Estrategias clave para conseguir un salario mínimo vital

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Estrategias clave para conseguir un salario mínimo vital

Dar impulso a las campañas nacionales y regionales por la adopción o mejora del salario mínimo aplicando las conclusiones del estudio de la CSI sobre las estrategias sindicales de éxito en ocho países.

Documento de
Acción
de la csi

Según cifras del Banco Mundial, entre octubre de 2022 y enero de 2023, el aumento de la inflación impactó a casi todos los países de ingresos bajos y medios. La inflación superó el 5% en el 83,3% de los países de ingresos bajos, en el 90,2% de los países de ingresos medios bajos y en el 91% de los países de ingresos medios altos, y muchos experimentaron niveles de inflación de dos dígitos.

Para los hogares más pobres, este aumento de los precios está resultando devastador. El último Informe Mundial sobre Salarios de la OIT subraya la importancia de ajustar adecuadamente los salarios mínimos para evitar que los hogares más pobres sean los más afectados por futuras crisis. En este ámbito, los sindicatos desempeñan un papel fundamental.

El salario mínimo vital constituye un elemento clave del Nuevo Contrato Social de la CSI, y el apoyo de la CSI a las campañas de las afiliadas a favor de un aumento de los salarios es un compromiso recogido en la Declaración del Congreso adoptada en noviembre de 2022.

El estudio de la CSI Conseguir un aumento salarial: estrategias sindicales

para garantizar un salario mínimo vital, recoge las principales estrategias empleadas por sindicatos en ocho países de diversas regiones, que lograron aumentos del salario mínimo nacional y, en el caso de Sudáfrica, consiguieron por primera vez en su historia la adopción de un salario mínimo nacional.

Algunos empleadores afirman falsamente que los salarios mínimos tienen efectos perjudiciales en el empleo y el crecimiento, pero la realidad demuestra que unos salarios mínimos adecuados proporcionan una base importante para los salarios del conjunto de la economía. El informe subraya cómo lograron los sindicatos en sus campañas y negociaciones poner de relieve los beneficios económicos generales que reporta la adopción de unos salarios mínimos. Así lograron el respaldo público y contrarrestar la narrativa predominante de los gobiernos y la patronal que bloqueaba el progreso.

El estudio ofrece los ejemplos de Nigeria y Bulgaria, donde los aumentos del salario mínimo han propiciado que los salarios negociados colectivamente aumenten por encima del salario mínimo nacional, refutando el argumento de que aumentar el salario mínimo nacional socava los logros de la negociación

colectiva. De hecho, el estudio pone de relieve la complementariedad entre los salarios mínimos nacionales y la negociación colectiva generalizada, ya que juntos pueden desencadenar aumentos salariales equitativos por encima del mínimo.

El Nigerian Labour Congress (NLC) recopiló pruebas empíricas que demostraron los beneficios macroeconómicos que se obtienen al aumentar el salario mínimo: un salario más alto fomenta el consumo, lo que conduce a una mayor demanda agregada y a una mayor productividad. El estudio pone de relieve el papel vital que pueden desempeñar las campañas de los sindicatos a favor de un salario mínimo vital en sus regiones y países. Ya sea recopilando pruebas, lanzando campañas públicas, esgrimiendo las normas internacionales del trabajo para respaldar sus reivindicaciones y, en caso necesario, convocando movilizaciones, los sindicatos pueden ser una fuerza impulsora de cambios positivos para sus miembros, comunidades y sociedades.

La CSI cree que el mundo necesita un aumento salarial y que los sindicatos ayudan a los trabajadores y trabajadoras a conseguirlo.

El poder sindical: 4 estrategias clave de organización

Los sindicatos pueden activar cuatro fuentes de poder para lograr los objetivos de sus miembros:1

El poder del sindicato más allá del lugar de trabajo, a través de sus alianzas y coaliciones. El poder de garantizar y estabilizar su influencia a través de estructuras institucionales.

El poder de provocar disrupciones, el poder de negociación en el lugar de trabajo y en el mercado laboral.

Los sindicatos pueden activar estratégicamente estos cuatro recursos de poder para influir en los procesos políticos, las negociaciones, las campañas y para presionar a los responsables de la toma de decisiones.

Campañas sindicales de éxito

El informe examina ocho países en los que los sindicatos aplicaron con éxito estas cuatro estrategias de organización en distintos momentos de sus campañas y lograron sus objetivos: Argentina, Bulgaria, Costa Rica, Malasia, Nigeria, Macedonia del Norte, Senegal y Sudáfrica.

El poder del sindicato como organización basada en la participación activa de sus miembros y en la democracia sindical.

Independientemente de las diferencias de sus contextos nacionales, los sindicatos aplicaron estas estrategias y lograron sensibilizar a la opinión pública y consiguieron su apoyo a la introducción, el aumento o la extensión de la cobertura del salario mínimo; recabando datos con

El aumento del coste de la vida ha afectado a trabajadores y trabajadoras de todo el mundo, tanto de economías avanzadas como emergentes, que reclaman salarios más altos para poder hacer frente a los rampantes precios de la energía, la alimentación, la vivienda y el transporte.
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Schmalz et al. (2018) The Power Resources Approach: Developments and Challenges.
PODER ASOCIATIVO
PODER SOCIAL PODER INSTITUCIONAL PODER ESTRUCTURAL

los que respaldaron sus argumentos en las negociaciones; utilizando las normas internacionales del trabajo para justificar sus reivindicaciones, y movilizando a sus miembros para emprender acciones colectivas en caso necesario.

En Sudáfrica, los sindicatos hicieron campaña y lograron la introducción de un salario mínimo por primera vez en la historia del país. En Bulgaria y Macedonia del Norte, los sindicatos, que exigían un aumento significativo del salario mínimo, utilizaron sus propias estimaciones del coste de la vida para poner en evidencia hasta qué punto era insuficiente el salario mínimo vigente para cubrir los costes de vida básicos de los trabajadores. En todos estos casos, la fuerza del movimiento sindical y su capacidad de organización fueron cruciales para conseguir aumentar los salarios.

Estimación del coste de la vida

Los sindicatos aprovecharon su poder asociativo y su poder social para llevar a cabo sus propias investigaciones, que sirvieron de contrapeso a sus objetivos de campaña. Además, forjaron alianzas con académicos creíbles y grupos de reflexión progresistas, lo que les permitió presentar pruebas irrefutables en las negociaciones salariales tripartitas y contrarrestar los argumentos de la patronal y del Gobierno que bloqueaban las subidas del salario mínimo.

Bulgaria: La Confederación de Sindicatos Independientes de Bulgaria (CITUB) llevaba desde 1979 publicando sus propios datos sobre el coste de la vida (lo que se conoce como “salario vital”). Le servía para influir en los debates sobre la fijación de los salarios y en el discurso público sobre la adecuación de

los sueldos. Cada trimestre, el Instituto para la Investigación Social y Sindical (ISTUR) presenta en una rueda de prensa los datos sobre el coste de la vida, con arreglo a una metodología propia basada en una cesta de consumo de bienes y servicios que representa los gastos necesarios para una familia estándar de cuatro miembros. El cálculo se ha convertido en una referencia ampliamente aceptada para el coste de la vida, que sirve de base para la formulación de políticas en el país. El aumento constante del valor del salario mínimo en Bulgaria en los últimos años demuestra el ejercicio efectivo del poder social por parte de la CITUB, expresado mediante su capacidad para intervenir satisfactoriamente en los debates públicos, con un alto grado de poder discursivo y presión pública.

Campañas públicas

Los sindicatos desplegaron su poder social y su poder institucional a través de campañas que sensibilizaron a la opinión pública sobre el tema e influyeron en las instituciones para impulsar los objetivos de sus campañas.

Malasia: En 2012, tras una campaña de presión de cinco años del Congreso de Sindicatos de Malasia (MTUC ), Malasia aprobó la Orden sobre Salarios Mínimos (MWO), que establece el primer salario mínimo de la historia del país y su incremento cada dos años. Los sindicatos lograron la introducción del salario mínimo y consiguieron que este se convirtiera en uno de los principales temas de debate durante las campañas electorales políticas.

Además, se alinearon con la agenda del Gobierno y destacaron que el aumento

del salario mínimo es un componente necesario para la transición de una economía de renta media a una de renta alta.

Normas internacionales del trabajo y marcos regionales.

Los sindicatos utilizaron su poder institucional esgrimiendo las normas internacionales y regionales del trabajo para justificar sus objetivos de campaña y presentar argumentos jurídicos a favor del aumento de los salarios mínimos durante las negociaciones salariales tripartitas.

El Convenio 131 de la OIT sobre la fijación de los salarios mínimos establece la necesidad de procesos tripartitos regulares para la fijación de salarios mínimos, y exige que durante los debates sobre la fijación de salarios se tengan en cuenta las necesidades de los trabajadores y sus familias, además de los factores económicos y otros criterios. Los sindicatos han utilizado con éxito este convenio para exigir salarios mínimos más altos para sus miembros.

Senegal: Los sindicatos pusieron sobre la mesa las disposiciones del Convenio 131 cuando reivindicaron y lograron una revisión del salario mínimo en el país, tras más de dos décadas de estancamiento.

Bulgaria: La flamante Directiva de la UE sobre salarios mínimos y negociación colectiva, por la que los sindicatos búlgaros habían presionado activamente, obligará al Gobierno de Bulgaria a revisar nuevamente la adecuación de su salario mínimo. Además, los sindicatos pueden aprovechar esta norma en sus negociaciones con el Gobierno.

Acción colectiva

Los sindicatos ejercieron su poder asociativo y su poder estructural emprendiendo acciones colectivas para hacer valer su poder de negociación en las negociaciones para la introducción y adaptación del salario mínimo.

Nigeria: De 2015 a 2019, el Nigerian Labour Congress (NLC) y el Trade Union Congress (TUC) han liderado una conflictiva negociación con el Gobierno nigeriano para la fijación del salario mínimo. Las negociaciones fueron las más prolongadas de la historia y llevaron a los trabajadores a emprender movilizaciones sindicales para apoyar su causa. El NLC organizó una huelga general cuando el Gobierno se negó a aplicar el aumento del salario mínimo acordado entre los interlocutores sociales, movilizando así el poder social y estructural para garantizar el cumplimiento del acuerdo.

Estrategias de éxito

Los sindicatos que han hecho campaña y logrado la introducción o el ajuste a la inflación de los salarios mínimos en sus países ofrecen ejemplos de buenas prácticas que los sindicatos de otros países pueden usar para crear la hoja de ruta de sus propias campañas locales. Al optimizar sus capacidades a través de las cuatro fuentes de poder, los sindicatos amplificarán las voces de sus miembros y darán un impulso a sus campañas para lograr un impacto en el mundo real.

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Contrarrestar la narrativa que afirma que los salarios mínimos son perjudiciales para el empleo y el crecimiento, mediante la recopilación de pruebas empíricas y estudios. Esto implica recabar datos exhaustivos sobre el coste de la vida para reforzar las negociaciones y hacer hincapié en la importancia de aumentar el salario mínimo. En Bulgaria y Macedonia, este fue un componente clave de las estrategias de los sindicatos.

Optimizar el poder institucional es crucial para garantizar un diálogo social constructivo, las negociaciones sobre el salario mínimo y los ajustes periódicos. En todos los países analizados, los sindicatos eran miembros activos de los comités salariales o laborales tripartitos oficiales, lo que garantizaba que las reivindicaciones de los trabajadores fueran escuchadas por los responsables de la toma de decisiones.

Realizar campañas públicas y formar alianzas con académicos y grupos de reflexión progresistas para contrarrestar la retórica política y social que mantiene a los trabajadores mal pagados, obtener apoyo público y hacerse oír a escala nacional. En Bulgaria, Costa Rica y Nigeria, las campañas en los medios de comunicación fueron cruciales para defender la necesidad y los efectos positivos de la introducción y el ajuste de los salarios mínimos.

• Conseguir un aumento salarial: estrategias sindicales para garantizar el salario mínimmo vital https://www.ituc-csi.org/IMG/pdf/winning_a_pay_rise_es.pdf

• CSI El mundo necesita un aumento salarial: https://www.ituc-csi.org/IMG/pdf/promoting_minimum_living_wages_es.pdf

• Guía sobre políticas en materia de salario mínimo de la OIT

• Informe mundial sobre salarios 2022-2023 de la OIT

Acciones sindicales 06/2023
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