Artes del 4 de agosto de 2013

>>PROTAGONISTA.

Mauricio Vargas ficciona la historia sin dejar la realidad. >> 5 >>CINE. La nueva

mujer en la gran pantalla japonesa.

>> 8 Ecuador, domingo 4 de agosto de 2013

N潞 826

www.lahora.com.ec

Alfonso Endara Confrontaci贸n desde el detalle y la sutileza.

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ensayo

Ecuador, domingo 4 de agosto de 2013

Poesía ecuatoriana del siglo XXI Civilización o barbarie

FERNANDO LÓPEZ MILÁN · Ser civilizado, para Bertrand Russell, es tener amplitud de miras. La actitud correlativa es la apertura a los demás y el interés por comunicar algo que sea relevante para las personas con quienes se convive. Una sociedad civilizada es tolerante y comunicativa. Y su grado de civilización no depende del progreso económico o tecnológico, sino de su capacidad para facilitar la vida en común.

La literatura, como intento de comunicación, es una práctica civilizada. De ahí que el barroquismo y el hermetismo resulten más bárbaros que civilizados. No sólo por los obstáculos que una propuesta estética de esta naturaleza impone a la comunicación, sino porque su reducida capacidad comunicativa conduce al elitismo. Hay, detrás de las propuestas barrocas y herméticas, un fuerte sentimiento de vanidad y egocentrismo, una actitud de rechazo y desprecio a los otros, incluso, a la humanidad en su conjunto.

La vanidad intelectual, sin embargo, no es más que un esfuerzo de sublimación de las carencias y limitaciones intelectuales, que se expresa como una desproporción entre la ambición estética y su realización.

Esto ocurre, probablemente, con la mayoría de los libros de poesía escritos, en lo que lleva el nuevo siglo, por los jóvenes y menos viejos poetas ecuatorianos. Los unos y los otros, al igual que ciertos poetas maduros, han mostrado, en reiteradas ocasiones, sus malas costumbres; su ‘poesía’ equivale a escupir en plena calle o a limpiarse la nariz al estilo futbolista. El escupitajo y este tipo de poesía son malas costumbres porque impiden la cercanía y, en consecuencia, la comunicación.

Reflexión

Muchos de estos poetas están influidos por las ideas estéticas de Ezra Pound, a quien, como se recordará, Robert Graves le negaba la condición de poeta.

Una de las ideas de Pound es que todo lo existente es materia poética. Aupados

en esta idea, que recupera una de las características esenciales de la poesía latina, los poetas de la última época se han empeñado en utilizar en sus obras ideas y elementos de distintas disciplinas y campos del conocimiento, cuya comprensión les está negada.

La pseudo-erudición es una constante de la ‘nueva’ poesía que se escribe en Ecuador. Ejemplos: “¡Qué fugaz es el Principio/ de la Incertidumbre!” (César Eduardo Carrión); como si el hecho de que la varianza de la posición de un electrón sea inversamente proporcional a la dispersión de su velocidad (y viceversa), que tal es el mal llamado principio de incertidumbre de Heisenberg, pudiera calificarse de fugaz; o “¡Qué breve es el azar en los niveles subatómicos!” (César Eduardo Carrión), como si el azar pudiera ser breve o prolongado y no la coincidencia de cadenas causales. Y todo esto aderezado con algunas citas en lenguas muertas (doblemente muertas a causa de las citas), como acostumbraba a hacer Pound; autor al que los poetas aludidos imitan de la peor manera. Citas: “poiesis sine phantasmata, “, “spiritus/phantasticus” (César Eduardo Carrión). ¿Conjuros de Harry Potter?

Son cosmopolitas estos nuevos poetas. Tienen el don de las lenguas: “…y un sol es/ apenas/ un punto (como un hueso) alargado acariciando/ flores, / no la fleur,…” (Juan José Rodríguez). Y darían todo lo que tienen en el mundo porque alguien los comparase con los poetas beat: “En la mente, recojo la estrella. ¿Sirve la estrella, / Jollie? / Jollie Sue de los muertos ¿te sirve así la estrella?” (Juan José Rodríguez). Pero, a lo mejor, quiere otra cosa Jollie. Además, ¿por qué no Susana o Alejandra? Seguramente, los hijos de nuestro sofisticado poeta deben llamarse ‘Jordis’, ‘Kevines’ o ‘Melanies’.

También, este poeta hace su contribución a la teoría del azar: “…Sería más rápido/ que confiarse al azar: esa serie de puntos/ vacilantes, / sobre una magazine de pasatiempos,…” (Juan José Rodríguez).

AUTOR. Ha publicado tres poemarios. Se desempeña como catedrático.

Y a la teoría de la relatividad: “Según la relatividad y su teoría: / el movimiento es arduo e imagínese cuánto más lo/ será” (Juan José Rodríguez). No decimos nada, por ahora, acerca de “las grullas (que) fabricaban origami” (Juan José Rodríguez), aunque esta frase es una clara muestra de cómo la literatura realiza lo imposible

o, dicho de otro modo, de cómo el papel aguanta todo: “-abrázame-/delira Venus/ desde su último teorema” (Juan Carlos Miranda), “No reveles elíxir de beatitud inefable sobre la atmósfera del pozo levita un diminuto grabado de Cártago (sic) sustancia aérea que alude en su fonda” (Juan Carlos Miranda).

ensayo

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El ‘yoísmo’ es otra de las malas costumbres de los poetas del nuevo siglo”.

Una sociedad civilizada es tolerante y comunicativa”.

Del barroquismo (estoy dudando, ahora, de si éste es el término adecuado), o la mescolanza, pasamos al terrorismo. Para el poeta terrorista, leer poesía es peligroso y tener buena memoria puede ser motivo de una ejecución sumaria: “el día en que olvidemos para qué servía la poesía/ los verdaderos poetas se levantarán de sus tumbas/ contentos por haber sido olvidados/ y por fin Rimbaud podrá enseñarnos/ a usar armas/ para matar a quienes recuerden sus versos malditos/ ese día/ dispararemos todos contra todos/” (Freddy Peñafiel). El poeta terrorista no ceja en su empeño y, fanático como es, nos lanza la siguiente ráfaga de metralla: “silénciame/ usa las armas que tienes guardadas en tu cuerpo/ dispárame cuando esté distraído/ llama a los cascos azules” (Freddy Peñafiel). Cuidado, pues, con la poesía y la amada.

Algunos de estos poetas han tomado como modelo a Leopoldo María Panero.

Y han replicado sus intenciones y prácticas contrarias a la comunicación, es decir, a la posibilidad de mantener una convivencia civilizada. Decía Panero, en su prólogo a los poemas de Lear: “…los que, como yo, Lear y muchos otros, no tenemos la menor intención de comunicar con ustedes”. Y la misma pretensión

se advierte en el poeta que es capaz de escribir: “Claudicamos/ en tratados de rosas / donde nada era cuerdo” (Paúl Puma), y en aquel que pregunta “¿alguna metonimia / fugaz por la ventana?” (Vicente Robalino).

Temas recurrentes

El ‘yoísmo’ es otra de las malas costumbres de los poetas del nuevo siglo; costumbre que se basa en la idea de que todo lo que nos ocurre es trascendente y, por tanto, de interés y conocimiento obligatorio para los demás. Olvidan, estos poetas, las palabras de Emily Dickinson: “Qué tristeza ser alguien, / qué público: como una rana / decir el propio nombre junio entero / para una charca admiradora”.

Además, como la mayoría de veces su presunción es equivocada, los poetas, sobre todo los más jóvenes, al advertir las limitaciones de la anécdota personal, recurren al ‘malditismo’ y a su referente de moda: Bukowski. La pose de poeta maldito, de antihéroe, sustituye la falta de voz propia.

Voz que, con dificultad, estos poetas están construyendo, descubriendo. Mientras lo hacen, sin embargo, no reparan en el hecho de que escribir mal (incluso con errores de sintaxis y faltas ortográficas) es un acto de descortesía, de prepotencia: “Respiraos conmigo el aire viciado que os atrajo/ por envilecer el coloso del Cofre Áureo” (Claudia Minuche). ¿Respiraos?

El otro no cuenta. Y como no cuenta le entregamos poemas ‘subversivos’ o ininteligibles, porque los otros son la plebe a la que hay que despreciar y, en el mejor de los casos, desconcertar con un lenguaje pretencioso, oscuro, cacofónico: “me excuso ante mis muertos / -que de todos son los vivos- / les suplico a sus hálitos, / a las psicofonías heredadas, / que me enrumben y me enviuden / de tumba en tumba, / por la guadúa guadañera que me aguarda” (Diego Cazar).

Las poetas escriben, especialmente, sobre temas eróticos. Y se hallan empeñadas en mostrar a quien quiera leerles lo audaces y ultraliberales que son; a tal punto que no dudan en reivindicar el incesto: “¡Oh papilas del incesto!/ Ella y yo/ hace tiempo que degustamos/ de nuestras campanillas. / Qué deliciosa la carne de mi pequeña” (Mayra Estévez).

Enfrascadas como están en su empeño de escandalizar, les cuesta abandonar la palabra estridente y el detalle pornográfico o de mal gusto: “arranco de su vulva / el hilo que precede a un apósito ignífero de sangre” (Mayra Estévez), “Como un falo de heces sodomizo la soledad en la que habito” (Mayra Estévez). Una poeta dice haber fornicado con tantos dioses que no podría decir exactamente con cuál de ellos ha estado, otra nos confiesa que “sac(a) todos (sus) huecos al sol” (Silvia Mariposa del Castillo) y otra, finalmente, que se encaja en un mástil: “Despego/ y me encimo en tu mástil / como aguja en hilo /me envuelvo en tus alas/ como piola en trompo” (María Fernanda Espino-

sa). ¡Mástiles y trompos! El problema no está, como afirmaba Susan Sontag, en la pornografía como tal sino en su calidad; porque lo pornográfico, en tanto forma extrema del pensamiento, está presente en todas las culturas y no es sólo un producto del capitalismo, según pretende la crítica histórica de la pornografía.

Tampoco falta la estética de telenovela con el gastado tópico de ‘la otra’: “Yo soy la amante y lo digo enaltecida, / que mi voz la escuchen las otras y aquella” (Kira Martínez). Y el lugar común de la ‘inocencia perdida’, donde se encuentran la música de Máximo Escaleras con las novelas de ‘Buen Hogar’: “Perdió la inocencia, niña aún. / Un lobo viejo y enfermo la atrapó. / Perdió la palabra, dejó de sentir la cadera. / Congeló su corazón para no sentir dolor. / Se puso a caminar, a errar en la vida. / Ansiosa buscaba a otros. / Lo que en ella se había roto” (Matilde Almeida). Kitsch, ni más ni menos; es decir, mal gusto, más anacronismo, más sensiblería.

Para poner nuevamente las cosas en su sitio, conviene citar a Ledo Ivo, quien considera que la poesía es “el arte de componer versos” y que su misión es “ayudar a vivir, servir a la vida, al hacer que el hombre tenga conocimiento de sí mismo y de su condición terrena”. Ésta, por sus firmes intenciones comunicativas, es una actitud auténticamente civilizada. La actitud que los simples y toscos mortales exigimos de todos los bárbaros y bárbaras que se meten a poetas. fernandomilan1964@yahoo.es

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galería

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Los rostros de la confrontación dad religiosa, que estatizan el día a día.

REDACCIÓN ARTES • A través de sus retraInspirado en la Palabra de Dios, el tos no sólo evidencia el recogimiento de su reflexión, sino que expresa esa rup- maestro cuestiona el confort de la materia tura de silencio una vez que las ideas sobre el espíritu: “Siempre busco retracobran sentido luego de ser, minuciosa- tar el alma, lo hago a través de la mirada de mis personajes”, dice determinante, mente, caviladas.

Es así como Alfonso Endara (Quito, mientras inquiere sobre la minimización 1960) plasma su obra, donde el confron- del mundo interior.

Por medio de los ‘rostros’ que exhitar, desde el detalle y la sutileza –como una be en trabajos como ‘Yo también pronunciada arruga, una viva gota soy un ángel’ o ‘Dignidad’, donde de sudor o un objeto de gran carga El Dato el afro y el indígena, la mujer y el simbólica-, se transforman en los eleanciano, respectivamente, plasmentos que rompen el mutismo del El aniversario del ma los ‘rastros’ que une a todos: la cara a cara con las debilidades. artista también recordará en igualdad como seres humanos que Sus metáforas, sus colores, sus se galerías de arte sobrepasa etnias, género y edades. líneas, construidas desde la magis- de Bogotá (Colombia) y Igualmente, continúa su ‘rastro’ tralidad del dibujo, columna verte- Puerto Vallarta ciuda- de confrontación en el momento de bral que llena de vida a su pintura, (México), des donde desapueden admirarse en ‘Rostros, ras- rrolló su carrera. cuestionar el poder instaurado desde el papado, por ejemplo, en obras tros y raíces: 30 años de confrontacomo ‘Fin de la rebelión y engaño’. ción’, que se presenta en las salas “¿Por qué será que los países donde el Eduardo Kingman y Oswaldo Guayasamín de la Casa de la Cultura Ecuatoriana Vaticano ejerce una gran soberanía coinciden en ser los llamados tercermundis‘Benjamín Carrión’, en Quito.

La exposición celebra las tres décadas tas?”, se pregunta el artista, no sin antes de trayectoria artística de Endara, así como aclarar que el sometimiento del poder sintetiza la propuesta que le ha acompaña- llega desde todas las religiones, no sólo do en su camino, donde la figura humana la católica, pues “todas han adaptado la Palabra de Dios a su conveniencia para ha sido su principal protagonista.

Claro que su obra no se reduce a un conseguir réditos económicos”.

Endara, por su propuesta y visiones, simple trazo anatómico, pues ésta encierra una serie de señas que evidencian es un artista que no se alimenta tan solo aquellas situaciones que pasan inadver- de la fe, sino de un estudio profundo de la tidas, quizás, por la comodidad desde la Biblia, que le permiten dejar un testimoindividualidad, o por el sometimiento del nio a través de los pinceles. ddelatorre@lahora.com.ec poder construido desde la institucionali-

‘Yo también soy un ángel’

‘Alabanzas a ti’

‘El instante entre el abrir y cerrar de ojos, estás preparado’

‘Dignidad’

‘Mariposas y máscara de dolor’

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protagonista

Vargas nos deja su ‘gloria’

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Mauricio Vargas

REDACCIÓN ARTES • Conversar con Mauricio Vargas Linares es como hojear las Perfil páginas de una enciclopedia histórica o, mejor aún, es como escuchar un gran parlante –esto no sólo por la gran estatura Escritor y periodista colombiano (Bogotá, 1961). que ostenta, sino por los conocimientos Actualmente se desempeña como columnista del que encierra– que no se limita a repetir diario El Tiempo. A inicios de los 90’ fue Ministro de Comunicaciones de su país. Ha ganado en siete datos y fechas, sino que los reflexiona y ocasiones el Premio Simón Bolívar y en 2001, su libro los plasma de una forma humana a través ‘Tristes tigres’, recibió el Premio de Periodismo Planeta. Publicó la novela ‘El Mariscal que vivió de prisa’. de la palabra.

Esto lo hace desde una trinchera más lúdica: la ficción. Lo que da cuenta de que aprendió el ingenio estratégico de los de los 191 años de aniversario del encuenpersonajes que involucran su literatura tro entre Bolívar y San Martín y, por si (grandes héroes de la Independencia sud- fuese poco, dos días antes la Universidad americana), haciendo la historia mucho Andina revelaba un nuevo hallazgo sobre la mencionada entrevista, investigación más entretenida.

“El problema es que de niños nos pre- encabezada por su compatriota, Armansentaban unos héroes patrios como óleos do Martínez.

Dibujando una sonrisa, Mauricio exmal pintados en textos escolares y, de adolescente, si te interesaba la historia, presa que toda esa coyuntura lo alegra y, descubrías autores que los satanizaban; en medio de la efusividad de sus manos, pero, en ninguno de los casos te enseñan recuerda que “el 25 de julio, que se presenta el libro en Guayaquil, coincien las escuelas la parte humana de los mismos”, explica Mauricio, La novela circula de con la llegada de la goleta Maen las principatras tomar un sorbo de café como les librerías del cedonia al puerto ecuatoriano”, es país. Tiene un decir, es el día de la llegada de San todo buen colombiano. costo de $24.

Martín.

Pero, ese ficcionar la historia Acerca del nuevo descubrimien¿no caería en desinformaciones?

“Para nada, si se tiene clara la idea entre to de la Universidad Andina expresa que ficción y fantasía. Porque al ficcionar no “queda definitivamente claro que la endejas la realidad a un lado, mientras que trevista entre San Martín y Bolívar no fue con la fantasía te sometes a un plano ne- por Guayaquil, porque su situación ya estaba resuelta. La cita se dio por ver qué tamente imaginativo”, opina.

Es así como publica su segunda nove- sucedía con el Perú”. la que gira sobre esos grandes personajes “Bolívar, sin duda, miró como algo que dieron ‘el puntapié inicial’ de nues- inadmisible la propuesta de San Martín tras repúblicas. Antes lanzó ‘El Mariscal de traer un principado al Perú. Hay que que vivió de prisa’, sobre Antonio José recordar que el argentino llegaba siendo de Sucre; ahora trae ‘Ahí le dejo la gloria’ traicionado, enfermo y decepcionado. Le (Planeta), que trata sobre el encuentro de cedía la gloria a Bolívar. Lo curioso es que Simón Bolívar y José de San Martín en ambos buscaban dar el cierre definitivo al Guayaquil. reinado de España en Sudamérica, pero quien lo consigue es Antonio José de Sucre”, reflexiona Mauricio.

Encuentro La charla entre Mauricio y revista Artes coincidió con el natalicio de Simón Bolí- La gloria var: 24 de julio, horas antes de la presen- San Martín es un maestro militar, capaz tación de la novela en Quito. de armar los mejores ejércitos por su exSentados alrededor de una mesa de la periencia y los recursos que posee. De cafetería del hotel donde se alojaba, que alma cálida, pero de temperamento frío, hervía mucho más que un sauna, se le re- se muestra reservado ante toda situación. cordó al también periodista colombiano Por su parte, Bolívar es extrovertido. Un todas las coincidencias que rondaban so- caribeño con aires de machista. Su formabre su paso promocional por Ecuador: el ción es mucho más amplia en la política. nacimiento del ‘Libertador’, las fiestas de Desde esos rasgos el escritor humaniza Guayaquil por su Fundación, las vísperas al ‘Protector’ y al ‘Libertador’, a quienes la

gloria les sonrió ante sus logros y después les dio la espalda, para redimirse tras sus muertes y laurearles.

“Lo que hay que preguntarse es quién realmente se llevó la gloria. Sucre y Bolívar quisieron salir de América, pero la muerte, en distintas circunstancias, se los negó. Ahora, en vida, por lo menos San Martín, quien vivió muchos años para su época, si bien no lo cobijó la gloria, por lo menos sí vivió el respeto de todos quienes iban a verlo en Francia”, indica Mauricio, quien siempre buscó “dejar la objetividad periodística a un lado, para encontrar el equilibrio novelístico”, al dedicarse a la literatura.

“Me dediqué a escribir novelas porque sentí que me repetía a diario. Iba a realizar un artículo y me daba cuenta de que ya lo había hecho antes, con otros actores y otros escenarios. Si te fijas, es cierto eso de que la historia es un constante retorno”, afirma con convencimiento.

A diferencia del periodista y el historiador, que en el presente y el pasado buscan al ganador del hecho (respectivamente), Mauricio aclara que como novelista le interesó más el supuesto “perdedor”.

Me dediqué a escribir novelas porque sentí que me repetía a diario”.

“John Lynch (biógrafo de estos padres de la Independencia) dice que para entenderlos no hay que dejarse seducir por Bolívar. Seguí su consejo y no caí en los encantos del caraqueño”, explica. También, exalta a Manuelita Sáenz, a quien considera como “la promotora del encuentro”.

Por lo pronto, el autor anda preparando una tercera entrega, “no se descarta una cuarta”, donde piensa abordar a Bolívar de frente, porque antes “lo hice a través de su heredero, Sucre, y también de su émulo, San Martín”.

Al preguntarle si se hizo novelista para alcanzar la gloria, Mauricio responde, tras soltar una sonrisa que: “Con 30 años de ejercicio periodístico razonablemente conocido en Colombia, me da libertad paro no buscar reconocimiento. Lo que me encanta es que la gente que quiero me diga que le gusta mi novela, ésas son mis grandes glorias”. ddelatorre@lahora.com.ec

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biblioteca

Un testimonio muy personal Si el maquillaje de las librerías garantizase que en ellas se vendan buenos libros y trabajen libreros enterados de su oficio, muchas de las tiendas que ofertan lecturas serían indispensables como lo son en realidad aquellas que, sin mucho boato y sin gran publicidad, exhiben requeridos títulos y buenos autores de todos los tiempos a una legión de fieles compradores que, con frecuencia y confianza, las visitan.

O sea que de fachadas no se trata. En las librerías de tradición y linaje el tema no es de formas, es de fondos y de personal enterado de su arte, por haber enrolado a libreros de oficio, amantes de su tarea, cultivados en su trabajo, no a improvisados en su quehacer.

“Si los libreros supiesen de los libros como los buenos bibliotecarios, si en vez de decir “no tenemos” empezaran por hablar de otras obras del autor, de otros autores que abordan el mismo tema, de las ediciones anotadas o de una mejor traducción, los índices de mercadeo de libros subirían notablemente. En ambos casos (bibliotecario y librero) hay que unir la buena atención. Como decía alguien que alargaba las palabras: la dedicac(c)ión a los libros es un aposto al lado (Iván Egüez: ‘La lectura, esa íntima batalla’, pág. 83).

Dicho lo dicho no hay razón de callar, en Librería Rayuela hay continente y contenidos. Libros que no dejan lugar al desperdicio, dicho de otra manera, es claro que quien la administra sabe qué compra, trae y vende.

En la mesilla de novedades, que es la preferida de todo lector, encontré, entre

OSWALDO PAZ Y MIÑO J. •

Revista literaria Se encuentra en circulación el cuarto número de esta propuesta cultural. En esta edición se insertan temas literarios, ensayos, cuentos, artes plásticas y publicaciones recientes editadas por la CCE. Entre los temas destaca el amplio espacio dedicado al poeta argentino Juan Gelman, quien visitó al país por el encuentro Poesía Paralelo 0. Un tema que llama la atención es el referente a la intervención militar a la cultura, hace 50 años (1963), acontecimiento recreado por el director de la revista Patricio Herrera Crespo. CCE

Los mÁS VENDIDOS ecuador

Dan Brown (Planeta) ° Inferno, ° Cincuenta sombras de Grey, E.L. James (Grijalbo) ° La reina descalza, Ildefonso Falcones (Grijalbo) ° El mundo que he vivido, Diego Cordovez (Latina) Fuente: Libri Mundi

° Cincuenta sombras de Grey, E.L. James (Grijalbo)

Dan Brown (Planeta) ° Inferno, ° Cincuenta sombras más oscuras, E.L.

Datos del autor

James (Grijalbo) ° Memorias de un sinvergüenza de siete suelas, Ángela Becerra (Planeta)

Paul Auster

Nueva Jersey (1947). Novelista, poeta, guionista y licenciado en Literatura Inglesa comenzó su andadura como autor escribiendo poesía y ensayos en diversas revistas. Influido en sus inicios por Dostoievsky, sus obras, caracterizadas por una desconcertante mezcla de realismo y fantasía, han obtenido el aplauso de la crítica, que también recibió con gran entusiasmo sus colaboraciones como guionista con el director de cine Wayne Wang en las películas ‘Blue in the face’ y ‘Smoke’. Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2006.

Fuente: Mr. Books

ARGENTINA

Dan Brown (Planeta) ° Inferno, ° Cincuenta sombras de Grey, E. L. James (Grijalbo) ° Cincuenta sombras más oscuras, E. L. James (Grijalbo) ° Cincuenta sombras liberadas, E. L. James (Grijalbo) Fuente: puntos de venta del Grupo ILHSA.

otras, la joya que comparto con ustedes hoy, un testimonio personal de un escritor fascinante, de esos que seguimos con devoción e ilusión, Paul Auster, ‘La historia de mi máquina de escribir’, una obra que en primera edición se publicó en 2002, que ha sido reeditada por Seix Barral de forma primorosa e ilustrada por Sam Messer, por Editorial Planeta Colombia 2013. Novísima de todas maneras. Un tomo de colección, de aquellos en los que subrayar está expresamente vetado, 62 páginas de puro arte y, nunca mejor dicho, que se han de adquirir con urgencia; el precio es un regalo.

El escritor norteamericano, ganador, entre otros galardones universales del Premio Príncipe de Asturias de Literatura 2006, se despoja del secreto y comparte la relación de intimidad, afecto, complicidad y respeto que ha vivido desde 1974 con su preciada herramienta de trabajo una “Olympia portátil fabricada en Alemania Occidental. Ese país que ya no existe: Ya llevamos juntos más

COLOMBIA

Dan Brown (Planeta) ° Inferno, ° La verdad sobre el caso Harry Quebert,

Joel Dicker (Alfaguara) ° Cincuenta sombras de Grey 1, E.L. James (Random House Mondadori) ° Rayuela, Julio Cortázar (Alfaguara) Fuente: Librería Nacional

ESPAÑA

de un cuarto de siglo. Donde quiera que haya ido la máquina de escribir ha venido conmigo. Hemos vivido en Manhattan, al norte del estado de Nueva York y en Brooklyn. Hemos viajado juntos a California y Maine, a Minnesota y a Massachusetts, a Vermont y Francia.” (Pág. 47) La genial literatura de Auster ha pasado palabra por palabra uno de los “últimos artefactos que aún quedaban del ‘homo scriptorus’ del siglo XX”. La historia de una reliquia es tener algo de ella en casa. No pierdan la ocasión. opymj2008@gmail.com

Vitrina de libros CASAPALABRAS

Ecuador, domingo 4 de agosto de 2013

CIENCIAS SOCIALES

Revista sociológica Las carreras de Sociología y de Política, de la Universidad Central del Ecuador, ponen en circulación la edición número 34 de esta publicación, que contiene como tema central los ‘Desafíos de las Relaciones Sur-Sur’, a través de siete artículos de académicos e intelectuales de diferentes partes del mundo, quienes debaten sobre las relaciones internacionales. Entre los colaboradores están: François Houtart, de Bélgica; Paul Quintos, de Filipinas; Pierre Beaudet, de Canadá; Rashid Sherif, de Túnez; y Decio Machado, de España, entre otros. UCE

° Pídeme lo que quieras o déjame, Megan Maxwell (Planeta) ° Pídeme lo que quieras, Megan Maxwell (Planeta) ° Pídeme lo que quieras ahora y siempre, Megan Maxwell (Planeta) ° Inferno, Dan Brown (Planeta) Fuente: Casa del Libro.

méxico

° Cazadores de sombras: Los orígenes: Princesa mecánica, Cassandra Clare (Destino) Dan Brown (Planeta) ° Inferno, Verónica Murgia (SM Ediciones) ° Loba, ° Bajo la misma estrella, John Green (Nube de Tinta) Fuente: Librería Gandhi.

Nota: Listado de libros de ficción de EFE, excepto Ecuador.

Director (e): Francisco Vivanco Riofrío Editor: Agustín Garcells Cordón Redactor: Damián de la Torre Ayora Diseño: María Leonor Oviedo Composición electrónica: Pantone Impresiones Edita: Editorial Minotauro S.A. Correspondencia: Planta Diario La Hora Av. Galo Plaza N62-08 y Nazaret Fax: 247-6085 casilla 17-17-243 CCI cul­tu­ra­@la­ho­ra­.co­m.ec Quito, Ecuador

Ecuador, domingo 4 de agosto de 2013

memoria

Un aporte esencial a la historia ecuatoriana

GERMÁN RODAS CHAVES •

El recuento de los sucesos históricos –ojalá con mirada crítica– es una de las tareas sustantivas del historiador. Su oficio, empero, está atravesado por la necesidad de colocar en contexto los acontecimientos, con la finalidad de impedir que tan solo se describan hechos y se comenten anécdotas o detalles que no escrutan la estructura social a cuyo interior se suceden las vivencias del género humano.

Así, la validez de la investigación histórica, como decía el historiador norteamericano Christopher Lloyd, residirá en la capacidad de dirigir la atención teórica y empírica con la finalidad de estudiar de qué manera la acción de los hombres, el pensamiento y las estructuras han interactuado en el tiempo.

Estas ideas que nos conducen, sin dilaciones, al complejo tramado de las concatenaciones entre lo objetivo y lo subjetivo

y hacia el antiguo y no bien resuelto problema del rol de los grupos humanos con características sociales y culturales propias frente a los procesos estructurales de la sociedad, forman parte, entre otras cosas, de la exigente responsabilidad de construir los procesos históricos sobre la base de la información documentada.

Si. Información documentada, porque de lo que se trata, finalmente, en el marco de cualquier interpretación de los hechos, es de demostrar que estos forman parte de la realidad y que son posibles de ser probados con la documentación pertinente de respaldo. La historia no puede ser escrita de otra manera.

Incluso la novela histórica –que puede permitirse algunas permisiones– no se da el lujo de omitir la investigación previa y la documentación de soporte para relatarnos, entretenidamente, cualquier momento histórico trascendente escogido

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HISTORIA. Simón Bolívar y José de San Martín tuvieron un decisivo encuentro en julio de 1822 en Guayaquil.

por el autor. Aquello ocurre en los trabajos de calidad no solamente para asegurar el tratamiento fidedigno de una circunstancia particular, sino porque los lectores, cada vez más, exigen rigurosidad a este género literario. Por ello, la novela histórica se halla recorriendo el camino de la paráfrasis como una fórmula para dar cuenta de episodios que han impactado la historia universal.

De esta forma, diversos autores contemporáneos de la novela histórica no solamente que han optado por deleitarnos con los signos en rotación, sino que han comprendido que es indispensable apoyar sus textos en documentaciones pertinentes que se demuestran con la amplia bibliografía consultada que va al final de sus obras. Se ha trazado así una cancha en la cual la documentación de respaldo es fundamental a la hora de novelar la historia.

Si aquello viene ocurriendo con este

género literario de entretenimiento, qué se puede decir de la ciencia histórica cuyo compromiso es hablar con documentos probatorios sobre los sucesos de la humanidad, más allá de las interpretaciones que se puedan hacer sobre esos mismos sucesos.

Por todo lo dicho es de enorme importancia la circunstancia del historiador colombiano Armando Martínez –vinculado al post-doctorado de la Universidad Andina Simón Bolívar– quien ha encontrado en el Archivo Nacional de Historia en Quito la documentación de respaldo que nos permite saber qué trataron Simón Bolívar y José de San Martín en su encuentro de julio de 1822 en Guayaquil.

En efecto, el informe que el secretario de Simón Bolívar, José Gabriel Pérez, redactara el 29 de julio de 1822 y que le enviara al general Sucre, entonces Intendente de Quito, es una revelación que desentraña uno de los más importantes

El ángel exterminador del cine convencional SAMUEL REGUEIRA, EFE • Arriesgado, extraordinario, desquiciado, rompedor... son algunos de los calificativos que definen el cine de Luis Buñuel, el realizador más español y más internacional, un genio reconocido, adorado e imitado, cuya muerte hace 30 años en México dejó un hueco imposible de llenar.

Responsable de algunas de las imágenes más impactantes vistas en una pantalla, Buñuel Portolés nació en Calanda (noreste de España) en 1900 y recibió una estricta educación jesuita que puso la semilla de una obsesión por la religión que se paseó por toda su filmografía.

Escribió en Francia, con Dalí, su primer corto, ‘Un perro andaluz’ (1929), una explosiva mezcla de escenas con numerosas referencias a escritores de la época y

que contiene una de las imágenes cinematográficas que más rechazo ha generado, la del ojo de una mujer rasgado por una navaja sostenida por la mano de Buñuel y que en realidad era el de una vaca.

‘La edad de oro’, de 1930, fue su primera crítica contra la Iglesia y provocó una fuerte reacción de la extrema derecha en Francia, donde se prohibió hasta 1981.

Luego rodó en España el tremendo documental ‘Las Hurdes’ (1933), que el gobierno de la Segunda República prohibiría dada la pobre imagen que ofrecía del país.

En 1946 recalaría en México, dando comienzo a su etapa profesional más fructífera con películas como ‘Él’ (1953), su particular homenaje al director Alfred Hitchcock, y una versión de ‘Cumbres borrascosas’ ambientada en el México del

XIX titulada ‘Abismos de pasión’ (1954).

Buñuel regresó a España, a petición de Franco, y dirigió ‘Viridiana’ (1961), protagonizado por Fernando Rey, Silvia Pinal y Francisco Rabal, a la que tuvo que cambiar el final por la censura, pero supo disfrazar la mayor parte de su “amoralidad”, que pasó inadvertida hasta su estreno en Cannes, donde ganó la Palma de Oro. A continuación Buñuel rodó otra cima de su cine, ‘El ángel exterminador’ (1962), una impresionante fábula desasosegante de un grupo de gente que no podía abandonar una fiesta.

En 1972 lograría su único Óscar con ‘El discreto encanto de la burguesía’, con la que se convirtió en el primer director español en recibir el premio de la Academia a la mejor película de habla no inglesa. EFE

CINEASTA. Luis Buñuel fue el padre del surrealismo en el cine.

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bambalinas

La nueva mujer en el cine japonés

RICARDO SEGREDA • La Embajada del Japón, que tan generosamente ha proporcionado un nuevo sistema de sonido a la Casa de la Cultura en Quito, prosigue enriqueciendo artísticamente a la ciudad con su nueva muestra de cine japonés. Como en todos los festivales internacionales de cine, son ricas las experiencias, no sólo por el placer que proporcionan como entretenimiento, sino como oportunidades de experimentar otra cultura y apreciar lo que tenemos en común, y así tener una mejor comprensión del mundo.

Lo interesante es que dos de las mejores películas en el festival de este año tratan de mujeres que superan las limitaciones impuestas por una cultura machista.

Primero está ‘La esposa de Villon’, que ha ganado varios premios, especialmente por su actriz principal, Takako Matsu.

En verdad, es magnífica en un papel que podría haber sido de una autocompasión melodramática.

Sin embargo, el personaje que Matsu representa tiene toda la justificación de sentir lástima de sí misma. ‘La esposa de Villon’ se basa en una novela autobiográfica de Ozamu Dazai, un muy talentoso, pero muy alcohólico autor, cuya autodestrucción se convirtió en el tema de su trabajo. De hecho, al año después de que esta novela fue publicada, Dazai murió a los 39 años. En esta adaptación, Matsu es Sachi, la esposa de un brillante pero alcohólico e irresponsable escritor.

También tienen un hijo, lo que complica la solución simple de abandonar al marido. Tadanobu Asano, considerado como uno de los iconos del moderno cine japonés, tiene el papel de Otani, el autor que, cuando no está enfocado en su trabajo, pasa todo su tiempo en cantinas. Cuando Otani está en riesgo de ser

Ecuador, domingo 4 de agosto de 2013

RECONOCIMIENTO. ‘La esposa de Villon’ ha ganado varios premios, en especial por el desempeño de Takako Matsu, su actriz principal.

Ficha técnica Título: ‘La esposa de Villon’ País:Japón Año: 2009 Director: Kichitaro Negishi Guion: Osamu Dazai, Yozo Tanaka Reparto: Takako Matsu, Tadanobu Asano, Shigeru Muroi Tiempo: 114 minutos Calificación: ****

detenido debido a la enorme deuda que tiene en una taberna, Sachi le propone al tabernero trabajar como camarera hasta pagar la deuda.

Su belleza y encanto atrae a la taberna más varones clientes y más ganancias para el negocio y, con eso, la gratitud de los propietarios, quienes insisten que Sachi mantenga sus propinas. Por su parte, Otani se hace más alcohólico y, después de un episodio de paranoia en el que acusa a su esposa de infidelidad, con gran hipocresía inicia una relación con una mujer tan enferma como él.

Sachi recibe ofertas de hombres que están no sólo enamorados de ella, sino que quieren rescatarla. Los rechaza, tanto por lealtad a su marido, como por una nueva independencia de espíritu nacido de las difíciles circunstancias.

‘Hana no ato’

En español ‘Después de las flores’, dirigida por Kenji Nakanishi, está basada en una historia de Shuhei Fujisawa, el mismo autor de literatura samurái que escribió la historia de ‘El samurái del

SAMURÁI. En ‘Después de las flores’, una mujer quiere corregir una injusticia homicida contra el hombre que ella había amado.

crepúsculo’, que fue una magnífica película del veterano director Yoji Yamada. Algunas de las mismas cualidades nobles de ‘El samurái del crepúsculo’ se pueden encontrar en ‘Después de las flores’, que provoca la pregunta de quién merece crédito, o culpa, por la calidad de la película.

La dirección de ‘Después de las flores’, en sí, aunque es muy buena, no tiene la misma calidad transcendental de maestros japoneses como Yamada, Kurosawa, Mizoguchi y Ozu. Sin embargo, ‘Después de las flores’ es una inspirada y bella película. El tema es de una mujer samurái –que pese a esto conserva su feminidad– y su misión de corregir una injusticia homicida contra un samurái que ella había amado. Este amor que nunca fue consumado y se basa en su reconoci-

Ficha técnica Título: ‘Después de la flores’ País:Japón Año: 2010 Director: Kenji Nakanishi Guion: Shuhei Fujisawa, Yasuo Hasegawa, Kenzaburo Iida Reparto: Keiko Kitagawa, Shuntarô Miyao, Kamejiro Ichikawa Tiempo: 107 minutos Calificación: ****

miento de la habilidad de la heroína como samurái, más que su belleza como mujer, da a ‘Después de las flores’ cualidades de redención espiritual dignas del arte más grande. rick.segreda@gmail.com