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Traslado a vida o muerte entre Málaga y Sevilla

El equipo de traslado de críticos de SAMU participa en un complejo operativo para llevar a una paciente con oxigenación extracorpórea entre el Hospital Carlos Haya de Málaga y el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Dos ambulancias y una decena de profesionales sanitarios hicieron posible este reto

El equipo de traslado de pacientes críticos de SAMU ha participado en una operativa de gran trascendencia que ha vuelto a demostrar la capacidad de coordinación de los recursos sanitarios andaluces. La paciente era una mujer de mediana edad con una patología cardíaca grave que necesitaba un trasplante de urgencia. Estaba ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Carlos Haya de Málaga y tenía que ser trasladada a la del Virgen del Rocío de Sevilla, el centro de referencia. Un trayecto de 220 kilómetros, a vida o muerte, que fue posible gracias al esfuerzo titánico de más de una decena de profesionales médicos.

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La paciente estaba conectada a una máquina ECMO, según explicó a NIUS Emilio Curiel, Jefe de Sección de la UCI de Coronarias del Hospital Carlos Haya de Málaga. Se trata de un sistema de oxigenación por membrana extracorpórea, o lo que es lo mismo, una máquina capaz de proporcionar soporte cardíaco y respiratorio durante días o semanas a pacientes críticos que así lo necesitan.

El miércoles 14 de junio tuvo lugar el traslado por carretera. Un convoy formado por dos ambulancias hicieron el recorrido de dos horas y diez minutos, escoltado por Policía Local en los tramos urbanos y guardia civil, durante el trayecto en carretera. En la primera, viajaba la paciente junto a una enfermera, un perfusionista encargado del manejo de la máquina y un médico intensivista. “Se trata de que el viaje se realice en las mismas condiciones en las que estaba en la UCI, no tiene que notar el traslado”, apuntó Curiel. Tras ella viajaba la segunda ambulancia con un cirujano cardíaco y todo el material replicado de la primera por si surgiera algún problema.

“Cualquier fallo, falta de oxígeno, de electricidad... implica que halla que solventarlo en mitad de la carretera”, insistía el médico que reconocía que, una vez que se cierran las puertas de la ambulancia y comienza el viaje, empieza uno de los momentos más críticos de este tipo de casos. “Sabes que ya no hay marcha atrás y que el objetivo es llegar al trasplante”, apuntó.

Manuel Morón es uno de los Técnicos de Emergencias Sanitarias de SAMU que participó en el operativo. La conducción en este tipo de traslados es vital. “Debe ser continua, con los mínimos frenazos para que el paciente no lo perciba”, explicó. A veces, esto se hace difícil en determinados tramos. “Hay baches y tienes que intentar evitarlos o que no se noten porque dentro de la ambulancia pueden ir de pie o trabajando”, apuntó.

La comitiva salió de Málaga a las 13.20 y llegó a Sevilla a las 15.30 horas. El Hospital Virgen del Rocío es centro referente en situaciones de insuficiencia cardiaca avanzada y trasplante. Aquí, esta unidad multidisciplinar pasó a hacerse cargo de la paciente, como explicó uno de sus responsables, el cirujano cardíaco José Miguel Borrego. “Somos el equipo final que valora y toma decisiones en función del estado en el que se encuentre”, señaló.

Dos hospitales, dos ambulancias, más de 220 kilómetros de distancia y dos equipos de profesionales dispuestos a que todo saliera bien.

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