Roberta Calderón

A finales del 2021, pasé seis meses indefinibles que me llevaron, día tras día, a escribir, leer, escribir, escribir y escribir. Desde hace un año y cinco meses trabajo con dos personas que me brindan sus conocimientos para el armado de un libro de poemas,titulado; Arrebatada e inconclusa. El libro ya es una entidad, una unidad, una parte de un todo, un algo con cierta vida que a quienes lo venimos conociendo tan íntimamente, nos sorprende, nos alegra y nos irrita.

LOCOMOTORA

A mi novia se la llevó puesta una locomotora, mi novia era una hermosa diosa griega hasta que quedó debajo de esas ruedas, ay, mi novia que ahora está muerta. No, no, esto no le pasó a mi novia, me pasó a mi, a mí me llevó puesta una locomotora, yo era una hermosa diosa griega hasta que quedé debajo de esas ruedas, ay, de mí que ahora estoy muerta. Tampoco, no, esto le pasó a mi perro, sí, a mi perro se lo llevó puesto una locomotora, mi perro era un hermoso dios griego hasta que quedó debajo de ese peso, ay, mi perro que ahora está muerto… Mejor, pero no, esto no le pasó

al negro, le pasó a mi abuelo, sí, a mi abuelo lo empaló la policía, mi abuelo era un hermoso dios alemán hasta que le reventaron los órganos por dentro, ahí mi abuelo, ahora está muerto, la de la locomotora fue mi hermana, pero no, tampoco, no fue una locomotora.