Sembradores Marzo-Abril 2018

MAR-ABR 2018 • Nº 456 EJEMPLAR BIMESTRAL • AÑO XLII • $15.00 M.N.

¿Cómo han estado viviendo este tiempo de cuaresma? ¿Ya están listos para celebrar la gran fiesta de la Pascua, en la cual celebramos la resurrección de Jesús que ha vencido el pecado y la muerte?

No se les olvide que la cuaresma en un tiempo muy importante para que revisemos nuestra vida y nuestra conducta. Es tiempo para hacer un buen examen de conciencia y acercarnos al sacramento de la reconciliación, de pedirle perdón a las personas que hemos ofendido y de luchar muy fuerte contra el pecado. Así pues, con ayuda de Dios preparemos nuestras almas y nuestros corazones para celebrar la resurrección de Jesús.

Quiero compartirles que, a finales del año pasado, en OMPE México, recibimos una carta muy especial que nos llenó de inmensa alegría. Nos escribió el Padre Patrick Simon Gomes, Director de Misiones de la Arquidiócesis de Daca, Bangladesh, para agradecer nuestras oraciones y el apoyo económico para los niños más desfavorecidos en esas lejanas tierras de misión; con ese apoyo, y con la ayuda de Dios, se pudieron construir dos albergues para niños y niñas, en los cuales, además de cubrir sus necesidades más básicas, se apoya a su educación y formación cristiana y misionera. Quiero compartir este agradecimiento con cada uno de ustedes, pues ustedes son parte fundamental en nuestra labor, y con su ayuda este tipo de obras son posibles.

Recordemos que el pasado mes de febrero celebramos el Domingo Mundial de la Infancia y Adolescencia Misionera (DOMINF), con el lema: “¡Con la misión en el corazón!”, los invito a continuar así durante todo el año. ¡Ah! y no se les olvide que el próximo año 2019, del 14 al 17 de febrero, tendremos nuestro XVIII CONIAM en la Diócesis de Zamora, en la que S. E. Mons.

Javier Navarro, juntamente con todos sus colaboradores, están preparando todo lo necesario para esta gran fiesta de los niños y adolecentes de México. Recuerden que es la tierra de San José Sánchez del Rio, así que comencemos a prepararnos para esta gran celebración, orando para que el Señor nos ayude a seguir siendo fieles testigos y discípulos valientes del Evangelio, defendiendo nuestra fe como Joselito.

Que en este tiempo de oración, reflexión y júbilo por Nuestro Señor resucitado crezca en ustedes la llama misionera. Pidamos a mamita María su intercesión para ser grandes misioneros.

Que Dios los bendiga.

Pbro. Lic. José Ayala Madrigal Obras Misionales Pontificio Episcopales de México Director Nacional

Propietario Obras Misionales Pontificio Episcopales de México, A.R. Director Pbro. José Ayala Madrigal Secretario Nacional de la Pontificia Obra de la Santa Infancia Pbro. Ivo Saúl Flores Venegas Editora Diana Monroy Rodríguez Diseño e ilustración Alan Ayala García Colaboradores: Pbro. Francisco Espino Godínez, Pbro. Álvaro Solano, Daniel Durán, Comunidad Misionera de Villaregia, Elena García Gamboa, Hna Nancy Gabriela.

SEMBRADORES, Año XLII, Número 456, marzo-abril 2018. Es una publicación bimestral, editada por Obras Misionales Pontificio Episcopales de México, A.R., Prolongación Misterios No. 24, Col. Tepeyac Insurgentes, Delegación Gustavo A. Madero, C.P. 07020, Tel. (01 55) 57500544, www.ompe.com.mx, informes@ompe.com.mx, Editor responsable: Pbro.

José Ayala Madrigal, Reserva de Derechos No. 042005-052609402000-102, ISSN: En trámite, Licitud de Título y Contenido No. 15349, ambos otorgados por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación, permiso SEPOMEX No. PP09-1849. Impresa por Editorial Esfuerzo S.A. de C.V., Esfuerzo 16-A, Col. Lázaro Cárdenas, Naucalpan de Juárez, C.P. 53560, Estado de México. Este número se terminó de imprimir el 18 de febrero de 2018 con un tiraje de 10,000 ejemplares. El contenido de los artículos que aparecen en este número es responsabilidad de los autores y no compromete la opinión de los editores.

Para que toda la Iglesia reconozca la urgencia de la formación en el discernimiento espiritual, en el plano personal y comunitario.

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Para que los responsables del pensamiento y de la gestión de la economía tengan el coraje de refutar una economía de la exclusión y sepan abrir nuevos caminos o rutas.

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Griselda Santiago Gómez/Asesora IAM Izcalli

Hola, chiquitines misioneros. Me llena de alegría saludarlos nuevamente, espero tengan una salud estupenda, una alegría que contagie y un gozo en Cristo Misionero.

¡Ya estamos cerca de vivir la Semana Santa! No sé ustedes, pero a mí me encanta ver los preparativos que se realizan en las comunidades y experimentar la emoción que se percibe en las personas al aproximarse las misiones.

Hace un par de meses, una amiguita nos platicó que su esposo está en la cárcel, y eso la tiene deprimida, desconsolada, triste y avergonzada; todos estos sentimientos la tienen muy mal emocionalmente, y no suficiente con lo que está pasando, el sistema penitenciario, tan lleno de injusticias y corrupción, hace que la familia entera esté viviendo un viacrucis.

Se preguntarán por qué les platico todo esto, bueno, quizá hay misioneros ajenos a este tipo de situaciones, y creo que la manera de hacer cercanas estas vivencias es recordando la última cena de Jesús con sus apóstoles, donde después de haber cenado con ellos, fue arrestado y encarcelado injustamente. En aquella ocasión, Jesús pasó una noche sintiendo la soledad y el miedo que los presos experimentan al estar encarcelados injustamente y, por otro lado, la virgen María, al ver a su hijo en prisión, sintió angustia y un gran dolor. Verdad que, viéndolo

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desde este punto de vista, ¿cambia la perspectiva?

En todo el mundo existen millones de familias atravesando este tipo de situaciones.

Por eso, querido misionero, la Actividad Misionera de estos días consistirá en visitar un reclusorio. Sé que puede ser difícil realizarlo, pero, si pudieras, sería grandioso llevar la presencia de Jesús a los reclusos. Cuéntales cómo Dios rompió las cadenas de Pablo y Silas, cuando ellos clamaron a él; como Pedro fue encarcelado injustamente y Dios lo puso en libertad para que volviera a su casa, porque para el que cree y tiene fe, nada es imposible. Para los que son pequeñitos o simplemente no pueden visitar un reclusorio, basta con que hagan oración por los presos que injustamente están encarcelados, para que Dios les abra el camino de la libertad; y también orar por aquellos que con justa razón les privaron de su libertad, que Dios les dé fortaleza para aceptar de buen modo su culpa, y les otorgue, como Dios misericordioso, el perdón. No hay que olvidar, en nuestras oraciones, a las personas que tienen en sus manos el sistema carcelario de nuestro país y del mundo entero, para que Dios les dé la sabiduría y puedan impartir la justicia y hacer valer los derechos humanos en esos centros.

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ยกHola a todos queridos sembradores! Siempre es un gusto poder compartir con todos ustedes esta posibilidad: aprender juntos acerca de nuestra fe y compartir los caminos de la misiรณn.

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Pbro. Álvaro Solano Díaz / Director Diocesano de Misiones de Ecatepec

Como ustedes saben estamos viviendo dentro del año litúrgico el tiempo de la cuaresma, un tiempo en el que se nos invita a la conversión y así poder prepararnos con un corazón bien dispuesto a vivir los misterios de la pasión, muerte y resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. ¿Alguna vez se han preguntado porque la cuaresma dura 40 días?

Los días que integran el periodo cuaresmal tienen una especial significación, la cual surge desde la misma historia del pueblo de Israel, plasmada en la Biblia; encontramos por ejemplo que se nos habla acerca del periodo del diluvio que duró cuarenta días y cuarenta noches, más adelante en la Sagrada Escritura recordarás, que el tiempo que pasó el pueblo de Israel peregrinando hacia la tierra prometida es de 40 años por el desierto; el mismo Jesucristo antes de comenzar su vida pública pasó 40 días en el desierto como un tiempo de reflexión y oración;

ante ello habría que profundizar sobre la connotación que tiene en nuestras vidas hoy en día, el tiempo cuaresmal.

La cuaresma es un periodo penitencial que implica una preparación personal desde lo más profundo de nuestros corazones, tiempo de reflexión en donde estamos llamados a reconocer de qué manera vivimos verdaderamente como hijos de Dios, como tal la cuaresma es un peregrinar no solo en el sentido de contar los días para vivir la Pascua, sino es un ir creciendo progresivamente en la oración, en la vida de los sacramentos, en el servicio, en el amor a Dios; de tal manera que la reflexión nos lleve a propósitos concretos de conversión haciendo presente en nuestra vida y la vida de Dios para los demás, en la búsqueda de la santidad a la cual estamos todos llamados. La cuarema como lo sabemos no es un fin en sí mismo, sino un camino que nos conduce a la vivencia de la Pascua.

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Saludos a todos los sembradores, que durante este año 2018 vamos creciendo en el testimonio del Evangelio. Nos toca en esta ocasión reflexionar un poco en el VI Compromiso del XVII CONIAM:

6. Los niños y adolescentes misioneros del XVII CONIAM nos comprometemos a reutilizar, reducir y reciclar los recursos naturales que Dios nos regala.

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Pbro. Mtro. Juan Francisco Agustín Espino Godínez / Director Diocesano de Misiones Arquidiócesis de Puebla

Hoy está de moda la ecología, y seguramente escuchas en todos lados que “hay que reciclar”, “hay que respetar la naturaleza”, “hay que cuidar y no maltratar a los animales”. Y esto, más que una moda, quiero decirles que es un acto de fe, una respuesta a Dios que ‘hizo todo muy bueno’ (Cfr. Gn.1) y que lo hizo para nuestro servicio y como signo de su amor, como lo explica el Catecismo de la Iglesia Católica: “Dios creó el mundo para manifestar y comunicar su gloria. La gloria para la que Dios creó a sus criaturas consiste en que tengan parte en su verdad, su bondad y su belleza” (Cat.I.C.319).

Si Dios creó todo para nosotros y como signo de su amor y belleza, ¿no crees, amigo sembrador, que lo normal es que lo cuides y hagas siempre buen uso de las cosas según su voluntad? Por eso el Catecismo nos enseña que “…La belleza de la creación refleja la infinita belleza del Creador.

Debe inspirar el respeto y la sumisión de la inteligencia del hombre y de su voluntad.” (Cat.I.C.241) Así es que la pretendida “moda” de cuidar la naturaleza es en realidad un compromiso parte importante de nuestra fe. De este modo, si los niños y adolescentes misioneros queremos anunciar verdaderamente a Cristo, el respeto y buen uso de la naturaleza, y la buena relación y cuidado de

los animales, para quienes no creen en Jesús, será una oportunidad de entender el amor de Dios, que nos ha dado todo. Por eso las palabras de nuestro compromiso expresan lo que hemos de hacer, y curiosamente son las tres “R”: • Reutilizar lo que se puede aprovechar para no desperdiciar, • Reducir el consumo para no abusar de las cosas y usarlas de la mejor manera • Reciclar lo que se pueda transformar en otra cosa también útil y así no ensuciar.

Estas sencillas acciones nos dan dos posibilidades muy hermosas: la de darle gracias a Dios y aprovechar al máximo las cosas de la naturaleza y productos hechos por el hombre, y la de dar buen testimonio como misioneros, ante los que no creen en Jesús. Están a nuestro alcance y todos podemos hacer el esfuerzo, ¿verdad que sí?

El Papa Francisco nos invita a eso en su encíclica Laudato Sí: “Todos podemos colaborar como instrumentos de Dios para el cuidado de la creación, cada uno desde su cultura, su experiencia, sus iniciativas y sus capacidades.” (LS14) Así es que, querido sembrador, a ser misionero ecológico en Paz con la Creación.

Hasta la próxima.

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OMPE México

¡Sembradores! En esta ocasión les traemos un testimonio de la Arquidiócesis de Daca, Bangladesh; quienes escribieron a las OMPE México para agradecer el apoyo económico y espiritual para la promoción de actividades a favor de los pequeñines más desfavorecidos.

Las Hermanas Misioneras de la Inmaculada, con la ayuda de Dios y distintos benefactores, gestionaron la apertura de dos albergues para niños bangladesíes, provenientes de las distintas tribus; muchos de ellos huérfanos o de familias en pobreza extrema.

Entre los objetivos de los refugios está el contribuir a la educación de niños y niñas, así como en su formación cristiana y misionera.

Algunas de las actividades que se realizan tienen que ver directamente con su educación y aprendizaje, además de complementarlas con actividades al aire libre, deportes, seminarios, programas culturales y otras actividades que corresponden al programa de la Santa Infancia.

Cabe mencionar que los niños son visitados regularmente por sus padres o parientes cercanos. De igual manera, la recepción de estudiantes en los albergues es continua En las OMPE México, extendemos este agradecimiento a cada uno de los que colaboran con la misión, gracias a ustedes este tipo de proyectos no se detienen. ¡Muchas gracias!

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Amigos Sembradores, dentro del año litúrgico que propone la Iglesia hay un momento llamado Triduo Pascual, y te preguntaras ¿de qué se trata eso y a qué hace referencia? Pues bien, antes de explicarlo quisiera comenzar diciendo que, para vivir y experimentar tal momento, hay un tiempo que se llama Cuaresma, y que seguramente se te hará familiar esta palabra porque la escuchas cuando asistes a la Iglesia el miércoles de ceniza.

El tiempo cuaresmal abarca 40 días y va desde el miércoles de ceniza hasta el sábado santo, que es un día anterior al domingo de resurrección o domingo de Pascua, es decir, la cuaresma tiene sentido solo en función de la Pascua, es un tiempo de preparación precisamente para celebrar, en un sentido de conversión, la resurrección de Jesús: “La Cuaresma es un nuevo comienzo, un camino que nos lleva a un destino seguro: la Pascua de Resurrección, la victoria de Cristo sobre la muerte. Y en este tiempo recibimos siempre una fuerte llamada a la conversión: el cristiano está llamado a volver a Dios «de todo corazón»” (Jl 2, 12), “a no contentarse con una vida mediocre, sino a crecer en la amistad con el Señor” (Papa Francisco).

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Daniel Alonso Durán González / Investigación y Desarrollo Estratégico-Académico

Hay, entonces, dos tiempos celebrativos: la Cuaresma y la Pascua, esta última es un complemento en tres momentos celebrativos llamados “Triduo Pascual”; son tres celebraciones dentro de una unidad: pasión, muerte y resurrección. Los tres momentos son los más recordados en la vida de Jesús de Nazaret. De hecho, la fiesta de la Pascua es el centro de las celebraciones y de todo el año litúrgico; a partir de ella se calendariza las fiestas más importantes en la Iglesia, en otras palabras, la Pascua o paso del Señor, es el centro de la fe en el cristiano: “Si no hay resurrección de los muertos, tampoco Cristo resucitó; y si no resucitó Cristo, nuestra predicación es vana, y vana también nuestra fe” (1 Cor 15, 13-14).

La pasión nos recuerda que Jesús, el Maestro, fue condenado a muerte. Recordamos este acontecimiento en lo que llamamos Jueves Santo, donde él cena por última vez con sus discípulos, parte el pan y bendice el vino, y también los sorprende al lavarles los pies. Es el tiempo que va desde que es tomado preso y

juzgado por los sacerdotes judíos, hasta ser condenado a muerte por el cónsul Poncio Pilato. La muerte de Jesús se conmemora desde las tres de la tarde del llamado Viernes Santo, hasta la celebración de la Vigilia Pascual, es decir, hasta aquella misa que celebramos el Sábado Santo ya muy entrada la noche. Es la misa más larga de todas y donde se utilizan muchos símbolos como el fuego, el agua, el cirio pascual, más lecturas de lo ordinario, las vestiduras blancas de los que se bautizan, entre otros; es aquí donde se celebra con júbilo e inmensa alegría la Pascua del Señor, es decir, su paso de la muerte a la vida, porque la muerte no tiene ni tendrá la última palabra, es ya, el Domingo de Resurrección. Aquí culmina la mayor celebración en la Iglesia, y que estamos próximos a celebrarlo del jueves 29 de mazo al domingo 1 de abril. Pidamos, pues, al Dios de Jesús que nos ayude a vivir con sentido de conversión, pero al mismo tiempo con un enorme gusto y alegría porque el Señor ha resucitado, el Triduo Pascual.

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San José, esposo de María y madre de Jesús, ejerció el oficio de carpintero. En los evangelios encontramos breves pasajes bíblicos que expresan las virtudes que lo distinguen y lo hacen un ejemplo a seguir. ¡Veamos!

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Hna. Nancy Gabriela Vázquez / Hijas de María Inmaculada de Guadalupe

“El Ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen que estaba comprometida con un hombre perteneciente a la familia de David, llamado José” (Lc 1, 26-27). Desde el momento de la encarnación, Dios pone sus ojos en San José, lo hace protagonista del proyecto de Salvación. ¿No es este el hijo del carpintero? (Mt 13, 55) Este pasaje bíblico menciona que San José, era carpintero, oficio que sin duda alguna realizó con diligencia y responsabilidad, en el trato con las personas amable y servicial, era un hombre de palabra y la gente confiaba en él.

Ese hombre justo y trabajador, desde la eternidad, fue elegido por Dios para ser el esposo de María, la Madre de Jesús y Madre nuestra. “Estando desposada María, su madre, con José...” (Mt 1, 18). El padre de Jesús, debía ser un hombre digno de tal misión, y San José cumplía con ciertas virtudes que lo hicieron la persona indicada para educar a nuestro Dios hecho hombre.

San José tenía a Dios presente en todo momento en su mente, en su alma y en su corazón, sin importar la tarea o el trabajo que estuviera realizando estaba unido a Dios, a través de su trabajo alababa y bendecía al Señor, cada trabajo que realizaba esta tocado por la mano de Dios, porque ponía en ello todo su corazón, por tanto, podemos decir que se distinguía por su alegría, una persona unida a Dios, ha de ser alegre, que a pesar de las dificultades o problemas se sabe acompañada por Dios.

“José, como era justo...” (Mt 1, 19), obraba siempre en bien de los demás, aunque esto implicara para él algún sacrificio, sus intenciones eran leales, sin aprovecharse de las personas, por tanto, tenía un corazón universal, generoso y bondadoso. ¡Amiguito! Hay mucho más que decir de San José, pero ahora es momento de aplicarlo a tu vida y responder ¿cómo es tu amistad con Jesús?, ¿es como la de San José?, ¿Qué cualidades de San José, tienes tú?

San José, es ejemplo a seguir, por sus virtudes, por su forma de vivir, por haber educado a Jesús, y por haber aceptado la voluntad de Dios. No comprendía lo que Dios estaba haciendo en su vida, sin embargo, su gran fe le llevó a aceptar el proyecto de Dios. Tú sabes que no le fue sencillo, pero quienes confían en Dios, todo lo pueden alcanzar, así que ¡ánimo!

Tú puedes ser mejor persona, tienes la capacidad para imitar sus virtudes y distinguirte por tu generosidad, tu fe, tu amabilidad, por ser justo, por ser humilde… ¡Tú decides!

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Diana Monroy Rodríguez / OMPE México

Al llegar a casa, después de un largo día

en el colegio, Kyoya Suou fue directamente a la cocina a preparase un bocadillo. En el camino se encontró con su abuela, quien le recordó su promesa de acompañarla a comer un día a la semana. Kyoya recordaba a la perfección su promesa, pero estaba tan cansado y aburrido que su único deseo era comer en su cuarto viendo algún programa de televisión.

La abuelita notó el fastidio en el rostro de su nieto, así que para animarlo un poco le propuso: Hace frío, así que podemos comer en el kotatsu.

Al darse cuenta que había despertado la curiosidad de su nieto, la abuelita lo tomó de la mano y comenzó a contarle: «Cuando yo era pequeña lo que más me gustaba del invierno era cuando mi familia y yo nos sentábamos a comer alrededor del kotatsu, o mesa caliente. En ese entonces colocábamos un marco de mesa bajo hecho de madera sobre agujero profundo donde se ubicaba una estufa de carbón, después lo cubríamos con una cobija muy pesada, llamada futón, sobre la cual poníamos la superficie de la mesa. Nos sentábamos en el piso y podíamos meter los pies bajo la cobija. Pero ¿sabes cuál era la mejor parte?»

¿Kotatsu? «¿Que no sentían frío? –preguntó Kyoya–» Ya hacia muchos años que la familia Suou había migrado del lejano país del sol naciente al continente americano, cuando el papá de Kyoya era apenas un niño, por tal motivo Kyoya estaba más familiarizado con las costumbres de su mamá, que eran las del país en el que ahora vivían, que con aquellas relacionadas con la cultura japonesa.

Cuando Kyoya escuchó la palabra kotatsu, inmediatamente la asoció con el idioma de su padre y no pudo evitar pensar en todos los cachivaches que su abuela tenía en el armario de su cuarto.

«No, que convivíamos en familia y podía escuchar las historias que me contaba mi papá, ¿quieres que te cuente alguna?» «¡Sí!»

«Primero vayamos a poner el kotatsu» Aquella tarde, Kyoya, no solo aprendió lo que era un kotatsu, sino la importancia de convivir con la familia; además de escuchar una gran historia mientras comía un delicioso ramen, preparado por su abuela.

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La Cuaresma es un tiempo de preparaciรณn para vivir la Semana Santa y la Pascua plenamente.

En el siguiente camino escribe las actividades y actitudes que tendrรกs para prepararte durante el tiempo de Cuaresma.

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Descifra el siguiente cรณdigo, alusivo al Domingo de Ramos

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manera diferente ¿qué actividades Cada Parroquia conmemora la Semana Santa de io: espac hacen en tu Parroquia? Dibújalas en el siguiente

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En algunas ocasiones encontramos valiosas y verdaderas amistades en los lugares menos pensados. Eso le sucede a la familia Brown un día cuando, regresando a casa, encuentran solo y perdido a Paddington, un oso proveniente del Oscuro Perú. Los Brown, conformados por Mary la mamá, Henry el papá, Judy y Jonathan, los pequeños hijos; se encuentran divididos en opiniones porque, mientras Mary está convencida que deben ayudar al tierno oso y hospedarlo en su casa, Henry piensa que es un peligro y que no deberían considerar la idea.

Gracias a la intervención de los niños, Paddington llega temporalmente a casa de los Brown mientras le ayudan a buscar a un famoso explorador (razón por la cual viajó a Londres). Allí comienzan las aventuras de todos mientras tienen que escapar de una taxidermista del Museo Británico que desea atrapar al osezno.

A lo largo de la película, los Brown comenzarán a eliminar las fricciones que se les presentan como familia y a ser más comprensivos unos con otros. Principalmente entienden que deben apoyarse en todo momento, juntos como familia, y que deben luchar por sus seres más queridos; los malos tiempos se pueden librar con amor sincero.

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Blanca Elena García Gamboa

Una linda y mágica niñera que vuela en paraguas, una banda de pingüinos bailarines y muchas canciones son la combinación perfecta en el clásico de Disney Mary Poppins. Esta película cuenta la historia de dos hermanos, Jane y Michael, a quienes sus padres no les hacen mucho caso; y de Mary Poppins, su nueva niñera, quien con magia les enseñará a comportarse correctamente; pero sobre todo les ayudará a acercarse a sus padres, principalmente a su papá, para que puedan tener una familia muy feliz.

Por supuesto no es una tarea fácil ya que, muchas veces, los adultos olvidan lo que significa ser niño, los problemas que tienen y cómo las cosas les pueden afectar en sus sentimientos. Por su parte, los niños también deben comprender que sus padres los aman demasiado, aunque algunas veces éstos confundan lo que creen que necesitan los hijos con lo que es verdaderamente importante.

Al final, juntos como familia, logran superar los obstáculos y barreras que ellos mismos se imponían unos a otros, y comprenden que la familia es más importante que cualquier cosa que el mundo pueda ofrecer. Nada más valioso o verdadero como el amor de los padres y los hijos se puede encontrar entre los seres humanos; y es precisamente en la familia en donde reside nuestra fortaleza.

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Diana Monroy Rodríguez / OMPE México

¡Saludos, pequeños sembradores! En esta ocasión con motivo del Día Meteorológico Mundial, el cual se celebra el 23 de marzo, les contaré un poco de la importancia de predecir el estado del tiempo.

¿Alguna vez han escuchado del Servicio Meteorológico? Entre las muchas actividades que realiza el Servicio Meteorológico es avisarnos si hará frío o calor, si habrá lluvia o un cielo despejado; sin duda, es una información muy valiosa, que además de ayudarnos a saber si nos pondremos suéter o no también resulta de utilidad en sectores como el de la agricultura.

Por eso cuando nos hablan del cambio climático se refieren a que las condiciones meteorológicas diarias han ido cambiando, y puede ser que no las notemos en nuestro día a día pero, de alguna forma, han alterado los ecosistemas de nuestro planeta. Un ejemplo de esto es el calentamiento global, que ha tenido como consecuencia el aumento del nivel del mar.

Podríamos decir que la meteorología es fundamental para prevenir sequías, inundaciones y algunos otros fenómenos que puedan causar daños a la humanidad; como ciclones y huracanes.

Ahora quizás se pregunten ¿cómo es posible predecir el estado del tiempo?

Aprovechemos esta celebración para reflexionar la importancia de comprender el estado del tiempo y el cambio climático, así como la influencia que tienen nuestras acciones en estos fenómenos.

Los meteorólogos, así se llaman los estudiosos del estado del tiempo, analizan una gran cantidad de factores, como la temperatura, la humedad, la presión atmosférica, las nubes, el viento y su velocidad, entre muchos otros. Definitivamente, ellos realizan un arduo trabajo para el beneficio de la humanidad.

Pero ¿por qué hablamos de estado de tiempo y no de clima? El estado del tiempo se refiere a las condiciones diarias y va cambiando día con día; el clima se refiere a las condiciones meteorológicas en un largo periodo, por lo general se estudian lapsos de 30 años.

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Oración para Cuaresma Padre nuestro, que estás en el Cielo, durante esta época de arrepentimiento, ten misericordia de nosotros.

Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras, transforma nuestro egoísmo en generosidad.

Abre nuestros corazones a tu Palabra, sana nuestras heridas del pecado, ayúdanos a hacer el bien en este mundo.

Que transformemos la obscuridad y el dolor en vida y alegría.

Concédenoslo por Nuestro Señor Jesucristo.

Amén.

Oración para Pascua Padre bueno, gracias por mostrarnos, a través de la resurrección de tu Hijo que la vida es más fuerte que la muerte y el dolor.

Gracias porque la Pascua nos acerca a tu mismo corazón.

Fortalece nuestra esperanza y aumenta nuestra alegría para que todos los que nos vean, descubran en nosotros la misma esperanza y gozo de los discípulos.

Te lo pedimos por Jesús resucitado y presente en medio de nosotros.

Amén.