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JESSICA XANTOMILA Y ALONSO URRUTIA / P 4 Y

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CORRESPONSAL

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Sitio web potencia el uso de tecnología para identifi cación forense

ALONSO URRUTIA Y JESSICA XANTOMILA

Auspiciada conjuntamente por la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas en México, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Agencia de Cooperación Alemana (GIZ, por sus siglas en alemán) desde abril de este año opera la plataforma identificacionhumana.mx, un esfuerzo para homologar y enriquecer criterios técnicos que contribuyan a ubicar la filiación de los restos mortales. Asumida por la Secretaría de Gobernación como una emergencia forense, en México se contabilizan 52 mil cuerpos sin reconocer, según los reportes oficiales más recientes.

“Estoy convencido de que se podrían reconocer miles de personas en el corto plazo” a partir de la unificación de criterios forenses y la utilización de técnicas probadas para esa labor que han sido aplicadas en conflictos armados o desastres naturales, sostiene Maximilian D Murck, director del Programa de Fortalecimiento de Derecho de GIZ.

“Existe voluntad política y recursos para enfrentar la crisis, pero no podemos enfrentarla hasta no tener las estructuras para la identificación de personas.”

Desde la perspectiva de ONUDH la plataforma fue ideada como un mecanismo para potenciar el uso de la “tecnología al servicio de los derechos humanos”, define Gabriela Gorjón. Se pretende difundir entre los interesados, esencialmente familias afectadas, expertos forenses o autoridades, las alternativas científicas para enfrentar la coyuntura que tiene el país en este ámbito.

Yarimar Ruiz, coordinadora del programa forense en México del CICR, admite que se han hecho “esfuerzos enormes” de sistematización a través del Registro Nacional de Personas Desaparecidas que permita trabajar en hipótesis de búsqueda, pero “se requiere mayor integración de datos porque es tan importante como la información postmortem que puedan hacer los servicios periciales forenses en un análisis”.

Aunque en México se cuenta con una base de huellas en la que están más de 90 millones de personas (el Registro Federal de Electores), no ha habido esquemas que permitan potenciar su aplicación ni se ha podido vincularla con otras bases de datos. Murck resume: “No hay una base de datos centralizada para el uso de la genética o del ADN. Si hay una muestra de ADN en Chiapas de una persona fallecida sin identificar y la familia es de Tamaulipas nunca se va a empatar esta información porque no hay una base de datos centralizados”.

La plataforma pretende también propiciar un debate científico para intercambiar temáticas asociadas a procesos de identificación forense, señala Ruiz. En México es muy importante; se necesita muchísimo para las búsquedas que se están llevando a cabo y que requieren la intervención de arqueólogos u otras opciones técnicas, agrega. –¿El insuficiente avance en el reconocimiento de cuerpos obedece a deficiencias técnicas o a la falta de voluntad de las autoridades? –A nivel federal hay mucha apertura de enfrentar la crisis. Se crearon comisiones locales de búsqueda a través de la Comisión Nacional de Búsqueda y mucha voluntad de Gobernación. Pero no se pueden aprovechar las huellas dactilares si no tenemos el necesario flujo de información. De lo contrario, nunca vamos a poder aprovechar esta información en las entidades con fines de identificación –plantea Murck.

DEMOSTRACIÓN ● HERNÁNDEZ

Terapéuticos, muñecos hechos con ropa de personas ausentes

CAROLINA GÓMEZ MENA

Hace nueve años que Melisa no sabe en dónde está su hermano, y pese al dolor por su ausencia, abrazar al muñeco sanador, elaborado con ropa de Miguel Ángel García y con rasgos similares a él, la conforta.

“Nos hace sentir bien tenerlos cerca, porque al final es como volver a darles vida”, señaló a La Jornada la joven, quien precisó que fue justo el 27 de agosto de 2012 cuando ya no supieron más de su hermano.

“Todos los muñequitos son muy significativos, es algo muy terapéutico, es muy sanador para nosotras. Es su ropa, es todo lo que tenemos de ellos.”

Como Melisa, son varias las mujeres, hombres y una niña que cargan su muñeco sanador, previo a la inauguración de la muestra fotográfica Estos rostros que ves, mujeres que buscan en la Casa Miguel Alemán del Centro Cultural Los Pinos.

Comentó que los muñecos terapéuticos son una iniciativa de una artesana de Orizaba en colaboración con la agrupación Familias de Desaparecidos Orizaba-Córdoba, a la que pertenece. “Están hechos con fragmentos de sus ropas y lo que sobra se les pone como relleno”.

En víspera del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas (30 de agosto), Melisa contó que “cuando desapareció mi hermano tenía 28 años, fue en la ciudad Río Blanco, Veracruz. Se dirigía a su primer día de la licenciatura de derecho en la universidad de Ciudad Mendoza. Salió tarde de su casa, tomó un taxi, y fue a partir de ahí que no supimos nada de él. Mi hermano ya tenía a su familia y había costado mucho que pudiera retomar sus estudios”.

Recordó que “en esos tiempos, por miedo, no hicimos la denuncia de inmediato, fue tiempo después, y lo poco que tenemos son indagatorias que se hicieron de manera propia, pero no hay nada seguro ni nada que nos pueda afirmar dónde pueda estar. Es un dolor muy grande el que sentimos las familias, las mamás, las hermanas. Desafortunadamente nos encontramos en este camino”.

Teresa de Jesús Morales también busca a su hermano Esteban Morales; él era policía federal y desapareció el 3 de diciembre de 2009, “cuando estaba (Felipe) Calderón, son casi 12 años en su búsqueda, desapareció en Michoacán”.

Arcelia Castillo también busca a su hermano desde hace poco más de dos años. “Él es abogado, desde el 10 de mayo de 2019 está desaparecido. Se perdió en el centro de la Ciudad de México, ahí tenía su despacho, salió del trabajo y ya no supimos nada de él, lo seguimos buscando”.

Teresa y Aracely son de la Red Eslabones por los Derechos Humanos y señalaron a este medio que la pandemia de Covid-19 retrasó muchas búsquedas. “Nos afectó, se paró todo. Presencialmente se hacía un poco más de presión o podíamos movernos más, pero con la pandemia no podíamos ver a las autoridades, teníamos que hacerlo por Zoom, y sí nos atendían, pero nos retrasó más”. Asimismo, conminaron a la población a ayudar a compartir en redes sociales las fichas de búsqueda.

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