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Diez años siguiendo al primer caminante, Jesús

Equipo facilitador del Movimiento Juvenil Huellas - Colombia

“Que la distancia no sea un impedimento para el andar” Empezando el 2020 en todo el Movimiento Juvenil Huellas estábamos muy felices ya que luego de diez años de presencia en Colombia, queríamos tener diferentes encuentros festivos en los cuales la familia huellista tuviera la oportunidad de dar gracias a Dios por tanto bien recibido durante estos años de caminar. En marzo del año pasado llegó la pandemia a Colombia y todos los planes que teníamos como Movimiento cambiaron y nos desafiaron a ser creativos y a continuar con nuestra celebración. Queremos compartir con ustedes, cómo fue este camino en este tiempo tan desafiante que nos llevó a tener el corazón dispuesto y los sentidos abiertos. Todo esto no hubiera sido posible sin el espíritu y la alegría de los huellistas, acompañantes y el equipo facilitador de la Red Juvenil Ignaciana (RJI). En enero del año pasado el Movimiento se preparaba para empezar la celebración de su presencia en Colombia, nuestro plan era para el mes de septiembre tener una celebración simultánea en las regiones en donde hace presencia Huellas. Desde nuestra mirada todo iba a ser una gran fiesta y los preparativos ya empezaban a sonar en algunas ciudades. Ante la llegada inminente de la pandemia del Covid 19 en marzo del año pasado y por ende el aislamiento, los preparativos de la celebración pasaron a un segundo plano, ya que la apuesta de muchos colegios estuvo centrada en cómo ofrecer una educación desde la virtualidad. Al parecer la celebración no se iba a llevar a cabo y fueron los huellistas desde el día uno del aislamiento los que nos invitaron a acompañantes y asesores a seguirnos encontrando, a no perder la esperanza y que esa sensación de incertidumbre que llegó con la pandemia no fuera excusa para no encontrarnos. Para continuar con el proceso de formación desde la Coordinación de la RJI y la Coordinación nacional de Huellas propusimos un camino que denominamos “huellas en formación” en donde formamos a los diferentes acompañantes y asesores en la nueva propuesta formativa de bitácora y lineamientos. Este proceso tuvo un plus y fue la posibilidad de encontrarnos con acompañantes, asesores y guías de diferentes regiones cada quince días, la constancia fue la gran característica de este proceso. Durante abril los coordinadores regionales del Movimiento nos reunimos e impulsados una vez más por los huellistas logramos trazar una nueva manera de celebrar nuestro aniversario número diez en Colombia. Para esto apelamos a la creatividad, los recursos tecnológicos y el espíritu de encuentro. Con todo ello, decidimos que la manera de llevar a cabo la celebración iba a tener tres momentos: encuentros por regiones, construir un Podcast y la celebración conjunta en octubre del año pasado.

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Para mayo y junio definimos entre huellistas y asesores los equipos de trabajo que diseñaron cada uno de los momentos antes mencionados. Tuvimos la gran fortuna que los equipos conformados fueron de varias regiones, esto nos dio la posibilidad de sentir y gustar la manera de ser huellistas en diferentes regiones. Vale la pena mencionar que incursionamos en un medio que no teníamos la más mínima experiencia y fue el podcast, fue la posibilidad de arriesgarnos y de construir a partir de nuestras intuiciones. A este experimento que tanto nos enseñó lo denominamos “Huellas 10.0". En él a partir de la identidad propia del Movimiento narramos parte de la historia y la relevancia que ha tenido para muchos Huellistas en estos años. Mientras íbamos caminando y planeando nuestros encuentros, desde el colegio San Luis Gonzaga nos regalaron el himno de huellas para Colombia titulado “Las palabras no bastan” este himno recoge el camino formativo de huellas y cómo el primer caminante, Jesucristo, nos acompaña en todo nuestro vivir. En julio y septiembre el protagonismo se lo llevaron los encuentros regionales, la creatividad de los equipos conformados por huellistas y asesores se manifestó en cada región y cada una desde sus posibilidades brindó lo mejor en cada encuentro. En octubre llevamos a cabo la gran fiesta nacional, desde la celebración de la eucaristía y el testimonio le dimos gracias a Dios por este tiempo recorrido y pudimos evidenciar que el Movimiento ante las dificultades y los nuevos retos, se fortalece y logra crear nuevas formas para encontrarnos, servir y seguir a Jesús. Por último, queremos dar las gracias a todos los que hicieron parte de esta celebración y se unieron para demostrar que la distancia sólo fue el pretexto para seguir caminando tras las Huellas de Jesús. Invitamos a quien nos esté leyendo a acudir a las redes sociales de la RJI y ver los diferentes videos y publicaciones que estamos haciendo en torno a lo antes narrado. Este año 2021, lo iniciamos con la fe que mueve a nuestro Movimiento Juvenil Huellas. Una fe que, en medio de las exigencias que todos vivimos, renuncia a apagarse. Por el contrario, Dios nos sigue mostrando nuevos senderos para avivar la vida del Movimiento en las regiones de nuestra Provincia Colombiana.

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