31 minute read

GUSTAVO CASTILLO

Celebra la CNTE 43 años; marcha hoy en Guerrero

LAURA POY SOLANO

A 43 años de la fundación de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), dirigentes del magisterio disidente señalaron que “pese a todos los obstáculos, hemos logrado sobrevivir a todos los gobiernos que han intentado acabar con nuestra lucha legítima por una verdadera democratización de la educación, del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y del país”.

En conferencia de prensa, Pedro Hernández Morales, secretario general de la sección 9, acompañado de representantes de las secciones 10, 11 y 60, así como de docentes del estado de México, indicó que en 2023 “mantendremos nuestra resistencia” y anunció que “no dejaremos las calles ni la exigencia de una verdadera democratización”.

En la sede nacional de la CNTE, señalaron que “pese a las promesas de basificación de todos los maestros, aún miles de compañeros mantienen plazas interinas, aunque llevan 15, 20 y hasta 30 años laborando, por lo que no pueden jubilarse, ya que no tendrían acceso a una pensión”.

En el marco de la conmemoración del 43 aniversario de la creación de la CNTE, agregó, hoy acudirán a una marcha nacional en Chilpancingo, Guerrero, donde también habrá una conferencia magistral de Luis Hernández Navarro, coordinador de Opinión de esta casa editorial, y del investigador y politólogo Mauro Jarquín.

Destacó que el magisterio disidente continuará la lucha para consolidar no sólo un proyecto sindical

▲ Conferencia del magisterio disidente en la sede nacional, en la que participaron representantes seccionales. Foto Alfredo Domínguez

verdaderamente democrático, pues la dirigencia del SNTE “ha simulado el relevo de 30 secciones sindicales con un reglamento a modo, que no cumple con las reglas básicas de la democracia sindical”.

Integrantes del CJNG secuestraron al coronel Grimaldo: Sedena

GUSTAVO CASTILLO GARCÍA

Integrantes del cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) al mando de un líder regional identificado como El CR secuestraron al coronel José Isidro Grimaldo Muñoz en la comunidad de Tapalpa, Jalisco, el 10 de diciembre. A través del general Crisóforo Martínez Parra, comandante de la 15 Zona Militar, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) solicitó la colaboración de la ciudadanía para localizarlo.

Al terminar sus vacaciones, el coronel Grimaldo Muñoz fue interceptado por dos unidades con hombres armados que fingieron un incidente de tránsito y lo plagiaron con violencia, sin que hasta ahora se sepa su paradero. “En un acto por demás cobarde fue objeto de la violencia de un grupo de delincuentes del CJNG, encabezados por el jefe regional de Tapalpa, que responde al alias de CR, cuya identidad, lugares que frecuenta y área de influencia es conocida.

“Con datos recabados de integrantes del CJNG y otras fuentes, se ha logrado establecer un perímetro definido dentro del cual, muy probablemente, haya sido trasladado y hacia donde orientamos nuestros esfuerzos de búsqueda.” El general Martínez Parra destacó la trayectoria del coronel Grimaldo en el Ejército Mexicano. “En la actualidad se desempeñaba como comandante de una corporación en la frontera norte, donde se ha destacado por los resultados sobresalientes a favor de la seguridad de la sociedad mexicana.

“Esta reprobable acción la llevaron a cabo integrantes del CJNG de manera premeditada, aprovechándose de la condición indefensa del coronel Grimaldo”, por lo que “El Ejército Mexicano, Fuerza Aérea Mexicana, Guardia Nacional y demás instituciones de seguridad de los tres ámbitos de gobierno, enfocarán todos sus recursos humanos, materiales y tecnológicos, incrementando significativamente sus efectivos, para lograr la localización y recuperación con vida del coronel José Isidro Grimaldo Muñoz”.

Funcionarios de la FGR informaron que el caso está en manos de autoridades de Jalisco, que difundió una ficha solicitando el apoyo ciudadano para localizarlo.

La progresía anti-AMLO

FABRIZIO MEJÍA MADRID

Apareció en la revista argentina Viento del Sur, un ensayo de Marcelo Starcenbaum sobre el antikirchnerismo de los intelectuales progresistas tras el atentado sufrido por la vicepresidenta Cristina. Las diferencias con la animadversión de los antes “progresistas” intelectuales mexicanos hacia el obradorismo son muchas, pero me llamaron más la atención sus semejanzas. El primer saque de Starcenbaum se puede aplicar también para leer el ambiente mexicano: los relatos decadentistas, es decir, los que equiparan el movimiento de transformación con una restauración que puede variar desde el estatismo, el autoritarismo y el personalismo –con el que los “progres” coincidirían con el empresario Claudio X. González, porque tanto neoliberales como comunitaristas coinciden en su condena al Estado, al que confunden siempre con coerción– hasta los que creen que las medidas redistributivas y de justicia no son verdaderamente revolucionarias o “suficientemente” de izquierda. La coincidencia entre leer a la transformación obradorista como regreso al Partido Único y de otra nueva “interrupción” de una verdadera Revolución social es que en ambas falta uno de los componentes que tanto el peronismo argentino como la izquierda mexicana siempre han compartido: lo nacional-popular. A los “progresistas” les falta entender el nuevo arraigo republicano que se volvió a manifestar en La Marcha del 27 de noviembre: son millones cuya identidad es la política y cuya pertenencia se rige por incorporarse a una soberanía de corte cultural que denuncia el clasismo racializado, la blanquitud y el menosprecio meritocrático. La “progresía” se pierde entre alertar desde lejos los peligros de la vuelta al PRI –el presidencialismo y la represión– y añorar una comuna horizontal y sustentable que pueda sobrevivir sin el maldito Estado, pero se les pierden los millones que asumen como identidad su carácter de “pueblo”, “pata rajadas”, “acarreados por la esperanza”. Les pasa lo mismo que a los estudiosos de la Revolución Mexicana que la despreciaban porque no conducía al “socialismo”.

Escribe Starcenbaum que muchos “progres” argentinos han caído en la farsa de leer las transformaciones como “una experiencia de destrucción del sistema democrático a través del voto popular”. Ahí coincidirían con todos los que se oponen a las consultas populares, los plebiscitos y las marchas que sacuden con su aparición de cuerpos a la democracia de los reglamentos. Sin reconocer la aparición del pueblo, todo se hace un engrudo indistinto: la transformación no hace sino prolongar el neoliberalismo (es lo mismo privatizar bienes y servicios públicos que la austeridad republicana), el ritual presidencialista del PRI es igual que el liderazgo de un dirigente histórico como AMLO; los cambios serían, igual que en el pasado, sólo de apariencia porque no se toca al sistema capitalista y sus leyes de la propiedad y explotación.

La aparición del pueblo es lo que no cabe en ninguno de sus análisis que, como dice el autor, no pasarían un examen universitario porque se brincan los marcos teóricos y los contextos de los procesos sociales, hacen comparaciones absurdas (como entre Díaz Ordaz y AMLO) y no atienden a las reglas de la causalidad que permanentemente confunden con la correlación (dos sucesos simultáneos no necesariamente son causa y efecto). Así, al igual que la derecha, la “progresía” no puede leer ni pensar en el proceso de transformación y se pierde también en el evento diario, la declaración sin contexto y el descalabro momentáneo que parece el final del todo.

Hay una idea apenas esbozada por Starcenbaum que me parece sugestiva: existe una nueva derecha anticomunista sin comunismo. No es que luche contra un fantasma, sino que para ella, el “comunismo” es decidir sobre la procreación, autodeterminarte el género, enunciar el clasisimo racializado y poner en duda la autoridad en política de los títulos académicos. Ese es su “comunismo”. En el caso de México, se le agrega la idea de que la izquierda propone que todos seamos pobres, mediocres, y emotivos. Es su forma de enunciar su desacuerdo esencial con el antiobradorismo: no es necesario atenuar las inequidades porque éstas son “naturales” o el motor de no sé qué talento esforzado. En el semejante de la derecha, la “progresía”, hay este temor a que lo público sea del dominio de todos, iguales. No es un clasisimo racializado como el de la derecha, pero sí un acuerdo con que la opinión política válida es primero la de los “letrados”. Unos dirían que eso es mera apariencia, uso del lenguaje público, pero no. En realidad, es una forma de cuestionar todo un sistema de dominación de comportamientos, cuerpos y hasta sentimientos. Ese es el contenido de lo que se autodenomina “pueblo”, la politización de las disputas por quién ordena y quién obedece. Eso ha llevado a la ampliación de los derechos, pero también a la autocontención de ciertas palabras humillantes y conductas de menosprecio.

Como el kirchnerismo, el obradorismo ha actuado en la reparación de las embestidas del neoliberalismo. Tiene medidas de contención de la miseria, al lado de construcciones de infraestructura para generar desarrollo y un sentido de justicia. Sin embargo, la derecha y la “progresía” insisten en que es la destrucción del mundo como lo conocimos. Y, aunque no pueden enunciarlo, lo que se ha ido destruyendo poco a poco son las coordenadas del lugar que ocupan unos y otros mexicanos en la idea de patria, el tipo de pertenencia. Ya no son más la economía, el dinero y los grados académicos los únicos que pueden dotarnos de identidad. Ahora, también es la política y, por default, es el nuevo terreno identitario de los excluidos. Para aminorar sus miedos, la oposición clama por la “reconciliación” o un obradorismo suavizado. Se comete el mismo error de siempre: tratar de leer el presente como restauración autoritaria o quedar lejos del futuro revolucionario. Cada vez que les pase eso, deberían de darse una vuelta por las calles.

MÉXICO, SEGUNDO CON LA MAYOR MERMA Cae esperanza de vida en América Latina y el Caribe por la pandemia

CAROLINA GÓMEZ MENA

América Latina y el Caribe es la región del mundo en que hubo la mayor reducción de la esperanza de vida al nacer, a raíz de la pandemia. La pérdida promedio fue de 2.9 años en 2021, en comparación con 2019, y entre los países con las mayores mermas se ubicó México.

Ese desplome “se traduce en un retroceso de 18 años, ya que en 2003 se registró la esperanza de vida al nacer que se estimó para el año pasado”. Esta caída “constituye la mayor pérdida de años de vida observada en la historia reciente de la región”, y refleja el efecto total, directo e indirecto, del covid-19 en la mortalidad, es decir, no sólo las muertes por el contagio, sino también por otras causas derivadas de la pandemia.

En las proyecciones se perfila que la recuperación ya empezó este año, pero sólo se situará en los niveles prepandémicos hasta 2025, dependiendo del país.

El estudio Envejecimiento en América Latina y el Caribe, inclusión y derechos de las personas mayores, elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), refiere que “seis de los 20 países del mundo con mayores pérdidas de esperanza de vida al nacer en 2020, en comparación con 2019, son de la región.

El primer lugar lo ocupó Ecuador, con una reducción de esperanza de vida de 5.1 años; México (-4.1), Bolivia (-3.4), Perú (-2.5), Nicaragua (-2.3) y Colombia (-2.0).

La esperanza de vida es un indicador clave del avance de los países, que capta la mortalidad en el curso de la vida e indica cuántos años viviría una persona, en promedio, dadas las condiciones de mortalidad observadas en su país y “está muy relacionado con el nivel y la distribución del desarrollo económico y social y con los factores ambientales”.

En América Latina y el Caribe se han registrado ganancias de supervivencia extremadamente rápidas, “la esperanza de vida al nacer aumentó de 48.6 años en 1950 a 75.1 años en 2019 para ambos sexos. Con la caída a causa del covid-19, llegó a 72.2 años en 2021, y a partir de este año volvió a aumentar hasta llegar a 73.8 años.

Las diferencias entre los países de la región en torno a la recuperación de ese indicador se deben a las desigualdades en el proceso de vacunación. “Se considera que la vacunación contra el covid-19 es una herramienta fundamental para controlar la crisis sanitaria, económica y social desencadenada por la pandemia. De acuerdo con datos al 31 de julio de 2022, en la región se ha logrado vacunar a 70 por ciento de la población con esquema completo y a 78.6 por ciento con esquema parcial”.

Publican en el DOF la nueva ley sobre tabaco y uso de vapeadores

LAURA POY SOLANO

El gobierno federal publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones del Reglamento de la Ley General para el Control del Tabaco (LGCT), con lo que se podrá regular la protección de los espacios libres de humo, incluidas las emisiones de nuevos productos, como vapeadores o cigarros electrónicos.

Las modificaciones a la LGCT, que ahora se incluyen en su reglamento, prohíben la publicidad, promoción y patrocinio de productos elaborados con tabaco, en forma directa o indirecta, en todo medio informativo, incluidas comunicaciones personales y redes sociales. También está prohibida cualquier publicidad en los puntos de venta.

Al respecto, Erick Antonio Ochoa, director de Salud JustaMx, destacó que con la publicación de las reformas se incluyen modificaciones muy relevantes que acercan a México al cumplimiento del Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco.

Una de las principales modificaciones, indicó, es la protección de los espacios libres de humo, incluidos los cigarros electrónicos y productos de tabaco calentado.

“Con estas reformas al reglamento (...) ya no se podrán utilizar estos dispositivos en todos los espacios públicos cerrados, áreas interiores de trabajo, sitios de concurrencia colectiva y en todos los planteles educativos de todos los niveles, desde prescolar hasta posgrado”, pues las escuelas deben considerarse espacios cien por ciento libres de humo.

Con la prohibición de toda forma de publicidad, dijo, México tiene una de las legislaciones más avanzadas en esta materia en América.

Desbordan crematorios las muertes por covid en Pekín

AFP PEKÍN

Trabajadores en crematorios de Pekín afirmaron ayer que sus establecimientos están desbordados por la ola sin precedentes de casos de covid-19 en China que, según las autoridades, pronto llegará a las zonas rurales.

La epidemia se está propagando rápidamente por el país asiático, una semana después de que se levantaran la mayoría de las restricciones sanitarias en vigor desde hace casi tres años.

Las autoridades admiten que ahora les es “imposible” contabilizar el número de casos.

“Incineramos 20 cuerpos al día, principalmente ancianos. Muchas personas enfermaron recientemente”, explicó a la agencia Afp un empleado de un crematorio. “De los 60 que trabajamos aquí, más de 10 son positivos al covid, pero no tenemos opción ya que hay muchísimo trabajo”, añadió.

Los trabajadores de otras dos funerarias de Pekín, contactados por Afp, indicaron que sus establecimientos están operativos las 24 horas, al ofrecer servicios de cremación el mismo día para responder a la fuerte demanda.Otro centro de ese tipo indicó que su lista de espera es de una semana.

Sin embargo, las cifras oficiales no recogen ninguna muerte relacionada con covid-19 desde el 4 de diciembre.

La organización de lucha contra el covid instó a los gobiernos locales a aumentar la vigilancia y la atención médica para las personas que regresan a sus hogares en las zonas rurales, de cara a las fiestas del año nuevo chino, en enero.

El evento provoca cada año el mayor desplazamiento de población del mundo. Se espera que en esta ocasión sea aún mayor, ya que se levantaron las restricciones de viaje entre provincias.

Los medios de comunicación estatales y los expertos en salud chinos minimizan la peligrosidad de la variante ómicron, y el experto en enfermedades respiratorias Zhong Nanshan propuso cambiar el nombre del covid por “resfriado del virus”.

Sin embargo, millones de personas de edad avanzada no fueron vacunadas, y las pruebas de antígenos y los medicamentos contra la fiebre escasean.

En redes sociales, se viralizaron varios videos de enfermos con covid, sentados en taburetes fuera de hospitales abarrotados y recibiendo perfusiones de solución salina.

El saldo global de la pandemia hasta ahora es de 6 millones 664 mil 236 muertos y 652 millones 533 mil 965 casos, de acuerdo con la Universidad Johns Hopkins.

Gustavo A. Madero la alcaldía más iluminada de la ciudad

• Se han sustituido 73 mil luminarias a luz tipo LED

La alcaldía Gustavo A. Madero, gobernada por Francisco Chíguil Figueroa, logró transformar en su totalidad el alumbrado público de la demarcación con cerca de 73 mil luminarias sustituidas por luz tipo led, con las que fue posible instalar 275 senderos seguros a lo largo de 330 kilómetros.

Desde 2019 que se puso en marcha el programa “Iluminemos Nuestra Alcaldía”, personal de la Dirección General de Servicios Urbanos, y de las 10 direcciones territoriales que conforman la demarcación fueron los encargados de sustituir las luminarias, así como verificar su correcto funcionamiento.

Los senderos seguros instalados en calles y avenidas se ubicaron principalmente en zonas escolares, mercados, plazas, parques e iglesias. Un ejemplo de ello es el del Instituto Politécnico Nacional, el más extenso de la zona, con 814 luminarias que benefician a 120 mil estudiantes de esta casa de estudios.

Estas acciones han coadyuvado a que disminuya la incidencia delictiva de alto impacto, por lo que se continuarán implementando rondines de seguridad enfocados a seguir abatiendo el robo a transeúntes, casashabitación, comercios y repartidores.

El Gobierno de Gustavo A. Madero informó también que, según datos del observatorio de la Ciudad de México, Seguridad y Justicia, durante los últimos cuatro años se han reducido en un 53 % los delitos de alto impacto en la demarcación, por lo que se mantiene la coordinación con los tres niveles de gobierno en la reunión que preside el alcalde todas las mañanas con su Gabinete de Seguridad.

Argentina-Francia: la disputa política en la cancha

HÉCTOR ALEJANDRO QUINTANAR*

En junio de 2006, durante la Copa Mundial de Futbol en Alemania, el líder del fascista Frente Nacional de Francia, Jean Marie Le Pen, expresó desconfianza en la selección de su país porque en ella había “muchos jugadores de color”. No fue el primero en decir un disparate parecido. Eduardo Galeano contó que, casi un siglo antes, en 1916, en el contexto del primer campeonato sudamericano de futbol, Uruguay venció por dos a cero a Chile, país que impugnó el resultado porque en el equipo celeste “se habían alineado dos jugadores africanos”, en referencia a Isabelino Gradín y Juan Delgado, uruguayos descendientes de esclavos.

Los fascistas y posfascistas suelen ser una exposición constante de anacronismos e ignorancia: por lo visto el señor Le Pen no se enteró de que en 1998 Francia logró su mejor resultado futbolístico hasta entonces al ser campeona del mundo, y lo hizo precisamente con una escuadra diversa que, por primera vez en la historia, contó con jugadores de raíces en los cinco continentes: el gran mediocampista Desailly era ghanés; el hábil Thuram, antillano; Youri Djorkaeff, de familia armenia y Christian Karembeu, de Nueva Caledonia. ¿Cosas de la multiculturalidad contemporánea? No necesariamente: Le Pen quizás ignoraba que el mejor goleador en mundiales, Just Fontaine, hizo 13 goles en el lejano Mundial de Suecia, en 1958. El ariete era francés, pero nació en Marruecos. Más que ignorancia lo que aqueja a los fascistas es un estado de negación: el equipo en que Le Pen “desconfiaba” hizo un buen papel en 2006, al resultar subcampeón.

Además de anacrónicos, los fascistas y posfacistas suelen ser nada originales. En 2017, ante la eliminación italiana para ir al Mundial de 2018, el ex futbolista Paolo Cannavaro aseguró que el mal momento “Sauri” se debía “a extranjeros que quitan oportunidad a chicos italianos”. Mussolini estaría orgulloso, aunque para respaldar a Cannavaro tendría que ocultar muchos hechos. Como se sabe, las copas mundiales de 1934 y 1938 fueron ganadas por Italia, nación que convirtió ambos torneos en asunto de Estado para “demostrar” la superioridad competitiva del fascismo. Pues bien, los datos mostraban otra cosa: el equipo campeón de 1934 y que se tornó en orgullo de la italianidad fascista, tenía a más de la mitad de sus jugadores titulares compuesta por “extranjeros”: el delantero Felice Borel nació en Francia; el atacante Anfilogino Guarisi, en Brasil; los mediocampistas Atilio de María, Raimundo Orsi, Enrique Guaita y la estrella Luis Monti eran todos argentinos. Por más que se apele a esoterismos de “pureza étnica”, los hechos son los hechos: en esa época ultrarracista, el fascismo italiano debió echar mano de foráneos para exaltar su destructivo nacionalismo.

El fascismo se caracteriza por ser una postura violenta en favor de una sociedad desigual cuyas jerarquías a veces descansan en condiciones no escogidas, como “raza” u origen de clase. De ahí que sea un ideario execrable cuyo potencial destructivo debió quedarnos claro a todos desde los orígenes de la Segunda Guerra Mundial. ¿Por qué luego de 100 años persisten aún muchos de sus prejuicios? Por una razón: más que ideología, los fascismos parecen ser un estado mental inmovilista que se siente amenazado ante cualquier viso de equidad en lo social o de diversidad en lo cultural. Hace casi un siglo Mussolini pudo azuzar un engaño cínico al blandir como “pureza italiana” a un equipo conformado, como todos, por una complejidad diversa. Hoy Le Pen y semejantes (su hija Marine; Vox en España; Meloni en Italia y un preocupante y creciente etcétera) piensan de forma parecida.

Eso ocurre en el futbol, pero el mismo principio se reproduce en ámbitos más delicados, que van desde quien niega equidad de género mediante anatemas sexistas hasta los que desprecian los programas sociales que buscan apenas paliar injusticias históricas. Así, el señalado por “nini huevón” en México sería el “choriplanero” en Argentina. Tristemente, ese discurso proclive a detestar cualquier intento de equidad, atraviesa a las ultraderechas, pero también a derechas que se dicen democráticas, que en América Latina parece costarles cada vez más hacer un deslinde claro contra las voces más reaccionarias de la vida pública, quizá porque ven en ellas un aliado que dice lo que ellas no se atreverían.

Es urgente, igual que hace 100 años, combatir las taras postfascistas. Hagámoslo no sólo desenmascarando la hipocresía malinformada –y violenta– de gente como Le Pen, sino también exaltando con justicia la diversidad. Aquí un aporte, a propósito de la final del Mundial de Catar entre Argentina y Francia. Uno de los más ilustres argentinos de la historia, Gardel, nació por casualidad en Toulouse. Él solía cantar la canción más bella que, con tema de futbol, se haya escrito (de autoría, por cierto, de un argentino de raíz italiana, Alejandro Fattorini): el tango Mi primer gol, que reza: “Y verás cuando entre en juego el latir de mi ala izquierdo/ que con un centro a mi labia te acorrale en un rincón;/ ni el foul de tu indiferencia podrá evitar la caída/ cuando en la red de tus labios te acomode el primer gol...”. Que el futbol sea un lenguaje para hablarle a la pasión constructiva y a la felicidad, nunca más al odio.

Que el futbol sea un lenguaje para hablarle a la felicidad y a la pasión constructiva, nunca más al odio Focos rojos se desatan en Europa

TATIANA COLL*

Una mexicana, yo, con necesidad cotidiana de saber lo que sucede, mirando los noticieros de Francia y España: el asombro se instala y abre puertas a un torrente de ideas y comparaciones que intentaré reflejar puntualmente: 1. Busco canales de información y voy cambiando buscando esencias. Abundan canales, pero el mundo que integran a sus inquietudes es sólo Europa, y más allá Estados Unidos, Rusia y China, algo del Mediterráneo y nada más, salvo que suceda una catástrofe. La mayoría de los canales dan noticias muy locales y alguno alcanza a ser nacional. Un mundo ciertamente muy estrecho. 2. El sistema sanitario español en crisis total, huelga de varios días de los médicos de base en hospitales y puestos sanitarios. Demandan, ojo demandan: que se rebajen el número de consultas diarias que tienen que dar, de 60 a 30, para poder dedicar, por lo menos, 10 minutos a cada paciente, lo cual consideran imprescindible para realizar diagnósticos serios; además de que para obtener una cita transcurre un mes en promedio. A lo cual los gobiernos locales (Madrid) del Partido Popular responden que lo adecuado sería montar un sistema de consultas por videoconferencia o por teléfono para eliminar la presión. Los médicos se indignan y solicitan contratar un refuerzo de 24 mil galenos más en el sistema público. Apuntan a las privatizaciones como parte del desmantelamiento que sufren. 3. Médicos franceses, en las mismas condiciones, se plantean una crisis y posibles movilizaciones, pues el sistema público está desmantelado, los galenos generales han sido relegados, desvalorizados, abrumados por consultas rápidas constantes, sustituidos en las consultas privadas por profesiones paralelas, como kinoterapistas. Hay camas disponibles en los hospitales, pero no existe personal, hacen falta unos 70 mil, desde médicos hasta personal de limpieza. La crisis se profundiza porque hay una novena ola de contagios de covid, con la nueva variante BQ 11; hay un biológico bivalente, pero la mayoría no quiere vacunarse, ni siquiera el personal sanitario, hay miles en casa que rechazan el antígeno y el debate se centra en si sería necesario que los no vacunados se reintegraran a su trabajo en los hospitales. 4. La temperatura ha caído de pronto, el termómetro señala: -1, hasta 4 grados, un invierno difícil aparece. Dos fantasmas se instalan: el inalcanzable precio de la electricidad y los combustibles, para movilizarse e intentar calentar las casas. Los gobiernos plantean como solución que no suban a más de 15 grados sus calentadores, aun así millones no podrán pagar. En Francia, además, el gobierno anuncia cortes imprescindibles de energía para enero, el mes más frío, el debate se desata: ¿cuáles cortes?, ¿cómo avisarán?, ¿cortes totales en escuelas?, ¿hospitales?, ¿industrias?, ¿bomberos y policías?, ¿transportes y semáforos? ... por lo pronto, para el fin de semana, huelga parcial de los trenes, el sistema más afectado por las privatizaciones, desatendido, con salarios más bajos (que sólo se compensan con primas al desempeño que no se integran al salario y luego afectan las jubilaciones). El gobierno balbucea que está todo planificado, que los lugares serán avisados, que todos tienen que aprender a gastar menos y ser muy precavidos, etcétera … Los franceses se “encabritan” aún más… Entonces, ¿somos los franceses los que tenemos la responsabilidad de gestionar los problemas nacionales y no el gobierno? 5. La perniciosa inflación se ha instalado también y pone una angustia mayor sobre la gente. En promedio se ha desatado, según los noticieros una inflación que ronda entre 15 y 20 por ciento en alimentos, según los productos de que se hable. Una Navidad, dicen los muchos que están en los salarios mínimos, que pasarán con dificultades: a pesar del Black Friday, los juguetes y regalos han aumentado en 44 por ciento. 6. En tanto, Macron se fue de visita, con bombos y luces, con Biden. Grandes declaraciones de amor, una alineación poco esperada con las políticas estadunidenses guerreristas. Pedro Sánchez es nombrado presidente de la Internacional socialdemócrata, los mismos bombos y platillos, la misma alineación. Bruselas impone un fantasmal tope al precio del gas ruso.

Los comentaristas señalan que Europa no está ni remotamente en condiciones de aumentar el apoyo a Ucrania, como lo exige Biden, una guerra que está pesando fuertemente sobre el cotidiano, no se atreven a plantear abiertamente la absoluta necesidad de parar la guerra y negociar; hay déficit comercial fuerte, hay necesidades impostergables para reforzar la producción de energía nacional y de alimentos, fortalecer los servicios públicos; exceso de condiciones impuestas por Bruselas, no hay acuerdos sobre aumentar impuestos, pensiones y salarios. 7. Conclusión: en la próspera Europa naufragan las políticas neoliberales de privatización y mercantilización, aunque les cuesta mucho admitirlo y cambiar rumbo. ¿Donde escuchamos esto antes? 8. Rápidas y escuetas noticias sobre el juicio a Cristina Kirshner en Argentina, derrocamiento de Castillo en Perú, nada más sobre Latinoamérica, como una curiosidad extraña; mientras que en Alemania detienen a una banda de ultraderecha armada hasta los dientes como algo espectacular.

Sistema de salud en crisis, electricidad y combustibles inalcanzables...

Derechos humanos frente al 2023

MIGUEL CONCHA

En repetidas ocasiones en este año, hemos atestiguado momentos álgidos y complejos relacionados con la realización de los derechos humanos en México. Hemos visto por fortuna también el trabajo colectivo y sostenido entre los grupos organizados más desfavorecidos para hacer vigentes sus derechos. Son precisamente las colectividades sociales las que desde abajo siguen resistiendo y enfrentando una crisis de derechos humanos que no amaina. Son ellos, que desde acciones concretas y realistas abonan cada año a la consolidación de la paz, la justicia y los derechos humanos en México y en el mundo.

Recordemos aquella frase del historiador inglés, Edward Palmer Thompson, hoy tan oportuna: “Aprendemos, ni por primera ni por última vez, que resulta una tarea desagradecida y terriblemente larga intentar influir en el curso de la historia por medio de pequeños movimientos desde abajo. Con todo, tales posiciones minoritarias, a lo largo de gran parte de la historia humana registrada, han sido los únicos lugares honorables donde estar; tampoco fracasan siempre a largo plazo”. Por ello, resulta fundamental el fortalecimiento de actores sociales de base encaminados a la transformación de la realidad, y todos trabajar en un proceso de liberación que ponga al centro la dignidad de las personas, las comunidades y el cuidado de la naturaleza.

En este proceso, toca al Estado mexicano atender las propuestas y necesidades de estos grupos, haciendo todo a su alcance para cumplir con sus obligaciones en materia de derechos establecidas en la Carta Magna y diversos instrumentos internacionales; por ejemplo, dadas las constantes agresiones contra quienes luchan por sus derechos, toca revisar a fondo el compromiso y acción decidida para revertir tal situación desde una política de Estado de protección integral. Debe dedicarse especial esfuerzo a proteger la integridad de cientos de mujeres, muchas de ellas madres, que buscan a sus hijos y familiares desaparecidos: no es menor que 2022 sea el año más fatídico para ellas, pues es cuando más asesinatos de mujeres buscadoras registramos.

En ese sentido, es relevante que para 2023, con la debida consulta, se pudiera contar con una ley renovada en materia de protección de estos grupos y personas. Por otro lado, durante los dos últimos años, hemos visto avances en temas relacionados con el esclarecimiento del pasado reciente. De todo lo que se incluye en tal estrategia del Estado, llamo la atención sobre la propuesta de una “Ley de Memoria”; tal empresa requiere la participación amplia de todos los sectores involucrados, especialmente de las víctimas. Si fuera el caso y pertinencia de esta ley, deberá servir efectivamente para garantizar el derecho a la memoria de todas las víctimas y la sociedad en general.

Igualmente, será urgente dar seguimiento a los informes y visitas que en el último año recibió el Estado. Por un lado, lo relacionado con el Comité contra las Desapariciones Forzadas de la Organización de Naciones Unidas; el Estado debe poner ahínco en dar cumplimiento a tales sugerencias, dadas por las y los expertos en abril pasado. Asimismo, 2023 será ocasión de recibir e idear las mejores rutas para dar cumplimiento a recomendaciones de la Relatora especial sobre los derechos humanos de los Desplazados Internos de Naciones Unidas, Cecilia Jimenez-Damary. En ambos asuntos se esperaría la participación cada vez mayor de todos los ámbitos de gobierno y de los tres Poderes de la Unión. Los esfuerzos del Estado en su conjunto para erradicar la violencia feminicida en México deben ser redoblados.

Por desgracia, la violencia feminicida se mantiene, por ello, el cumplimiento efectivo de las alertas de género, así como las debidas tareas de investigación con perspectiva de género entre las fiscalías son urgentes; asimismo, el fortalecimiento de instituciones dedicadas a la atención de las violencias contra las mujeres no debe cesar, sino extenderse.

Resulta alentador que este año se cuente ya con el reconocimiento del matrimonio igualitario en todo el país. Tuvo que pasar una década, desde que la primera entidad reconociera esta figura legal, para que en todo México sea posible garantizar el matrimonio igualitario entre personas del mismo sexo sin discriminación; tocará hacer todo lo posible para evitar retrocesos en estos derechos ganados. Resultará importante sentar bases para hacer efectiva la obligación de las empresas para la protección de los derechos humanos, en ello se deberá formular una normativa seria para el cumplimiento de la debida diligencia de grandes corporaciones que ponen en riesgo a comunidades y al medio ambiente. Dada la cantidad de temas de abordaje, considero que el Programa Nacional de Derechos Humanos vigente tendrá el último año completo para ser cumplido y robustecer la acción del Estado en su conjunto a favor de la dignidad de las personas. Que 2023 sea un año de más derechos para todas y todos.

Los esfuerzos del Estado para erradicar la violencia feminicida deben ser redoblados y al mismo tiempo dar pie a una normativa que evite poner más en riesgo a las comunidades y al medio ambiente

¿De qué material está hecho el sistema político español?

BEÑAT ZALDUA

El gallinero sigue tremendamente alborotado en Madrid. Esto no es Perú, pero aquí todo el mundo tiene el golpe de Estado en la boca. Hablar es fácil. Hay mucho teatro, mucha sobreactuación prelectoral, pero también hay hueso y sustancia. La crisis institucional de estos días, que estuvo a punto de cruzar una línea roja el pasado jueves con la finalmente abortada interrupción de una votación en el Congreso por parte del Tribunal Constitucional, deja entrever el material del que está hecho el sistema político español y las dificultades que presenta para construir con él una democracia liberal al uso; ya otro día hablamos cuál cosa es esa y si acaso existe en algún lugar.

La derecha, con el paso marcado por Vox, acusa al gobierno de Pedro Sánchez de golpista por aprobar leyes que no le gustan, por pactar con vascos y catalanes, por existir y hasta por respirar. Alberto Núñez Feijóo, que en abril pasado asumió el liderazgo del gran partido de la derecha, el PP, con un talante pretendidamente más moderado, ha tardado medio año en comprar el marco de los aprendices de Steve Bannon: el de Sánchez es, por lo visto, un gobierno ilegítimo.

Pero es que ahora también los socios de gobierno, PSOE y Podemos, acusan de golpista a la derecha por pedir al Tribunal Constitucional –órgano supremo que vela por la adecuación de las leyes a la Constitución– que impidiese al Parlamento votar una reforma legal que, precisamente, debería permitir renovar unos órganos judiciales que llevan cuatro años con el mandato caducado porque el PP prefiere el bloqueo antes que perder su control.

El propio Constitucional frenó la maniobra del PP, o al menos la ralentizó, para evitar protagonizar un titular contundente: Los jueces impiden votar a los representantes de la ciudadanía. En Europa, que tiene a Pedro Sánchez como aliado de peso creciente y que ya ha estirado de las orejas en más de una ocasión a Madrid por el bloqueo del poder judicial, este titular se hubiese girado en contra de la propia derecha.

Esto no quiere decir que el TC vaya a avalar la reforma del Código Penal con la que, a modo de embudo, el gobierno ha tratado de cerrar varias carpetas incómodas de un solo golpe, desde la reforma que le permitiría salvar el bloqueo del PP y renovar parcialmente los órganos judiciales, a los cambios de los delitos de sedición y malversación con los que confía comprar dosis de tranquilidad en Cataluña, dado que son los delitos por los que fueron condenados los líderes independentistas.

El año ha acabado para Sánchez económicamente mejor de lo que esperaba; la inflación general ha bajado algo, un otoño preocupantemente cálido ha permitido ahorrar gas y, en términos generales, se han evitado la recesión y el descalabro largamente anunciados desde algunos púlpitos. Pero como toda Europa, España camina por una frágil arista: si el frío aprieta, las facturas van a generar mucho enfado, va a haber –los está habiendo ya– problemas con el diésel, y a las miles de personas con una hipoteca de tipo variable, la cuota mensual le está subiendo 200 y hasta 300 euros –entre 5 mil y 6 mil pesos–. Hay hogares que van a sufrir los próximos meses, diga lo que diga la macroeconomía.

En este contexto, Sánchez ha sentido la urgencia de despejar de un plumazo su agenda de temas sensibles para encarar con menos lastre el 2023 electoral. Es una jugada arriesgada y puede que se haya pasado de frenada. De momento, un Tribunal Constitucional conservador más inteligente que su contraparte política ha decidido no impedir que el Congreso vote lo que le plazca. Pero puede tumbar perfectamente la reforma de Sánchez una vez aprobada, con menor escándalo.

Hará lo que le parezca y cuando lo considere, porque en España, y aquí llegamos al fondo del asunto, el Estado profundo, con la judicatura al frente, tiene su propia agenda. August Gil Matamala, histórico abogado antifranquista e independentista catalán siempre recuerda con sorna que el problema aquí nunca fue de separación de poderes. Todo lo contrario, el Poder Judicial es extremadamente independiente, probablemente demasiado, teniendo en cuenta su genealogía ininterrumpidamente franquista.

No hace ninguna falta que el PP pida a los tribunales que paren los pies a Sánchez, porque lo harán si de verdad ven en peligro la integridad del Estado español. Así lo hicieron en su día en el País Vasco y así lo han hecho recientemente en Cataluña, a cuyo Parlamento le han impedido en reiteradas ocasiones mantener debates sobre la independencia y hasta sobre la monarquía española.

Siempre con el apoyo y el aplauso del PSOE, que ahora descubre que la judicatura puede también girarse en su contra. He aquí el gran drama de la izquierda española, que en contra de catalanes y vascos jalea a su propio victimario. Es una izquierda cómoda en aquella memorable exclamación de José Calvo Sotelo, “España, antes roja que rota”; incapaz de entender que, como ya propusiera en su día el gallego Castelao, quizás haya que invertir la fórmula: “Sólo rota podrá ser roja”.

This article is from: