Artes & Cultura del 14 de abril de 2013

DARDOS. David Santillán confronta y debate la realidad política. >> 4-5 >> CINE. ‘Réquiem’,

la psiquiatría y lo sagrado.

>> 7 Ecuador, domingo 14 de abril de 2013

Nº 810

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‘El poder no puede estar estático’ Leonardo Valencia habla sobre la edición de su novela y los peligros del irrespeto a las voces críticas.

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diálogo

Ecuador, domingo 14 de abril de 2013

‘No me siento un desterrado’ Construir una novela que fuera autónoma por sí misma. Ése fue el objetivo que se planteó el escritor ecuatoriano Leonardo Valencia, en el momento de trabajar ‘El desterrado’.

No cayó en contar una obra autobiográfica, tentación que aparece, sobre todo, cuando escribe la primera novela.

Radicado en España, llegó hace unos días a Quito para presentar dicha obra, que circula bajo el sello Punto de Lectura. En la actualidad, el que sus pares conozcamos su propuesta literaria lo alienta.

Esto porque su trabajo tiene gran aceptación en el exterior, pero, curiosamente, a nivel nacional todavía no existe una adecuada difusión de su pluma.

Su visita fue de ‘médico’. Muy rápida. Por suerte hubo tiempo para que ‘Artes’ conversara con Valencia, quien pese a que vive en Barcelona, siempre está de vuelta.

REDACCIÓN ARTES ·

“La cuestión no es publicar, sino escribir”, manifestó en una anterior conversación. ¿Por qué es importante reeditar?

Volver a editar significa que algo hizo el escritor para ameritar una reedición. Ésta es la prueba de fuego para una escritura que no estaba hecha para una sola publicación. Siempre será lo más importante la escritura, pero eso no quita que exista una gran satisfacción de que un texto pueda tener nuevos lectores. Además, esta edición me anima mucho porque considero que va a ser la primera, siendo la cuarta,

que realmente va a llegar al público ecuatoriano.

Perfil

¿Por qué lo afirma?

Porque la primera edición fue una española, publicada en 2000, y llegaron muy pocos libros al Ecuador. La segunda edición salió a través de una colección de la Biblioteca de la Municipalidad de Guayaquil donde, lastimosamente, el libro no ha sido visibl; la tercera salió por medio de Alfaguara sobre literatura ecuatoriana, donde se la incluyó en un mismo tomo junto a otras novelas, por lo que también no hubo visibilidad. Entonces, con esta edición de Punto de Lectura, pienso que va a darse el primer gran encuentro entre los lectores ecuatorianos y ‘El desterrado’.

Ya sucedió con ‘La luna nómada’ el año anterior. Para Ud. siempre es importante el encontrar la difusión apropiada ante el público nacional…

Así es. Mi obra ha tenido acogida afuera, pero no se ha difundido del todo en Ecuador. Como escritor, es fundamental que circule mi obra en mi país. El hallar nuevos lectores me llena, mucho más si son nacionales. Por eso trato de publicar en editoriales que se impriman y distribuyan en Ecuador, de manera que el libro pueda llegar con mayor facilidad.

Ahora vive en Barcelona, y la novela la escribió cuando estaba en Lima.

Sus salidas son por otras razones pero, ¿se ha sentido un desterrado?

ESCRITOR. Presentó su nueva edición de ‘El desterrado’ en Quito.

LEONARDO VALENCIA

Justamente, eso lo cuento en el posfacio que incluyo, el cual lo escribo varios años después bajo otras perspectivas que da el tiempo, porque los escritores también aprendemos de los que hemos publicado.

Esta novela navega entre 1994 y 1998, periodo en que residía en Lima.

Ahora me doy cuenta de que la obra está muy imbuida por la realidad que experimenté como un ecuatoriano que vivía en Perú, en medio de una guerra (la del Cenepa). Nunca me pasó nada, pero sí noté una presión en el ambiente.

El peso de la historia y del conflicto cayó sobre mí. Esa realidad influyó mucho. Pero para nada me siento un deste-

Escritor ecuatoriano (Guayaquil, 1969). Posee un doctorado en Teoría de la Literatura por la Universidad Autónoma de Barcelona y una maestría en Edición por Publish/Oxford Brooke University.

Su obra abarca al cuento, la novela y el ensayo.

Entre sus publicaciones están: ‘La luna nómada’ (cuentos), ‘El desterrado’, ‘El libro flotante de Caytran Dölphin’, ‘Kazbek’ (novelas), y ‘El síndrome de Falcón’ (ensayo). En Barcelona, ciudad donde reside, dirige el Laboratorio de Escritura.

rrado, por lo menos no en el sentido del personaje, aunque hay que entender que el destierro es una condición humana. No hay que olvidar que nuestro paso por la Tierra es breve.

Al prologar esta edición, el escritor peruano Fernando Iwasaki la califica como “obra abierta”. ¿Esto significa que estará sujeta a cambios y ampliaciones al igual que sus cuentos de ‘La luna nómada’?

Esta edición, obviamente, fue releída y corregida, pero es ya la versión definitiva.

Hubo ligeros cambios, pero no existe ese factor progresivo que aparece en ‘La luna nómada’. Sin embargo, la novela tiene otro sentido de lo abierto, aunque ya sea una edición cerrada, definitiva.

Su madre es italiana, ¿de qué manera influyó esto para ambientar la novela?

Hay todo un escenario mitológico familiar muy importante. Mi madre falleció cuando yo era muy joven, tenía unos 16 años, y esta novela la escribí entre los 25 y 28 años, por lo que de alguna manera se trató de recuperar un espacio, un imaginario, de preguntas y respuestas que nunca pude tener de mi madre. ‘El desterrado’ se ambienta en el ascenso del fascismo hasta 1938, año en que estalla la Segunda Guerra Mundial y en el que, coincidencialmente, nació mi madre. Ella vivió su infancia en pleno conflicto y su adolescencia en tiempos de posguerra, por lo que la obra responde a esa realidad.

En ese sentido, se puede decir que Leonardo Valencia es muy parecido a Orlando Dalbono, personaje de la novela, quien tiene una gran necesidad de conocer los relatos sobre sus padres…

Bueno, Orlando es calvo y yo no (sonríe por un instante, antes de continuar con su respuesta). De hecho, escogí ese nombre porque la ‘o’, que es doble, me daba la sensación de calvicie. En fin, claro que hay cierta relación, pero para nada existe una proximidad entre el personaje y yo. La novela no tiene nada de autobiográfico, por

Ecuador, domingo 14 de abril de 2013 Como escritor, es fundamental que circule mi obra en mi país”. lo menos de forma directa. Esto porque pienso que toda obra tiene algo del escritor, hasta las comas son autobiográficas, pero en este caso no me enfrasco en lo testimonial.

Sin duda, no busca aleccionar, pero, la primera lección que arroja el libro es que el ser humano puede desterrarse sin desplazamiento geográfico…

Este personaje, Orlando, nace en Roma y vive en Roma, pero se ha nutrido de una serie de mitos familiares, como todos.

Entonces, la carga de imaginación y de relatos es tan poderosa que puede aislar a una persona sin que se mueva a ningún lugar: se puede ser un desterrado interno. También hay otra cuestión. Cuando ocurren las cosas no siempre se está en el lugar preciso. Estamos, muchas veces, desterrados de los acontecimientos históricos, aunque siempre vivamos sus consecuencias. Esto también se evidencia en la novela. Por ejemplo, Orlando quiere vivir al margen de lo que sucede. Trata de alejarse del ascenso fascista, no quiere inmiscuirse con el régimen de Mussolini, dictador que por entonces despertaba pasiones, pero llega un momento en que la realidad le toca la puerta, así quiera evadirla.

Como señala, el ambiente se recrea en medio del totalitarismo y autoritarismo. ¿Piensa que en la actualidad todavía se mantienen estas formas de gobernar? ¿Aún esa realidad golpea nuestras puertas?

diálogo El escritor no puede afincarse en el poder político”. ¿Qué papel juega la literatura dentro de la democracia?

En ese sentido, la literatura siempre ha tenido una actitud crítica. El escritor no puede afincarse en el poder político. El escritor debe mantener su independencia, a riesgos de que eso implique muchas veces marginaciones. En la literatura escuchamos voces de individuos que quieren transmitir su visión de ciertas cosas y, además, existen los lectores, quienes quieren conocer varias opiniones. La novela, justamente, es un género que permite la convivencia de voces, eso genera lo que se conoce como la ambigüedad de la novela, pero esa ambigüedad –denominada así por Octavio Paz– es lo que hace que existan diversos puntos de vista. Una novela con un solo discurso se mata a sí misma.

Más allá de su enorme peso, ¿el personaje del Viejo Elefante es la metáfora de la buena memoria y la sabiduría?

No sé si como metáfora. A ver, tiene los dos elementos: dicen que los elefantes se caracterizan por su buena memoria, y el personaje tiene cierta sabiduría. Lo que pasa es que el personaje es muy gordo y grande, es como un paquidermo. Lo vi más como el personaje mediador de la historia, además de que la cuenta. Y el hecho de contar historias va articulando la visión realidad, si bien ésta no se puede cambiar, pero sí la percepción de la misma. Y la memoria es la que va modificando las cosas.

Eso es una cosa también propia de la condición humana. Y pienso que siempre deben existir voces críticas, en todos los regímenes. Ningún gobierno, ninguna forma de poder, sea del discurso que sea, debe pretender tener el poder absoluto.

Siempre debe primar el respeto por los individuos y hay que generar formas de vida para que exista una verdadera participación, porque un solo grupo no puede ser dueño de la verdad, eso es terrible. Lo que sucede es que el totalitarismo, hoy en día, no tiene una figura definida, salvo algunos gobiernos, pero hay discursos de poder que quieren ser los dueños de la verdad. La convivencia es democracia. Ésta no es una cuestión numérica que te dice quién “ganó”.

Entonces, ¿nunca hay que olvidar el pasado?

Considerando su respuesta, ¿cómo mira al Ecuador?

El ensayo está terminado, espero que circule a finales de este año, y gira sobre un grupo de obras de Peter Mussfeldt. La novela la sigo trabajando. En un inicio pensaba que iba a ser corta, pero se me alargó. Me pasó lo mismo que con ‘Kazbek’. Sigo disfrutando de ese trabajo y su investigación. Espero terminarla pronto.

Pienso que Ecuador necesitaba una serie de cambios y eso es muy positivo. El problema es cuando el poder se anquilosa. El poder no puede estar estático dentro de un grupo de personas, porque termina reproduciendo lo que precisamente criticaba. Me preocupa que no se estén respetando las voces críticas.

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El lenguaje corriente es muy tramposo.

Dividimos en pasado, presente y futuro, pero éstas son categorías gramaticales. La literatura se somete a retos de lo temporal. El pasado lo elaboramos en el presente, por eso es importante la memoria que, por si fuera poco, será leída en el futuro.

Entonces, todo está conectado. El pasado no ha pasado, siempre está actuando de manera permanente en nosotros. Además, como decía Germán Espinosa (escritor colombiano): “La muerte está en el futuro, no en el pasado”.

Para cerrar, en nuestra última conversación (‘Artes’, 2012/01/22) adelantó que trabajaba en dos proyectos, un ensayo y una novela, ¿cómo van?

ddelatorre@lahora.com.ec

REPRESENTANTE. Radicado en Barcelona, el escritor es uno de los referentes de la literatura ecuatoriana contemporánea.

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da

Santillán, o la trinchera del pincel REDACCIÓN ARTES • ¿Hasta dónde llegan los

tentáculos del poder? Ésa es la primera pregunta que surge cuando se admira la propuesta pictórica del artista ecuatoriano David Santillán.

Un segundo cuestionamiento que nace, tras la observación, es cómo esas ‘pulposas’ prolongaciones vencen al tiempo y, pese a las posibles enseñanzas que deja la historia, continúan extendiéndose de manera hipnotizante.

David toma el riesgo y, a través de sus pinceles, confronta y debate la realidad política. Esto lo hace desde una postura estética elaborada con altura, tal como se debe realizar en “democracia”.

No hay resentimiento en ‘Gris’ –así se llama la serie de Santillán–. Por el contrario, se encuentra una mirada reflexiva y crítica, que invita a un verdadero y activo diálogo con el espectador. Esto, sin duda, porque genera más preguntas que respuestas.

Tres años ha tardado en dar cuerpo a los 16 cuadros, de distintos formatos y trabajados con óleos sobre lienzos, que conforman esta obra, la misma que se presenta a manera de instalación pictórica en un hotel que fue víctima del fuego, ubicado en la Plaza de Santo Domingo (Quito), que limita con la casa donde habitara el expresidente García Moreno, quien es uno de los personajes centrales de la exposición.

El público puede contemplar ‘Gris’ tan sólo el 18 de abril, desde las 19:30, en el inmueble quemado de la calle Rocafuerte No.1345, en el Centro Histórico.

Concepción

“En esta época lo político está mediatizado”, opina David Santillán, quien insiste en que el éxito del Gobierno se sostiene gracias a la gran plataforma propagandística que impera en los medios de comunicación, los mismos que son “tan criticados actualmente”.

“No hay nada de malo en disentir y pensar de forma distinta. Muchas personas pueden compartir criterios, pero se autocensuran porque tienen miedo de decir lo que sienten. También hay muchos que optaron por la comodidad. Cuántos colegas artistas, y de otras ramas de trabajo, no dicen nada con tal de mantener un empleo”, expresa David con palabras determinadas, las mismas que van al pulso de lo plasmado por sus pinceles.

Para ejecutar sus cuadros, el artista investigó acerca de la historia del Ecuador republicano, centrándose en los periodos gobernados por García Moreno, sobre todo, y Eloy Alfaro. Aquellas lecturas le permitieron analizar y comparar qué diferencias y similitudes aparecen hoy en día.

El arte es el paso que libera, que franquea, que abre un camino a la sorpresa de aquello que está por venir”.

FERNANDO ALBÁN SOBRE ‘GRIS’.

“Lo primero que hay que entender es que quienes tienen el poder siempre manipularán la historia a su conveniencia.

Aquí, por ejemplo, te venden la idea de un anticolonialismo y a través de eso construyen un discurso”, explica David, quien no sólo se apropia de la memoria, pues da un salto para interpretarla.

Aparte de las lecturas, él sostiene su propuesta por medio de fotografías antiguas. Éstas sirven de referencias que dan paso a una serie de metáforas estéticas que cuestionan al poder y su aplicación.

Serie ‘Gris’

“La historia, cuando es reflexión crítica sustentada en los restos del pasado, tiene una función de conocimiento”, escribe sobre la serie ‘Gris’ el poeta Iván Carvajal, quien es uno de los encargados de reinterpretar los trazos del artista.

El texto de Carvajal –incluido en un catálogo bajo el título ‘David Santillán: la desacralización del poder’– establece que el artista “nos convoca a un acto liberador, para nada catártico. Su descarnada exhibición del poder y del poderoso obliga a pensar sobre ellos y sus efectos en la vida cotidiana, que es el espacio de nuestra liberación, a condición de no ocupar ni solios de poderosos ni sillas para sumisos”.

Criterio similar lo comparte Fernando Albán Rodas, quien señala en su análisis que también se suma al catálogo, que “el arte es el paso que libera, que franquea, que abre un camino a la sorpresa de aquello que está por venir”.

Albán remata su texto ‘Política del arte y arte de la política’ reflexionando sobre cómo “la política convertida en soberanía tiene como preocupación fundamental el cuidado normativo de la vida, mientras que la política entendida como arte apela al coraje, pues no es la vida y su control lo que se impone, es más bien el mundo, que se comparte en común, lo que está en juego”.

En resumen, muchas cosas están en ‘juego’, pero ¿cuáles? El lenguaje artístico ayuda a la comprensión. Por supuesto, tal como lo entiende David al manifestar la cualidad didáctica que puede encontrarse desde una expresión artística, en este caso la pintura que, en conjunto, conforma una gran instalación pictórica.

Santillán, por ejemplo, sintetiza el vacío del dominio a través de ‘Soledad del poder’, donde sillas plásticas, que apelan

‘Mi poder’

a lo desechable, rodean al trono presidencial desolado.

Un trono ocupado se avizora en ‘Mi poder’. Allí los tentáculos del poderío –que toma forma en el ‘poderoso’– son las extensiones que hipnotizan y aletargan. Dichas extremidades, metáforas de la saturación mediática, entran por cualquier parte del cuerpo.

El paralelismo entre pasado y presente, reflexionando sobre qué cosas han cambiado y cuáles se mantienen, quedan marcados en obras como ‘Muere tirano’,

‘Cábalas’ y ‘Off side’. En este último cuadro se hace una alusión al García Moreno que presidió su funeral.

Pero el entorno, tanto humano y como espacial, tampoco pasa desapercibido.

La serie ‘Círculo rosa’, compuesta por el esbozo de los cuatro frentes de la Plaza Grande, marca el silencio cementerial existente, así como el difícil acceso al círculo de poder (no todos pueden ocupar los puestos que, curiosamente, son ‘desechables’). Por su parte, ‘Políticos’ devela algunos rostros que sí han tenido acceso a

os

Ecuador, domingo 14 de abril de 2013 Santillán nos convoca a un acto liberador, para nada catártico. Su descarnada exhibición del poder y del poderoso obliga a pensar sobre ellos y sus efectos en la vida cotidiana”.

IVÁN CARVAJAL SOBRE ‘GRIS’.

Perfil

DAvID SAnTILLán Artista, restaurador y museólogo ecuatoriano (Quito, 1968). Ha participado en diversas exposiciones, individuales y colectivas, tanto a nivel nacional como internacional. Entre sus reconocimientos están: Primer Premio Salón Leonardo Tejada, Municipio de Latacunga (2010); II Premio categoría Pintura, Bienal Internacional de Arte Contemporáneo, Universidad Autónoma de Chapingo, México (2008); Mención de Honor, XLvIII Salón de Octubre, Guayaquil (2006); I Premio Salón de Artes Plásticas, Museo de la Ciudad de Riobamba (2005), entre otros.

‘Muere tirano’

‘Políticos’

Más imágenes en: www.lahora.com.ec

‘Patria’

los límites de la cerrada redondez. Estos están retratados con el uniforme de los militares del Ejército liberal de antaño: será porque ellos, actualmente, son los “liberadores”.

No puede faltar la patria (tierra sagrada). Recostada y el rostro vendado con el escudo de armas, mientras al “Pichincha decora”. Será que “ya es de todos”. Realmente se podrá acariciar ese cuerpo desnudo que falta abrigar o, simplemente, se continuará cobijando bajo simple retórica. ddelatorre@lahora.com.ec

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‘Soledad del poder’

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biblioteca

Un ensayo imprescindible OSWALDO PAZ Y MIÑO J. • En la biblioteca de

la UDLA encontré, del novelista francés Émile Salomon Wilhelm Herzog –nacido el 26 de julio de 1885 en Elbeuf, Normandía y fallecido en París el 9 de octubre de 1967– la siguiente frase: “La lectura de un libro es un diálogo incesante en que el libro habla y el alma contesta”.

De la conmovedora e intimista cita de quien fuera conocido universalmente por el pseudónimo de André Maurios y autor entre otras obras de ‘Estudios literarios’ (1946) y ‘La lectura, mi dulce placer’ (1958), quiero partir para exponer ante vosotros un tomo clásico, un ensayo imprescindible de Harold Bloom: ‘Cómo leer y por qué’.

El referido texto fue escrito por un genio de carne y hueso, pensando en todos sus pares, esos que encontramos en el acto de leer algunos de los personalísimos fundamentos de nuestra existencia, a veces incomprendidos, criticados, acometidos y envidiados también, porque así como la fe es un don, el amor por la lectura también unos lo tienen y otros no. Hay quienes se declaran ateos de ella y viven para contarlo.

Dicho lo dicho, haciendo en el mencionado libro recorridos profundos y señalando identidades con rotulador negro, repito un pensamiento que escribí para el artículo de la semana pasada, que se aplica concretamente, hoy, a una de las ideas centrales con las que el maestro Bloom convoca a los neófitos a integrarse a la fraternidad universal de lectores: “Todo lector cuando bien ejerce su oficio, se mira en los textos”, lo que desde la palabra del ensayista comentado se lee así: “Encontrar, en lo que sintamos próximo a nosotros, aquello que podamos utilizar para sopesar y reflexionar, y que nos llene de la convicción de compartir con el texto una naturaleza única, libre de la tiranía del tiempo”.

Para Bloom, desde mi visión, leer envuelve siempre una actitud subversiva, insumisa, rompedora de todos los esquemas y rutinas que agobian al ser humano en el transcurso de la vida. Por tanto se ha de leer con pasión, fuerza, deseo, lujuria, vehemencia, adicción, habitualidad y urgencia, para ganarle tiempo al tiempo, y vida a la muerte y a los folios del destino. ¿Cómo leer y por qué, 307 páginas publicadas por Anagrama que contienen las preferencias esenciales y las razones de un crítico literario, sabio y consagrado, que ha influido en la literatura mundial? Por su palabra y su análisis pasan en la obra de marras autores de la talla de Shakespeare, Cervantes, Hemingway o Whitman, y otros que son pilares de la literatura universal de todos los tiempos.

“Toda consideración sobre cómo y por qué leer novelas debe incluir el Quijote de Cervantes, la primera y mejor de todas, de hecho más que una novela. Para mi crítico cervantino predilecto, el vasco Miguel de Unamuno, el libro era la verdadera Biblia española y ‘Nuestro Señor don Quijote’ el auténtico Cristo. Si se me permite ser totalmente secular, para mí Cervantes es el único rival posible de Shakespeare en la literatura de invención de los últimos cuatro siglos.”

(Pág. 152) “Al buen entendedor pocas palabras”.

F. Hidalgo y Á. Márquez Editores ‘Contrahegemonía y Buen vivir’ es un libro donde se presenta una serie de reflexiones, desde el ámbito de las Ciencias Sociales y Políticas. Se observa la etapa posneoliberal abierta en la mayoría de países del continente, desde una lectura que se cuestiona si se está ante la construcción hegemónica de continuidad o, al contrario, de rupturas firmes a favor de un nuevo orden popular basado en el buen vivir.

ECUADOR

Cincuenta sombras de Grey, E.L. James °(Grijalbo).

El invierno del mundo, Ken Follett °(Plaza&Janés).

Claudia Gray (Montena). °Medianoche, Cincuenta sombras más oscuras, E.L. °James (Grijalbo).

Baila, baila, baila, Haruki Murakami °(Tusquets).

El tango de la guardia vieja, Arturo °Pérez-Reverte (Alfaguara).

Una vacante imprevista, J.K. Rowling °(Salamandra).

Alfaro en la sombra, Gonzalo Ortiz °Crespo (Paradiso).

FUEnTE: MR. BOOKS

ARGENTINA

°Cincuenta sombras de Grey, E. L. James (Grijalbo).

°Cincuenta sombras más oscuras, E. L. James (Grijalbo).

°Cincuenta sombras liberadas, E. L. James (Grijalbo).

°Amor, Isabel Allende (Sudamericana).

FUEnTE: PUnTOS DE vEnTA DEL GRUPO ILHSA.

COLOMBIA

°Ahí le dejo la gloria, Mauricio Vargas (Planeta).

°Cincuenta sombras de Grey 1, E. L James (Random House Mondadori).

°Memorias de un sinvergüenza de siete suelas, Ángela Becerra (Planeta).

°Cincuenta sombras más oscuras 2, E. L James (Random House Mondadori).

FUEnTE: LIBRERíA nACIOnAL

ESPAÑA

°Pídeme lo que quieras, ahora y siempre, Megan Maxwell (Planeta).

°Cincuenta sombras de Grey, E. L. James (Estuche 3 Vol.).

°El maestro del Prado, Javier Sierra (Planeta).

°El cumpleaños secreto, Kate Morton

Datos del autor HAROLD BLOOM

nueva York (1930). Es profesor de Humanidades en la Universidad de Yale y de Inglés en la Universidad de nueva York. Ganador del McArthur Prize Fellow, entre otros galardones, y miembro de la American Academy, es autor prolífico y una de las personalidades más influyentes en la actualidad dentro del mundo de los estudios literarios.

opymj2008@gmail.co

UNA HISTORIA NO CONTADA

Revista Nacional de Cultura La edición número 18 de esta publicación presenta varios artículos vinculados con el tema Glbti y su tratamiento en la literatura, en la historia local, en la fotografía y en el arte. La revista abre sus páginas a Pedro Artieda, Fernando Iturburu, Fredy Lobato, Boris Torres y Oliver Hölcke quienes, con absoluta libertad, han expuesto sus ideas y conceptos sobre este tema que genera controversias, pero que invita al debate.

CNC

LOS MÁS VENDIDOS

FUEnTE: LIBRI MUnDI

VITRINA DE LIBROS CONTRAHEGEMONÍA…

Ecuador, domingo 14 de abril de 2013

(Suma).

FUEnTE: CASA DEL LIBRO

MéxICO

Janne Teller (Seix Barral). °Nada, °Un beso en París, Stephanie Perkins (Plataforma Neo).

°El principito, Antoine de Saint-Exupéry (Emece).

°Partials: La Conexión, Dan Wells (Vergara y Rivas.

FUEnTE: LIBRERíA GAnDHI

Nota: listado de libros de ficción de EfE, excepto Ecuador.

Director encargado: Francisco vivanco Riofrío Editor: Agustín Garcells Cordón Redactor: Damián de la Torre Ayora Diseño: Ma. Leonor Oviedo, Luis Alberto Aspiazu Composición electrónica: Pantone Impresiones Edita: Editorial Minotauro S.A. Correspondencia: Planta Diario La Hora Panamericana norte km 3 1/2 Fax: 247-5724 casilla 17-17-243 CCI cultura@lahora.com.ec Quito, Ecuador

Ecuador, domingo 14 de abril de 2013

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bambalinas

RECOMENDADOS CLÁSICO BIOGRÁFICO

‘Gandhi’ (1982) es una película dirigida por el británico Richard Attenborough, que narra la vida del líder hindú Mahatma Gandhi. Está protagonizada por Ben Kingsley. La cinta tuvo gran acogida y se alzó con ocho de los 11 premios de la Academia (Oscar) que disputó.

Sinopsis La historia de este líder pacifista arranca desde su estancia en Sudafrica, donde es un joven abogado formado en Inglaterra.

Allí defiende los derechos de los hindúes.

Después regresa a la India para predicar la resistencia no violenta contra el Imperio Británico. La presencia de Gandhi juega un papel primordial por la independencia de su país, convirtiéndolo en un hito de su pueblo y del planeta. El filme se transmite mañana por HBO HD (canal de televisión pagada), a las 21:00, y permanecerá en cartelera por esta cadena hasta fin de este mes (revisar programación).

PELÍCULA. ‘Réquiem’ recrea una verdadera y muy polémica historia acerca de un exorcismo en Alemania en los años 70.

La psiquiatría y lo sagrado RICARDO SEGREDA • De todos los temas trata-

dos en el cine, probablemente no haya uno tan difícil ni tan delicado como la religión. Si un cineasta proclama la existencia de Dios corre el riesgo de enajenar a agnósticos y ateos. Si hace lo mismo como ficción o mito, se arriesga a ofender a los creyentes.

Otra manera de tratar este tema es sólo sugiriendo la posibilidad de lo religioso, respetando las creencias de uno y otro. En muchos sentidos, éste es un sendero admirable, en cuanto que demuestra respeto y sensibilidad.

Esta ‘tercera manera’ es evidente en ‘Réquiem’, que se presenta este mes en la Casa Humboldt, basada en una verdadera y muy polémica historia acerca de un exorcismo en Alemania que recibió mucha atención en los años 70. Provocó mucha discusión acerca de la moralidad de ritos religiosos como medio de tratar enfermedades mentales.

En 1968, Anneliese Michel, adolescente de una familia católica, conservadora y devota, experimentó una crisis epiléptica durante la cual oyó voces siniestras, según afirmó. Inicialmente, fue tratada con medicinas, pero unos años después los síntomas, con voces y visiones demoníacas, regresaron en forma de legión.

La medicina fue ineficaz, o quizás Michel

optó por no tomarla. En 1973, sostuvo que poderes demoníacos dentro de ella le impedían tocar el Rosario o la Cruz e hicieron de la oración una penosa experiencia. Gradualmente sus padres aceptaron su idea de estar poseída y solicitaron un exorcismo de la parroquia local, que les fue negado porque el sacerdote estaba seguro de que el problema era psiquiátrico, no satánico.

Los padres persistieron y al fin se encontraron con un clérigo que aceptó que se trataba de posesión diabólica. Anneliese Michel fue sometida a varios exorcismos durante los cuales rechazó alimentos y bebidas. Murió finalmente de una combinación de desnutrición y deshidratación. Esto condujo a un juicio contra los padres y el sacerdote, acusados de homicidio negligente.

‘Réquiem’ es la tercera película sobre esta historia que se ha hecho en los últimos 10 años. Sin embargo, aunque una de éstas fue hecha en Hollywood con un alto presupuesto y otra fue una película independiente con recursos limitados, las dos presentaron una interpretación muy sensacionalista, más explotación que exploración. Por contraste, ‘Réquiem’ parece haber sido hecha como un reproche en contra de estas películas, así como de la famosa obra de 1973 , ‘El exorcista’, rica en horror visual y que quizás influyó en

‘Réquiem’ PAís: Alemania AñO: 2006 CAlifiCACióN: **** TiEMPO: 128 min.

DirECTOr: Hans-Christian Schmid GuiON: Bernd Lange rEPArTO: Sandra Hüller, Burghart Klaußner, Imogen Kogge BUEN RETORNO

el estado mental de Anneliese Michel.

El director Hans-Christian Schmid y el guionista Bernd Lange, de ‘Réquiem’, son tan opuestos al sensacionalismo que ésta concluye sólo con la iniciación del exorcismo, y –curiosamente– explica el destino trágico de Anneliese Michel sólo con títulos. Así, no se presenta el horror de las semanas finales de su vida ni hay dramatización del juicio legal que siguió.

Entonces, ¿cuál es el objetivo? En la película, Schmid y Lange no ridiculizan ni rechazan la religión pero sugieren, con la ayuda inapreciable de sus excelentes actores alemanes y un guion inteligente, que los problemas de Michel, llamada Micheala Klinger en la película, se originaron en la relación que tuvo con su madre, que es presentada como fría y hostil bajo el pretexto de ser piadosa.

El problema, desafortunadamente, está en que, al fin, la ambigüedad de los artistas llega a ser una evasión, que también indica que la manera “sugestiva” de una película acerca de religión puede ser insatisfactoria. Sin embargo, los actuación, la dirección y el diálogo son magníficos, lo que hace que ‘Réquiem’ sea digna de la atención de cinéfilos serios. rick.segreda@gmail.com

El grupo Bon Jovi regresó con un nuevo material que, si bien dista de sus sonidos iniciales, no defrauda por el alto trabajo de composición.

‘What about now’, decimosegundo disco de estudio de la banda, fue lanzado en marzo y tuvo una buena recepción, pues combina una gran variedad de tonos que alcanzan para todos los gustos.

El álbum contiene 12 canciones, donde se evidencia que su trabajo musical ha sabido adaptarse a los gustos, los mismos que cambian en el tiempo.

Esta entrega cuenta también con una edición de lujo, que incluye tres canciones más, además de una edición ‘deluxe’ japonesa, que alcanza las 17 melodías. ddelatorre@lahora.com.ec

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galería

‘TAKA’

Ecuador, domingo 14 de abril de 2013

‘PLITVICE’

Arroyo: la libertad de la mancha

REDACCIÓN ARTES • Arranca la charla sobre pintura. Después, de repente, cambia de tema y habla de literatura. Poco a poco las letras son suplantadas y la imagen gana a la palabra: llega la hora de opinar sobre fotografía. Y así, una breve conversación con Eduardo X. Arroyo puede convertirse en un abanico de temas. En cada uno de sus actos, sin duda, prima la libertad.

Es por eso que no sorprende el trazo, la mancha y el dibujo libre que se recoge en su obra más reciente, exhibida en Ileana Viteri Galería de Arte.

Treinta trabajos que dan cuenta de su solvencia y madurez, donde sus elementos de inspiración saltan en una rayuela poética visual. Así aparecen siluetas femeninas, rostros desvanecientes, paisajes difuminados, entre otras figuras, que cobran vida en las orillas de la abstracción gestual que propone.

La obra que antecede a la hoy expuesta se caracterizaba por la sobrecargada tonalidad azul. Tal como cuenta Eduardo, por entonces otro tipo de experiencias fluían. “Cierta calma primaba”.

Esta vez la intensidad del rojo y la vivacidad del verde predominan. En menor medida asoma el amarillo. Arroyo se jugó por lo cálido. “Hay una mayor alegría en mí, por eso asoman estos colores”, dice el artista, quien no hace una serie de manera secuencial y no escoge con antelación los tonos.

“Todo depende del estado del ánimo”, manifiesta con picardía este amante de la fotografía, la naturaleza y de los paisajes del inglés William Turner.

Cargada de una sensibilidad tierna, aquella que permite que todo transcurra en una atmósfera lúdica, Eduardo devela la conciencia que prima en sus pinceles y que se impregna en sus óleos y acuarelas. Esto se puede admirar en su obra ‘Herido’, donde un árbol es violentamente atacado por el rojo.

Pese a esa potencia inquisidora, se genera cierta catarsis que evoca a la esperanza de la vida.

Sin duda, la mancha es la mejor de las cómplices de Arroyo, quien halla plena libertad de interpretación –y comunicación-– en la misma.

ddelatorre@lahora.com.ec

‘HERIDO’

‘AMBIENTE DE ESPERANZA’

‘PAREJA’

La exposición estará abierta TOME NOTA hasta el 4 de junio, de lunes a viernes de 09:30 a 14:00 y de 15:00 a 19:00, y los sábados de 11:00 a 14:00.

Dirección: Av. González Suárez N 31-150, Edificio Atrium, Quito.