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Once periodistas están en el sistema de víctimas y testigos

Los periodistas de Ecuavisa, TC Televisión, Teleamazonas, de Radio Democracia-Exa y Carlos Vera recibieron artefactos explosivos. Fueron cinco envíos, según las primeras investigaciones. El comunicador Lenin Artieda fue el primero en ser afectado. Ningún grupo delincuencial se atribuyó los atentados. La Policía y la Fiscalía investigan el caso por terrorismo. 5

El toque de queda se levantó en cuatro

En Estados Unidos, a la crisis del Silicon Valley Bank le ha seguido la del First Republic, y en Suiza tambalea el Credit Suisse, abocándonos a una sacudida del sistema financiero mundial; en tanto, bajan los precios del petróleo y sigue la guerra en Ucrania contra la invasión rusa; al mismo tiempo, y sin tregua, en Ecuador la oposición busca deponer al Presidente y la violencia social atraviesa la vida cotidiana de la ciudadanía.

La violencia es parte de la cotidianidad. Sin embargo, es importante entender cómo ésta, y el miedo que genera, ha reconfigurado la vida de todos. Mas entablar un juicio político al presidente Lasso es lo que interesa

La corrupción, como sabemos, con sus lodos nos embarra a todos. No hay poder del Estado capaz de arrancarla de nuestra cotidianidad. ‘Cambalache’, el famoso tango de Enrique Santos Discépolo en el siglo pasado, sigue vigente: “El que no llora no mama y el que no afana es un gil”. Y aún más: este tiempo político ecuatoriano “es un despliegue / de maldá insolente, ya no hay quien lo niegue”.

Nada parece funcionar. Algunos parecen ignorar que el país está afectado por la pobreza y la desigualdad y, sin misericordia, por la proliferación del crimen transnacional organizado y el miedo a la inseguridad, un terreno fértil para los abusos a los derechos humanos. Las mejores personas, con las mejores intenciones, haciendo todo lo posible, no pueden arreglar este sistema de absurdos.

El cara a cara entre Gobierno y oposición pone fin al juego de máscaras que hemos visto hasta hace muy poco. La opinión pública es zarandeada por una insólita violencia verbal. Existe una necesidad inmensa de dirección y guía. Se ha escrito tanto, se ha teorizado tanto y se ha hablado tanto que solo un gran pacto entre los agentes sociales, económicos y políticos sería una oportunidad de salida racional y justa. Si es que todavía la decencia existe entre nosotros.

Confianza para el cambio

La peor consecuencia de los escándalos de corrupción y de las recientes crisis políticas y sociales en América Latina es la falta de confianza que enfrenta la región. Philip Keefer, asesor económi-

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