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lugar siniestrado. Foto Afp.LA JORNADA DE ORIENTE

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David Brooks

David Brooks

Juan Carlos Rulfo plasma en cinta el miedo y amor que había en las cartas enviadas a los enfermos de Covid-19

JORGE CABALLERO ENVIADO MORELIA MICH.

Hace más de año y medio cuando la gente se tuvo que refugiar en sus casas por la emergencia sanitaria provocada por el virus Covid-19, la voz creativa del cinedocumentalista Juan Carlos Rulfo le susurró que “tenía que hacer algo ante el evento, no podía quedarse ahí”. El resultado de esa propulsión imaginativa es Cartas a distancia, que vio la luz en la reciente entrega del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) y que compite en la sección de documental mexicano.

Cartas a distancia es un valioso testimonio que retrata la forma en que la pandemia transformó las dinámicas de comunicación, traslado, trabajo e interacción. A través de las misivas que envían familiares a sus enfermos, se construye una historia acerca del aislamiento, el miedo y el amor.

Al principio, Rulfo no tenía claro qué iba hacer, pero la pandemia “se fue acercando hasta que de repente la Ciudad de México se quedó vacía, cuando por lo general está atascada, hecha un desastre, un caos, aunque para mí es estéticamente fascinante. Entonces me di cuenta de que ese vacío también me resultaba seductor y todo comenzó con una toma aérea del Zócalo sin gente”.

Cuando el director de En el hoyo pensaba qué hacer con todo lo que pasaba llegó la guionista Melisa del Pozo, quien había visto en la clínica 27 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) cómo los familiares pedían al personal médico que hicieran llegar cartas a sus enfermos de Covid. “Melisa se enteró de todo ese asunto, porque el camillero Jorge es su amigo y él le contó. Todo este aspecto literario, volver a tomar la palabra, informarte por medio de las misivas de la situación que estaba viviendo la sociedad, no tanto lo mediático e infodémico, nos mostró por lo que pasaba la gente”.

Precisamente, que los familiares hicieran el esfuerzo para enviar una carta, un mensaje en un botella de agua para su paciente fue uno de los motores que dieron forma a este trabajo de Juan Carlos Rulfo.

El también director de Del olvido al no me acuerdo reflexionó: “Que todo sucediera tan de repente fue otro de los motivos, porque una película por lo general requiere un desarrollo del proyecto, una planeación, un guion, buscar financiamiento... esto no podía esperar, tenía que arrancar ya. Entonces nos fuimos a las rejas de la Clínica 27, yendo y viniendo a otros puntos de la ciudad para ver las otras historias. Así lo hicimos con un equipo interdisciplinario, con lo mínimo para estar en la calle, cuidarnos mucho, no exponernos”.

Al mismo tiempo al equipo se le acercaba la gente, le contaba por lo que estaban pasando, “qué mejores ingredientes para este trabajo. Es ahí donde me di cuenta de que esta infodemia de los medios se quedaba vacía ante la necesidad de las personas de comunicarse. La película viene a ser nuevamente eso: acercarse a la gente”.

La sociedad está polarizada

Ya con las puertas abiertas y la confianza de las personas todo fluyó, porque, comentó el cineasta, “en México no conocemos a nuestra gente, no estamos cerca de ella. La sociedad está polarizada, con miedo y la pandemia dio en el clavo en ese sentido, en la separación de las comunidades, acentuó la polarización y el temor entre unos y otros”.

El educado ojo de Juan Carlos Rulfo vio que la pandemia “fue muy cinematográfica. Me encantó. Finalmente, esos espacios permiten observar cosas que nunca volverán a suceder y hay que saber verlas sin la nota noticiosa, amarillismo u oportunismo”.

Se refirió al trabajo con Del Pozo. Contó: “Investigó muchas de las cosas para el documental..., aunque sigo con muchísimas preguntas porque generalmente la gente es mi investigadora: toco la puerta, voy a las cárceles o esas cosas.

Además, al no poder meterse a los hospitales, Rulfo utilizó la empatía con la gente; los camilleros, que servían de carteros improvisados, también fueron cineastas, porque grabaron algunas tomas de la llegada del correo a las camas de hospital y el cineasta las montó. “Ves a las personas todo el tiempo escribiendo en sus celulares, ése es su diario, su cuaderno de notas, cómo me gustaría ordeñar todos esos teléfonos. Para Cartas a distancia, les decía a las enfermeras: ‘¿cómo le fue en su día, cuénteme...?’ El problema fue que cuando les pedía que fuera natural siempre se ponían muy impostadas, comenzaban a hacer cosas. En el caso de la protagonista Berenice se soltó el chongo y con ella nos quedamos”.

Se le preguntó a Rulfo que si en ese momento pensó que era el principio del fin. Respondió: “Lo vi con mis hijos, las preguntas y respuestas iban desde: ¿cuando voy a poder ver a mis amigos?, tal vez en dos meses más. La situación se ponía más cruda; ya no iban a ir a la escuela, llegó septiembre y no regresaron. Llegaron las vacaciones y fuimos por ahí cerca. Nos encerramos lo mejor posible. Después llegaron las nuevas variantes. En fin ellos, mis hijos tenían la esperanza de que las cosas se normalizaran algún día, cuándo, no se sabía”.

Fotograma de la película Cartas a distancia.

Rulfo concluyó: “Cómo dice doña Mari en el documental: ‘Pues quién sabe nos están echando inyecciones al aire. Igual me caigo hoy y se llamaba Mari. Todo puede ocurrir, pero que me digan que no voy a poder saludar a la gente, pues cuál será la nueva vida que vamos a tener’. Y eso es un poco el punto porque esa nueva vida ya existe. ‘Aléjate de la calle, no te acerques a ese lugar y ten miedo’. Acabo de regresar de un viaje no turístico por Europa y su realidad es terrible, hay un miedo interiorizado; tu peor enemigo es el vecino porque es quien te delata. No hay desobediencia y ésta es muy importante, porque cuando se rompen las reglas es cuando hay progresiones y cambios en la sociedad”.

MANGA FAIR EN BARCELONA

Crearán puente cultural entre Durango y la Ciudad de México

SAÚL MALDONADO CORRESPONSAL DURAGO, DGO.

Durango busca crear un puente cultural con la Ciudad de México con la finalidad de que los artistas del estado puedan presentarse en la capital del país y viceversa.

En el homenaje que se rindió a cinco duranguenses por su trayectoria artística, José Ramón Enríquez, senador por Durango, señaló que con este puente cultural se logrará que México conozca el talento de esta entidad.

“Este puente cultural busca no sólo traer a Durango artistas de todas las disciplinas, sino también llevar a la Ciudad de México el talento de la entidad, que conozcan en la capital del país a nuestros artistas en música, teatro, danza, pintura, artes plásticas”, señaló.

El estado cuenta con los escenarios adecuados, pero sobre todo gente que busca adentrarse cada vez más en las artes.

“Es importante que el talento local esté presente en todo México y, por qué no, en el mundo”, agregó José Ramón Enríquez.

Pilar Rincón, una de las artistas plásticas más reconocidas en el estado y quien fue homenajeada en esta ocasión por su obra, señaló que el puente cultural que se establecerá es algo que los artistas duranguenses esperaban, porque significa trascender más allá de la entidad.

“No saben cómo lo anhelábamos, porque aquí tenemos gente que sólo necesita una oportunidad para salir y mostrar su talento, y más, tratándose de la Ciudad de México.”

Rincón es alumna de la escultora Guillermina Galaviz, y estudió ese arte, además de pintura y grabado en la Universidad Juárez del Estado de Durango; tiene tres diplomados en arte y humanidades y 10 cursos diversos en artes plásticas y visuales, impartidos por maestros de la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Entre sus exposiciones se cuentan Más allá del color, París y sus rostros, De la muerte a la vida y Al desnudo.

El dramaturgo Víctor Hugo Galván, también homenajeado por su trayectoria, consideró que un puente cultural de esta naturaleza logrará llevar a Durango a la Ciudad de México y al mundo en materia artística.

Tierra del cine

Señaló que la entidad ha sido reconocida como Tierra del cine sobre todo por su cielo, que permite rodar escenas al aire libre sin contratiempos; sus sets cinematográficos y escenarios naturales han atraído a muchos grandes productores.

“Aquí viene todo tipo de artistas, pero también tenemos talento que espera una oportunidad, no sólo en el cine, sino en el teatro y eso podemos llevar a la Ciudad de México”, señaló.

Víctor Hugo Galván ha presentado con éxito durante más de 30 años su monólogo El hombre de la rata, que está cerca de las mil representaciones no sólo en Durango, sino en ciudades del país, Perú, Ecuador, Colombia, Cuba, Panamá y Venezuela.

Ha participado en varias producciones cinematográficas y en series, la más reciente es Somos, de Netflix.

Nimbe Salgad también recibió homenaje por su trayectoria. También es profesora de la Escuela Superior de Música de la Universidad Juárez del Estado de Durango.

Interior del teatro Victoria, con 200 años de antigüedad. Foto Saúl Maldonado

La poeta Julia Leyva y el músico Raúl Sepúlveda, también recibieron tributo por su trayectoria.

José Ramón Enríquez Herrera reiteró que Durango tiene los mejores escenarios para todas las áreas de la cultura, entre ellos destacan los teatros Victoria y Ricardo Castro, que tienen una gran historia.

El primero, de estilo italiano, tiene más de 200 años. Fue fundado por Juan José Zambrano como su foro particular y familiar, pero desde hace 100 años se abrió al público. Con una muy buena acústica, tiene capacidad para 160 personas.

El teatro Ricardo Castro, de estilo afrancesado, fue inaugurado en 1924. La obra de cantera fue realizada por el profesor Benigno Montoya. Posee un busto de Mozart y la escultura en bronce del pianista y compositor Ricardo Castro.

En la sala principal luce dos murales del escenógrafo Octavio Ríos, y en el segundo nivel cuenta con una sala de exposiciones y una cafetería con un pequeño escenario. Su capacidad es para mil personas.

Durango ha dado al mundo grandes personajes, recordó José Ramón Enríquez, como Francisco Villa, que cuenta con un museo en el palacio de Zambrano, que durante muchos años fue sede del gobierno del estado.

Ahí se puede conocer la historia de Villa, cuyo nombre real fue José Doroteo Arango Arámbula, su faceta de bandido, padre amoroso, trabajador del campo, del mujeriego y del general.

El recinto tiene 13 salas y varias áreas para exposiciones, así como conferencias.

Celebra el Festival Sónar el retorno de la música en vivo; reunió a 300 artistas y unos 14 mil asistentes

La inteligencia artifi cial tocó sin la presencia humana

EUROPA PRESS BARCELONA

El Festival Sónar 2021 clausuró el sábado por la noche una edición de cuatro días en Barcelona por la que pasaron 300 artistas e investigadores de 25 países y con un programa de unas 100 actividades, que reunieron a unos 14 mil asistentes en los festivales AI and Music S+T+Arts Festival, el 27 y 28 de octubre, y SónarCCCB, los días 29 y 30.

El pianista y compositor Marco Mezquida agotó las entradas para el concierto inaugural del festival que ofreció el día 27 en L’Auditori de Barcelona, con el espectáculo Piano+AI, informaron los organizadores.

El festival tuvo una ocupación “bastante alta y muy alta” el jueves y el viernes, respectivamente, y también agotó las entradas para el sábado.

El Sónar destacó que esta edición puso la inteligencia artificial como sujeto de debate en el ámbito musical y reivindicó el arte, la ciencia y la educación como “vías interesantes y prometedoras para el desarrollo de nuevos proyectos creativos”.

Celebró que la música y las artes en vivo hayan “regresado fuertemente revalorizadas como derecho y necesidad social y cultural” después de meses de cierre obligado por las restricciones derivadas de la pandemia de Covid-19.

El epicentro del Sónar se ubicó en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB), que tuvo un aforo limitado a mil 900 personas por día y conciertos, conferencias, talleres y proyecciones de las 11 hasta las 24 horas.

De miércoles a sábado, hubo 40 propuestas y diyei sets a cargo de artistas como Koreless, Tirzah, Leon Vynehall, Space Afrika, Object Blue A/V Live, Il Quadro di Troisi, Die Wilde Jagd y DJ Nigga Fox; y talento estatal y local como BFlecha y Rakky Ripper.

El festival también colgó el cartel de “agotado” las dos noches del OFFSónar By Night en el Poble Espanyol, que ha recuperado el clubbing de la mano de Nina Kraviz y Laurent Garnier, que compartieron escenario con artistas barceloneses como Ángel Molina.

Holly Herndon, María Arnal y Tarta Relena, Mouse on Mars, Hamill Industries & Kianí del Valle, AWWZ, Nabihah Iqbal and Libby Heaney y Reiko Yamada son otros de los artistas que estuvieron en el escenario en esta edición, que también tuvo un diyei set a cargo de una inteligencia artificial que tocó sin asistencia humana.

ENTREVISTA IVÁN CEPEDA, SENADOR POR EL POLO DEMOCRÁTICO DE COLOMBIA Triunfo popular, que avance el pacto de paz pese a 300 asesinatos

Posible, que la centroizquierda gane en las elecciones de 2022

El legislador esboza el ambiente que fl oreció en su país a la sombra del tratado que puso fi n a la guerra que duró casi medio siglo. Por ejemplo, con los paramilitares –expone– se busca no una negociación política, sino un diálogo para que acaten la ley

BLANCHE PETRICH

Se acerca el quinto aniversario de los Acuerdos de Paz en Colombia, pactos que el presidente Iván Duque y el entorno de Álvaro Uribe han intentado destruir, bloquear, desprestigiar. Y que, sin embargo –asegura el senador por el Polo Democrático Iván Cepeda– han tenido efectos políticos, culturales y sociales que permiten pensar, “por primera vez en la historia republicana del país, en la posibilidad del triunfo de una coalición de centroizquierda” en las elecciones de marzo de 2022.

Cepeda, quien forma parte del directorio del Pacto Histórico, una de las dos coaliciones que enfrentarán a conservadores y uribistas en los próximos comicios, describe en entrevista con este diario el nuevo ambiente que floreció en Colombia bajo la sombra del acuerdo que puso fin a la guerra que se prolongó casi medio siglo: un realineamiento de todas las fuerzas en favor o en contra de la paz; un clima de continuas movilizaciones y protestas sociales; un sistema de justicia transicional inédito que, pese a navegar a contracorriente, ha tenido grandes avances.

El simple hecho de que los acuerdos se mantengan, luego del asesinato más de 300 ex guerrilleros y líderes sociales, “es un triunfo del pueblo colombiano”, que lo sostiene “a pesar de todo”. Y ese “a pesar de todo” significa que de enero a septiembre de 2021 se registran al menos 50 masacres, centenares de asesinatos de defensores del ambiente y los derechos humanos. “Lo que el gobierno llama paz con legalidad son palabras huecas.”

Lo que propone para las elecciones del año próximo: apuntalar un proceso de paz que ponga en marcha procesos que incluyan al Ejército de Liberación Nacional (ELN), a grupos del paramilitarismo que sobreviven y a sectores del narcotráfico. “No a través de una negociación política, por supuesto, sino de procesos de sometimiento pacífico a la ley.” (El Pacto Histórico es una amplia alianza de fuerzas de izquierda que van desde Colombia Humana, del ex alcalde de Bogotá Gustavo Petro, hasta el partido de las ex FARC, pasando por Polo Democrático, Unión Patriótica y otros. Coalición de la Esperanza agrupa a liberales, verdes y fuerzas de centro, e incluye a figuras como Ingrid Betancourt.)

Lo que falta: paramilitares y narcotráfico

–En la ecuación para ampliar los efectos de los Acuerdos de Paz incluye al paramilitarismo. ¿Cómo? –En el discurso de Uribe, este proceso de los acuerdos paz ha sido como entregarles el poder a los ex guerrilleros. Pero lo cierto es que Uribe, en su momento, quiso entregar literalmente el país a los paramilitares. De ello resultó que hubo entre 30 y 40 por ciento de los congresistas elegidos por los paramilitares. Y que terminó con 70 de ellos en las cárceles. Si se logró juzgar por sus crímenes a los paramilitares fue por los movimientos de víctimas, jueces y fiscales honestos, los periodistas valientes, que promovieron el examen de la verdad y que logramos parar la paramilitarización de Colombia. –¿Y cuál es el proceso que se propone con ellos? –No una negociación política, sino un diálogo para que acaten la ley.

Mentira impúdica, lo que dicen Uribe y Duque de que los convenios de paz crearon un sistema de impunidad

Si dejan las armas, dejan el negocio y contribuyen a reparar a las víctimas, obviamente el procedimiento judicial tiene que ser benigno. –Sobre el tema de la configuración política ¿Cómo va el proceso con las ex FARC? –El balance es variopinto. [El partido] Comunes es el resultado político del acuerdo de paz. Su incorporación ha tenido problemas y retrocesos, no sólo por los ataques, sino por la propia lógica después de 50 años de guerra. Pero la realidad es que están en el Congreso y las otras fuerzas políticas, incluso la extrema derecha, han tenido que acatar. –El acuerdo de paz colom biano no se pactó sobre amnistías ni a guerrilleros ni a represores del Estado. ¿Cómo va ese proceso de justicia transicional? –Es un sistema de justicia inédito. La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) es un tribunal con una comisión de la verdad y una unidad de búsqueda de personas desaparecidas, fruto de un acuerdo entre adversarios que vienen de una guerra muy larga.

“Se le ha querido mostrar como un tribunal sin garras y ni dientes y no es así. En sus salas se están procesando siete macrocasos. Están siendo juzgadas 13 mil personas ligadas a los crímenes de guerra que se cometieron durante el conflicto armado, en su mayoría guerrilleros, pero también 2 mil 500 militares y civiles.

“Ya hay resultados muy importanes. Por ejemplo, el juicio contra los jefes de las FARC por secuestro ha permitido documentar hasta 20 mil casos, algo que no había podido ser establecido. Los ex guerrilleros han hecho una petición pública de perdón a las víctimas y lo que sigue es la sanción.

“Hay otro auto que se sigue contra el ejército por los falsos positivos. Son 6 mil 402 personas, en su mayoría jóvenes que fueron

El congresista colombiano, cuando participó en el seminario internacional Los partidos y una nueva sociedad, con el tema Crisis del neoliberalismo, el 23 de octubre pasado. Foto José Antonio López

prácticamente secuestrados por el ejército, ejecutados, vestidos con uniformes de la guerrilla y sus cadáveres presentados como bajas terroristas. Además se ha documentado que los cementerios en las zonas de conflicto fueron utilizados para esconder en fosas comunes los cuerpos de víctimas. La unidad de búsqueda ha desenterrado e identificado a centenares de personas. Yo mismo, con mi equipo, investigué seis de esos cementerios con más de dos mil casos.

“La comisión de la verdad es el tercer elemento de este sistema y se apresta a presentar su informe, al menos 10 mil testimonios de víctimas del conflicto armado.

“Cuando terminen su trabajo vamos a tener, yo no diría que toda la verdad, pero sí avances supremamente importantes. Por eso es una mentira impúdica lo que dicen Uribe y Duque de que los acuerdos de paz crearon un sistema de impunidad. Es exactamente lo contrario.

“Uribe teme a la JEP. Cuando se termine este proceso se revelará lo que ocurrió durante su gobierno con los falsos positivos, algo monstuoso. Por eso ha emprendido una batalla feroz contra los magistrados y la Corte Suprema de Justicia.

“Por otra parte, su pupilo, Duque, ha conducido un gobierno desastroso. Todas las políticas que ha querido poner en marcha han recibido un rotundo rechazo popular. Como su intento de gravar los alimentos básicos en un país con 40 por ciento de pobreza y 15 por ciento de desempleo.

“Esto desató un ciclo de protestas sociales que sigue hasta ahora. Y a ello respondió con una violencia inusitada, echando mano del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), que ya es sinónimo de violación a los derechos humanos, que ha dejado sin ojos, muertos o asesinados a decenas de jóvenes.” –Muy importante también hacer el balance de lo que ha significado el movimiento por los derechos humanos en Colombia. –En pocas palabras: sin el movimiento de los derechos humanos en Colombia muchas comunidades habrían desaparecido, muchas más personas habrían muerto. El movimiento ha sido un cinturón de protección y contención para muchas poblaciones y ha develado el rostro criminal del poder político y del conflicto armado en Colombia.

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