El Aprendizaje Situado al Contexto

Aprendizaje Situado al Contexto

Por: Melina Santos, Ingeniero Ambiental; M.ENG Docente

Recuerde un momento en el que ha estado profundamente inmerso en la experiencia del mundo que le rodea y siente que todo lo que sucede alrededor suyo es verdaderamente significativo. Todos, en algún momento, hemos experimentado el poder del contexto.

El aprendizaje está intrínsicamente ligado a contextos de tiempo, lugar, personas u objetos. Es por esto que salir de las cuatro paredes del aula, y apoyarnos en diversas herramientas pedagógicas, nos permite enseñar a través de múltiples contextos y que los estudiantes aprendan cómo los principios de la ciencia se relacionan con su entorno.

La educación basada en el lugar (Place-Based-Learning) es una filosofía educativa que aprovecha la geografía para que el aprendizaje sea auténtico, significativo y atractivo para los alumnos. El término fue acuñado a principios de la década de 1990 por Laurie Lane-Zucker de The Orion Society.

La estrategia se basa en la premisa de que la interacción de los estudiantes y los profesores fuera del aula no sólo promueve activamente el aprendizaje, sino que también se ven a sí mismos como recursos para el crecimiento y desarrollo personal y educativo de los demás.

Basada en esta filosofía de enseñanza y aprendizaje, programé un viaje de campo con mis estudiantes de tercer año de ingeniería civil a una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, como parte de la clase de Saneamiento Ambiental.

Este viaje de campo propició la convivencia académica entre los estudiantes fuera del aula y a la vez me permitió conocer a los estudiantes con mayor profundidad en términos de cómo ellos ven el mundo, ayudándome a comunicar mejor los conceptos de la unidad siendo tratada. A la vez, se construyeron alianzas entre la academia y la empresa, al ellos conocer de primera mano los procesos de cumplimiento ambiental que están siendo ejecutados en el sector privado.

Por supuesto, la enseñanza dentro del aula es importante, pero es cada vez más evidente que un conocimiento que se basa en la experiencia del mundo real ofrece la oportunidad de que los estudiantes conozcan de las prácticas implementadas localmente, las oportunidades de mejora y lo que ellos pueden aportar una vez que salgan al mundo laboral.

Es necesario aprovechar el “poder del lugar” e ir transformar el sistema educativo, enfocándonos en la integración de la academia, la industria y las comunidades para equipar a los estudiantes con herramientas y habilidades para pensar críticamente y resolver los problemas complejos de nuestra industria, economía, ambiente y sociedad.