Reportaje periodístico por Inda Urrestarazu

EL TERROR DE UNA OLA

INDA URRESTARAZU

DÉJÀ VU DE MADERA

Inda Urrestarazu Sánchez

DÉJÀ VU DE MADERA

INDA URRESTARAZU

Para mi padre

DÉJÀ VU DE MADERA

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Déjà vu de madera Sergio Urrestarazu lleva más de sesenta años creando barcos de madera

Sergio Urrestarazu preparando los planos del Alcontancillo.

Año 1968, Gran Canaria. Barrio de Escaleritas, clase obrera. Mrs. Robinson

a fabricarse una chalana en la azotea de su casa.

de Simon and Garfunkel suena en las radios de la mayoría de las calles.

Cincuenta y tres años después en las

"Whoa, whoa God bless you, please, Mrs.

Robinson",

escucha

calles de La Santa, Lanzarote, suena

Sergio

Location, de Karol G, en los móviles de

Urrestarazu con ocho años mientras

los adolescentes, pero en un garaje de la

piensa en un sueño que tuvo desde aún

calle Rosa de Los Vientos, Sergio

más pequeño, fabricar un barco con sus

Urrestarazu

propias manos. Sin poder esperar más se

mientras perfila con sus propias manos el

pone manos a la obra, y con chapas de

esqueleto de una chalana de madera de

madera barata, clavos y cola se dispone

aproximadamente dos metros.

escucha

Los

Panchos

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al que ella también ayudó a construir, se construyó poco a poco con los ahorros

Sergio nació en Las

que conseguía Sergio llevando barcos como patrón y fabricando muebles como

Palmas en 1960 y desde niño

carpintero, y este fue creciendo en

ha soñado con fabricarse un

diferentes

barco de madera Al garaje convertido en taller asisten

partes

del

pueblo.

"Al

principio estaba cerca de un bar dónde hacían las fiestas del pueblo, después en nuestra casa y al final en un terreno que

también Pedro Hassad, de 63 años y Neo

le

dejó

Pedro",

explica

Cristina.

de 55 años. Ambos son íntimos amigos

Después de tantos años, cuando al fin el

de Sergio y han compartido con él varias

barco pudo navegar sobre la mar, Sergio

de sus numerosas aventuras. Nació en

lo disfrutó con numerosos viajes por la

Las Palmas en 1960 y desde niño ha

Macaronesia y el Caribe. Pero después

soñado con fabricarse un barco de

de tantas aventuras se dispuso a acabar

madera. Este sueño empezó a cobrar vida

un trabajo que dejó a medias cuando era

en 1998, cuando esta vez en otra isla de

un niño, un pequeño bote de madera.

Canarias, Lanzarote, empezó a construir un velero de madera, una labor que le llevó hasta mayo de 2017, 18 años en total.

"Al principio el barco estaba cerca de un bar, De izquierda a derecha, Pedro

dónde hacían las fiestas del

Hassad, Neo y Sergio Urrestarazu.

pueblo" Neo, patrón de salvamento marítimo

Sergio Urrestarazu

jubilado, conoce a Sergio Urrestarazu desde que era joven, cuándo empezaron

Según Cristina Sánchez, exmujer de

a llamarle "Halcón" por su particular

Sergio Urrestarazu, el velero de madera,

forma de hacer surf. En la década de los noventa se mudó al pueblo costero de La

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Santa, Lanzarote, dónde Sergio llevaba viviendo unos años. Según Neo, en aquel momento el Halcón ya se manejaba por ese pueblo como un residente más, incluso le ayudó a conseguir un permiso de vivienda presentándole al alcalde de la época en un bar.

Sergio Urrestarazu comprobando las

"Trabajaba como un

medidas con la maqueta de su velero en su espalda

animal" Neo

Segundo tornillo atornillado, Sergio se detiene

También

fue

testigo

de

cómo

construyo su casa, en el mismo pueblo, con sus propias manos. "Trabajaba como un animal, un día estaba paseando con la bicicleta y vi a Sergio cavando en su terreno, estaba haciendo la cimentación de la casa él mismo", apunta Neo. Esa misma casa es en la que actualmente Sergio, el Halcón, atornilla con un taladro el esqueleto de madera de su barquito, el Alcontancillo, en honor al velero de madera, su hermano mayor el Alcotán segundo.

para

estudiar

las

posibles

incorrecciones, se inclina para verlo desde múltiples perspectivas, toca la curva de la madera para comprobar que es la apropiada.

Para asegurarse de que no hay fallo le pregunta a Pedro Hassad. Si debería o no poner una pequeña chapa de más. Pedro toca la madera con su mano izquierda, el dedo medio esta amputado, signo de sus años como maestro carpintero. La conclusión final es que sí debería poner una pequeña chapa, no resulta un trabajo muy costoso.

"esta súper aprobado, de notable" Pedro Hassad

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Hassad conoció a Sergio unos años

Para crear esta chalana, barco de

después que Neo, a principios de los

madera, el proceso es el siguiente:

noventa, cuando Sergio Urrestarazu se

Primero se fabrica un molde hecho de

dispuso a vivir en Lanzarote y asistió a

madera que es parecido a un esqueleto

sus clases de carpintería en el instituto de

del barco. Después a este molde se le

arte de Arrecife. Ahí comenzó su

atornillan unas chapas que actuaran

amistad. que motivó a Pedro a construir

como el casco (parte del barco en

también su propio velero de madera. Hoy

contacto con el agua), luego estas chapas

en día está retirado de su oficio, pero

son embardunadas con fibra y resina,

sigue actuando como maestro de su fiel

para plastificarlas. Una vez secada la

amigo. "Esta súper aprobado, de notable,

resina se desatornilla la chapa y se separa

pero como siempre ahí que hablar de

la chapa plastificada, quedando con la

algunos detalles como este de aquí…"

forma del casco. El molde guía

aconseja Pedro Hassad señalando a una

permanece a la espera de crear otro

curva de la madera.

barco, y el casco recién separado se

Según él lo que más sorprende de el Halcón es la ilusión con la que trabaja

rellena en su interior hueco con bancos de madera.

cada día. "Es lo que le mueve para acabar los trabajos", dice.

"Trabaja todos los días, hasta los

La creación de un barco a mano es

domingos, pero le está quedando muy

laboriosa y se necesitan cantidades

bonito", explica Milagros, de 70 años

abismales de paciencia. Primero Sergio

quién le alquila a Sergio una de las casas

Urrestarazu estudió un plano que tenía

que fabricó hace años, justo al lado de su

guardado hace más de diez años, en este

garaje. Hace aproximadamente cinco

plano se mostraba una base de un barco

años, Milagros alquiló la casa de madera

para crear otros.

para vivir cerca de su familia. Cuando pasea su perra pasa delante del garajetaller y ve cómo avanza poco a poco el barquito de madera. Ella cuenta cómo al principio la construcción tenía una forma arbitraria, sin parecer un barco, y que día a día se acerca más a una embarcación.

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Sergio recibe el aprobado

El primer barco de Sergio

de sus amigos, pero aun así

lo tiró por la azotea porque

sigue contemplando la

se había roto con la lluvia

construcción en busca de Sergio sonríe, se acuerda de como

fallos

hace cincuenta y tres años subió a su azotea en un día de tormenta y vio como Ahora de nuevo en el garaje-taller, Pedro Hassad coge el cepillo de madera, una herramienta que va cortando lascas de la chapa. Cepilla la madera agarrando la herramienta con sus nueve dedos, y después de unos minutos se detiene y mira el barco a contraluz. Sergio, el Halcón, contempla con su amigo la construcción. Neo exclama en voz alta como Pedro maneja las herramientas con

la lluvia había destrozado el humilde barquillo que había intentado construir, soltando el pegamento y arrancando los tornillos. Y de un arrebato infantil tiró las maderas por la azotea, cayendo como la lluvia. Siente como si ya hubiera vivido este momento, según Sergio "es cómo mi sueño se cumpliera ahora, después de tanto tiempo, es cómo un déjà vu".

soltura, se nota que es el maestro. Sergio recibe el aprobado de sus amigos, pero aun

así

sigue

contemplando

Una tradición milenaria

la

construcción en busca de fallos, no encuentra ninguno. Al final da los últimos toques y da por acabado el trabajo

del

día,

mañana

seguirá

trabajando. "Le quedará un mes de trabajo" exclama Pedro, cuando ya llevan dos semanas trabajando en ello.

Sin saberlo, Sergio Urrestarazu está siguiendo una tradición que se practicaba desde hace siglos en las Islas Canarias, la carpintería de ribera (carpintería de barcos). Según un estudio de la

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Universidad de Gran Canaria, Origen

península y las islas y en antaño era muy

competitivo de los botes de vela latina en

respetado pues, según explica Óscar

Gran Canaria, los primeros carpinteros

Fuertes en su tesis Las carpinterías de

de ribera eran en su gran mayoría de

ribera en Galicia "el carpintero de ribera

Portugal, dado a la tradición marinera de

era un artesano polivalente, capaz de

los lusitanos, pero en poco tiempo

utilizar toda su sabiduría y destreza

surgieron

artesanos

técnica tanto en la construcción de

dedicados esta actividad y las primeras

embarcaciones de madera, como en el

normas

barcos

diseño y construcción de su propio

canarios. En 1556 las Ordenanzas del

taller". Sergio Urrestarazu trabaja en la

Consejo de Indias ordenaron que los

fabricación de su barquito desde su taller

barcos canarios debían tener capacidad

también construido a mano, siguiendo

máxima de ochenta toneladas.

sin saberlo una tradición milenaria.

los

para

primeros

construir

los

El carpintero de ribera, oficio con tradición en las Islas Canarias, era un artesano polivalente

A su vez en la costa de Tenerife, los pescadores

tradicionales

utilizaban

barcos de madera propulsados por una vela,

estos

barcos

eran

utilizados

también como medio de transporte hacia los caladeros, como bien se explica en Tecnologías y estrategias tecnológicas tradicionales del litoral de Tenerife, estudio elaborado en la Universidad de La Laguna.

El oficio de carpintero de ribera es muy generalizado en las costas de la