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Philippe Orliange
LaCumbre entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe (UE-ALC) fue una oportunidad para fortalecer el diálogo de alto nivel entre la UE, América Latina y el Caribe. Abre una oportunidad para una nueva agenda relevante para ambas regiones con foco en la inversión solidaria y sostenible, al servicio de una transición social y ecológica, base para un Pacto de Confianza e Inversión Solidaria (Pacis) entre la UE y América Latina.
El Pacis se fundamentaría en tres componentes principales: social y medioambiental, democrático; y de convergencia normativa y financiera. Estos ejes están alineados con la implementación de la Agenda 2030.
En la parte socioambiental, lo que se busca es compatibilizar un crecimiento bajo carbono, la protección de los recursos naturales y de la biodiversidad con la inclusión social y económica. En la parte normativa, el hecho de que un número creciente de países de América Latina esté integrando la OCDE abre nuevos espacios de convergencia de normas y políticas públicas. En el ámbito financiero, es importante destacar que Europa sigue siendo el mayor inversionista en América Latina, con un perfil de inversión bastante importante.
El Pacto se beneficiará de la existencia en ambas regiones de instituciones financieras públicas y privadas que ya tienen una agenda de sostenibilidad y de la transición social y ecológica. Esto impulsa el fomento de mayores alianzas entre estos organismos financieros y sus contrapartes europeas, para promover la ‘ecologización’ de los sistemas financieros y generar un efecto dominó observable en el ahorro.
Europa y América Latina han sido pilares del multilateralismo y es un valor compartido entre las dos regiones. Hoy en día, la UE puede y debe ser para América Latina y el Caribe un aliado natural e importante. Para ello, es indispensable trabajar juntos alrededor de nuevos conceptos.
RODRIGO CONTERO PEÑAFIEL rcontero@gmail.com
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