SEÑALES DESDE PALACIO A BUCARELI

de operación política.

El sobrenombre de “el hombre de confianza del Presidente” no es un invento de marketing político. La trayectoria de Adán Augusto está intrínsecamente ligada al movimiento obradorista, incluso desde antes que este existiera como tal. Incluso, desde que llegó al gabinete se le ubicó entre los presidenciables.

Tabasqueños ambos, con ese acento característico del trópico mexicano en que la “s” al final de las palabras es prescindible, Adán Augusto y Andrés Manuel se conocieron desde pequeños debido a la amistad que hay entre las familias de ambos. Incluso, uno de los tres hijos de Adán, se llama Augusto Andrés.

Israel Mendoza Pérez

Después de tener inmóvil a la Secretaría de Gobernación en los primeros años de la cuatroté, el presidente tuvo que recurrir a la fórmula infalible. Colocar a un cercano. La familiaridad es indiscutible. La confianza, es de décadas y mil batallas políticas juntos, lo obligaron a llevar a Adán Augusto López a convertirse en el brazo derecho y

Incluso en la carrera entre “corcholatas”, una encuesta señala que tiene un 46% de ideales muy parecidos para gobernar y ese componente comenzó a subir en días recientes al tener mayor atención en temas coyunturales y presencia en eventos en representación del Presidente.

López Hernández estudió Derecho en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT), en donde debido a su poder de oratoria y sus dotes de negociador, se convirtió en líder estudiantil. Poco después se afilió al semillero de jóvenes que formaban las filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), acompañando a López Obrador cuando fungía como dirigente del partido en Tabasco.

A su regreso de Francia, en donde estudió Derecho Comparado en la Sorbona, se adhirió al Frente Democrático Nacional (FDN) para apoyar al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas como candidato presidencial y a López Obrador como candidato al gobierno de Tabasco.

Para 1992, lo nombran presidente de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del Estado de Tabasco, cargo al que le siguió el de subsecretario de Desarrollo Político y Protección Civil y, al año siguiente, asumió como subsecretario de Gobierno y Asuntos Jurídicos.

En 1994, Adán Augusto López decidió alejarse de la política para encabezar la Notaría Pública 27 perteneciente a su padre, en Villahermosa. Resalta de esta época que, para ayudar a familias de escasos recursos a escriturar sus propiedades, les fiaba o les cobraba 10 pesos por sus servicios.

El hecho lo recuerda de la siguiente forma: “Con lo que ganaba de los asuntos grandes, podía darle crédito o ayudar a los más pobres”. Estas acciones lo llevaron a ser el notario que más escrituras ha hecho en la historia de Tabasco.

El hoy secretario de Gobernación estuvo presente a poco de haberse creado el Partido de la Revolución Democrática, pues renunció al PRI en 2001 para incorporarse al partido del Sol Azteca en donde su paisano y amigo, AMLO, ya militaba.

En 2003, Adán compitió por el PRD a la presidencia municipal de Villahermosa, la cual perdió, mientras que Andrés Manuel ya estaba en el Gobierno del Distrito Federal y comenzaba a crecer como uno de los favoritos rumbo a la contienda presidencial de 2006.

Uno de los primeros encargos clave para el hombre de confianza del Presidente fue organizar el movimiento de defensa de AMLO en el sureste, contra el desafuero entonces promovido por el gobierno de Vicente Fox que buscaba impedirle aparecer en la boleta electoral para la Presidencia de la República.

Dos años después, Adán queda a cargo de la campaña presidencial de AMLO en la Tercera Circunscripción del país, correspondiente a los estados de Campeche, Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán; de los cuales, solo se pierde el último.

• En 2007, fue diputado local por representación proporcional en la LIX Legislatura de Tabasco; en 2009 ganó como diputado federal por el Distrito 4. En 2012, gana la encuesta y elección para senador por su estado.

• Ya en octubre de 2016, es nombrado dirigente estatal de Morena y en 2018 compite por la gubernatura de Tabasco por la coalición “Juntos Haremos Historia”, arrasando con el 61.37% de los votos.

• Se sabe que fue en Palenque que AMLO le comentó por primera vez sobre su intención de moverlo a la Secretaría de Gobernación (Segob). Desde entonces se convirtió en la mano derecha del Presidente para resolver asuntos relacionados con las reformas energética, Guardia Nacional, y electoral, además de ser el ente negociador con las diferentes facciones legislativas, rompiendo incluso el bloque opositor en ambas Cámaras.

“Y ya me quedo con él (AMLO), a construir el movimiento. Para lo que sigue”, ha dicho Adán Augusto, refiriéndose a lo que eventualmente se convirtió en el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que llevo a Andrés Manuel a obtener el triunfo en 2018.

Además de la cruzada publicitaria, más varios ajustes en el cuarto de guerra de Adán y el fichaje de un personaje clave: César Yáñez, figura muy cercana al Presidente, que fue su vocero. Además de coordinador General de Política y Gobierno de la Presidencia de la República, dan cuenta de que nada está definido al interior del partido que encabeza Mario Delgado y que ahora, efectivamente, puede ser Adán.

• Su gran relación con los gobernadores de distintos partidos le ha valido el reconocimiento por parte de la mayoría, que en la pasada reunión de la Conago expresaron estar “Agusto”.

• Por ello, se perfila no solo como una opción interesante para la sucesión presidencial de 2024, en un panorama donde todo indica que Morena se llevará de nuevo una victoria contundente en las urnas, sino en que puede ser el verdadero alfil o “tapado” de López Obrador. Y es que Adán Augusto es quien verdaderamente representa al obradorismo per se; es decir, una izquierda popular que está con las y los de abajo, o sea, con la mayoría.

Desde 2021 en que se integró al gabinete presidencial, la punta de lanza del Presidente para operar los temas más importantes de la 4T como las grandes obras de infraestructura y las reformas aprobadas: guardia nacional y electoral. A Adán Augusto le ha encargado, además del país, el cabildeo a nivel legislativo y estatal de las reformas, y últimamente acude a eventos en representación del titular del Ejecutivo.

Si se buscan más señales de quien se encuentra dentro del círculo presidencial y tiene la ventaja es por demás entenderlo y las demás “corcholatas” comienzan a entender el mensaje. En este punto es donde se recuerda aquella frase “no se hagan bolas” y queda como anillo al dedo en estos tiempos.