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SALUD
RETOS DE LA REHABILITACIÓN
a rehabilitación se define como “un conjunto de intervenciones encaminadas a optimizar el funcionamiento y reducir la discapacidad en personas con afecciones de salud en la interacción con su entorno”. Esta forma de terapia ayuda a las personas a ser tan independientes como sea posible en su vida diaria. Cualquier persona puede necesitar rehabilitación en algún momento puede ser tras una lesión, intervención quirúrgica o enfermedad, o porque su capacidad para funcionar se ha reducido con la edad.
La rehabilitación puede consistir, por ejemplo, en: ● Ejercicios para mejorar el habla, el lenguaje y la comunicación de una persona tras una lesión cerebral. ● La modificación del entorno domiciliario de una persona mayor para mejorar su seguridad e independencia en el hogar y reducir el riesgo de caídas. ● Indicar ejercicios y educar a las personas con cardiopatías para que lleven una vida saludable. ● Fabricar y ajustar una prótesis y enseñar al paciente a utilizarla tras la amputación de una pierna. ● Técnicas de posicionamiento y colocación de
Lférulas para favorecer la cicatrización de la piel, reducir la hinchazón y recuperar el movimiento tras una intervención quirúrgica por quemadura. ● Prescribir medicamentos para reducir la rigidez muscular en niños con parálisis cerebral. ● Dar apoyo psicológico a personas con depresión. ● Enseñar a las personas con pérdida de visión a utilizar un bastón blanco. La rehabilitación se centra en la persona, lo que significa que las intervenciones y el enfoque elegidos en cada caso dependerán de los objetivos y las preferencias del individuo. Puede ofrecerse rehabilitación en muchos entornos diferentes: en espacios hospitalarios o ambulatorios, en clínicas privadas y en ambientes comunitarios. En ella participan psicoterapeutas, ergoterapeutas, logopedas, ortesistas y protesistas, psicólogos clínicos, fisiatras y personal de enfermería especializado. LOS BENEFICIOS La rehabilitación puede reducir los efectos de multitud de problemas de salud, incluyendo enfermedades agudas y crónicas, afecciones, lesiones o traumatismos. Asimismo, puede complementar otras intervenciones sanitarias, como las médicas o quirúrgicas, para conseguir el mejor resultado posible. Asimismo reduce los efectos incapacitantes de padecimientos crónicos, dando a los pacientes estrategias de autogestión y la ayuda técnica que precisen. En términos económicos, la rehabilitación es una inversión que aporta beneficios tanto al paciente como a la sociedad en conjunto y ayuda a evitar hospitalizaciones costosas.
NECESIDADES MUNDIALES DE REHABILITACIÓN NO ATENDIDAS ● La ausencia de un orden de prioridades, así como de fondos, políticas y planes de rehabilitación. ● La falta de servicios de rehabilitación fuera de las zonas urbanas, y los largos plazos de espera. ● Los elevados gastos directos y la inexistencia o insuficiencia de medios de financiamiento. ● La falta de profesionales calificados para prestar servicios de rehabilitación en muchos contextos de ingresos bajos y medianos. ● La falta de recursos, en particular tecnología de apoyo. ● La necesidad de más investigación y datos sobre la rehabilitación. ● La ineficacia de la derivación de pacientes a rehabilitación. ● Rehabilitación en las emergencias.

La rehabilitación no es solo para personas con trastornos prolongados o deficiencias físicas. Al contrario, es una parte esencial del servicio que ha de recibir cualquier persona con problemas de salud agudos o crónicos, deficiencias o lesiones que supongan una limitación para su vida cotidiana.
Tampoco es un lujo ni un servicio de salud más. No es un servicio opcional que pueda intentarse cuando fallen otras intervenciones para prevenir o curar una afección de salud.
NECESIDADES NO SATISFECHAS Se estima que unos 2400 millones de personas en el mundo se beneficiarían con la rehabilitación. Con los cambios que se producen en la salud pública y en las características de la población mundial, esta necesidad estimada de rehabilitación solo puede ir en aumento en años venideros.
La expectativa de vida crece; de hecho, se prevé que el número de personas mayores de 60 años se duplicará para 2050, y hoy más personas viven con enfermedades crónicas, como diabetes, accidentes cerebrovasculares y cáncer. Al mismo tiempo, persiste la incidencia de lesiones (como quemaduras) o afecciones del desarrollo infantil (como la parálisis cerebral). Estos problemas de salud pueden afectar a la funcionalidad de una persona y se relacionan con mayores niveles de discapacidad, para los que la rehabilitación puede ser benéfica.
En muchas partes del mundo, las crecientes necesidades de rehabilitación quedan en gran medida desatendidas. Más de la mitad de las personas de algunos países de ingresos bajos y medios que precisan servicios de rehabilitación no los reciben. La rehabilitación se encuentra en general entre los servicios de salud más afectados por la pandemia de covid-19.
RESPUESTA DE LA OMS Para que la rehabilitación cumpla sus objetivos, debe fortalecerse el sistema de salud en su conjunto, y garantizar que la rehabilitación forme parte de la atención sanitaria en todos los niveles del sistema de salud, así como de la cobertura sanitaria universal.
En 2017, la Organización Mundial de la Salud puso en marcha la iniciativa Rehabilitación 2030, en la que se hace hincapié en la necesidad de fortalecer los sistemas de rehabilitación. La OMS responde a los retos ofreciendo apoyo técnico y creando capacidad en diferentes países; fomentando el liderazgo, el establecimiento de prioridades y la movilización de recursos; elaborando normas, criterios y orientaciones técnicas, y dando forma a los programas de investigación y vigilando los progresos.