Un recorrido con historia DE VIÑA DEL MAR A PUCHUNCAVI, POR VALLE ALEGRE

Viajar por la ruta del Valle Alegre, en el transitar desde Viña del Mar a Puchuncaví, o viceversa, es una interesante experiencia que residentes y visitantes, pueden experimentar con un sentido turístico y también de acercamiento con la historia de Chile.

Ese camino, con una buena mantención, es una efectiva alternativa a la ruta de la costa, generalmente más concurrida, con gran congestión vehicular y con una alambicada conexión a la entrada del puente de Concón.

La ruta de VEsa vía, cuando se transita desde Viña del Mar resulta bastante más relajada después de dejar el pomposamente llamado camino internacional, de dos pistas y atiborrado de vehículos, que impide conocer más profundamente algunos hitos de la historia de este país. Al llegar a Colmo, se erige un monumento conmemorativo y en homenaje a las víctimas de la fraticida Guerra Civil del año 1891, que cobró más víctimas que Guerra del Pacífico finalizada pocos año antes. En Concón, también existía un pequeño museo con algunos testimonios de una de las cruentas batallas libradas en la rivera del Aconcagua.

En Colmo también, si uno puede efectuar un pequeño desvío, podría encontrar el lugar en que se levantaba la vivienda de Benjamín Vicuña Mackenna, figura señera en la historia de Chile, que escogió este lugar como residencia.

Avanzando hasta llegar al cruce que conduce a Quintero, el viajero tiene la oportunidad de presenciar la residencia que mandó construir Lord Thomas Alexander Cochrane, mientras servía en la Escuadra chilena. Esa vivienda, nos relata Mary Graham, en su Diario de su Permanencia en Chile, era un apreciado testimonio del deseo del almirante inglés de permanecer en el país,lo que no se materializó por razones que no son materia de esta crónica. Es una lástima que todas las veces que he pasado por allí, a pesar de los letreros que indican la presencia de este museo, el recinto permanece cerrado. Por lo menos, al mirarlo en su aspecto externo, se observa bastante bien cuidado. A propósito de este magnetismo de la zona que obra en las personas, nos encontramos que también Quintero fue elegido por Francisco Coloane para pasar allí sus últimos años de vida.