Guadalcanal 0-3 Honeyball

El balón parado castiga en demasía al Guadalcanal frente al Honeyball

Redacción

El balón parado nos causa serios problemas. De eso no cabe duda. Lo dejó patente el Servalabari en los dos tantos que nos hizo en su visita a El Coso, y este domingo ha vuelto a quedar demostrado. Ante el líder hubo remedio, porque hasta en dos ocasiones nos habíamos adelantado. En el partido ante el Honeyball ese remedio no se produjo.

Encaró el Guadalcanal el último partido de esta fase en un día aciago de agua, frío y viento. Un día desapacible incluso para la práctica del fútbol. Lo hacía, además, sin presión alguna, pues la pasada semana, cargada de magia nos dejó un tres de tres que nos clasificaba matemáticamente y en segunda plaza de la que ya nadie podría movernos.

Enfrente teníamos a un Honeyball que se había complicado la vida en exceso la semana anterior cayendo ante un rival directo como el Híspalis. Se lo jugaba todo a una carta y en un campo en el que aún no había ganado nadie.

La clasificación nuestra y la necesidad suya fueron malos ingredientes de este cóctel que, a la postre, se nos derramaría en las propias manos. Así, al inicio del encuentro, el balón no encontró un dominador claro, aunque quienes ponían el empeño, lógicamente, eran las sevillanas. El Guadalcanal jugaba por rachas, desplegando el mejor fútbol que podía bajo la lluvia, pero desapareciendo poco después. En este sentido, fue más regular el conjunto visitante. Este buscó puerta con la imperiosa necesidad de abrir el partido y respirar. Las nuestras se encomendaban a algún fallo rival, o alguna genialidad que les diera las alas necesarias. Las mejores ocasiones llegaban por parte del Honeyball, aunque las nuestras también tuvieron dos claras para adelantarse. De haberse concretado, en ese toma y daca, ahora estaríamos hablando de otra cosa. Pero no fue así y nos pasó factura. Para empezar, en el minuto 26 falta en la frontal que Ale, que poco antes con un paradón había evitado el primer gol, no consigue atrapar.

Aunque ahora por detrás en el marcador el partido se ponía cuesta arriba, esta sensación estuvo muy presente desde los instantes iniciales. A ello se unía que a las nuestras no les salía nada y a su rival todo. Pese a esta diferencia el Guadalcanal intentó un acercamiento que le diera moral para la segunda mitad pero no fue así.

Tras la reanudación, más de lo mismo. El Guadalcanal intentó y buscó el empate y Alba lo tuvo en sus botas, pero la meta rival lo evitó. Definitivamente no era nuestro día. Y del uno a uno al cero a dos. Lanzamiento de falta que pone el balón en el área para que el Honeyball cabecee y haga el segundo. El tercero, por su parte, fue un calco del anterior.

Así pues primera derrota en casa de nuestras chicas que no cambia nada en la clasificación y que, por supuesto no empaña una temporada genial.