

S

i hiciéramos el ejercicio de construir un relato, los inicios o antecedentes de la protección contra incendio en México, resultaría una historia relativamente joven. Desde el contexto que conozco, en los últimos 50 años ha habido una revolución en la tecnología y en los requerimientos; pero en el desarrollo de la cultura de prevención, solo se ha conseguido una evolución que necesita trabajarse más; al mismo tiempo, existe la necesidad de un marco regulatorio que exija estándares de talla internacional, mismos que generen una infraestructura nacional de primer mundo.

De tal manera que, haciendo una gran fotografía del sector, de la década de los años 60 al 2010 hubo una evolución que, en los últimos 10 años, AMRACI-CONAPCI han empujado para convertirla en una revolución en materia de protección contra incendio, sin que esto signifique que sea más costoso, al contrario, buscamos que la inversión de la iniciativa privada sea más efectiva, y que además, permita salvar vidas, eso vale todo el esfuerzo y el trabajo que llevamos a cabo como grupo.

La asociación nace con el firme objetivo de mejorar la seguridad contra incendio en México. Convicción que se ha logrado paulatinamente a través de tres ejes específicos que son regulación, educación y visibilidad. Dentro de la regulación participamos con diversas autoridades en la generación, modificación o actualización de reglamentos o normas, en este caso, oficiales mexicanas, aportando experiencia y conocimientos técnicos para generar un marco normativo que sea amplio, que esté homologado en el país para que sea factible de implementarse y vigilarse. En este contexto, diversas autoridades como Secretaría del Trabajo, nos han abierto las puertas para colaborar en la mesa con otros actores involucrados que pueden aportar en la materia.

Lo he dicho en diversos foros, en México hay dos Méxicos también en la protección contra incendios: uno, donde los usuarios y las empresas utilizan e implementan tecnología de primer mundo que cumple, e incluso supera, los estándares extranjeros, que se traduce en mayor seguridad y competitividad; y hay otro México, el que se apega y cumple solo con el marco regulatorio nacional, regional o local, pero esto no necesariamente es igual a competitividad o seguridad.

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Al mejorar el marco regulatorio se estaría consiguiendo que estas empresas, del México menos competitivo, vayan mejorando su protección contra incendio y, con el tiempo, blindando su seguridad.

De cualquier manera, el objetivo principal es que, en caso de tener un incendio no tengan pérdidas humanas ni económicas y que mantengan la continuidad de sus negocios, esto les permitiría a muchas empresas incluirse en cadenas de valor que eleven su capacidad financiera y los ponga en condiciones de competencia internacional.

“DE LA DÉCADA DE LOS AÑOS 60 AL 2010 HUBO UNA EVOLUCIÓN QUE, EN LOS ÚLTIMOS 10 AÑOS, AMRACICONAPCI HAN EMPUJADO PARA CONVERTIRLA EN UNA REVOLUCIÓN EN MATERIA DE PROTECCIÓN CONTRA INCENDIO.”

En educación, seguiremos contribuyendo a la certificación de los profesionales. Hasta ahora llevamos generados tres estándares de competencia, uno enfocado al diseñador de sistemas de rociadores, otro más que está especializado en el diseñador de sistemas de alarma y detección, y un tercero que va para el técnico en mantenimiento de extintores, considerando que el comité de gestión en el cual estamos, tiene competencia sobre toda la protección contra incendio y no solamente la parte de los sistemas.

UNA SOLA INDUSTRIA En esta década de revolución sobre la que estamos trabajando, la Asociación Mexicana de Rociadores Automáticos Contra Incendios se gesta encaminada a la supresión y más específicamente a rociadores, pero con la experiencia supimos que era insuficiente para lograr un México sin víctimas de fuego, y ocupando su base sólida, conformamos el Consejo Nacional de Protección Contra Incendio, que integra otros actores y fortalece al grupo. En AMRACI están las mejores empresas fabricantes, diseñadoras, instaladoras en materia de sistemas de rociadores automáticos contra incendio, además de ser un componente muy importante del CONAPCI, que implica un pensamiento más global de la seguridad ante incendios, y que integra otros jugadores de la cadena de valor del sector.

Considerando que un incendio es un proceso en el que hay una entrada y una salida, en dicho proceso lo primero que

tendrías que hacer es la prevención, luego la protección, después el combate y posteriormente la recuperación. Por ello, en materia de prevención, trabajamos a través de la Campaña Nacional de Prevención y Protección Contra Incendios, que sensibiliza a la sociedad a través de las infancias, con actividades y consejos que pueden transformar la realidad, en materia de seguridad, de nuestras futuras generaciones. Casi la totalidad de las misiones de cada uno de los integrantes, comulgan con la misión general de CONAPCI, y esto facilita mucho el actuar, porque entonces solo hay que dirigir y coordinar los esfuerzos, pues la filosofía ya está dada, aquí lo que hacemos es conjuntar trabajos para ser más fuertes y cumplir los objetivos.

Ya formado el conjunto, empujamos e invitamos a muchas otras organizaciones a generar cultura de protección

contra incendio, dando visibilidad a nuestro proyecto.

MÁS ALLÁ DE LA DÉCADA El progreso del sector en los próximos años, depende mucho de nosotros.

Actualmente, se están dando cambios muy importantes, uno de ellos se da con la entrada en vigor de la Ley de Infraestructura de la Calidad (LIC), que dio mayor definición del uso de estándares extranjeros en México, pues la anterior ley sí definía la utilización de estándares internacionales, pero no extranjeros.

En México, la protección contra incendio tiene una tendencia más apegada a la tecnología norteamericana y todo su engranaje normativo de códigos, de estandarización, emana de lo estipulado por los organismos especializados en Estados

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Unidos, por ello, vemos que con el nuevo TEMEC, se podría abrir una oportunidad para este mercado, evitando que se instalen productos no certificados, homologando condiciones justas y de garantía para los usuarios, todo a través de esta LIC, sin embargo, estamos en espera del reglamento, para conocer las reglas específicas de implementación que nos ayuden a lograrlo.

El ideal por el que trabajamos lo resumo en hacer el bien, haciendo las cosas bien, para que a todos nos vaya bien. Que nuestra contribución de evitar la pérdida humana y económica o la interrupción del negocio sea un gran aliciente. Esas condiciones del sector son viables y muchos tenemos trazado el camino hacia allá, los que somos líderes en esta industria transversal tenemos una gran responsabilidad, porque significa que en materia de negocio debemos ser honestos, profesionales, en constante aprendizaje, encabezando nuestros grupos de trabajo con responsabilidad y respeto para que todos crezcan social y económicamente. Por otro lado, en el tema que nos ocupa, tenemos que pasar de una cultura del sistema, a una

cultura de la ingeniería, con una visión amplia de la seguridad contra incendio.

Considero que los sueños de alguien que persevera, solo son objetivos que están por alcanzarse, por ello, soñamos y trabajamos por un país con una cultura social de la prevención y la protección contra incendio avanzada, como lo está ante otro tipo de fenómenos como sismos y huracanes. Sin muertes por quemaduras. Con una infraestructura del país más eficiente, que les permitiera a las ciudades conectarse a una red de agua para poner un sistema de rociadores. Que los sistemas de alarma y detección pudieran estar conectadas a las estaciones de bomberos y, que estos, fueran reconocidos en México como una profesión, es decir, que además de su labor altruista se dignificara el trabajo de los profesionales del combate contra incendio. Que la industria de la protección contra incendio sea cada vez más sólida y que con su injerencia transversal ayude a desarrollar la infraestructura del país, que con ello se desarrollará también su economía.

JUAN JOSÉ CAMACHO GÓMEZ PRESIDENTE DE AMRACI Y VICEPRESIDENTE DE CONAPCI

PERÚ

ACTUALIZACIÓN CONSTANTE POR: RAÚL DUARTE URRUCHI

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Un panorama general de las necesidades en materia de normas de protección contra incendio en Latinoamérica para lograr grandes cambios.

C

uando hablamos acerca de las normas y su aplicación, todos los involucrados en el sector de la protección contra incendio sabemos el significado e importancia en materia de su promulgación, difusión y cumplimiento. Específicamente, las normativas son reglas que nos permiten aplicar aspectos fundamentales y técnicos, que regulan parte o todas las partes, de un proceso en determinada actividad con el objetivo de establecer estándares que todos deben cumplir en igual condición para lograr un bienestar común. De esta manera, no solo garantizamos un resultado óptimo y seguro, también protegemos a las personas, los trabajadores que desarrollan los proyectos y salvaguardamos el patrimonio y la inversión.

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“EN EL PERÚ, SOLO DURANTE LOS ÚLTIMOS

5 AÑOS,

HEMOS PASADO DE ATENDER UN PROMEDIO DE 34 A CERCA DE

40 INCENDIOS POR DÍA”.

PERÚ

En ese sentido, las normas son una herramienta relevante para el desarrollo y operatividad en cualquier sector; sin embargo, la realidad es que su carácter regulador hace que muchos lo perciban como un elemento que obstruye, sobre todo porque a nadie le agrada ser fiscalizado. Incluso existe una peor perspectiva cuando se desconoce o no se entiende la normativa, ya que esta se ve como una especie de protocolos que generan gastos innecesarios.

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Particularmente, en el Perú, respecto a la protección contra incendios, las normas juegan un papel vital. Lamentablemente, reconocemos que se encuentran desfasadas, aunado a ello, existe desconocimiento sobre el tema debido a la carencia académica; esto hace que su aplicación no sea el único problema, pues también nos encontramos con temas de interpretación y especialización. Por lo tanto, reitero, el país necesita de manera urgente una actualización de la normativa que proteja la vida de los ciudadanos y bomberos, el patrimonio y la inversión.

Como sucede en gran parte de los países Latinoamericanos, en el Perú reina la informalidad y la corrupción; dos males que anteponen intereses de particulares y de grupos minoritarios, dejando desprotegido a la mayoría de la población. Desafortunadamente, esto también se aplica a la seguridad contra incendios. Por tales motivos, desde su creación en el 2019, la Sociedad Nacional de Protección Contra Incendios -SNPCI ha sido parte de una lucha constante por mejorar las normas y adaptarlas a la realidad de nuestro país, y si bien ha tenido avances, estos aún son pequeños.

Paradójicamente, cada año las cifras muestran el incremento de incendios a nivel nacional, convirtiéndola en la tercera emergencia atendida más frecuente por el Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú - CGBVP (solo durante los últimos 5 años, hemos pasado de atender un promedio de 34 a cerca de 40 incendios por día), y no existe mayor preocupación de los entes reguladores, por enfocarse en la actualización de la norma y trabajar un plan de adecuación para edificaciones antiguas.

“LAS NORMATIVAS, SON REGLAS QUE NOS PERMITEN APLICAR ASPECTOS FUNDAMENTALES Y TÉCNICOS, QUE REGULAN PARTE O TODAS LAS PARTES, DE UN PROCESO EN DETERMINADA ACTIVIDAD CON EL OBJETIVO DE ESTABLECER ESTÁNDARES QUE TODOS DEBEN CUMPLIR EN IGUAL CONDICIÓN PARA LOGRAR UN BIENESTAR COMÚN.”

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PERÚ 34

Para simplificarlo, en el Perú contamos con el Reglamento Nacional de Edificaciones (RNE), dentro de él, tenemos un subcapítulo denominado A130: Requisitos de Seguridad. Generalidades, el cual, especifica los estándares que deben seguir los sistemas de protección contra incendio. Contempla detección y alarma, supresión con agua e incluso muros cortafuego y protección pasiva en general. Ahora bien, aunque está correctamente estructurada, su actualización se hace necesaria debido a que, en algunos casos, la especificación es simple; por ejemplo, en detección o en los sistemas de supresión con agua, en donde solo se aplican para determinados riesgos. Por otra parte, todo lo que existe y ha servido como base está bajo normas NFPA; sin embargo, hace falta diseñar estándares más específicos para evitar múltiples criterios (en el diseño, instalación y certificación) que al final terminan perjudicando el proyecto.

Fundamentalmente, las normas de seguridad van a ser la fuente de información que permita lograr una uniformidad en el modo de actuar de los trabajadores ante determinadas circunstancias o condiciones, permitiendo comportamientos y acciones adecuadas. Por ello, su actualización es base. Hoy en día contamos con algunas leyes muy antiguas que no se modifican desde los años 60 y 70. Claro, existen excepciones como la actualización de la Ley de Hidrocarburos y Minería. Este sector cuenta con una legislación muy aparte, sus estándares son muy altos y, por ende, están bien protegidos. Cuando uno trabaja en minería o hidrocarburos se cumple con todas las normas NFPA y, si puede, pasa a FM Global, creciendo así las exigencias; muchos más rociadores, más agua, más elevado el estándar. Desafortunadamente, parece que en toda Latinoamérica siempre “se le saca la vuelta a la ley” y hay empresas que trabajan con malas prácticas, aunque no todo está perdido, pues existen otras, como las asociadas a la SNPCI, que quieren poner las reglas claras para que las normas cumplan con su objetivo y son conscientes de que trabajan por conservar la vida de las personas desde su campo de acción.

Otro aspecto de gran relevancia radica en la lucha contra la informalidad que permea prácticamente en cualquier esfera, pues no solo se aprecia en el sector empresarial, sino que, también parece

ser incentivada por el propio gobierno. Y esto lo vemos a través de licitaciones que son obtenidas por empresas que recién están iniciando o tienen muy poca experiencia y preparación para desarrollar sistemas contra incendios, los cuales, ameritan un alto nivel de capacitación para lograr ingeniería sofisticada que permita realizar una inversión eficiente. Lo lamentable de este punto es que los inversionistas no se dan cuenta hasta el final del proceso, cuando deben desembolsar mayor presupuesto para reparar una ingeniería, instalación o mantenimiento realizado de manera inadecuada o fuera de norma, lo que termina siendo un obstáculo para la obtención de permisos o, en otros casos, parálisis de operaciones por fallas en el funcionamiento. Hablando desde la experiencia de mi equipo de trabajo, nos hemos enfrentado a situaciones que requieren paro de operaciones, en ese momento, un profesional efectúa la revisión y se encuentra con instalaciones en las que quizá hay que comprar otra bomba, porque la que se ha colocado no sirve; o la cisterna que se ha utilizado es la misma para todo el edificio y el reglamento dice que tiene que ser una independiente; cuestiones serias que no pueden dejarse pasar porque estamos hablando de vidas humanas.

Finalmente, nos encontramos con la falta de profesionales capacitados. Es evidente que en el Perú existe una gran demanda de la ingeniería de protección contra incendios; sin embargo, en las universidades no prexiste una sola ingeniaría relacionada con esta profesión, solo se tienen versiones equivocadas pese a las enormes necesidades que surgen en el país. Desde su origen, la SNPCI trabaja para impulsar la especialización de los profesionales en temas relacionados con la protección contra incendios a través de cursos y conferencias que se brindan de manera gratuita. La propuesta a futuro es generar alianzas con universidades para incluir a la ingeniería de protección contra incendios como curso de postgrado, dando pie a una nueva generación de profesionales expertos en la materia.

Con todo ello, fortaleceremos un sector pujante, que debe contemplar normativas especializadas, que funcionen como ejes rectores para todos los involucrados en un proyecto; sumando, además, generaciones de profesionales que se encuentren cada vez más doctos en la implementación de los sistemas de protección contra incendio; y haciendo unidad, que genere el combate a la informalidad y fomente una nueva cultura del combate al fuego.

RAÚL DUARTE URRUCHI PRESIDENTE DE LA SOCIEDAD NACIONAL DE PROTECCIÓN CONTRA INCENDIOS -SNPCI PERÚ.

GERENTE GENERAL DE IDT.

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CÓDIGO CONTRA INCENDIOS,

una necesidad

Exploramos un panorama general de la importancia de contar con códigos y normas contra incendio en los países latinoamericanos, desarrollando las diferencias entre estos dos conceptos e indicando las características de idoneidad que surgen de la adopción o tropicalización.

POR: JOSÉ MANUEL MAYA G.

L

as normas en protección contra incendio se construyen como respuesta a las grandes tragedias que han azotado al mundo, especialmente aquellas que han involucrado pérdidas de vidas humanas y grandes pérdidas de capital. A partir de la experiencia de dichas tragedias se han creado las diferentes alternativas de protección contra incendios y se han construido las normas técnicas para el diseño e instalación de los sistemas de protección.

El propósito de las normas, es lograr un grado razonable de protección contra incendios para la vida y la propiedad a través de la estandarización del diseño, de la instalación y de los requisitos de prueba para sistemas de protección con base en principios de ingeniería, prueba y experiencias de campo.

Con la construcción de tales normas, se produce un gran portafolio de alternativas y requerimientos para la protección contra incendios de acuerdo con la condición particular y específica, ya sea para rociadores, mangueras, bombas, procesos, materiales o equipos. Estas normas se enfocan en el tema principalmente de instalación, es decir, de cómo se deben hacer las cosas para que los sistemas funcionen correctamente cuando son requeridos.

Luego de estudiar, analizar y evaluar los eventos desencadenantes de las tragedias y las condiciones agravantes de sus consecuencias, se construyen los códigos, igualmente en consenso, con la participación de grupos interdisciplinarios, de tal manera que, la conclusión a la que se llegue sea aceptada por todos los entes de interés, con la especificación de los requerimientos mínimos que se deben cumplir para que no vuelva a suceder, o para que los daños o consecuencias sean menores.

La gran diferencia entre el código y la norma se fundamenta en la cobertura, en el código es mucho más amplia, ya que, se tratan de reunir, en un documento, todos los aspectos de la protección y prevención de incendios que utilizan otras normas desarrolladas.

Estos códigos se construyen en un lenguaje adecuado para su adopción como ley, a diferencia de otros documentos que son redactados como referencia.

Son empleados para uso legal, con los requisitos adecuados para su aplicación obligatoria e inclusión con material aclaratorio y notas. Su principal función radica en definir cuándo son requeridos determinados medios de protección y cuáles son las normas que se deben consultar; mientras que las normas se centran en el cómo deben ser implementadas las alternativas de protección requeridas por el código.

La protección contra incendio no pude seguir siendo una simple práctica recomendada, la protección de las vidas no debe ser algo voluntario, debe ser considerada como algo obligatorio.

En los códigos se consideran los estudios de los incendios más significativos con pérdida de vidas, y el análisis de las causas de esta pérdida de vidas; se escriben igualmente en consenso por un grupo interdisciplinario, donde se reúnen un conjunto de requerimientos, reglas o preceptos mínimos, necesarios, para establecer un nivel razonable de seguridad para las vidas humanas y protección de la propiedad ante riesgos de incendios, explosiones, y condiciones de peligro.

Existen códigos de seguridad humana, códigos de construcción para edificaciones nuevas, códigos de detección y alarma, códigos de líquidos combustibles, entre otros, así como también códigos de incendios, que se convierten en el portón o entrada a los demás códigos o normas, en ellos, se trata de cubrir la gran mayoría de temas relacionados con la protección contra incendio y su orientación o identificación de las normas que se deben aplicar.

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COLOMBIA 38

La adopción de un código de incendio significa la adopción de un conjunto muy amplio de otros códigos y normas, por lo tanto, no hay que seleccionar cuáles serían las normas que son de obligatorio cumplimiento, sino que, con la selección de un solo código de incendios, aceptan las demás normas y códigos.

Estos códigos de incendio existentes han sido revisados, actualizados, probados, y ajustados constantemente, cuentan con un completo historial de mejoras, todos encaminados a proteger la vida de las personas y la continuidad de las operaciones, por lo tanto, no tiene sentido inventar lo que ya está inventado, es decir, no es indispensable crear un nuevo código para las necesidades particulares de un país, pues el riesgo de incendio y el riesgo de pérdida de vidas humanas es prácticamente el mismo en cada nación.

Se podrían hacer algunos ajustes menores, como la adecuación de tecnologías donde las condiciones climáticas son diferentes, o la terminología usada puede variar, pero el objetivo y alcance indicado en los códigos aplica en cualquier país del mundo.

La gran diferencia entre el código y la norma se fundamenta en la cobertura, en el código es mucho más amplia, ya que, se tratan de reunir, en un documento, todos los aspectos de la protección y prevención de incendios que utilizan otras normas desarrolladas.

La protección contra incendio no pude seguir siendo una simple práctica recomendada, la protección de las vidas no debe ser algo voluntario, debe ser considerada como algo obligatorio, y la adopción de un código de incendios obliga a incluir los requerimientos de protección desde la misma concepción de cualquier proyecto de construcción, de tal manera que, las protecciones contra incendio y la seguridad humana sean parte del costo total del proyecto y no pueden ser consideradas como costos adicionales innecesarios, como las clasifican algunos constructores, y es tan simple como entender que velar por la seguridad de las personas siempre es necesario.

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En los países latinoamericanos donde se cuenta con un código de incendios, existe un aporte trascendental para establecer los lineamientos de protección de las personas al interior de las edificaciones. Ahora bien, tan importante es contar con un código como tener la autoridad competente que lo haga cumplir, una autoridad preparada, conocedora del código, con la formación técnica y ética para hacer valer los requerimientos indicados y con el poder o los medios para sancionar en caso de no seguirse los lineamientos. Ambos se complementan (el código y la autoridad competente), pues un documento escrito sin claridad en su obligatoriedad y sanciones no es suficiente, nuestro entorno aún no ha madurado para considerar los temas de seguridad humana y protección contra incendio como algo natural, si se imponen, no se consideran.

La construcción de un código debe estar sustentada en la parte técnica y no en las exigencias o requerimientos de quienes dominan el mercado, es aquí, donde los gobiernos tienen una gran obligación, para poder identificar que prima la protección de las personas sobre los intereses particulares, y ese es el gran riesgo de “construir” un código propio, que fácilmente se ajusta a los intereses de algunos, y se descuida el interés común, mientras que los códigos existentes de reconocimiento internacional, están integralmente basados en la protección de las personas sin considerarse intereses particulares, por ello, como se ha dicho antes, es preferible adoptar y no construir un código de incendios.

El gran paradigma de la implementación de códigos de incendios en nuestros países latinoamericanos, es el incremento en costos que esto implica en los proyectos de construcción, pero en realidad, significa una gran oportunidad de inversión desde el principio de los proyectos, y no una gran tragedia. Ya ese costo lo pagaron otros, no tiene sentido volver a pagar por lo que ya se sabe y es mejor reconocer las alternativas que funcionan para proteger a las personas. En materia económica, el costo necesario para la protección de una persona, es en realidad, un porcentaje menor frente al costo total de un proyecto.

JOSÉ MANUEL MAYA G. INGENIERO MECÁNICO. GERENTE DE LA EMPRESA CONSULTORA FIRE MARSHAL DE COLOMBIA S.A.S. ACTUALMENTE MIEMBRO DE LA JUNTA DIRECTIVA DE ANRACI, EL GREMIO DE LA PROTECCIÓN CONTRA INCENDIO EN COLOMBIA.

PERSPECTIVA

FORTALECIENDO LA SEGURIDAD CONTRA INCENDIOS EN MÉXICO POR: MARIA IAFANO

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En un contexto en el que el andamiaje normativo parece agregar valor al marco de infraestructura de calidad mexicano y al mismo tiempo, apoyar la innovación y el avance tecnológico, la seguridad contra incendios de México, puede verse beneficiada por el trabajo de UL y de otros actores relevantes del ecosistema.

E

l 4 de febrero de 2021, Underwriters Laboratories (UL), una organización científica de seguridad sin fines de lucro, cuya misión es trabajar por un mundo más seguro, celebró el primer aniversario de su autorización como Organismo Nacional de Normalización en México, otorgada por la Dirección General de Normas (DGN) de la Secretaría de Economía. Con esta autorización, Underwriters Laboratories se convirtió en la primera organización autorizada para desarrollar estándares en cada uno de los tres países que conforman el acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC).

A la par, la histórica introducción de la Ley de Infraestructura de la Calidad (LIC), representa un nuevo marco regulatorio que se ha convertido en un mecanismo para avanzar en el sistema de estandarización y evaluación de la conformidad en México. La LIC fue creada para alinear el sistema mexicano con las nuevas tendencias y requerimientos del T-MEC, así como con las necesidades de su mercado. Además, se convirtió en una plataforma de apertura que integra nuevos sujetos facultados para estandarizar, abriendo y fortaleciendo aún más el sistema.

Este cambio ha sido una transición progresiva que alejó el sistema de estandarización de la pesada gestión pública y permitió el impulso del sector privado. La intención fue agregar valor al marco de infraestructura de calidad mexicano y al mismo tiempo, apoyar la innovación y el avance tecnológico en concordancia con los objetivos de política pública del gobierno actual.

Debido a que todos los facultados para estandarizar deben tener la experiencia y la capacidad para desarrollar estándares nacionales, se espera que este cambio logre un impacto real en la estandarización.

REUNIR AL ECOSISTEMA A más de un año de su autorización, Underwriters Laboratories (UL) ha dado pasos firmes para fortalecer y agregar valor al ecosistema de protección contra incendios. El ingreso de Underwriters Laboratories a México ha facilitado el desarrollo de estándares mexicanos, a través de la creación de su Comité Técnico de Normalización Nacional de Seguridad Contra Incendios y Dispositivos Salvavidas (CTNNSIDS). Este comité ha buscado incluir a todos los actores relevantes involucrados en el ecosistema, permitiéndoles contribuir con su experiencia para elevar la seguridad contra incendios en el país.

Actualmente, dentro del comité y con la ayuda de más de 70 expertos, se están desarrollando estándares que abordan temas como la presión positiva de fuego para ensambles de puertas, bombas centrífugas estacionarias para servicios de protección contra incendios, dispositivos de señalización visible para alarmas de incendio, sistemas y dispositivos de flotación personal (también conocidos como chalecos salvavidas). Estos estándares se están desarrollando por consenso de los miembros del comité para reflejar las necesidades específicas de México.

Además del comité, los grupos de trabajo tienen el mandato de revisar, adaptar y desarrollar los requisitos técnicos de las normas. Tanto el comité como los grupos de trabajo incentivan la participación de todas las categorías de interés identificadas y grupos de partes interesadas, a fin de tener a todos los sectores posibles reunidos. Este enfoque no solo cumple con el código de buenas prácticas para el desarrollo de normas contenido en el Anexo 3 del Acuerdo sobre Obstáculos Técnicos al Comercio (OTC) de la Organización Mundial del Comercio (OMC), sino que también, ayuda a garantizar que las opiniones y propuestas puedan presentarse desde diferentes perspectivas, incluida la academia, el gobierno, los usuarios finales y los grupos de interés general.

“HAY CINCO ESTADOS EN LOS QUE SE HAN AUMENTADO LOS CASOS DE INCENDIO EN MÁS DE UN 30%: BAJA CALIFORNIA SUR, NUEVO LEÓN, COLIMA, MICHOACÁN Y AGUASCALIENTES.”

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INVESTIGACIÓN EN CIENCIAS DE LA SEGURIDAD, PUNTO DE PARTIDA Conjuntamente con el desarrollo de estándares, la investigación científica y tecnológica en Underwriters Laboratories son esenciales para respaldar el desarrollo óptimo, la actualización y la base científica de nuestros estándares. Lo anterior, ayuda a garantizar que nuestros estándares sigan siendo técnicamente relevantes y que respalden la innovación y los últimos avances en la ciencia de la seguridad.

Por esta razón, hemos invertido en investigación de la ciencia de la seguridad durante más de 125 años y continuamos compartiendo conocimiento y ciencia de datos con nuestros socios y países interesados en todo el mundo.

A principios de este año, nuestro equipo de ciencia de datos realizó un análisis del sistema de seguridad contra incendios en México y proporcionó nuevos conocimientos

SECRETARÍA DE ECONOMÍA, CDMX.

“MÉXICO OCUPA EL PRIMER LUGAR EN LESIONES POR INCENDIO EN LA REGIÓN DE AMÉRICA DEL NORTE CON 100 CASOS POR CADA 100.000 HABITANTES.”

PERSPECTIVA

tanto en lesiones como en muertes por incendios, mientras que Ecuador ocupa el primer lugar y Perú el tercero.

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y cifras impactantes sobre la situación de la seguridad en este tema.

Según David Wroth, director de Ciencia de Datos de Underwriters Laboratories, la tasa de muertes relacionadas con incendios en México disminuyó de 2009 a 2014. Sin embargo, las lesiones causadas por incendios aumentaron en un 7.6% entre 2014 y 2019, mientras que entre 2015 y 2019, las muertes causadas por fuego, calor y sustancias calientes aumentaron tres veces esa cantidad, en un 22%. Este aumento suma 203 muertes cada año, lo que resulta en más de 1,000 muertes adicionales. Además, Wroth informó que ciertos grupos de población tienen más probabilidades de sufrir accidentes y muertes relacionadas con los incendios. Los resultados de 2019 indican que los hombres tienen 1.3 veces más probabilidades que las mujeres de sufrir una lesión y 1.8 veces más probabilidades de morir en un incendio.

Wroth también explicó que México ocupa el primer lugar en lesiones por incendio en la región de América del Norte con 100 casos por cada 100.000 habitantes, en comparación con los poco más de 80 casos por cada 100.000 habitantes en los Estados Unidos y poco más de 70 casos para la misma cantidad de habitantes en Canadá. Sin embargo, en el número total de muertes por fuego, calor y sustancias calientes, Estados Unidos ocupa el primer sitio. Al comparar a México con el resto de América Latina, ocupa el segundo lugar

Un análisis más detallado de los datos indica que dentro de México, solo hay tres estados que han logrado reducir las lesiones por incendio: Ciudad de México, Veracruz y Guerrero. En contraste, hay cinco estados en los que se han aumentado los casos en más de un 30%: Baja California Sur, Nuevo León, Colima, Michoacán y Aguascalientes. Los resultados muestran que el panorama de la prevención de incendios está lleno de desafíos y áreas de oportunidad importantes.

“Continuaremos colaborando con todas las partes interesadas para mejorar la recopilación de datos y analizar qué estrategias pueden aportar algunos estados de México a otros”, dijo Wroth durante el seminario web en junio de 2021, que Underwriters Laboratories organizó en conmemoración al mes nacional de prevención de incendios en México.

ALIANZAS QUE FORTALEZCAN LA SEGURIDAD CONTRA INCENDIOS En Underwriters Laboratories, nuestra visión incluye contribuir a un futuro más seguro y sostenible, por lo que también apoyamos iniciativas de estudiantes como el proyecto Synbiofoam, un esfuerzo para desarrollar una espuma de extinción de incendios sostenible con agentes extintores ecológicos para ayudar a salvaguardar la vida animal y vegetal. Dirigido por estudiantes de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL). Asimismo, recientemente firmamos un memorándum de entendimiento con el Instituto Politécnico Nacional (IPN), una universidad dedicada a promover la colaboración en investigación y educación con sus estudiantes.

El compromiso con nuestra misión es lo que rige todas nuestras acciones actuales y nuestros planes futuros para crear mejores

estándares que beneficien a toda la sociedad. Continuaremos promoviendo la colaboración internacional para generar valor compartido y brindar a las partes interesadas, así como a los socios, las herramientas para mejorar los productos, brindar confianza y adquirir conocimientos sobre el cumplimiento de las normas de seguridad.

El proceso basado en consenso se fundamenta en el aporte de diversos expertos para ayudar a garantizar que las normas sean integrales, sostenibles y que se centren en la seguridad, en línea con la misión de UL. Finalmente, hago una atenta invitación a aquellos especialistas interesados en participar en nuestro proceso de desarrollo de estándares abiertos y transparentes, a que nos contacten a través de nuestro sitio ul.org/contact.

De igual manera, a quienes estén interesados en acceder a los documentos de los estándares UL y ULC (incluida la visualización digital gratuita), así como en registrarse para recibir alertas, pueden hacerlo en ShopULStandards.com. ¡Sigamos trabajando juntos para fortalecer el sistema de seguridad contra incendios en México!

MARIA IAFANO INTERNATIONAL STANDARDS MANAGER DE UNDERWRITERS LABORATORIES

CONECTAR Y CONTROLAR DESDE SU DISPOSITIVO MÓVIL Servicios Conectados para la Protección de Vida (CLSS)

Los Servicios Conectados para la Protección de Vida (CLSS) de Honeywell colocan la conectividad en el centro de la seguridad contra incendios, proporcionando visibilidad para impulsar la toma de decisiones oportuna y precisa.

La plataforma Honeywell CLSS aprovecha el poder del hardware y el software para transformar la forma en que los sistemas están diseñados, instalados, monitoreados y mantenidos. Ya sea que esté buscando optimizar la puesta en marcha, aumentar la productividad del servicio o acceder a los informes en cualquier momento y desde cualquier lugar, busque Honeywell CLSS. HAGA MODIFICACIONES EN EL INSTANTE CLSS le permite instalar, probar y monitorear dispositivos desde cualquier lugar durante la instalación, en múltiples dispositivos móviles.

INFORMES ELECTRÓNICOS EN LA PUNTA DE SUS DEDOS

Registros electrónicos disponibles en cualquier momento, desde cualquier lugar en un servidor seguro en la nube.

PRUEBAS DE INSTALACIONES EN LA MITAD DE TIEMPO Pruebe activamente una instalación eliminando la necesidad de volver físicamente al panel para realizar pruebas.

UN SISTEMA QUE CRECE CON USTED El software innovador CLSS se desarrolla continuamente teniendo en cuenta sus necesidades.

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CURRÍCULUM DEL PROFESIONAL EN INGENIERÍA CONTRA INCENDIO ECUADOR

UN ESFUERZO LATINOAMERICANO POR: SANTIAGO XAVIER DURÁN CAMACHO

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esde hace varios años, la incorporación de instalaciones de protección contra incendio en las edificaciones es algo solicitado, incluso en algunos países de Latinoamérica es obligatorio; las medidas de protección activa como: sistemas de supresión a base de agua o sistemas de alarma y detección son los más implementados, y son tomados en cuenta en la planificación de las edificaciones.

El vertiginoso desarrollo de la industria de la construcción, con edificaciones cada vez más complejas y la constante inclusión de nuevos requerimientos normativos, muchas veces por parte del usuario final, van creando esta necesidad de sistemas de protección contra incendio con cumplimiento normativo, este último, es posible si tenemos el conocimiento y las herramientas para diseñarlo, especificarlo y construirlo, además, necesitamos contar con una legislación adecuada que nos lo permita.

Al menos 11 países Latinoamericanos, han generado un programa que busca salvar la deficiencia educativa en materia de protección contra incendio en la región, pensando que es primordial un inicio sobre las bases prácticas, para posteriormente, llegar a los diseños por desempeño.

Es importante reconocer el momento que vivimos, mismo que ha permitido el desarrollo de gremios referidos a la protección contra incendios. La unión de varios profesionales con objetivos similares, enfocados en reducir las brechas de conocimiento en este tema, ha fortalecido el uso de normativas válidas o la creación de algunas de acuerdo a los requerimientos del país donde se encuentren. Una práctica utilizada en algunos países, es la adopción por referencia de normas y códigos de la NFPA como una solución práctica al desarrollo normativo.

En el 2018, a propósito del Expo Fire Protection Congress, en ciudad de México, los anfitriones AMRACI y CONAPCI propusieron unir fuerzas para profesionalizar la actividad a través de mejorar la legislación y la educación en la región; esfuerzo que ha ido tomando forma y se ve reflejado en la creación de la Red LATAM PCI, hoy en proceso de legalizar su actividad. En esta convocatoria han participado activamente al menos 11 países latinoamericanos. Una de las actividades principales de esta institución es la de buscar un aprendizaje formal en la protección

contra incendio, no ha sido una sorpresa, que las necesidades en capacitación y la visión final del proceso sean similares para todos.

Otro factor de impulso, han sido los trabajos de la NFPA por llegar al Mercado Latinoamericano, permitiendo el inicio de la capacitación de las normas NFPA en español. Esta tarea no ha sido fácil, es necesario recordar que en Latinoamérica no existían Universidades con carreras de protección contra incendio y, en consecuencia, muy pocos profesionales de la región con un título universitario, en ese sentido, la búsqueda de profesionales que puedan capacitar adecuadamente ha sido y es un reto por cumplir.

“RED LATAM PCI ES LA UNIÓN DE AL MENOS 11 PAÍSES LATINOAMERICANOS, QUE UNEN FUERZAS PARA PROFESIONALIZAR LA ACTIVIDAD A TRAVÉS DE MEJORAR LA LEGISLACIÓN Y LA EDUCACIÓN EN LA REGIÓN; ESFUERZO QUE HA IDO TOMANDO FORMA Y, QUE HOY, ESTÁ EN PROCESO DE LEGALIZAR SU ACTIVIDAD.”

Actualmente, es posible estudiar varias normas NFPA en varios países de Latinoamérica, por medio de empresas proveedoras de los programas de educación, incluso obtener reconocimiento que tenga el nivel de un diplomado, al acumular estudios en varias normas. Precisamente, la imposibilidad para acceder a una profesión de tercer nivel en la región, definió la característica principal de este esfuerzo, la meta final, a largo plazo, será llegar a la profesionalización de la actividad de protección contra incendio a través de la creación de una carrera de pregrado en las universidades.

La mayoría de los países trabajan para salvar la deficiencia en educación, generando cursos puntuales que no siempre están integrados en un plan, son estudios que no necesariamente involucran todos los aspectos relacionados con la protección contra incendio.

Al hacer una consulta sobre las características de los programas de educación y sobre el interés sobre los mismos, surgieron solicitudes de

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ampliar el conocimiento de la protección contra incendios de forma global, y no solo basado en la aplicación de medidas activas de alarmas y detección o combate de incendios, es decir, programas de estudio que se basen en la obtención de competencias fácilmente demostrables y no solo en la aprobación de cursos.

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Se acordó desarrollar el programa con énfasis en el entendimiento de las medidas prescriptivas, sobre las de desempeño, pensando que es primordial un inicio sobre las bases prácticas, para posteriormente, llegar a los diseños por desempeño, además, se consideraron aspectos económicos y de acceso a la tecnología para tomar esta decisión.

CONDICIONES DE INICIO ESTABLECIDAS PARA ESTE PROCESO DE APRENDIZAJE

Una tarea compleja es revisar los planes de estudios desarrollados en cada nación y elaborar un programa que cumpla con los requisitos planteados, dentro de esta tarea se han definido 5 áreas en las que se desarrolla el plan de estudio, prevención, compartimentación y evacuación, sistemas pasivos, sistemas activos y relación con la normativa local o con las entidades con jurisdicción. Como base para los estudios se utilizarán: el Manual de Protección Contra Incendio de la NFPA, El Código Internacional de Fuego ICC y los manuales de la SFPE. Generar una malla curricular, es un tema complejo que se ha resuelto con el compromiso y pasión de varios ingenieros Latinoamericanos, que han colaborado compilando los diferentes ensayos educativos propios y, otros que han llegado hasta su implementación, a través de Institutos y Universidades de la región.

NO PRETENDER QUE SEA UN PLAN DE CARRERA UNIVERSITARIA.

PARA ASEGURAR EL CUMPLIMIENTO DE LOS OBJETIVOS SE DEBERÁN DEFINIR LAS COMPETENCIAS INICIALES Y FINALES DE CADA CURSO.

“SE HAN DEFINIDO 5 ÁREAS EN LAS QUE LOS CURSOS PODRÁN SER TOMADOS DE FORMA INDEPENDIENTE O POR ÁREAS HASTA EL NIVEL QUE EL PARTICIPANTE LO DESEE.

SE DESARROLLA EL PLAN DE ESTUDIO, PREVENCIÓN, COMPARTIMENTACIÓN Y EVACUACIÓN, SISTEMAS PASIVOS,

SERÁ RESPONSABILIDAD DEL ESTUDIANTE EL NIVEL DE ESPECIALIZACIÓN QUE QUIERA ADQUIRIR.

SISTEMAS ACTIVOS Y RELACIÓN CON LA NORMATIVA LOCAL O CON LAS ENTIDADES CON JURISDICCIÓN.”

BUSCAR LA ESTANDARIZACIÓN DE LOS ESTUDIOS ENTRE LA REGIÓN.

PROMOVER LA GENERACIÓN DE PROFESIONALES PARA QUE SEAN INSTRUCTORES.

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En la actualidad, los programas de estudio universitario se evalúan de acuerdo a la cantidad de créditos educativos por nivel y totales; considerando que no se trata de un plan de estudios para la obtención de un título universitario, se ha decidido que se determine una cantidad mínima de horas de estudio en función del apartado. Se ha identificado que la capacitación requiere ser complementada a través de la práctica guiada, tareas y el estudio adicional de los estudiantes, por ello, la propuesta se basa en una cantidad mínima de horas de capacitación directa con el instructor, y unas horas de estudio propio, generando así una carga académica total. Otro aspecto importante que resolver, es el reconocimiento al estudio, se propone considerar dos alternativas para acceder a los programas de estudio, uno será de acuerdo al área de interés y otro por periodos, cuyo tiempo será el de un periodo universitario aproximadamente, que si el estudiante aprueba, será reconocido con una acreditación. Tal acreditación, en cierto tema o área, se ha definido como una evaluación documentada y más detallada que la aprobación.

El plan de estudio se compone de materias en las áreas de: Prevención: son puntos relacionados con evitar que se produzca un fuego de forma espontanea o por condiciones creadas en la planificación de una edificación, evitando tomar otro tipo de medidas de seguridad como medida inicial, considerando que no es una solución eficaz por sí sola.

Compartimentación: estudios para entender que el confinamiento del fuego aumenta considerablemente la eficacia de las medidas de combate de incendios, así como el uso adecuado de los diferentes materiales disponibles en la construcción.

Sistemas pasivos: estudio de los elementos constructivos y productos usados específicamente para evitar el inicio y propagación del fuego, minimizando las afectaciones a la edificación.

Sistemas activos: estudio sobre medidas de alerta y combate de incendios a base de agua y otros medios, de acuerdo a la aplicación, en función de la eficacia y seguridad, estudiando a detalle todos los elementos que integran una solución tecnológica.

Normativas locales: el desarrollo normativo en la región es incompleto y es importante buscar la forma de complementar las deficiencias con normativas válidas, a través de la relación y desarrollo mutuo con las entidades con jurisdicción.

La intención de la Red LATAM PCI es que el documento esté disponible como una guía para consulta, su uso y eficacia deberá ser evaluada para perfeccionarla y que cumpla con los objetivos y metas propuestas. Una vez que la Red LATAM PCI adquiera su constitución legal, los documentos desarrollados serán difundidos y compartidos, estos esfuerzos se hacen para conseguir elevar el nivel de seguridad en todas las edificaciones de la región.

Evacuación: medidas de seguridad frente al fuego y a otros peligros, entendiendo el comportamiento humano y los diferentes riesgos que se puedan presentar, estudio de soluciones prescriptivas detalladas en el código de seguridad humana que permiten el movimiento de las personas evitando los peligros.

SANTIAGO XAVIER DURÁN CAMACHO INGENIERO MECÁNICO DE LA ESCUELA POLITÉCNICA NACIONAL, CON 30 AÑOS DE EXPERIENCIA. COORDINADOR DEL COMITÉ DE EDUCACIÓN EN LA RED LATAM PCI