Punto Universitario 318

EDITORIAL: Gabriela de la Fuente Betancourt Responsable de información F. Yazmín Rodríguez Orantes Revisión editorial

Colaboradores Nallely Arce Victor O. Ayala-Perez Rubén Olachea Pérez

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El extraordinario fenómeno de la migración en las aves

número 318/ año 2019

Y hablando de la familia: Primera Feria Universitaria de la Salud Sexual y Reproductiva en la UABCS Camarón que se duerme… no le da Alzheimer El Proyector: El castillo de la pureza

Día Internacional de las Familias: Las familias y la Acción por el clima Existen diversos conceptos de la familia en los diferentes sistemas sociales, culturales y políticos, la ONU considera que la familia es la unidad básica de la vida social.

En este contexto, el Día Internacional de las Familias, celebrado cada 15 de mayo, nos da la oportunidad de reconocer, identificar y analizar cuestiones sociales, económicas y demográficas que afectan su desenvolvimiento y evolución.

Hay diferentes opiniones sobre el concepto de una familia, y es que su composición no ha sido igual a través de las culturas y el tiempo. La UNESCO explica que “los modelos de familia que han predominado en cada país o región responden a cómo se ha ido desarrollando la historia y la cultura de cada pueblo”. Así, se tiene a la familia típica es la Nuclear, pero ¿en dónde quedan las abuelitas, madres solteras y demás combinaciones? La realidad es que hay vínculos afectivos, de apoyo y seguridad que unen a las personas y dan origen a familias Extendidas, Monoparentales, Homoparentales, Ensambladas y a las de Hecho.

Este año, el tema a destacar es el papel de las familias y las políticas familiares como elemento esencial para el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 13, Acción por el Clima, con especial atención en transmitir conocimientos para mitigar y adaptarse al cambio climático, así como incorporar medidas necesarias por parte de tomadores de decisiones.

El extraordinario fenómeno de la migración en las aves

Nallely Arce y Victor O. Ayala-Perez, Investigadores de la UABCS - Laboratorio de Aves y Pronatura Noroeste, A.C.

Fig. 1. Aves migratorias. (A) Charran Ártico, (B) Colibrí de garganta roja, (C) Aguja colipinta y (D) Ánsar indico.

viajes migratorios puede variar de cientos hasta miles de kilómetros. Por ejemplo, el Charran Ártico (Sterna paradisaea; Fig. 1) en un viaje migratorio completo recorre hasta 70 mil km, desde el Círculo Polar ártico hasta el antártico. En su vida puede volar hasta 2.4 millones de kilómetros, equivalente a realizar tres viajes de ida y vuelta a la luna.

El fenómeno de la migración en las aves también representa cambios físicos y fisiológicos.

Antes de migrar, algunas aves reducen el tamaño de su intestino, hígado y riñones, en un 25% de su tamaño original. Algunas especies acumulan entre el 20 y el 30% de su peso total en grasa, mientras que otras que se desplazan grandes distancias acumulan hasta un 90% de su peso total.

Para algunas aves, la migración representa retos increíbles. Por ejemplo, el Colibrí de garganta roja (Archilochus colubris; Fig. 1), que pesa sólo seis gramos, es capaz de cruzar el Golfo de México y recorrer hasta 2000 km sin escalas, en un viaje que puede durar hasta 20 horas. Otras son capaces de realizar vuelos transoceánicos, como la Aguja

colipinta (Limosa lapponica; Fig. 1), la cual puede volar de Alaska a Nueva Zelanda, recorriendo 11 mil kilómetros sin detenerse, durante ochos días.

Otras especies son capaces de sobrevolar las montañas más altas del planeta durante su migración, como el Ánsar índico (Anser indicus; Fig. 1), el cual cruza la cordillera del Himalaya para llegar a las costas de India en un viaje de hasta 4,500 kilómetros.

Por otra parte, algunos de los humedales costeros de Baja California Sur: Ensenada de La Paz, Bahía Magdalena, San Ignacio y Guerrero Negro, reciben al año, en conjunto, hasta 650 mil individuos de aves acuáticas Fig. 2. (A) Ruta y conectividad migratoria del Playero rojizo generado a partir de un esfuerzo internacional de marcaje y reobservación. (B) Adulto marcado por primera vez en Guerrero Negro, México, en 2006. (C) Individuo reobservado en el Alto Golfo en 2010. Ésta ave tiene al menos 11 años de edad.

La migración es un fenómeno importante en la biología de muchas especies de aves y es un evento muy extendido dentro de este grupo taxonómico.

Cada año se estima que alrededor de 50 000 millones de aves, pertenecientes a casi 2300 especies de aves de todo el mundo realizan migraciones, que comunican sus zonas de reproducción y sus sitios de invernación. En el continente Americano, de las 650 especies de aves que se reproducen al norte, 332 son migratorias.

Pero, ¿por qué migran las aves? Los movimientos migratorios representan una adaptación que les permite desplazarse entre diferentes sitios para poder explotar picos estacionales de productividad de diferentes recursos, y a su vez puedan evitar sitios en épocas del año cuando el alimento escasea.

En Norteamérica muchas especies migratorias tienen sus lugares de reproducción al norte del continente en donde, durante el verano, se presenta una explosión de recursos alimenticios, los cuales son aprovechados por las aves. Sin embargo, éste pulso de producción dura poco tiempo, hacia el otoño disminuye el alimento y las condiciones climáticas empeoran. En este punto las aves inician su migración hacia Centro y Sudamérica, en donde pasarán el invierno. Posteriormente, en primavera de nuevo las aves realizarán el viaje de regreso al norte, completando así su ciclo migratorio, mismo que se repite año tras año. En este sentido, la migración en las aves representa un desplazamiento cíclico, regular y voluntario en busca del lugar apropiado, en el momento oportuno.

La distancia que las aves recorren en sus

migratorias. Uno de los grupos más abundantes son las aves playeras, con hasta 400,000 individuos.

En estos humedales inverna una fracción importante de las poblaciones de algunas especies, e.g. el 60% del Picopando canelo (Limosa fedoa), 55% del Playero rojizo (Calidirs canutus) y 45% del Costurero de pico corto (Limnodromus griseus). Una de las especies que sobresale por su capacidad durante sus vuelos migratorios es el Playero rojizo.

Con el objetivo de conocer y ampliar la información sobre la ecología migratoria del Playero rojizo en las costas del Pacífico, el Laboratorio de Aves de la UABCS y Pronatura Noroeste, ha realizado un esfuerzo ininterrumpido en el estudio de esta especie desde 2006 hasta la fecha.

Lo anterior ha ido acompañado de una colaboración internacional. Gracias a este esfuerzo se ha podido conocer la ruta migratoria que sigue ésta especie en el Pacífico y la conectividad migratoria existente entre los diferentes humedales (ver figura).

Algunos de los individuos que fueron marcados en las primeras campañas de capturas en Guerrero Negro (2006-08) se han reobservado en los

últimos años, estimando que algunas de estas aves pueden tener una edad de hasta 13 años y han viajado hasta 170,000 km, el equivalente a 12 vueltas a nuestro planeta o a recorrer casi la mitad de la distancia de la tierra a la luna.

El fenómeno de la migración en las aves es uno de los eventos más espectaculares y extraordinarios de la vida animal.

Sin embargo, la migración también supone una serie de riesgos a los que se enfrentan las aves. Estas amenazas pueden ser tanto de origen natural (huracanes, depredadores, enfermedades, entre otros), así como de origen antrópico (e.g. modificación, destrucción o fragmentación del hábitat, perturbación, contaminación y cacería).

Todos estos factores ponen en riesgo su conservación a largo plazo. Es importante entender que las aves migratorias representan una responsabilidad común entre los estados y las sociedades de los países que las comparten, por lo que es importante generar conciencia y fortalecer acciones de conservación, impulsar y apoyar proyectos de conservación e investigación.

Hablando de la familia: Primera Feria Universitaria de la Salud Sexual y Reproductiva en la UABCS Siempre nos recomiendan que tengamos buena salud y la cuidemos.

Repetimos la frase a las nuevas generaciones. Pero en los temas sexual/reproductivos encontramos barreras morales/puritanas que impiden hablar de sexo con los más jóvenes.

La verdad es que, para gozar de una vida saludable, hay que acompañar nuestras acciones de responsabilidad. Y eso se logra si estamos bien informadas/os. Por eso es tan notable que se realicen eventos como esta 1a. Feria Universitaria de la Salud Sexual y Reproductiva. Desde las 9 de la mañana del 8 de mayo pasado, los distintos estands ya atendían a jóvenes estudiantes que se acercaban –entre curiosos, tímidos y aventados.

La intención del evento, coordinado por nuestra Máxima Casa de Estudios y la Secretaría de Salud en BCS, fue dar a conocer también cuáles son los riesgos que existen al no contar con el cuidado pertinente en la salud sexual. Se proporcionó información, con folletos y demostraciones con maniquíes, sobre los métodos anticonceptivos, incluyendo cómo colocar y retirar un condón. Se informó también sobre el VIH y otras enfermedades de transmisión sexual.

Hay que destacar que la sexualidad no sólo implica la relación sexual, incluye, además la planificación familiar, salud materna y perinatal, cuestiones de cáncer en la mujer (de mama o cervicouterino), violencia familiar o en el noviazgo, y hasta la alimentación y activación física. Además de brindar información, condones, ácido fólico y premios, en el Centro de Servicios Médicos de la UABCS también se realizaron pruebas de VIH, Papanicolaou y mastografías.

La UABCS cuenta con una gran población estudiantil y queremos que vivan saludables y sigan dando vitalidad a la máxima casa de estudios por eso es loable que se haya organizado esta feria, y entre todo ¡póntelo! o ¡pónselo!

Camarón que se duerme… no le da Alzheimer Por Gabriela de la Fuente B. Diversos estudios clínicos han demostrado que no dormir genera cambios fisiológicos que derivan en obesidad, diabetes, depresión y presión arterial alta, entre otras complicaciones que provocan, a mediano plazo, una mala calidad de vida y finalmente, muerte prematura. Con nuestro estilo de vida acelerado, desorganizado y con alimentos y dispositivos ultra estimulantes, no siempre hallamos una adecuada solución a la falta de sueño.

Pero debemos buscarla, porque recientemente se demostró que dormir puede proteger al cerebro de la enfermedad de Alzheimer (EA). Y es que el ciclo sueño-vigilia regula, entre otras acciones, el flujo cerebral de dos proteínas cuya acumulación está relacionada con la enfermedad: la beta amiloide (A β) y la tau. La primera favorece la aparición de la EA, pero todo indica que la tau es la responsable del daño cerebral y deterioro cognitivo.

Así se vivió la 1a. Feria Universitaria de la Salud Sexual y Reproductiva, en la UABCS.

Suena lógico, puesto que los enfermos de Alzheimer sufren diferentes alteraciones del sueño, como sería el insomnio y el sueño fraccionado que repercute a nivel diurno con la necesidad de echar varias siestas a lo largo del día. Si te ha pasado, o te pasa frecuentemente ¡cuidado! la falta de sueño no solo aumenta Aβ de forma aguda y crónica, en una investigación reciente se mostró que la privación crónica del sueño aumenta considerablemente la tau a lo largo de las horas y también impulsa la propagación de la patología de la tau en el cerebro.

Imagina que a tu carro le falla los niveles de aceites o de los frenos, todo un caos ¿no? Si el ciclo sueño-vigilia regula el nivel de la beta-amiloide en los fluidos intersticial y cefalorraquídeo, algo desastroso es de esperarse si ese ciclo se ve comprometido. De hecho, se acumula la proteína Aβ.

Se han documentado cientos de casos en los que la agregación de esta proteína inicia la patogénesis de la EA, que a su vez incluye la agregación y la propagación de tau. Pero es la acumulación de tau la que conduce a la neurodegeneración.

La próxima vez que quieras desvelarte o tengas insomnio, no cuentes ovejas, cuenta proteínas Aβ porque se estarán acumulando y te acercarán al territorio de patologías como la enfermedad de Alzheimer.

Basado en: The sleep-wake cycle regulates brain interstitial fluid tau in mice and CSF tau in humans por Jerrah K. Holth y col. Science, 2019.

EL PROYECTOR El castillo de la pureza es un filme dirigido por Arturo Ripstein, en 1973. La televisión cultural mexicana está programando los nuevos clásicos del cine en sistema High Definition (HD). Está basado en hechos escandalosos que se dieron a conocer en la prensa nacional allá por los años 50, cuando se descubrió que un hombre mantenía a su familia sin contacto con el exterior. El título, bellísimo por cierto, proviene de una frase literaria retomada por nuestro querido Octavio Paz en un ensayo-instalación sobre la obra de Marcel Duschamps, inscrita así en una cauda de obras artísticas que se entrecruzan. El título cae perfecto en este intento desesperado, y vano, de un hombre paranoico que opina que la sociedad está corrompida y por lo tanto, a quienes más quiere, les impone un castigo/premio de no entrar en contacto con esa sociedad en descomposición. Sin darse cuenta, o quizá en placer perverso, ese hombre no se percata de que está empeorando la situación.

La frase original de El castillo de la pureza, como construcción literaria, se le adjudica inicialmente a Mallarmé, por lo que es interesante ese entrecruzamiento de arte europeo y americano en el que, sin duda, el cine mexicano se encuentra situado, navegando y circulando ideas estéticas.

En una casona con glorias pasadas, en pleno centro histórico de la ciudad de México, un hombre de apariencia respetable interpretado por el gran autor Claudio Brook, va con su traje cual catrín de la lotería,

El castillo de la pureza Por Rubén Olachea desde la azotea, pedir auxilio en papeles pisoteados entre los peatones apurados. La presencia inesperada y completamente azarosa de la policía pone fin a una tragedia que ya había sido iniciada. El castillo de la pureza se nos revela así como el gran film que es: una tragedia puesta en escena que representa a un género difícil de llevar a cabo, acaso por su real y ominosa omnipresencia.

El castillo de la pureza Año: 1972 País: México Dirección: Arturo Ripstein Guion: Arturo Ripstein, José Emilio Pacheco Fotografía: Alex Phillips Música: Joaquín Gutiérrez Heras ofreciendo a las tlapalerías (ferreterías) un poderoso veneno de ratas de fabricación casera, puesto que sus tres hijos lo elaboran con su ayuda. La esposa cuida de la casa y lleva una cocina estrictamente vegetariana. Los dos hijos mayores son bien portados pero adolescentes.

Aunque educados de manera severa, el despertar hormonal los conduce a exploraciones que a los ojos del padre causan un escándalo demencial.

La madre vive en ensoñaciones por un pasado en el que fue libre y creyó que su esposo era normal. Su desencanto le resigna a

reproches sexuales ofensivos, violentos. Los castigos se suceden a menudo. El caballero respetable, de buenos modales y apariencia un tanto extranjera, ante la cámara se transforma en un terrible monstruo, trastornado por sus propios demonios imaginarios.

La cámara, vehículo de libertad, hará que veamos su lascivia incontrolable, al acudir a prostíbulos deprimentes o incitar sin éxito a jóvenes de la época (sobresale en ese rol la gran actriz María Rojo). La lluvia luce su presencia liberadora y la jovencita interpretada por Diana Bracho se atreve a,

Sonido: Jesús González Gancy Producción: Angélica Ortíz Productora: Estudios Churubusco Azteca S.A Reparto: : Claudio Brook, Rita Macedo, Arturo Beristáin, Diana Bracho, Gladys Bermejo, David Silva, María Barber, María Rojo, Inés Murillo, Cecilia Leger, Emma Roldán, Osami Kawano, Andrea del Llano, Alejandra Jiménez, Mario Castillón Bracho, Roberto Jiménez, María Guadalupe Delgado Premios: Ariel a la mejor película (1973)