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FABIOLA RIVERA GONZÁLEZ, maestra de 25 generaciones

Por Arturo Padilla

La frase “no sabemos a dónde nos llevará la vida” tiene algo de cierto, como lo comparte la QFB María Fabiola Rivera González, profesora base del Departamento de Biotecnológicas y Ambientales del Decanato de Diseño Ciencia y Tecnología de la Universidad Autónoma de Guadalajara.

La maestra descubrió su pasión por la enseñanza en cierta manera “por accidente” o circunstancias que no esperaba. “Tenía tres años de haber egresado. Ya estaba ejerciendo mi carrera en la industria de los alimentos, y en octubre de 1993 me invitaron a suplir a una de mis maestras, la QFB Virginia de la Cruz Gutiérrez, en la materia de Tecnología de Cereales, porque ella se mudaría de ciudad. Primero fue como profesor de tiempo parcial, pero ya en enero del año siguiente me ofrecieron la plaza de profesor base y me quedé”, relató. Está por cumplir treinta años de actividad docente, y se dice sorprendida por el tiempo que ha transcurrido “de manera providencial”.

Comenta que “lejos de darme pánico escénico estar en el aula frente al grupo, es algo que me sigue emocionando, apasionando; lo disfruto, me transforma interaccionar, acercarme a los alumnos, ver de cerca sus experiencias de estudio y de vida, eso me retroalimenta. La química como materia de estudio puede no ser la asignatura preferida de muchos jóvenes; sin embargo, siempre está presente. Como profesionales a quienes nos gusta nuestro trabajo, somos eternos estudiantes, porque el mundo se transforma. Debemos adaptarnos rápidamente a las novedades y tendencias”, apunta.

Ella es graduada de Químico Farmacéutico Biólogo, con orientación en Tecnología en Alimentos por la UAG. Cuenta con una especialidad en Nutrición y Alimentación Humana, y maestría en Calidad, Seguridad Alimentaria, Dietética y Nutrición por la Universidad Católica de Murcia, España.

Es profesora de Bioquímica y Bioquímica metabólica; Química de los alimentos; Análisis de los alimentos; Toxicología de alimentos, y Tecnologías de alimentos, materias que imparte en varias carreras.

La maestra Fabiola es tapatía, la mayor de tres hermanos, y tiene cinco sobrinos. Disfruta la naturaleza, la fotografía, la pintura en acuarela y la poesía. Desde hace 25 años tiene un apostolado en la Orden Franciscana, “que me inspira y marca el camino”.

Ha sido profesora de más de 130 alumnos de 25 generaciones. “Los maestros del futuro serán más humanistas, digitales y educadores con emociones”, comenta finalmente.

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