Encuentro 18
Pentecostés: presencia del Espíritu Santo
Público objetivo: Adultos: Padres de familia, Padrinos, Abuelos, Catequistas y otros responsables de la formación espiritual de los niños.
Objetivo de la Cápsula: Comprendemos que el Espíritu Santo está presente en el nacimiento y vida de la Iglesia.
¿EN DÓNDE ESTAMOS? z ¿Sabes quién es el Espíritu Santo y cómo está presente en tu vida y en tu familia? z ¿Cómo pueden ser una familia más llena del Espíritu de Dios?
PARA REFLEXIONAR Escuchamos Hechos de los Apóstoles 2,1-11 De repente vino del cielo un ruido como el de una ráfaga de viento impetuoso que llenó toda la casa donde estaban sentados, y se les aparecieron lenguas como de fuego que, repartiéndose, se posaron sobre cada uno de ellos. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo.
Compartimos z Como en Pentecostés, el Espíritu Santo ha sido derramado en cada uno de nosotros el
día de nuestro Bautismo y el de nuestra Confirmación. Él es el que nos da la fortaleza para ser valientes seguidores de Jesús. z El acontecimiento de Pentecostés nos permite descubrir el nacimiento de la Iglesia.
En ese momento, con los Apóstoles y María, la Iglesia de Jesucristo se forma y se prepara a cumplir, con la ayuda del Espíritu Santo, su misión: anunciar el Evangelio a todos los hombres z El Espíritu derrama en nosotros sus dones, como “un manantial de agua”, que
satisface nuestra sed. Estamos llamados a acogerlos como gracia de Dios y vivirlos como un compromiso de caminar hacia la santidad.
En comunidad, guiados por el Espíritu Santo
Referencia: https://issuu.com/ppceditorial.mexico/docs/191071_alianza_g6_issuu
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z El Espíritu poderoso de Dios es tormenta de amor y valentía, es creativo, es
renovador e inspirador y está dispuesto a realizar una renovación en nuestra vida para que seamos sus testigos de amor, perdón y reconciliación en el mundo.
TIEMPO EN FAMILIA z En familia, leamos Hechos de los Apóstoles 2,1-11. z Dialoguemos sobre cómo ser una familia que vive iluminada por el Espíritu Santo.
ORAMOS Ven, Espíritu Divino, manda tu luz desde el cielo. Padre amoroso del pobre; don en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo.