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LAS AGUAS, BOGOTÁ. JUNIO-JULIO 2017. TRIGÉSIMA PRIMERA EDICIÓN.
POMADAS NATURALES DE FENICIA El primer Taller de Pomadas Naturales, impartido por el Jardín Botánico de Bogotá, logró reunir a la comunidad Fenicia en el contenedor de Casa Progresa. A pesar de la incesante lluvia, hombres, mujeres, niños y niñas aprendieron las técnicas básicas para convertir varios productos naturales de la Huerta Fenicia en pomadas para uso casero o, incluso, para la venta. La receta es sencilla. Se necesitan plantas medicinales (preferiblemente secadas naturalmente) y una base para combinarlas: sebo clarificado, cera de abejas o vaselina cosmética. Tanto la cera como el sebo son más naturales, mientras la vaselina es un subproducto derivado del petróleo. Sin embargo, es más fácil y más barato acceder a la vaselina y sus resultados son muy similares. Las plantas medicinales se pican y desmenuzan, mientras la vaselina se pone a calentar en una olla. Cuando está completamente líquida y transparente, se agregan las plantas y se mezcla durante 20 minutos. Para que no se pierdan las propiedades medicinales de las plantas, es recomendable hacer el proceso a fuego bajo sin que la mezcla supere los 40 Cº. Finalmente, se filtra la vaselina para sacar los pedazos de las plantas y se envasa aún caliente en recipientes más pequeños.
“Una manotada tiene entre 200 y 250 gramos de cualquier planta, que rinden para una libra de vaselina cosmética”, explicó Edgar Lara, experto del Jardín Botánico que dictó el taller. Acto seguido, los más de 20 asistentes se pusieron manos a la obra y picaron el tabaco, la caléndula, el romero y la marihuana cultivados en la Huerta Fenicia por la propia comunidad de la zona.
Para Johnny Tascón, coordinador del Componente Técnico de Progresa Fenicia, los talleres de agricultura urbana —incluido este de pomadas— son muy importantes para “generar puntos de encuentro y fortalecimiento de los lazos de comunidad alrededor de temas que son de interés común”. Junto con varios vecinos, Johnny ha estado al frente de la Huerta Fenicia, a la cual se le hace mantenimiento todos los jueves en la tarde y de la cual se recogen Lorena Ramírez, habitante del Triángulo cosechas de diferentes productos, como de Fenicia, asistió con sus tres hijos. Juntos, cebolla, cilantro, acelga, tomate, lechuga, colaboraron en la elaboración colectiva entre otros. de estas pomadas: “Hicimos una pomada mixta, que llevaba tabaco, caléndula y “Mi impresión es que hay mucha gente romero. Me ha servido muchísimo porque interesada en aprender sobre técnicas mi esposo tuvo un pequeño accidente en medicinales naturistas en nuestro entorno. la bicicleta y la pomada le ha servido para Como Progresa Fenicia podemos generar desinflamar y cicatrizar”, cuenta. más espacios de este tipo”, explicó Johnny. Lorena, al igual que los demás asistentes al taller, se mostró emocionada por los resultados y valoró muy bien los conocimientos impartidos por el Jardín Botánico. Para ella es muy importante seguir aprendiendo a hacer este tipo de productos a partir de las plantas cultivadas por la misma comunidad: “Ojalá se puedan hacer más seguido estos talleres y aprendamos a hacer más productos naturales”, dijo.
Celebramos el interés que tiene la comunidad Fenicia por participar activamente en la huerta y en los diferentes talleres, así como la colaboración del Jardín Botánico para generar estos espacios. Por esa razón, cerramos con la buena noticia de que hay dos nuevos talleres planeados: uno de mermeladas y otro de cultivo en jardines verticales. Pronto habrá más información.