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Sakonki

TAFALLAKO ZANPANTZARRAK

Casi tres décadas al son del cencerro

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Endika Iriso

Los festejos y tradiciones culturales siempre han sido medio de sosiego ante la tempestad invernal. Frente al frío, el calor de las hogueras, la recogida de las primeras aguas (urberria) o la colocación de eguzkilores y ramas de muérdago en la puerta de casa han servido de amuleto para hacer frente a los temores que depara el año nuevo. Qué decir del festejo del carnaval rural, donde personajes malvados, benevolentes o traviesos deambulan por nuestros pueblos para entretener a la turba, augurar una buena cosecha o espantar al temporal.

Uno de los personajes más simbólicos del carnaval vasconavarro es el zanpantzar o joalduna, originario de Ituren y Zubieta pero extendido desde hace tiempo a todo Euskal Herria. Su estampa es, desde luego, sobrecogedora. Colocados en formación y al paso unísono agitan sus cencerros e hisopos para ahuyentar los malos espíritus y pedir a la tierra que sea generosa con quien la cultiva.

Curiosamente, nuestros zampanzares son muy similares a los zarramacos cántabros, los zamarrones zamoranos, los zarramaches avilenses, los mamuthones cerdeños, los kurenti eslovenos, los kukeri búlgaros y otros personajes grotescos antropomórficos relacionados con el rito de Dioniso, muy extendidos por la Europa meridional.

Todavía recuerdo cómo de txiki me quedaba anonadado cuando el estruendoso tolon-tolon y la llamada del cuerno anunciaban la llegada de estos místicos personajes por las rúas tafallesas. Y es que ya son casi tres décadas desde que nació Tafallako Zanpantzarrak y desde Merindad hemos querido reunirnos con Uxua Olcoz, Dani Arregi “Pollo” e Iñaki Hurtado “Furti”, vieja guardia del zampanzar tafallés, para que nos cuenten los inicios, el recorrido y sus retos actuales.

EL GERMEN

Uxua, que estuvo en el Zanpantzar durante 8 años desde su nacimiento, nos cuenta cómo surgió la iniciativa: “Recuerdo que Andoni Berrotaran y Jose Mari Esparza andaban con la idea de crear una comparsa de zampanzares, ya que por toda la geografía navarra estaban surgiendo grupos”, cuenta Uxua. La idea fue cogiendo forma y a través de una colecta popular promovida por varios colectivos locales se pudieron comprar las pieles (que se llevan al estilo de Zubieta) y los cencerros. Yolanda Goñi se encargó de confeccionar las sayas y los txuntxurros. Iñaki Goñi consiguió unas colas de caballo para hacer los hisopos, ya que su padre era tratante y el guarnicionero local se encargó de limpiarlas y apañarlas. El traje se adornó también con un pañuelo rojo decorado típico de Iparralde. “Conseguir las plumas de faisán que van encima del gorro fue la mayor odisea, los del Coto de la Valdorba nos echaron una mano”, añade Uxua.

EL ESTRENO

“Vinieron un par de muchachos de Uharte a enseñarnos el paso y anduvimos ensayando dando vueltas por el parque del conde”, recuerda Uxua. “Despues también hicimos alguna que otra prueba por el pueblo y recuerdo que algún año también practicamos por la pista de atletismo de las Comarcales, aunque pasados los primeros años no recuerdo haber ensayado más”.

La primera salida fue el 15 de febrero de 1993. La alineación la formaban entre otros: Uxua Olcoz (la chica que ha bailado con más continuidad en el grupo, pero también lo hicieron Amaia Urzain o Haizea Lizarbe, entre otras), Iñaki Goñi, Iñaki Ojer, Goyo Iriso, Juantxo y Mari Lizarraga, Iosu Berrio, Riki Abad y Santi Pérez.

Dani e Iñaki entraron al año, cuando con 13 años eran unos mueticos a los que les gustaba ser el perejil de todas las salsas. “Bailábamos los gigantes de la Ikas, nos metimos a tocar la gaita y un día que vimos los trajes de zanpantzar guardados en el gimnasio de la Ikastola nos propusimos entrar de cabeza. Lo del zampanzar siempre nos ha parecido una movida muy atractiva”, recuerdan.

Uxua en la primera salida de Tafallako Zanpantzarrak.

LAS SALIDAS

Las principales salidas del zanpantzar siempre han sido ferias, carnavales, Olentzero y Euskararen eguna, pero también han sido protagonistas en muchas de las manifestaciones que se han hecho en la localidad: relacionadas con la insumisión, los presos políticos, el tren, el euskera… A estas salidas acudía la gente del grupo a título personal, sin ningún compromiso. “Recuerdo que una manifestación por la insumisión que se celebró en Iruña la policía empezó a cargar, nosotros teníamos delante a una barrera con un montón de maderos y decidimos tirar hacia adelante pasara lo que pasara. Ver como se apartaban mientras la gente nos ovacionaba es algo que difícilmente olvidaré”, cuenta Iñaki.

Iñaki en la portada de Acción Cooperativa. Zanpantzar eguna celebrado en 2009 en Tafalla.

Los últimos años en ferias también han realizado muestras de cómo hay que vestirse antes de salir, ya que a la gente le resultaba curioso.

ZANPANTZAR ON TOUR

También han bailado en varios pueblos de la Merindad y no tan cercanos. “Recuerdo una salida a fi estas de Legazpi, menuda farra cayó… Hay que decir que casi todas las salidas han estado acompañadas de sus respectivas juergas, comidas o cenas, ya que nos gusta ser un grupo de amigos más allá de la actuación”, apunta Dani.

Entre risas recuerdan otra de aquellas aventuras: “Una vez fuimos a comer a una sidrería de Igeldo, nos vestimos y salimos a la carretera sin saber a donde ir. Nos pegamos unas tres horas vagando por allá con una galerna terrible. La juerga que nos pegamos después mejor no la cuento…” Sin duda tantos años dan para muchas anécdotas...“

Recuerdo que estando en Ugao fuimos a comer a una sociedad y a mí no me dejaron entrar por ser mujer”, cuenta Uxua. “Los demás decidieron que si yo no entraba ellos tampoco lo harían, y nos fuimos a comer a un bar de al lado tan agusto”.

Otra cita habitual fue el Joaldunen Eguna que cada año se celebraba en un pueblo. “En Tafalla se hizo en 2009 y participaron más de un centenar de zampanzares de un montón de localidades. Partieron tres columnas, una de cada salida del pueblo, y nos juntamos todos en la plaza. Era un estruendo gigantesco”.

VIAJE A IRLANDA

Las danzas más épicas de Tafallako Zanpantzarrak fueron sin duda las de Irlanda en 2005. “Estuvimos preparándolo durante más de un año”. El viaje coincidió con las protestas de un comité irlandés que trabajaba por la acogida de los presos políticos vascos y la concienciación sobre su causa. Se organizaron una serie de movilizaciones en Belfast, Dublín y Cork donde participaron nuestros zampanzares.

“Sergio Aoiz `Juanaco´ se prestó a llevar los trajes en un contenedor hasta el canal de La Mancha y un colega suyo los recogió allí para cruzar las islas y traérnoslos. Metieron clandestinamente los trajes en la carga de la empresa para hacérnoslos llegar al aeropuerto de Dublín sin gastar un duro. Una gesta que sin duda fue clave para poder bailar allí”, cuenta Iñaki.

“Otro apunte gracioso de aquel viaje es que como no teníamos palo para la ikurriña arrancamos una señal de una obra que pesaba un quintal, con bloque de cemento incluido” recuerda Iñaki. “El pobre Iñaki Pérez se tenía que poner toallas en el hombro para llevarla”, ríen.

Desfi lando por Irlanda.

LOS TRAJES

Los trajes siguen siendo los mismos que al principio, a pesar de que hace unos años se hicieron algunos arreglos y la compra de algún que otro cencerro. No obstante, lo más costoso son las pieles, que a raíz de que se guardaran en un local cedido por el Ayuntamiento que era muy húmedo, y que no se usaran desde la pandemia, se han deteriorado bastante. “Al ser todas nuestras salidas por amor al arte no tenemos dinero para renovar los trajes. Nuestros únicos ingresos son las subvenciones que hemos recibido por parte del Ayuntamiento, que siempre van dirigidas para estos gastos”, apunta Iñaki. “Sin embargo si que nos vendría bien una partida de dinero para adecuar los trajes”.

SE NECEITA SABIA NUEVA

a apuntarse al zampanzar, a apuntarse al zampanzar, ya que “es un símbolo de ya que “es un símbolo de nuestra cultura” y “hay muy buen rollo en el grupo”. “El punto fuerte del talde es que nos gusta tomárnoslo como un punto de encuentro, con alegría…” aclara Iñaki. Según cuentan, hay mucha gente joven que ha estado alguna vez y sabe hacerlo muy bien. “Sé también que hay gente con ganas y que lo harían con gusto, pero no terminan de dar el paso”, dice Dani. “El último que entró fue mi hijo, y sin ensayo ni nada lo bailó de primera”, añade Uxua. “No tiene misterio, la cuestión es mantener el paso del de adelante y que el trote tenga un poco de gracia, que no resulte forzado” termina Dani.

ensayo ni nada lo bailó de primera”,

ANIMA ZAITEZ!

“Lo que está pasando últimamente es que nos estamos quedando los más veteranos y no ha entrado la gente sufi ciente como para hacernos el relevo”, cuenta Dani. Desde aquí animan a la juventud Aprovechamos estas líneas para motivar a los y las futuras zampanzares, ya que el año que viene el grupo cumplirá su 30 aniversario y merece celebrarlo por todo lo alto.

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