LLAMAMIENTO A LA CLASE TRABAJADORA Y TODO NUESTRO PUEBLO EN APOYO AL PRESIDENTE

125

LLAMAMIENTO DEL PARTIDO POPULAR SOCIALISTA DE MÉXICO

A LA CLASE TRABAJADORA Y TODO NUESTRO PUEBLO EN APOYO AL PRESIDENTE • Es momento de reafirmar el mås vigoroso apoyo a AndrÊs Manuel López Obrador.

IMPORTANTES LOGROS EN MEDIO DE CONDICIONES ADVERSAS

• TambiÊn, de estar alerta ante las asechanzas de la derecha neoliberal, el gran capital y el imperialismo, que conspiran sin reposo contra su gobierno.

E

• Ademås, es necesario ir adelante, el pueblo, desbrozando el camino por el que pueblo y gobierno han de transitar en una Cuarta Transformación profunda, no cosmÊtica; hacia un MÊxico superior en lo económico, lo político y lo social, soberano e independiente del imperialismo.

l presidente AndrĂŠs Manuel LĂłpez Obrador dio un informe al pueblo a inicios de julio, a un aĂąo de su triunfo y siete meses de gobierno. En ese corto plazo habĂ­a cumplido ya 78 de los 100 puntos prioritarios que anunciĂł en su toma de posesiĂłn, 78% del total que se comprometiĂł a atender en el corto plazo, que se refieren a asuntos econĂłmicos, polĂ­ticos y sociales, la mayorĂ­a muy sensibles.

Entre los principales destacan tres, por su enorme importancia: “Las polĂ­ticas ya no estĂĄn sometidas a las recetas impuestas desde el extranjeroâ€?, dijo,

y añadió que “separamos el poder político del poder económico”, aseveraciones, ambas, hechas el 1 de julio, a las que hay que agregar otra, de igual significación, del 22 de marzo: “el neoliberalismo quedó abolido”.

vencido de la necesidad de luchar; tal fue el caso de las tres grandes transformaciones históricas, la de Independencia, la de Reforma y la Revolución Mexicana de 1910, que antecedieron a la cuarta, que hemos iniciado ahora.

Se trata de declaraciones del presidente que tienen un valor político trascedente; aunque hay quienes, con superficialidad objetan que no son hechos ya consumados, y en un sentido estricto tendrían razón; sin embargo, su peso en la batalla fundamental que libramos los mexicanos en la actual etapa histórica es de suma importancia, porque reiteran la firme voluntad política que anima al jefe del Ejecutivo para realizarlos a cabalidad lo antes posible. Los enemigos del pueblo, que son también los enemigos de López Obrador, han redoblado sus ataques y multiplicado sus insidias contra su gobierno, desde entonces, y nosotros debemos reafirmar nuestra lucha en su defensa, pero, además, pasar a la ofensiva, elevando nuestra consciencia y capacidad de movilización, y entrando al debate ideológico y programático con la mayor agilidad. Porque las grandes victorias sólo han sido posibles cuando se cuenta con un pueblo con-

Hay otros hechos que debemos tener muy presentes. El gobierno ha emprendido la defensa y restauración de lo poco que quedó de dos empresas que han sido clave para el desarrollo de nuestras fuerzas productivas y volverán a serlo: Pemex y la Comisión Federal de Electricidad, CFE. Son dos bastiones que, como bien lo ha dicho López Obrador, los gobiernos neoliberales no lograron acabar de destruir, pues no les alcanzó el tiempo, y que serán la base para la recuperación del sector estatal de la economía, sin cuya vigorosa reconstitución no habrá Cuarta Transformación, porque son vitales. Esta defensa, prioritaria y férrea, trasciende el carácter antineoliberal del actual gobierno y va más allá, asumiendo posiciones antimperialistas, por lo que los revolucionarios estamos obligados a impulsarlas de manera que ineludiblemente puedan afianzarse en momentos por venir, como parte fundamental de la lucha por la segunda

2

y definitiva independencia de México. La importancia de estas empresas es tal, que los esfuerzos del gobierno en este rubro concreto han concitado la más virulenta respuesta por parte de los diversos enclaves del imperialismo, sin faltar uno, como la OCDE y el FMI, las agencias calificadoras de riesgo, y de sus agentes locales, la CONCANACO, la Coparmex, el Consejo Coordinador Empresarial, etc. Aquí es donde se viene dando una de las primeras, grandes batallas.

colusión con el poder judicial; así como la reforma legal para convertir en delito grave la corrupción.

En otro orden, la puesta en funcionamiento de la Guardia Nacional ha sido uno de los temas más debatidos. El PPS de México la considera necesaria y observa que las críticas que ha concitado han sido injustas y superficiales, basadas en suposiciones. Aun así debemos mantener una vigilancia especial sobre esta nueva institución.

Además, es valiosísimo que se hayan rescatado los principios de No intervención y Autodeterminación de los pueblos como sustento de las relaciones con el exterior. Los gobiernos títeres del imperialismo los habían sepultado, atendiendo las órdenes del Departamento de Estado de Estados Unidos, y para vergüenza nuestra, se habían vuelto intervencionistas en asuntos de pueblos hermanos.

Muy destacable también el rechazo del presidente a la práctica del fracking, técnica altamente destructiva del entorno ecológico e impulsada por los monopolios imperialistas y los grandes capitalistas nacionales.

Muy positiva la actitud de este gobierno respecto al terrible asunto de Ayotzinapa, donde ahora sí se dan pasos hacia el esclarecimiento de tan abominable crimen del que fue responsable el gobierno neoliberal de Peña Nieto, como el PPSM lo denunció en su momento.

En otro tema toral, en cuanto al compromiso de López Obrador de desmantelar la Reforma “educativa” neoliberal, también hay logros importantes ya, aunque no se concretan aún en una victoria total. Fue tanto lo que impusieron en esta materia los gobiernos retrógrados, que objetivamente todavía nos resta mucho por hacer en este campo.

En el mismo tenor, es de la mayor importancia hacer justicia a los familiares y compañeros de los trabajadores mineros víctimas del crimen industrial, cometido por Germán Larrea Mota Velasco, en la mina de Pasta de Conchos, al ordenar el rescate de los cuerpos, pero además exigimos, que este crimen no quede impune, por tanto se castigue conforme a la ley y se indemnice a los deudos.

En lo social, tiene notoria importancia que se haya emprendido la construcción de caminos de concreto en municipios de Oaxaca, Guerrero y otros estados, con trabajadores de las mismas comunidades.

También la tiene el programa de becas para jóvenes desempleados y sin posibilidad de estudiar, cuyas expectativas en el pasado reciente se reducían a ser ejército de reserva de la delincuencia mayor; sin soslayar que este programa constituye, a la vez, un subsidio para las empresas de todos los niveles incluidas las pymes, para que empleen mano de obra joven.

Destaca asimismo el restablecimiento de los precios de garantía para los pequeños productores del campo, que los neoliberales habían cancelado, y también el inicio del programa Sembrando vida, con la plantación masiva de árboles frutales y maderables, entre otras muchas cuestiones de la misma índole.

CONDICIONES ADVERSAS EN EL ÁMBITO INTERNACIONAL Y NACIONAL Ahora bien, en el PPSM ¿quisiéramos que este gobierno, hubiera calado más a fondo, que ya hubiera realizado accionas más profundas rumbo a la plena independencia de México, económica y política, respecto del imperialismo? Sí, porque lo que falta es mucho, muchísimo. Pero el gobierno de López Obrador es producto de la lucha de clases, que, como muchas veces hemos analizado, en un país como el nuestro su parte más aguda se da entre todo el conjunto de las clases y sectores sociales víctimas del imperialismo, por una parte, y éste, el imperialismo y sus lacayos locales, por la otra. La correlación de fuerzas entre estos dos grandes contendientes es un factor que influye notoriamente en las posibilidades de mayor o menor avance del gobierno, y un tercer factor lo constituyen las condiciones que imperan en el ámbito nacional y en el internacional.

Valiente y muy importante la batalla que el gobierno de López Obrador emprendió contra el robo de combustibles o “huachicol”, que alcanzaba enormes volúmenes; dañaba brutalmente a Pemex y a la economía nacional en su conjunto; fortalecía a la delincuencia organizada que obtenía un gran botín, y contribuía notablemente a destruir el tejido social en múltiples poblaciones del país, y a degradar a quienes involucró en el hurto y la comercialización en pequeño, además de acrecentar las fortunas mal habidas de empresarios, políticos y delincuentes de toda laya.

También merecen mención la decisión de no condonar impuestos, esa corrupta práctica fiscal de devolver el pago de impuestos a las grandes empresas en

Por lo que hace a este último factor, lo que sobresale en el escenario internacional son los rasgos

3

antimperialista y pacífica. Así ha procedido aún contra procesos muy moderados, como el de Lula, en Brasil, los Kirchner en Argentina, y otros.

La experiencia ha demostrado plenamente que el imperialismo no tolera ni el menor asomo de independencia de gobierno alguno de lo que sigue considerando como su “patio trasero”, América Latina en su conjunto. Y sería muy ingenuo creer que el gobierno de López Obrador pudiera ser la excepción, que el capital financiero internacional y los monopolios extranjeros, pudieran verlo con buenos ojos, o tolerarlo siquiera. Lo cierto es que aún desde antes que tomara posesión; más todavía, desde antes del día de la elección, durante la campaña y otras campañas anteriores, el imperialismo se ha empleado y seguirá empleándose a fondo contra este gobierno, conspirando para impedir cualquier avance y para derrocarlo si puede, más temprano que tarde.

Además, el imperialismo, enemigo fundamental de nuestros pueblos, no sólo ataca por el lado de la economía, sino, moviendo a sus aliados y títeres, que los tiene en todas las esferas. También nos agrede por medio de la manipulación informativa, la propaganda mendaz, que le sirve para deformar las conciencias colectivas de los pueblos, buscando imponer el pensamiento de derecha.

Por lo que hace a la arena nacional, la terrible destrucción de la base económica del país, que dejaron los neoliberales, hace sumamente difícil avanzar hacia un futuro mejor con pasos profundos. El sector estatal de la economía, cimiento sobre el que han de erigirse la independencia y la soberanía, lo demolieron en gran medida. adversos para el ejercicio exitoso de un gobierno antineoliberal.

Empezando por el hecho de que la aguda crisis en que se encuentra el modo capitalista de producción genera una enorme inestabilidad en la economía mundial que afecta a todos los pueblos en el mundo, mucho más a los países dependientes como el nuestro, por su debilidad, que contrasta con el poderío de las potencias imperialistas. Y las nefastas acciones del imperialismo contra los pueblos que han logrado sacudirse a los gobiernos lacayos suyos, les causan mayores problemas de orden económico, porque los bloquea y sabotea por todos los medios a su alcance. Así ha hecho, criminalmente, durante un periodo larguísimo contra la heroica Cuba revolucionaria, causándole pérdidas incalculables; así lo hizo con el gobierno de Salvador Allende, en Chile, provocando su caída e implantando una era de terror a cargo del dictador Pinochet, quien ejerció, por cierto, el primer gobierno neoliberal del mundo. Así lo hace también con Venezuela hoy mismo, castigándola con crueldad por haber llevado a cabo su Revolución bolivariana,

4

Otro importante factor desfavorable es la correlación interna de fuerzas, donde el conjunto de los muy poderosos capitalistas privados, que son enemigos por principios e intereses de un gobierno como el actual, tildado de “populista”; tiene un peso enorme.

Su poder sobresale, si lo comparamos con la escasísima capacidad económica actual del Estado mexicano, sin empresas significativas de su propiedad y con una recaudación fiscal raquítica, heredada del pasado.

La fuerza de los capitales privados, que ya asestaba golpes demoledores a los gobiernos nacionales en la década de los setentas, provocando devaluaciones y atonías, cuenta con un poder infinitamente mayor en las condiciones de hoy.

Es natural, con ese entorno, que un gobierno como el actual se cuide mucho de provocar un enfrentamiento de alta intensidad con la dupla imperialismo-gran burguesía local, en tanto la fuerza que lo apoya no crezca mucho más allá del volumen que posee hoy mismo. Procede, por tanto, que el pueblo se movilice para fortalecer al gobierno de López Obrador.

EL PAPEL DE LA CLASE TRABAJADORA Y EL PUEBLO EN LA BATALLA DE HOY La relación de la clase trabajadora y el pueblo con un dirigente como López Obrador tiene un carácter dialéctico. Debe apoyarlo; debe defenderlo ante las asechanzas de la derecha neoliberal, el gran capital y el imperialismo. Pero también debe tomar la vanguardia en la batalla de las ideas y del programa. Porque como el ahora presidente ha dicho, sólo el pueblo puede salvar al pueblo y sólo el pueblo organizado puede defender a la nación. Esta es la hora en que el amplio frente popular de más de 30 millones de compatriotas que lo apoyaron en las urnas, levante el programa de medidas que deben ser tomadas en el futuro inmediato, promueva la más amplia organización popular y la movilización masiva que pueda destrabar la situación y dé a la 4ª Transformación un nuevo impulso. ¿De qué medidas hablamos? Principalmente, las que fortalezcan la economía en manos del Estado, desde luego Pemex y la CFE, pero no sólo esas; hay otras muchas más que deben ser recuperadas; de hecho, todas de las empresas y ramas de la economía estratégicas para la soberanía y el desarrollo propio.

Realizar una reforma fiscal a fondo, que paguen más los que más tienen y nada paguen los que nada tienen, para fortalecer al Estado, tan raquítico hoy frente al más que robusto sector de los capitalistas privados. Y las medidas que acaben con los dictados que durante la era neoliberal impusieron el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y la OCDE, y que todavía están vigentes en el área de la economía, pero también en la cultura, en la educación, y en tantas otras áreas más.

Acelerar el desarrollo de las fuerzas productivas nacionales y diversificar el comercio hacia todos los mercados del mundo, de acuerdo con el principio de mutuo beneficio y sin condiciones políticas. Impulsar la integración económica y política de todos los pueblos hermanos de América Latina y el Caribe, al tenor de la Comunidad de Estados Latinoamericanos

y caribeños (CELAC), y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).

Denunciar los Tratados de Libre Comercio, cualquiera que sea el nombre que se les asigne; generar las condiciones para, en su momento, rechazar el pago de la deuda externa porque es injusta y se ha pagado varias veces; incluido el caso Fobaproa, o rescate bancario, administrado ahora por el llamado Instituto de Protección al Ahorro Bancario; una leonina e impagable deuda que seguimos pagando todos los mexicanos, desde 1999, que en 2017 ascendía a 900 mil millones de pesos.

Todas las medidas que mejoren las condiciones de vida de las masas populares; aumenten sus recursos; mejoren la educación cuantitativa y cualitativamente, y recuperen plenamente su orientación conforme a lo señalado en el artículo 3º de la Constitución. Las que formen los cuadros medios y superiores para el progreso de la nación. Las que incrementen y mejoren substancialmente los servicios sociales y de salubridad. Las que defiendan y acrecienten nuestra cultura y nuestro medio ambiente en todas sus vertientes.

Las que se orienten hacia un régimen democrático más avanzado que la llamada “democracia representativa”, que sólo es de fachada, un puro engaño.

Un pueblo movilizado, con un programa que profundice la 4ª Transformación, dará al jefe del Ejecutivo la fortaleza adecuada para que pueda salir de la camisa de fuerza con la que pretenden maniatarlo sus enemigos, que son los nuestros, y dar nuevos pasos adelante. Así recobrará su vitalidad la interacción entre las masas y el individuo, que ya se dio durante la lucha para recobrar la presidencia, y que opera, como lo explica el genial pensador marxista Vicente Lombardo Toledano, cuando afirma que los pueblos son los constructores de la historia y no los individuos por sobresalientes que sean. Pero que a los grandes hombres y mujeres se les juzga sobre todo por su contribución a los logros de los pueblos, por la calidad de su interacción con ellos, tal como ha sido hasta hoy la interacción entre las masas y López Obrador.

¡Viva el 125 aniversario del natalicio de Vicente Lombardo Toledano! ¡Vivan la clase trabajadora y el pueblo! ¡Viva la Cuarta Transformación! ¡Viva Andrés Manuel López Obrador! ¡Viva México! ¡Viva México! ¡Viva México!

Congreso extraordinario del Partido Popular Socialista de México.

Ciudad de México, 20 de julio de 2019.