Comentario la trueka de mashara por Juan Ayala

Cróticas de “La Trueka 2015”

COMENTARIO Dic.

Revista El Zahorí

2015

Sobre el evento “La trueka 2015” del espacio cultural “231” realizado en Plaza Francia 231 (Cercado de Lima), el sábado 12 de diciembre de 2015.

A los participante de “La trueka 2015”, “para que comprendan que el mejor trabajo es el trabajo que hacemos por los demás”, es decir, con nuestros pares.

Manuel Scorza, Garabombo el invisible, 1977 JA, el cronista, 2015

1

Cróticas de “La Trueka 2015”

Afiche oficial [Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

Crótica[1] sobre otro centro/periferia en el propio centro de Lima[2]

“Esto no es un centro cultural” A modo de introducción

C

sagrados corazones ―amigo de hace muchos años de HQ― le ofreciera gratuitamente los distintos ambientes del salón Parroquial para que ella los utilizara según su mejor criterio. Y a HQ no se le ocurrió mejor respuesta que sí pero con una condición: no pedir/recibir dinero alguno de parte de la parroquia: luego nos confesaría que fue “para cuidar la auto-nomía creativa”. Pero también no se le ocurrió mejor primer paso que convocar a todo aquellos que ya conocía desde que decidiera migrar desde la seguridad de la arcadia que representa su propio local en la urbanización Elio (Lima).

En este tránsito desde el Jirón Víctor Criado

on esta (provocadora) idea ―y obvia-mente con otras ideas más― la actriz-dramaturga Hildy Quintanilla [desde ahora, HQ], de la agrupación Mashara, Teatro inter-cultural [desde ahora, MTI], explicaba ―al finalizar la Trueka 2015, Intercambio de saberes― [desde ahora, LT15], las características que este entorno/con-torno[3] (contra-cultural) de la “231” viene desarrollando, en estos sus pri-meros meses de existencia[4].

En este sentido, tendríamos que empezar señalando que la “231” se empezó a pensar/hacer luego que un cura de los

2

Cróticas de “La Trueka 2015” a la Plaza Francia, es decir, desde el sector que llegó a significar hasta mediados del siglo XX la periferia de la ciudad hasta el propio centro histórico de la misma, sospechamos que se podría estar produciendo ―para esta actriz que reconoció en la propia LT15 que ya está cerca de los 50 años― una especie de ritual de paso, curiosamente de auto-regeneración sociocultural y fundamentalmente de ruptura ideológica con un modo de hacer las cosas y con una consigna de los tiempos actuales: ¡sálvese el que pueda!; consigna que subyace y guía ―al parecer― los proyectos artísticopersonales de la clase media baja o alta en la actual ciudad de Lima. En este sentido, una propuesta como la “231” va a contracorriente de todo aquello y fundamentalmente se articula a partir de y con aquellos que históricamente han estado descentrados, en el sentido de no gozar de los beneficios del bienestar y sosiego[5].

No pudimos cubrir las siguientes 06 actividades: 1) el taller sobre sexualidades libres, a cargo de una joven de nombre Mary; 2) Conversa “Fijación de cimientos sólidos para el cambio del sistema”, a cargo de un hombre canoso de nombre Dante Ochoa; 3) la preparación colectiva del postre, a cargo de Silencio; 4) el taller de danza, a cargo de una joven de nombre Urpi; 5) el taller “Salud sexual y reproductiva”, a cargo del colectivo “Las Insurgentes”; 6) el taller de bicicletas, a cargo del colectivo “Biciraymi”.

No tenemos certeza alguna si se llegaron a realizar las siguientes actividades: 1) El taller “Narración 2. Desde la ira”, a cargo de Milagros Panta; 2) El taller de Malabares, a cargo de Ángela Díaz; 3) “Historia del hip-hop” a cargo del colectivo “Patrulla Autodidakta del Zur”.

Lo que a continuación sigue es la crótica de LT15 que ―como ya venimos cons-tatando en eventos como, por ejemplo, la Muestra Regional de Teatro― no es posible que sea cubierto a cabalidad por un solo individuo, especialmente por una característica de este evento en particular que complicó todo: las actividades paralelas y simultáneas que se abren y concluyen indiscrimina-damente y sin mucho aspaviento. Así pues, del conjunto de actividades programadas sólo pudimos cubrir y/o estar en las siguientes 13: 1) Historia de la animación, a cargo de Rosa Dávila; 2) Pegotes en la calle, a cargo del colectivo “Mal de ojo”; 3) Lucha social y contracultura punk, a cargo de un joven apellidado Cépeda; 4) Poesía colectiva, a cargo de un joven de nombre Diego Portillo; 5) Taller de Tejido de cintura, a cargo de tres señoras andinas del colectivo “Awanchik”; 6) el almuerzo colectivo; 7) Agricultura urbana, a cargo de Eduardo Takeshi; 8) El mercadillo 9) Cuentos, a cargo de Fabiola Bazán; 10) Micro Libre, intervenciones artísticas de dos chicas del hip-hop, Fabiola Bazán con un cuento, Mashara con una versión de “Alas de lata” para espacio abierto, Silencio con dos cuentos cortos, Frank con cuento y mala-bares; 11) La rifa de una cámara fotográfica y de una bolsa del colectivo “Las insurgentes”, a cargo de “jauría, red de fotografía”; 12) Palabras finales de HQ; 13) La limpieza, acomodo del lugar y fotos grupales.

Por otro lado, 02 actividades programadas fueron canceladas: 1) “Coca y plantas maestras”, a cargo del colectivo “La interprovincial”, 2) “El teatro y Scorza”, a cargo del Teatro de Ciencias Sociales de la Universidad de San Marcos.

En esa medida, constatamos que en LT15 se realizaron 16 actividades entre conversas y talleres, a las que habría que sumar las 03 actividades de participación ―digamos― obligatoria: el almuerzo, la clausura y la limpieza, y una actividad alterna como el Mercadillo. Es decir, 20 actividades de 25 programadas, con tan sólo 02 actividades oficialmente suspendidas y probablemente otras 03 más. Todo un éxito, pues se realizaron desde pasadas las 9:30 de la mañana hasta pasadas las 7 de la noche.

Por último, dejar constancia que en esta crótica no podemos dejar de ser lo que somos: un teatrero (ahora, teórico) que no sólo re-piensa los acontecimientos y las ideas que subyacen en ellos, sino que los plasma en documentos escritos. En este sentido, nuestras opiniones sobre una serie de aspectos ―y opinamos sobre casi todos los temas e incluso encontramos niveles en ellos― no van a eludir la confrontación desde esta condición nuestra, especialmente desde alguna epistemología teatrológica y cierta teoría de la cultura.

JA, el cronista Revista El Zahorí 151215

3

Cróticas de “La Trueka 2015”

Cróticas de LT15 01 Historia de la animación Por Rosa Dávila En un salón

L

os participantes se ubican en las sillas que están acomodadas en forma de “U”, de tal manera que el lado sin sillas le corresponde a Rosa Dávila [desde ahora, RD] que se mantiene de pie en todo momento. A su izquierda y junto en el vértice de los lado sin y con silla, sobre una mesa vemos una grabadora.

No registramos la hora de inicio pero ―digamos― ésta podría ser las 9:45 de la mañana. Por otro lado, alguien comienza a tomar fotos y se encuentran presentes alrededor de diez personas.

RD es una joven de ± 25 años, utiliza anteojos, sino estudiante universitaria, entonces recién egresada en Ciencias de la Comunicación[6], probablemente de alguna universidad local.

I La conferencia comienza con un ejercicio motivador: RD nos pide que cerremos los ojos y que veamos con los oídos[7]. Entonces prende la grabadora en donde tiene introducida una USB, y aquella reproduce un sonido que entendemos como “lluvia con truenos lejanos”. Lugo RD pregunta qué era/significaba ese sonido. Una mujer dice “agua…” y un hombre: “truenos…”. Entonces RD nos explica que aquello que habíamos escuchado era un paisaje sonoro y cómo en una ficción sonora puede devenir en leif motiv[8]. Luego especifica que en el paisaje sonoro hay tres planos: el primero es fuerte y el tercero más débil, y que todo sonido es “importante, poderoso…”.

A continuación nos hace escuchar otro sonido motivador que a diferencia del anterior es mucho más abstracto: un sonido agudo y monocorde en un primer plano y detrás de este otro sonido más débil que induce la idea de un tecleo mecánico. Ante las múltiples interpretaciones, RD concluye que “no todos tenemos la misma capacidad auditiva… y el silencio no existe, así como el negro no es un color…”.

II RD nos hace ver una fotocopia en donde se ve la propaganda de algunas telenovelas que pasaron en la TV local. Esta publicidad de los años ‘70s le sirve de introducción para hablarnos que en la ficción sonora hay tres tipos de guiones: el literal que “es fiel a la historia…”, el guion adaptado y el guion libre que “es una mezcla de los dos anteriores…”. Luego habla de la presencia del narrador. Y nos deja escuchar un fragmento en inglés de “La Guerra de los mundos”. A continuación un fragmento largo de una “ficción sonora sobre una nave en el espacio que llega a un planeta de mujeres…”. Así pues, nos enteramos que este fragmento largo es un ejercicio que preparó para la universidad, lo que nos hace pensar que aún se encuentra estudiando.

Apremiada por el tiempo, RD trata de resumir los recursos que ha venido señalando.

Por último, nos deja escuchar algunos fragmentos sobre sobre la importancia de la radio.

III En el último segmento de la conferencia RD pregunta si “Mi novela favorita” es una ficción sonora o una radionovela. Señala que la condición fundamental de una ficción sonora está en el tiempo de duración de la misma. “Si es seriada, es decir, consta de capítulos…” es una radionovela y si se da completa en una sola unidad de tiempo es una ficción sonora.

4

Cróticas de “La Trueka 2015” Con el tiempo ya vencido nos pide que escuchemos radios de otros países y que “Radio España es muy buena…”. Así pues, RD concluyó su conferencia con las siguientes y rotundas afirmaciones: “la radio es lo más cercano a la gente… Te hace más imaginativo… La TV te lo pone todo”.

El reloj marca las 10:25 de la mañana. Nos acercamos a ella y le planteamos que algunos sostienen que ya se ha cancelado el hombre tipográfico[9] de La Galaxia Gutenberg. Ante una ligera mueca de fastidio, le preguntamos si ha leído este libro del filósofo canadiense Marshall McLuhan (Alberta, 1911). Como reconoce que no lo ha leído, desistimos de hacerle la pregunta[10].

A modo de primeras conclusiones sobre la animación RD a contracorriente de la actual cultura visual trata de re-infundirnos aquella fascinación y confianza por un medio (sonoro) como la radio que desarrolló ―tanto en nuestros padres como en nuestra pasada niñez― cierta manera de entender la cultura auditiva; revolución tecnológico-digital que viene imponiéndose no sólo a través de la mayor resolución de ciertos aparatos registradores[11], sino fundamentalmente revolucionando la mentalidad de los sujetos (sociales). En este sentido, más que la hegemonía de la mirada por encima de la hegemonía de la escucha, más bien necesitamos la hegemonía del medio que aporta mayor información (McLuhan, 1996: 43): en esa medida McLuhan sostenía por ejemplo que los “medios calientes” aportaban más información que los “medios fríos” y ubicaba a la radio dentro de los medio calientes[12]. Sin embargo, también podríamos agregar que más allá de la mayor información e incluso más allá de las sinestesias como recurso sofisticado, necesitamos más bien recursos simples, directos y eficaces.

El tema de la revalorización de la animación radial pareciera estar reconociendo que, a pesar de la masificación de los productos audio-visuales portátiles, estos no han podido aniquilar del todo al medio radial, aunque sí relegarlo bastante. Por otro lado, esta revaloración implicaría no sólo un gesto de resistencia (contra-hegemónico y romántico), sino también la manifestación de un prejuicio sociológico, ya que se podría suponer que los “pobres” ―por ser tales― no podrían acceder a la plataforma televisiva y sí a la plataforma radial, en el mejor de los casos, alternativa e informal a la que las radios formales ofrecen [recuérdese por ejemplo que en los mercadillos de abarrotes populares hay un sistema de parlantes que funcionan al modo de una estación de radio]. Sin embargo, preguntamos ¿de qué “pobres” y de qué “contra-hegemonía” estamos hablando?, y sobre todo ¿de qué imposibilidad estamos hablando si la red ofrece una serie de servicios radiales y relevisivos?

Por otro lado, la revaloración de la animación radial pone en el centro de la polémica el retorno del código oral con todo lo que esto implica no sólo en tanto “parlatura”[13] y retórica, sino fundamentalmente en tanto emisión/interpretación verosímil y veraz. A esta conferencia asistieron, finalmente, 15 personas, incluido el cronista.

JA, el cronista 151215

5

Cróticas de “La Trueka 2015”

02 Taller “investigación callejera. Pegotes y esténcil” Por el colectivo "Mal de ojo” En un salón

[Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

A

l llegar, HQ me entregó una fotocopia en donde se señalaban los horarios, los ambientes y los encargados de las actividades. Según esta programación, estructurada luego de la reunión del miércoles 9 de diciembre, este taller de pegotes y esténciles debe realizarse en el ambiente en donde la “231” realiza el Cine-cleta los días lunes. Es un salón amplio, que tiene una enorme pantalla blanca en la pared del fondo. Al costado derecho, sobre una mesa hay una laptop conectada al proyector. Los siete participantes, así como los dos conductores se encuentran algunos sentados y otros echados en el suelo. Las carpetas rodean el ambiente, pero todos han renunciado a ellas, nosotros no. Miramos el reloj y este señala las 10:30 de la mañana.

Aunque es una pareja quien conduce el taller, es el joven de nombre “Ato” quien explica lo que se está proyectando. Al igual que el otro integrante que resulta siendo una muchacha ambos tienen ± 25 años de edad; aquella oculta disimuladamente la admiración que parece tenerle a “Ato”, mientras que este habla con un ritmo pausado.

El primer segmento del taller consiste en mostrar videos y fotos de fotografía muralista. Así, “Ato” proyecta el video “Raf3 intervención mp4”; luego el manifiesto fotográfico “El miedo que te venden…” de un colectivo de Córdoba (Argentina) que comienza con una (impactante) foto en blanco/negro en donde se ve un muchacho vestido muy pobre-mente pero con el ojo derecho cerrado [¿por algún golpe?]. El manifiesto parece alertarnos que todos los pobres con facha de delincuentes son usados por la propaganda para incentivar un clima de inseguridad y asegurar una represión indiscriminada. Luego las fotos enormes de un artista francés que cubre fachadas de edificios, así como otra foto, al parecer, del Brasil en donde se ve que sobre la escalinata de una favela han pegado una enorme foto. Por momentos parecieran fotos intervenidas con fotoshop.

6

Cróticas de “La Trueka 2015”

En el segundo segmento, “Ato” dice: “Queremos compartir una herramienta…” refiriéndose al programa PosteRazor 1.5.1 de partición de imágenes “¿Qué podemos hacer con esto…? ¿Qué mensaje transmitir…? ¿Dónde…?”. Mientras explica como programar los comandos de este programa, la muchacha va extendiendo por el suelo los fragmentos impresos en A4 de una foto en donde se ve un grupo de niños andinos.

Y entonces le encargan una tarea a los participantes: cortar los bordes para poder pegar los fragmentos. Y entonces explican qué pegamento utilizar: recalcan que los fragmentos se deben unir utilizando un pegamento no líquido, de preferencia de pasta, alguien por ahí dice: “Uhu…”, pues la humedad decolora las imágenes. No podemos dejar de pensar que esta tarea se asemeja al armado de un rompecabezas, pues mientras la pantalla muestra la imagen total, cada quien busca en el fragmento que tiene entre manos, alguna señal que les permita definir la ubicación exacta del fragmento. A modo de acicate para el cumplimiento de la tarea, “Ato” coloca un video de cerca de 14 minutos de duración sobre la protesta estudiantil en la Francia de 1968. En ese momento, HQ me invita a que me pase a una conversa contracultural.

Acepto, pues todo indica que el taller ya no va a realizar nada más, simplemente cortar y pegar los fragmentos. Así como en la actividad anterior, alguien toma fotos.

A modo de primeras conclusiones del taller de pegotes Pareciera que el colectivo “Mal de ojo” nos estuviera enviando tres grandes mensajes: 1) que renunciemos a “la reproducción mecánica”[14] de las gigantografías, pues con el programa Poste Razor podemos ampliar y sobre todo reproducir imágenes en formatos mayores; 2) que recuperemos algunos aspectos de la exigencia de hacerlo uno mismo y con cierta dosis de trabajo artesanal, por ejemplo en el recorte de los bordados y en la unión de los mismos [¿también tendríamos que reconocer que podríamos recuperar cierta dosis del “aura” de la imagen original?]; y 3) que nos apropiemos, reproduzcamos y expongamos las imágenes que consideremos necesarias, pues estas contienen significaciones, kinésicas, paralingüísticas y proxémicas (Eco, 1978) que el “lector” de imágenes podrá ―y de hecho puede― descubrir, sin que nadie se lo diga, se lo explique o se lo recalque.

JA, el cronista 151215

7

Cróticas de “La Trueka 2015”

03 Conversa “Lucha social y contra-cultura punk” Por Cépeda En un salón

C

uando llegamos al salón, notamos que en una de las esquinas han colocado las sillas formando una “U” pequeña. Cépeda, un muchacho de ± 30 años con un halo de barba rodeándole las mandíbulas, está sentado con las piernas cruzadas sobre una silla: postura poco usual, pero no nos sorprendemos, ya que por la experiencia del teatro callejero, sabemos que la necesidad de captar la atención genera una serie de posibilidades (provocadoras) ab libitum.

Luego que nos sentamos, notamos que alguien está tomando fotos. Al mirar el reloj descubrimos con sorpresa que son las 11:20 de la mañana. Y nos sorprendemos, pues no sentimos el discurrir de esos últimos 50’. Aparte de Cépeda y del cronista, se encuentran presentes tres participantes. Entonces Cépeda ―palabras más, palabras menos― dice: “Somos los que somos… El punk surge en los suburbios de Londres… Al igual que el hip-hop, su origen es contracultural…En el gobierno monárquico-fascista se expande este movimiento… Llega al país vasco con una visión más anarquista y social…”. Luego pide “que cada uno diga por qué está aquí…”. Entonces un muchacho de nombre Alex responde que “para escuchar, saber, aportar…”; la chica del Cine-cleta pregunta: “¿Qué tan ligada está la ideología punk con la música…?”; un muchacho dice: “El punk como parte de la movida subterránea… Cómo el contenido crítico va cambiando con el hip-hop y con la vinculación con el movimiento anarquista…”; la gemela de la chica del Cine-cleta pregunta: “¿Cómo se origina el punk…? ¿Cómo va evolucionando o involucionando…?”. En ese momento notamos la presencia de HQ, al parecer es ella quien está tomando las fotos. Ante la presión del grupo nos vemos obligados a decir algo, y entonces recalcamos dos temas y una pregunta. Los temas son: 1) nuestra condición de cronista y la necesidad de que los eventos dejen un documento escrito que dé cuenta de ellos, y 2) no sabemos nada del movimiento punk y no nos sorprende pues en una ciudad como Lima de más de 40 distritos, las actividades se desarrollan en una condición de archipiélago como nos lo demuestran las prácticas escénicas; y, para poder hacer la pregunta es necesario hacer la siguiente introducción: así como las vanguardias artísticas “sabían que nacían para morir” como decía el profesor universitario Nicolás Casullo en un libro [15] que utilizan los estudiantes de CCSS de la Universidad de Buenos Aires titulado “Itinerario de la modernidad”, así también habría que preguntarse si en la movida contracultural qué otras propuestas anteceden a la propuesta punk.

8

Cróticas de “La Trueka 2015”

[Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

Luego un hombre mayor, con muchas canas dice: “Permítanme decirles hermanos… El punk está ligado al anarquismo… En el universo interactúa la materia…

El anarquismo está ligado al tema de la libertad… Hay un divorcio entre nosotros… Por la capacidad de la memoria más los instintos naturales hemos adquirido el ego… Somos los que somos… Para ser un ego positivo a esa esencia de libertad hay que agregarle respeto… El anarquismo puede ligar muy bien eso…”. Por su parte, un muchacho de nombre Cristian dice: “El punk es un estilo de música…”. A su vez, HQ dice: “Quería escucharte… En los años ‘80s en la universidad San Marcos, en la Unidad Vecinal Nº 6… Cómo lo contabas…”. Entonces Alex dice: “Hay que propagar las ideas del anarquismo… Que en el punk haya gente que se drogue eso no es anarquista, eso es liberal…”. Una muchacha dice: “Me interesa mucho la contra-cultura general… El sistema lo absorbe todo y lo convierte en producto… Es complicado… La Contra-cultura se puede convertir en un gueto… No siempre estar aislado es positivo…”. Cépeda contesta: “El punk se origina a finales de los ‘70s… Cuando surgió no era anarquista…

Cuando es moda se basa en una imagen… Impulsaba la libertad del ser, del individuo…

Hay anarco-punk… El punk musical se caracteriza por ser simple… Tocar por tocar…

Tiene muchas similitudes con el hip-hop… Llega a Argentina a comienzos de los años ‘80s, también a Chile… A finales de los ‘80s llega al Perú… El punk musical es individualista, nunca tuvo una visión colectiva… Sólo para conciertos, como en el hiphop… Ahora es una cuestión estética, una moda… Las bandas emblemáticas van siendo absorbidas por el mercado…”. Entonces Alex lo interrumpe para decir: “En el punk necesita instrumentos…”. A lo que Cépeda contesta con: “Generar conciencia y compromiso… El hip-hop se mantiene… Recuperar el compromiso político…”.

La conversa se aborta a las 12:03 de la tarde, sin que Cépeda haya contestado nuestra pregunta.

A modo de primeras conclusiones de la conversa sobre el punk contracultural Esta conversa genera un corpus de temas (totalmente) polémicos. De allí que no es exagerado ―de nuestra parte― afirmar que constituyó ―hasta ese momento― en una especie de declaración de principios de ciertos colectivos participantes, con la cual había que confrontarse. Sin embargo, lamentamos la superficialidad de las exposiciones, justificadas ―hasta cierto punto― por la premura y la precariedad del tiempo establecido. En esa medida, este reclamo nuestro se inscribe dentro de una tradición de pensamiento, de la cual no pensamos adjurar, a pesar de que muchos de

9

Cróticas de “La Trueka 2015” nuestra generación lo hayan hecho ya y otros estén por hacerlo: no vamos a trocar la “percepción lineal y sucesiva”, con las implicancias de logicidad y causalidad, por aquella otra “simultánea y de perspectivas plurales” (Lehmann, 2013: 27) que implica la interdisciplinariedad y el eclecticismo. Es decir, no vamos a dejar de pertenecer no sólo a la cultura tipográfica de la que habla McLuhan en La Galaxia Gutenberg, sino principalmente no dejaremos de ser dogmáticos, frente al relativismo cultural e ideológico de los interdisciplinarios eclécticos.

En este sentido, le dejamos a Cépeda tres preguntas: puntuales 1) ¿Somos lo que somos o somos lo que nos dejan ser o lo que nosotros finalmente conseguimos ser? [en realidad, ¿los sujetos sociales son hechura de las imposiciones de los aparatos ideológicos de la sociedad o son el resultado, en el sentido de síntesis, de algo que se impone y de alguien que se resiste?], 2) Reconociendo de antemano que no producimos propuestas de vanguardia en ningún aspecto de la praxis social ¿qué se está haciendo para que conscientemente el proceso de apropiación/asunción de tal o cual postura contra-cultural se pueda mestizar con aquellas formas y significados que podríamos decir ya son nuestros? , y 3) ¿Qué es lo “nuestro” y qué es lo “ajeno”?

Y por último, señalar que pese a la brecha generacional [jóvenes/viejos], por momentos ideológica [anárquicos/no-anárquicos], y por otros momentos de género[16] [mujeres/hombres], e incluso por otros momentos de antigüedad institucional [fundadores/no-fundadores], las diversas conversas y ésta en particular, podría estar señalando que el diálogo aún es posible, por más superficial, introductorio, general, y ―hasta cierto punto― conciliatorio que éste haya sido.

JA, el cronista 161215

10

Cróticas de “La Trueka 2015”

04 Taller “Creación y Poesía colectiva” Por Diego Portillo En un salón

C

uando llegamos al salón, son las 12:15 del día y ya se encuentran reunidos. Todos están acomodados a ras del suelo: sentados o echados boca abajo. Preferimos sentarnos en una carpeta, para tener mayor comodidad mientras tomamos notas. Pero luego, desechamos la carpeta y nos sentamos en el suelo para no tener/estar en una posición por encima de ellos que genere un automatismo de posición privilegiada y dispare ciertos condicionamientos.

Este taller lo dirige un muchacho de tez cobriza y de ± 30 años de nombre Diego Portillo [desde ahora, DP], y a su lado, una muchacha robusta de tez blanca, parece ser su apoyo. Entonces, DP pide que cada uno se presente y señala que lo hagan desde su izquierda. Así, no sólo descubrimos que hay nueve participantes, sino que es alta la presencia femenina. Entonces la primera en presentarse es una señora mayor de nombre Teresa que se define como “tejedora…”; luego una muchacha que dice: “Lo colectivo me gusta mucho…”; le siguen Mary, Humberto, Sofi y la muchacha del hiphop, así como Anthony también del hip-hop. Por nuestra parte, empezamos señalando que desconfiábamos de los poetas, especialmente de los que se sienten el centro del mundo y que en todo caso la poesía me interesa siempre y cuando me aporte ideas interesantes sobre la realidad. Luego compartimos de una experiencia de poesía colectiva que tuvimos en 1992: el cadáver exquisito que proviene de los surrealistas franceses y que los integrantes del elenco de teatro universitario “Telón” de la Universidad San Martín de Porres ayudaron a que se confeccionara a raíz del estreno de la versión de “El otoño del patriarca”; luego dijimos que así como se dice con respecto a las artes escénicas de que hay muchas mujeres que actúan pero pocas actrices que logran construirse un oficio, así también se podría decir lo mismo con respecto a que hay mucha gente que escribe, pero pocos poetas. A continuación, una joven de ± 30 años de nombre Urpi dice: “Siempre escribo para mí como una forma de catarsis… Lo que el azar nos proponga… Algunos poemas no me han conectado por los códigos o porque son muy personales… Las artes buscan comunicar… Desde la danza, cómo busco el oficio, cómo conectar…”. A continuación el hombre canoso de nombre Dante Ochoa dice: “El arte es universal… Todos somos artistas… Cada quien tiene su don… El arte es una manifestación de la libertad…”. Y por último, la chica que apoya a DP dice: “La poesía colectiva no es sólo plasmar lo que cada uno escribe y lo que siente…”. Entonces DP dice: “Discrepo con la relación poeta/poesía… Si algo me toca,

11

Cróticas de “La Trueka 2015” entonces eso es poesía… El cadáver exquisito es el ejemplo más claro y más común…

Me gusta hablar más de la experiencia de escribir juntos… El aprendizaje más grande es el que queda…”.

En la segunda parte, DP nos pide que “cada uno escriba una primera cosa y que luego se lo pase al de la derecha para que éste agregue algo más, ya sea como ayuda o polémica…”. Para ello, distribuyen una tira gruesa de papel blanco, así como plumones de distintos colores. Luego de esto, sólo queda hacer. El tiempo sólo nos alcanza para cumplir cuatro rotaciones, lo que significa que no todos logran colocar una nueva línea.

A las 12:55 le avisan a DP que debe terminar. Entonces, DP pide que todos lean lo que tienen [intrigados por la última línea que han escrito en nuestro papel, indagamos al respecto y descubrimos que ha sido la gemela del Cine-cleta…]. A la 1 de la tarde el taller ha concluido. Intrigado por la dinámica, nos acercamos a DP y le preguntamos qué hubiera seguido de haber tenido más tiempo. Nos responde con una tranquilidad pasmosa que de tener más tiempo le hubiera gustado conversar sobre lo que cada uno había escrito. Para nosotros, pensamos que parte de eso debería centrarse en los textos-producto, pero no se lo decimos y simplemente nos marchamos.

A modo de primeras conclusiones del taller de poesía colectiva Este taller pretendió un objetivo sencillo: que escribamos un texto (poético), y al hacerlo elaboración del mismo pero más bien ese objetivo nos reveló una complejidad asombrosa. En este sentido, participar en él disparó un cúmulo de sensaciones y de ideas ex profesas. A diferencia de la conversa anterior que buscó el re-pensar, este buscó el hacer. En esa medida, el pragmatismo no sólo se impuso a la reflexión, sino que también nos introdujo en una experiencia fascinante: estructurar un discurso que no nos pertenecía del todo o que en todo caso, no controlábamos del todo. Al parecer, esta precariedad terminó por maravillarnos. Por lo tanto, su mayor valor (revelado) consistió en ese carácter de herramienta, en esa condición de dinámica, en esa cualidad de instrumento y en esa calidad de juguete[17].

Muchas cosas se quedaron en el tintero. De las principales podemos mencionar las siguientes: 1) El análisis de los textos, no sólo en su doble dimensión simultánea de “relato y discurso” (Blanco y Bueno, 1983: 24), sino también en su doble condición de expresión y contenido, es decir de estructuras significantes y estructuras de contenido.

2) La valoración del texto estructurado colectivamente en su condición de poético o no [¿qué dota a un texto del carácter poético?].

3) La identificación de la modalidad narrativa desde una discursividad de la mismidad o, en cambio, de la otredad [¿desde qué perspectiva se escribe poesía?].

4) El descubrimiento de las líneas temáticas, ideológicas y demás, bien sea como aporte del sujeto (social) o, en su defecto, como aporte del grupo de sujetos (sociales) [¿de qué da cuenta la poesía?].

5) El discernimiento sobre la ontología del texto poético [¿desde la subjetividad de las sensaciones y emociones o desde la objetividad del re-pensar de esas mismas sensaciones y emociones?]

A continuación vamos a reproducir los textos de tres participantes: el primero le pertenece a la señora Teresa Malpica, “artista en manualidades…”; el segundo le pertenece a la gemela Petit Campaña, del Cine-cleta; y, el tercero a JA, el cronista.

1

El agua es como estrella que te llama al miedo.

El miedo es agua embotada.

Registro del miedo en el cielo abierto.

Estrellas reflejadas. ¿Hasta dónde la memoria asustada marchará a su propia epifanía?

Se presentarán imágenes de acuerdo a las necesidades.

(Teresa Malpica, mujer mayor) 12

Cróticas de “La Trueka 2015”

2

Excitación constante de mis miedos traicioneros.

No temas, los miedos se superan y mejor cuando encuentras verdad. ¿Encuentros? Te encuentras, me encuentro sin cuentos.

No hay nada donde no puedo ver, abrir los ojos y buscar comprender.

Volver a mí.

El vacío es mirar a Dios o a la persona que más quieres.

(Petit Campaña, mujer joven) 3

La mismidad es el vicio solitario del yo. ¡Al carajo!

Conversa con el que parece diferente y aprendamos.

Uno tuyo, uno suyo. Más allá del uno mismo ser uno del colectivo.

Que camina en pensamientos y vuela hasta el sol quemándose orgullosa. ¿Al carajo? Estoy en el carajo ya hace un buen tiempo.

(JA, el cronista, hombre mayor) JA, el cronista 171215

Primer Intermedio Encontramos en un salón el taller de danza que dicta Urpi. Por los ejercicios de reconocimiento corporal vemos que ya llevan algo de tiempo. Todos están descalzos o en medias. Finalmente, no nos atrevemos a entrar ―digamos― que por respeto a la disciplina que este tipo de trabajo implica, y también por respeto a Urpi que como cualquier otra instructora de alguna modalidad de las artes escénicas ―en este caso, la danza (¿moderna?)― seguramente se podría problematizar con los observadores que toman nota y están en permanente análisis de lo que se hace [18].

Entonces aprovechamos que ya son la una de la tarde para establecer a priori un intermedio que no implica un tiempo de relajo, aunque sí de descanso, que por cierto no dura mucho, pues finalmente empezamos a hacer acopio de información de las actividades en las que no pudimos estar presentes.

Así, conversamos con Teresa Malpica que resulta que ni es pariente de Carlos Malpica, ni conoce que existía un libro como “Los dueños del Perú”. Luego con Dante Ochoa que nos informa que lo suyo fue una charla, pero también una conversa. Se tituló “Fijación de cimientos sólidos para el cambio de sistema” que implica “ir a la raíz, es decir que la gente aprenda a recibir conceptos simples…”. Que viene desarrollando esta actividad desde hace quince años. Luego señala que “el ego es la conjunción de los instintos naturales de nacer, crecer, multiplicarse… y que nos permite sobrevivir…”. Posteriormente agrega que: “esta conjunción de instintos naturales con la memoria es el origen del ego… Memoria porque el cerebro ha evolucionado…”.

No podemos seguir charlando, pues nos convocan al siguiente taller.

JA, el cronista 171215

13

Cróticas de “La Trueka 2015”

05 Taller de telar de cintura Por tres señoras del colectivo Awanchik En la galería

[Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

P

ara este taller, una HQ consciente de que en ciertos aspectos el evento se ha rebasado a sí mismo y los horarios se han trastocado, pide que los participantes se acerquen. En uno de los pilares de la galería han sujetado dos telares. Entonces tres señoras de evidente raíz andina se ponen al frente de la situación. Se presentan como “Cipriana, Angelina y Marly…”.

14

Cróticas de “La Trueka 2015”

Una de ellas dice: “Rescatamos de nuestros ancestros la costumbre…”. Así, mientras Angelina va colocando hilos de colores rojo verde, amarillo y negro sobre una estructura de madera que tiene tres mástiles, otra de las señoras sigue diciendo: “Para correas, aplicaciones en los pantalones, vinchas, flor de Cantuta para llaveros, cortina de quipus, centros de mesa, porta-fotos en forma de cuadritos…”. Paralelamente la tercera de las señoras va mostrando cada de esos objetos. La misma señora sigue diciendo: “Toda esta riqueza debemos mantener…”.

Y como en los demás talleres, pasamos a la demostración práctica de la confección de una chalina. Una de las señoras dice: “Que salga tosco o fino depende del material… del hilo de lana…”.

Dos de las señoras se colocan el telar de cintura, para lo cual requieren de una faja. Llaman a los instrumentos en quechua. Así, la illagua es el conjunto de hilos de lana de colores, por lo general son de tres colores y que en el nivel básico sólo implica una illagua. La columna la llaman runan y callua es el palo en forma de agujeta plana con el cual tensan y comprimen la trama o mini.

A las 2:30 de la tarde el taller ha concluido con la información de que estas mismas señoras van a realizar un taller para principiantes para verano en la “231”.

A modo de primeras conclusiones del taller de telar de cintura Nos quedamos pensando que lo que estas señoras consiguen hacer con instrumentos y técnicas de la cultura andina, una hermana nuestra lo hace con palitos de crochet y probablemente con técnicas muy parecidas. En todo caso, que es universal este afán de elaborar productos con la lana, que no por utilitarios dejan de ser artísticos, al igual de lo que sucede con la alfarería, la talla en madera y en piedra.

JA, el cronista 171215

15

Cróticas de “La Trueka 2015”

Segundo Intermedio

A

éstas alturas del evento, éste se ha rebasado a sí mismo. El estimado en las duraciones ha resultado insuficientes, y en estos momentos, “está cobrando la fractura”. Sin embargo, se puede señalar que el evento es un éxito ya que de catorce actividades programas para el bloque de la mañana, no se han realizado sólo cinco de ellas: Narración 2 Desde la ira por Milagros Panta, Malabares por Ángela Días, Coca y plantas maestras por La interprovincial, La Historia del hip-hop por “Patrulla Autodidakta del Zur”(sic) y El teatro y Scorza por TUCS; e incluso se desarrolló una conversa no programada (Dante Osorio), con lo cual la cantidad de actividades totalizan quince. Por otro lado, sólo hemos cubierto cinco, es decir un tercio.

Lo que vuelve a poner sobre el tapete una problemática que ya reconocemos por nuestras participaciones en otros eventos (Muestra Regional y Muestra Nacional de teatro Peruano, por ejemplo): un solo cronista es insuficiente. Se hace necesario pues, un equipo de cronistas que no sólo registre, sino que también sistematice de manera colectiva, pues lo primero que se le pueden objetar a estas cróticas es precisamente la interpretación y la producción de sentido de una sola persona.

Sin embargo, el problema se ahonda precisamente por el tema de la dependencia, ya que aun habiendo un equipo de cronistas, éste seguiría siendo externo y sujeto a una serie de factores (por ejemplo que, estén cubriendo otro evento).

Entonces, la eficacia pasaría por el eje del compromiso. En esa medida, la “231” tendrá que evaluar las posibilidades de generar su propio equipo de cronistas, si es que quiere que sus actos (culturales) no sólo no se agoten en sí mismos, sino que no se cancelen con aquella cualidad de memoria flotante que todo acto humano implica en sí mismo.

JA, el cronista 181215

16

Cróticas de “La Trueka 2015”

06 Almuerzo colectivo En la galería

S

iendo las 2:35 de la tarde, HQ invita a todos para que se acerquen a una zona de la galería en donde han extendido un grupo de mantas andinas, sobre las cuales han colocado ―en una serie de recipientes― todo aquello que los participantes de las conversas y talleres están aportando para ser consumido colectivamente: abundan, entre otros, panes integrales, frutas [plátanos, manzanas y mandarinas], además de tomates y limones, botellas de agua. HQ se sienta en el suelo y a su lado se instala Silencio con su olla en donde está el postre que ha elaborado en su taller, pero en una de las bancas, dándole la espalda a una de las paredes de la galería; pide que le den platitos para distribuirlo entre todos. Algunos que no hemos visto en ninguna de las actividades se sienten convocados y se acercan.

Al parecer, todos son bienvenidos. Nos quedamos preguntándonos por este práctica social de compartir la comida que es consustancial con la tradición cristiana [recuérdese por ejemplo, la “multiplicación de los panes” en el sermón de la montaña], y también con la cultura andina, a tal punto que las señoras del colectivo Awanchik comparten en platitos de plástico ―que empiezan a circular entre todos nosotros― un guiso de papas ―que se parece al estofado― y del cual no pudimos captar el nombre.

HQ dice: “Tiempo inicial que siempre cuesta… También compartir el sentido del trueque… Cambió la hora, parece que todo se complica… La única fuerza parece que son los seres… También nuestra básica acción… Volver a la tierra… Dar y recibir y volver a tejer cosas…”. Aplausos de los presentes.

17

Cróticas de “La Trueka 2015”

[Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

Y entonces dejamos de tomar notas, para ir a recibir la “jalapa” como lo llama Silencio y que nos recordó el “sanguito”[19] de nuestra pasada niñez que curiosamente algunos de los presentes conocían y que incluso mencionaron el tipo de harina con que se hacía y la “chancaca” con la que se endulzaba. Sin embargo, a Silencio ―al parecer― no le hizo mucha gracia la comparación nuestra y movió la cabeza para negarlo. Lo que no le impidió servirme en una taza de plástico que le alcanzamos.

Antes de saborear este “queque” o bizcocho, le solicitamos a la gemela del Cine-cleta que nos preste su poema para tener una copia e incluirlo en la crónica. Lo hacemos rápidamente porque el olor de la “jalapa” nos recuerda que ya no es hora de trabajar sino de comer. Entonces, mientras saboreamos el bizcocho, la gemela nos pregunta si nos molestamos por lo que escribió en el poema nuestro. Le decimos que no, porque curiosamente su línea cerraba el poema, son sólo por el hecho de volver a una palabra (carajo) que habíamos utilizado, sino porque lo hizo con el plumón del mismo color de la primera línea e incluso porque empleaba tal palabra en otro sentido [con esta pequeña conversa, tocamos algunos aspectos que no pudimos tocar en el taller de poesía colectiva].

Entonces HQ pide que cada uno se presente y que diga lo que piensa. Lo que sigue a continuación es algo de lo que cada uno va diciendo, hasta que me dediqué a escuchar y me olvidé anotar. Así: “Cuando Mashara propuso esto… Qué es un saber…

Todos tenemos una destreza, un conocimiento… Pocas veces elegimos los saberes…

Hay muchas cosas que hemos aprendido en la calle… Parece que todo tiene que pasar por un régimen institucionalizado… Esto va a seguir… Sociedad de la mezquindad…

Hay tanta fuerza con las historias que cada uno trae… Cruzar las fronteras del activismo…Sociedad de la sospecha…Tú puedes elegir las maneras en cómo fortalecer los saberes…No es fácil… Eso es conflicto y no huyo… Acomodar unos horarios…

Aprender a tener paciencia contigo, conmigo mismo… Un aspecto que nos pueda mover… Buscar… Todos podemos ser alimento de los otros… Son cosas urgentes… Se vuelve vital crear acciones concretas… Vamos a seguir tejiendo… Y si hay que desatar la madeja, la vamos a desatar… Hay tiempo para volver a vernos…”.

Un chico de facciones orientales ―aunque también puede pasar como andino― utiliza las semillas del tomate para sembrarlas en la mitad de un botella de plástico, cortada transversalmente. Y la deja para que alguien la cuide en el verano.

18

Cróticas de “La Trueka 2015”

[Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

A las 3:35 de la tarde se levanta el almuerzo colectivo para preparar el mercadillo.

A modo de primeras conclusiones sobre el almuerzo colectivo Nos quedamos pensando sobre la idea de distintas colectividades alrededor de los alimentos que, por ejemplo, la poesía de Vallejo [20] testimonia de las siguientes maneras: ¡Se amarán todos los hombres Y comerán tomados de las puntas de vuestros pañuelos tristes Y beberán en nombre De vuestras gargantas infaustas! […] ¡La hormiga Traerá pedacitos de pan al elefante encadenado A su brutal delicadeza!

(Himno a los voluntarios de la República, del poemario España aparta de mí este cáliz) (Vallejo, 1988: 231) Pedro también solía comer Entre las criaturas de su carne, asear, pintar La mesa y vivir dulcemente En representación de todo el mundo (III, del poemario España aparta de mí este cáliz) (Vallejo, 1988: 239) Necesitas comer, pero, me digo, No tengas pena, que no es de pobres La pena, el sollozar junto a la tumba; Remiéndate, recuerda, Confía en tu hilo blanco, fuma, pasa lista A tu cadena y guárdala detrás de tu retrato.

Ya va a venir el día, ponte el alma.

(Los desgraciados, del poemario Poemas humanos) (Vallejo, 1988: 198)

19

Cróticas de “La Trueka 2015”

Pero también no podemos dejar de pensar en otra poderosa idea: cómo ―al parecer, de una u otra manera― el evento reproduce un escenario análogo al “sermón de la montaña”, pues el sermón de HQ busca precisamente lo mismo que el sermón del tal “Jesús” buscó en su momento: cohesión y pertenencia. Claro, con dos grandes diferencias a favor de HQ: 1) cohesión y pertenencia para realizar tareas (alternativas) en este mundo que resulta siendo el único que existe, y 2) con un sesgo y una predominancia del sector femenino.

JA, el cronista 181215

07 Mercadillo En la galería

U

tilizan la galería de la entrada. En un primer momento se colocan en el mismo lado, pegados para la pared. Las primeras en instalarse son las integrantes del colectivo feminista contracultural “Las Insurgentes”.

Entre las bolsas de lona con mensajes impresos, los folletines, las fotografías, resaltan un enorme pene y una vagina, colocados al modo de sujeta-papeles pero que adquieren ―o mejor dicho― recuperan sus verdaderos significados en el contexto de esta prensa alternativa sobre la problemática social de la sexualidad. Luego sigue MTI (HQ) que sobre un tul en donde se reconocen los colores del arco iris, acomoda su bicicleta y algunos números del sugerente y original poemario “Colibrí de papel.

Poética de a-Las de Lata” que publicara con Luis y Silvia del colectivo de comunicación popular “Hazlo Pirata”, que curiosamente también se instalan a su costado con fanzines y demás publicaciones caseras; luego las tres señoras del telar de cintura con sus productos en lana. Posteriormente, frente a MTI se instalan algunos colectivos fotográficos con fotos diversas. No todos utilizan sólo el suelo, algunos apelan a las bancas que transforman en mesas. Por último sobre las paredes se colocan una serie de fotografías de los otros colectivos que también están participando. Por otro lado, al fondo de la galería se percibe el nacimiento que la Parroquia ha levantado por la cercanía de la navidad; parroquia que mantiene abierta una oficina en donde los padres de familia vienen para la primera comunión de sus menores hijos.

20

Cróticas de “La Trueka 2015”

[Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

[Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

A modo de primeras conclusiones sobre el mercadillo Recuperando la (combatida y reprimida) tradición del desborde popular, los diferentes participantes se instalan en el suelo como los vendedores ambulantes hicieran en la Lima cuadrada hace algunas décadas atrás. Hay en todo esto un aire de feria dominical andina, pero sin los toldos y las mesas que se colocan en las ciudades del interior. El sol aún calienta. No son muchos, los “puestos” que se instalan. Sin embargo, reconstruyen ―no sin cierta nostalgia― avenidas como La Colmena o el Jirón Lampa en el centro de Lima, en donde los sectores pobres podían adquirir libros y

21

Cróticas de “La Trueka 2015” discos de segunda mano, diskettes “piratas” y un sinfín de demás cosas. Toda explicación es necesaria, porque es necesario preguntarse ¿de dónde proviene tu praxis?

Sin embargo, más que el objetivo de la venta, se nos hacen visibles los objetivos de la existencia y de la pertenencia: cada colectivo o sujeto es/son a través de los objetos diversos, pero fundamentalmente es/son por el sentido colectivo que la actividad genera, en parte por sí misma, pero también inducida como acaba de demostrar el almuerzo colectivo. Y eso es un mérito que hay que subrayar: la recuperación de lo colectivo en un momento de fuerte neo-liberalismo, de emprendurismo individual y de reconstrucción de las organizaciones (populares) de bases. Pero por otro lado, también sospechamos que la “231” no es la arcadia utópica de Tomás Moro (1478-1535), sino que como sucede en todo conglomerado social en dónde se encuentran presentes más de un sujeto (social), está sujeto a las tensiones y contradicciones de la convivencia (social), por las razones que aquellas sean que, sin embargo no les impide en hacer cosas. Nos quedamos pensando en ésta última idea y en un poeta local que se mencionó en el taller de poesía colectiva: “Martín Adán” o Rafael de la Fuente Benavides (1908-1985), quien a finales de los años ‘60s del siglo pasado se recluye en el Hospital “Víctor Larco Herrera” por casi dos décadas, por un lado por la miseria económica de la familia, pero fundamentalmente por esta “ruleta rusa” que significa vivir con y entre los otros. En todo caso, es muy temprano para tener algo definitivo: todo lo dicho es sintomático.

JA, el cronista 181215

Tercer Intermedio Aprovecho esta pausa para hablar con la chica del Taller “Sexualidades libres” y que por la reunión de coordinación del lunes 30 de noviembre sabemos que se llama Mary, quien nos cuenta que el taller se hizo “desde el cuerpo que nos da placer acariciarse el cuerpo hasta los pies… Luego un diálogo sobre o que sintieron… Dijeron que no se habían dado cuenta…” Concluye que es una necesidad “la necesidad de reconocer su propio cuerpo…” ya que “tocarse implica un conocimiento de sí mismo, buscando satisfacción/relajación…” y que esto “redunda en conocimiento…”. Luego sigue diciendo que “no abordamos el patriarcado, sólo la sexualidad libre… Y que es complicado explicarlo…”. Reconoció que los participantes sintieron satisfacción y agradecimiento. Por último afirmó que “asumo todo desde el feminismo…”, que el taller duró 40’ y que participaron cerca de diez personas, de las cuales seis eran mujeres.

22

Cróticas de “La Trueka 2015”

[Tomado del Facebook de Mashara, Teatro Intercultural]

08 Narración Por Fabiola Bazán En la galería

A

sí como para el taller de danza (moderna) nos enteramos de su existencia cuando este ya había empezado. Sin embargo nos atrevemos a entrar. Lo que sigue es una crótica fragmentada que no pudo cubrir la totalidad del mismo. en ese sentido, encontramos a Fabiola Bazán [desde ahora, FB], maestra de profesión frente a una serie de cuentos empastados y una audiencia cautiva de diez personas, seis de las cuales son mujeres. Está mostrando los dibujos y diciendo los textos de un cuento para niños que tiene por título “Más te vale mastodonte”, pero también haciendo hincapié en las recomendaciones para contar cuentos con los niños, pues el

23

Cróticas de “La Trueka 2015” máximo tiempo de atención de estos es de siete minutos. Luego responde algunas preguntas de los participantes.

FB es una mujer de ± 30 años de tez blanca, de cabellos largos, con un pequeño defecto en la mandíbula que por momento no la deja articular bien las palabras y con un polón marrón demasiado ancho para su torso que por momentos se le resbala por uno de sus hombros, dejando ver la liga negra de su brasier. Señalamos todos estos porque consideramos que atentan con su trabajo de mantener la atención de la audiencia en los contenidos de los cuentos.

El último de los cuentos lleva por título “Camino a casa” de los autores Jairo y Rafael que ―pese a tener a un “niño” y a un “león” como personajes― resulta siendo un cuento para adultos. FB se apoya en las imágenes del cuento que las muestra ante todos, pero fundamentalmente en los elementos paralingüísticos del decir los pocos textos que cada una de aquellas tienes impresos. En este sentido, modula la voz, gesticula con sentimiento y emoción, apela ―por momentos― al susurro cómplice o a la exclamación, y también al silencio, de tal manera que la conjunción de todos estos recursos expresivos construyen atmósferas e imágenes sonoras en base exclusiva al código verbal. Al finalizar pregunta: “¿Qué les pareció…?”. La audiencia responde con: “Interesante… La imagen ayuda… La forma en qué contabas… El tono de la voz… Las pausas para poder captar la imagen…”. Luego vuelve a mostrar la imagen final y pregunta por quien está en la foto, y nos sorprendemos: en ella está el “niño” abrazado (muy familiarmente) por el “león”. Ante lo cual, vuelve a mostrar la primera imagen: el “niño” está frente a una lápida en donde aparece el año de “1948”. Y entonces FB pregunta: “Si el “león” fuera una persona ¿quién sería…?”, y ella misma responde: “El “león” es el papá…”, después “Cuando el “león” se va, ¿A dónde se ha podido haber ido…?” Para finalmente aclarar el asunto: “El papá está muerto…”. Con lo cual todo el cuento, adquiere un sentido (pleno, coherente y totalmente objetivo). Y entonces se abre un espacio polémico que no terminamos de entender del todo: la propia FB reconoce que es un cuento que necesita ser leído con una información que no maneja, por lo general, un niño, como por ejemplo: “¿Qué sucedió en 1948…?”. Respondemos que “1948 significó el inicio de la “Guerra Fría”, en el Perú, el general Odría da un golpe de estado contra Bustamante y Rivero y en un desierto de los EEUU se cae un platillo volador…” [¿esto llegó a provocar algunas risas entre los asistentes?]. Sin embargo FB responde que 1948 alude al fin de la Segunda Guerra Mundial, totalmente discutible porque en realidad tal guerra termina ―en el frente europeo― en mayo de 1945 y ―en el frente del Pacífico― en agosto de ese año. En esa medida, 1945 no es igual en 1948, por más que haya tres años de diferencia entre ambas fechas y que tal lapso implica ―en términos históricos― demasiados sucesos a considerar.

Por último, FB le pregunta a los asistentes: “¿Cómo se sienten…?” Al parecer todos están, en primer lugar emocionados con estos cuentos, algunos de los cuales contienen valores simbólicos para el sector adulto.

El taller concluye sus labores a las 5:17 de la tarde.

A modo de primeras conclusiones sobre el taller de narración de FB Sospechamos que mucho tiene que ver la profesión de FB: sino es profesora de inicial, lo es de los primeros grados de primaria. En el modo de interactuar, tiene mucho de este tipo de profesora. En ese sentido, el taller está enfocado, en primer lugar, para sus colegas. En segundo lugar, la apariencia física también le ayuda mucho.

Sin embargo, debemos reconocer que a pesar de irse por la vereda de la fantasía, la pretensión es finalmente de encontrar una interpretación realista. En esa medida, FB salva y utiliza esa literatura infantil “light”, precisamente porque en la producción de sentido la re-dirige, ya no a la fantasía ni a la moralidad implícita (y casera), sino más bien a reconocer el contexto real(ista) en que esas fábulas

24

Cróticas de “La Trueka 2015” (fantasiosas e imaginativas) se desarrollan. Tal acto de interpretación recupera una tradición (hermenéutica) de análisis y síntesis de los textos, cualquiera que sean los códigos en que estos están “escritos”.

09 Micro Libre En la galería

E

l evento cuenta con un pequeño parlante con ecualizador y un micro de mano que instalan en un intersticio entre la galería que continúa con el mercadillo y la oficina de la parroquia que también sigue atendiendo a la gente que viene a preguntar por el bautizo.

De improviso un muchacho que estuvo en la conversa sobre el punk contracultural coge el micro y asumiendo el rol de “maestro de ceremonias” o de “animador”, no puede dejar de mostrase afectado, y sobreactuando una performance que no necesitaba tal “explosión” de testosterona anuncia que se abre el espacio del

25

Cróticas de “La Trueka 2015” “micro libre…”. Así pues, entendemos que se van a mostrar una serie de intervenciones artísticas. La primera en presentarse es una chica blanca de ± 25 años, vestida de negro, con unos pantalones ¿arremangados? Que por ahora vamos a llamar la “chica blanca del hip-hop”. “Dice” dos letras acompañada por la pista rítmica que reproduce una grabadora conectada en donde reconocemos el mismo USB que utilizó RD en el primer taller. Su performance muestra ―como en todos los hip-hoperos prototípicos― cómo el ritmo del hip-hop condiciona, conduce y caracteriza el accionar de los movimientos corporales. Las letras critican comportamientos y conductas sociales del imaginario ideológico-social, en algunos casos polémicos. En ese sentido, me quedo pensando en una de ellas: “No vengas a esta zona con tus libros y cuadernos…” que al parecer pretende cuestionar el conocimiento y el estudio, aunque en la segunda letra acierta a medias cuando dice: “Macho eres si maltratas a las mujeres…” aunque le faltó decir que tal fenomenología (conductual) también se produce al revés y que al parecer, nadie da cuenta de ello, porque no es políticamente correcto y no está en las agendas de las diversas ONG a las que sólo les importan el supuesto “discurso de género”.

La segunda intervención artística está a cargo de FB, quien cuenta y muestra “Camino a casa”. En algún momento dice: “Cuentos que hablan de las emociones: la pérdida, la frustración y la soledad…” y que permiten por ejemplo descubrir que “tú mismo te puedes salvar… que tú solito puedes salir desde donde te encuentras…”.

Salvación que en todo caso ―dándole el beneficio de la duda― no es posible de ser planteada sino como parte de interacciones sociales, que precisamente las opciones socializantes pondrían no sólo en juego, sino podrían su justeza.

La tercera intervención corre a cargo de Mará, una muchacha de ± 25 años del movimiento hip-hop de la “Pandilla del Sur” (Villa María del triunfo), quien “dice” dos letras propias, las cuales van un poco más allá de la descripción ideológicamente fenoménica que caracterizó la intervención de la primera muchacha; es decir, las letras de Mará son (nítidamente) más políticas, pues como dice ella misma: buscan “cambiar cosas del barrio…”, como por ejemplo en: “La mujer va a ser libre si el pueblo es libre…”, y que “Las grandes fechas no son por reivindicaciones sólo de las mujeres, sino de aquellas que lucharon contra una dictadura y que por eso instauraron el día de la no-violencia contra las mujeres…”. En ese sentido, Mará no se queda en el discurso netamente femenino, sino que lo inserta en un discurso más social. Al parecer, es la que mejor entiende y articula las reivindicaciones de las mujeres como parte de un universo mayor. Otro rasgo distintivo de Mará es que el acompañamiento rítmico se hace con cajón peruano y tocado en vivo por Eduardo Takeshi, el muchacho de los tomates del almuerzo colectivo. A estas alturas el reloj marca las 5:40 de la tarde.

La cuarta intervención está a cargo de HQ que presenta una versión dialogada de “Alas de lata”. Comienza diciendo: “Y si dejáramos que las cosas nos hablaran de ellas… En un entorno en donde muy pocos entienden…”. Luego se monta en su bicicleta y recorre la galería. Genera expectación e interés. Posteriormente desarrolla la secuencia en que la cleta se resiste mientras se escucha una movilización. Luego dice: “Soy chola pero no barata…”. El espectáculo sufre un percance: la bicicleta se cae, y HQ con bastante oficio improvisa diciendo: “Aquel día no se cayó…”. A estas alturas ya captó una mayor atención, sin embargo estando tan cerca de ella, a menos de un metro, percibimos los enormes esfuerzos que hace para concentrar la atención, pues se halla en polo blanco, en pantalones jeans, en zapatillas y con los lentes puestos. Se apoya en una pista grabada que reproduce desde un celular viejito que incluso tiene una rajadura en un borde; pista grabada que contiene los diferentes leif motiv del espectáculo y que ella enciende y apaga. En ese momento dice: “Todos sabemos que escondemos algo que queremos que el otro no vea… La pequeña mentira nos permite respirar… Intento ser una actriz que escribe drama no tan dramáticos [21]…”.

Por otro lado, reconoce públicamente que está cerca de los 50 años de edad: esta confesión es “dura” de reconocer frente a un público que ―como promedio― tiene la mitad de años. Continúa diciendo: “Es interesante que no haga poesía… En la forma está tu fondo… Considera el silencio”. Entonces interactúa con un sector del público:

26

Cróticas de “La Trueka 2015” tocando el timbre les pregunta: “¿Qué te dice…? Cierra los ojos…”, y algunos le responden: “Helado… Mi infancia…”. Luego retoma el discurso para todos: “Lo que hago en realidad es teatro…”. Y ejecuta la secuencia en que la bicicleta se resiste y no avanza y en esa tensión dramática termina borrando las marcas en la “pista”. A continuación dice: “Se va yendo… Pero hemos venido a quedarnos… Necesitaremos toda la bicicleta… Sólo un timbre”. Finalmente en una actitud ya no como personaje sino actriz dice: “Esta función está dedicada a Juan Ayala de Pasión Crítica…”. Nos sorprende totalmente. Luego sale. Miramos el reloj y éste marca las 6:10 de la tarde.

El espectáculo ha durado 25’.

La quinta intervención corre a cargo de Silencio, el mismo del postre“sanguito”, cuya primera acción es reproducir un sonido tipo “pututo” juntando ambos manos y soplando por un orificio ubicado en la primera articulación de y entre los dos dedos pulgares; un sonido que también recuerda la caracola. Así pues, cuenta un primer cuento sobre cómo el “ave de todos los colores” que vive en un palacio en la India como consejero del rey consigue alcanzar su libertad. Luego cuenta un segundo cuento “de la tradición colombiana…” que narra las vicisitudes de un personaje de nombre “Antonio A…” que sufría de envidia (compulsiva) y que vivía pobremente contando huesos en una plaza. Hasta que se encuentra con Juan “amigo de colegio…”que a la vez era hijo “del hombre más rico del pueblo…”. Entonces “Antonio A…” hace un pacto con “los tres demonio del infierno…” sabiendo que cuanto se le sea concedido a él, lo será también por partida doble para su vecino. Entonces “Antonio A…” pide lo siguiente: “Quiero que me quites un ojo…”. Un cuento que parece aludir a la ¿importancia? de las pírricas, pues su vecino seguirá siendo el hijo del hombre más rico del pueblo, pero ciego, mientras que un pobre como “Antonio A”, si quiera tiene un ojo. Miramos el reloj y este marca las 6:29 de la tarde.

La sexta intervención artística corre a cuenta de Frank, un muchacho de ± 30 años que hace malabares en el cono norte. Lo primero que hace es reconocer que está frío, entonces cuenta un cuento sobre un zorro que constantemente es objeto de burla por parte de las aves, pues se empeñaba en volar. Hasta que un día puede volar agitando dos plumas en la boca, pero al perder una cae y muere. Entonces las aves lo resucitan. Pero al resucitar el zorro piensa que todo ha sido un sueño. Luego pasa a las habilidades malabarísticas: con tres clavas que resulta elemental y sencillo: lo domina. Luego pasa a otro más complejo: tres clavas, más una pelotita roja sobre la frente, más aro que gira en una pierna. Cuando lo intenta con 4 clavas no puede hacerlo perfectamente, pues finalmente se le cae una clava. El reloj marca las 6:40 de la tarde.

Después de las intervenciones artísticas un representante de “Jauría, red de fotografía” que ha hecho una muestra de fotos y que está buscando un local dice: “Apostamos por la auto-gestión y contra las salas elitistas…”, realiza la rifa de una cámara “Diana-F”, en donde el número cuesta un sol que finalmente se la gana la señora Marly del colectivo de mujeres tejedoras Awanchik. Pero se realiza una segunda rifa cuyo premio es una bolsa de loma más un fanzin y dos fotos que se lo gana el número 1. La ganadora dice escuetamente “Gracias…”.

Y entonces, HQ dice las palabras finales: “No recibimos dinero y subvención de nadie… Esto no es un centro cultural… Esto es así porque estamos juntos… Yo confío en ustedes… Este espacio no es eterno, pero lo que vivamos nos puede juntar…

Porque puede haber un espacio donde se dan cosas importantes… Aquí no queremos que nadie regale su trabajo, pero donde hay que dar lo mejor… De lo que cobren en los talleres del verano, veinte soles van a ir al fondo común…”. Los participantes.

Lo que sigue es limpiar y dejar el espacio tal como se encontró por la mañana.

Todos meten mano en eso. Son las 7.10 de la noche. Terminado todo vienen las siguientes fotos, todas bajadas del Facebook de MTI:

27

Cróticas de “La Trueka 2015”

28

Cróticas de “La Trueka 2015”

Escribe: JA, el cronista juanayalab@yahoo.es Diciembre 20 de 2015

Bibliografía BLANCO, Desiderio y BUENO, Raúl (1983). Metodología del análisis semiótico, Lima: Universidad de Lima.

CASULLO, Nicolás (1999). Itinerarios de la modernidad. Corrientes del pensamiento y tradiciones intelectuales desde la ilustración hasta la posmodernidad, Buenos Aires: EUDEBA. DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA (1970), Madrid: Espasa-Calpe.

ECO, Umberto (1978). “Parámetros de la semiología teatral”, en André Helbo, Semiología de la representación, Barcelona: Editorial Gustavo Gili GROTOWSKI, Jerzy (1988). “ISTA y el teatro de las fuentes”, en Eugenio Barba y Nicola Savarese, Anatomía del actor. Diccionario de Antropología teatral, México: Grupo Editorial Gaceta, 1988.

LEHMANN, Hans-Thies (2013). Teatro posdramático, Murcia: CENDEAC. MCLUHAN, Marshall (1996). Comprender los medios de comunicación. Las extensiones del ser humano, Barcelona: Paidós.

MATOS MAR, José (1984). Desborde popular y crisis del estado. El nuevo rostro del Perú en la década de 1980, Lima: IEP ediciones

29

Cróticas de “La Trueka 2015” PAVIS, Patrice (1998). Diccionario del teatro. Dramaturgia, estética, semiología, Barcelona: Paidós Comunicación 10.

ROMERO, Fernando (1988). Quimba, fa, malambo, ñeque. Afronegrismos en el Perú, Lima: IEP ediciones.

SASTRE, Alfonso (2003). Los intelectuales y el teatro de hoy, revista digital la Ratonera, http://www.la-ratonera.net/numero12/n12_intelectuales.html (Consulta: 22 de marzo de 2014).

ULLMANN, S. (1977). “Nociones lingüísticas fundamentales”, en Luis Jaime Cisneros, Temas lingüísticos. Segunda serie, Lima: Librería Studium.

VALLEJO MENDOZA, César (1988). César Vallejo. Poesía completa, Trujillo: Editorial Libertad.

Notas [1] El término crótica lo encontramos en el artículo “La crítica en el periodismo diario” que el investigador español Santiago Fondevila publicó en una revista (digital) de distribución gratuita del Instituto Nacional del Teatro argentino (Cuadernos de Picadero, nº 21, diciembre 2010, p. 8-10). Por tal, Fondevila entiende: Contracción obvia entre crónica y crítica. Es un género (…) que incorpora elementos de análisis y opinión (…)

(Fondevila, 2010) En esa medida, no se sorprendan los lectores si por momentos encuentran más fragmentos dedicados a la opinión e incluso al análisis que a los hechos mismos.

[2] Como consecuencia del comentario 01 sobre la séptima y octava fechas de la XIV Muestra Regional de Teatro Peruano (AAA, domingo 02 y lunes 03 de agosto de 2015), detallamos los centros teatrales que conviven en el archipiélago teatral limeño y que luego reprodujimos en el comentario sobre la versión libre de “Prometeo encadenado” de la agrupación Aroma de Octubre. Así pues, mapeamos la ciudad de Lima buscando encontrar los otros centros y periferias que operan simultáneamente al centro que significa la AAA. Y encontramos, por ejemplo, centros que ―a su vez― no sólo determinan sus respectivas periferias, sino que también luchan por imponer sus propias hegemonías. Algunos ―independientemente de la continua o de la rala actividad teatral que se desarrolle en ellos, e incluso de la poca o mucha calidad de sus espectáculos― estarían determinados por factores económicosociales del tipo tradicional y/o emergente, y también por el accionar de instituciones ad hoc (salas, escuelas o agrupaciones). Centros que podemos agrupar en tres anillos concéntricos que determinan sus periferias más cercanas/lejanas. El primer anillo estaría integrado por: 1) el centro del norte chico (Huacho y Chancay); 2) el centro del sur chico (Mala); y, 3) el centro intermitente (Callao). El segundo anillo estaría integrado por: los centros (emergentes) de la periferia (La Gran Marcha de los Muñecones en Comas, en el norte; Cuatrotablas en Chorrillos, Escuela Experimental ‘Nuevo Teatro Latinoamericano’ en Villa María del Triunfo y Vichama teatro, Arena y esteras, CIJAC = Casa Infantil y Juvenil de Arte y Cultura y La Comuna de Villa en Villa El Salvador, en el sur; y, Waytay y la Escuela de Teatro y Circo de El Agustino en El Agustino, en el este). Y, el tercer anillo estaría integrado por: 1) el centro de la “gentita” (por las salas: Teatro Plaza Isil, Alianza Francesa, Teatro Británico y Club de Teatro (de Lima) en Miraflores; Centro Cultural de la PUCP en San Isidro; las salas de Yuyachkani y Maguey en Magdalena y los Auditorios descentralizados del Británico en Pueblo Libre y San Miguel); 2) el centro en el propio centro histórico de la ciudad (la AAA, el ICPNA, el Teatro Municipal y Teatro Segura y el auditorio de la Biblioteca Pública en Lima cuadrada); 3) el centro en la periferia del centro histórico (demarcado por los ejes que conforman la ENSAD, el MALI y el Museo de Arte Contemporáneo de Lima, y el Goethe Institut, el Centro Cultural de España, el Teatro Raimondi, el Teatro Peruano Japonés, la Sala “Ricardo Blume” de Aranwa y el Teatro de la Universidad del Pacífico (Jesús María), y, 4) el centro oficial de la cultura (integrado por el Auditorio de la Biblioteca Nacional, el Gran Teatro Nacional).

[3] Vamos a utilizar la palabra entorno que remite a otra como contorno en vez de otra de uso muy común: “espacio”. La razón es que aquellas remiten a las ideas de territorio o parajes que rodean un lugar, y a la figura de pliegue. Y es que para empezar a entender lo que implica la “231” hay que

30

Cróticas de “La Trueka 2015”

visualizar el lugar en que se encuentra ubicada, y hay que hacerlo desde dos planos comunes: desde el socio-histórico y desde el metafórico. En esos sentidos, ubicada al costado de la Iglesia La Recoleta, al frente de la Plaza Francia, a donde desembocan los jirones Rufino Torrico y Camaná, representa uno de los entornos que los sectores pudientes utilizaron y consideraron como propios hasta los años ’60-70s: por ejemplo, allí funcionó la Librería Studium en los alrededores de la Plaza, y el TUC y el Centro de Idiomas de la PUCP en el Jirón Camaná. Luego vendrían los años ‘80s con todo lo que implicó el fenómeno del “desborde popular” (Matos, 1984) y el abandono de los sectores pudientes del centro de Lima hacia otros centros, uno de ellos: el eje Miraflores-San Isidro. En esa medida, visto desde esta perspectiva resulta sorprendente sospechar que el fenómeno de “desborde popular” haya concluido. En todo caso, ya explicaremos dos aspectos: 1) cómo con la “231” aquel fenómeno aún continuaría, pero con un matiz nuevo: ahora son los descendientes de aquellos desbordadores los que dinamizan el fenómeno, y 2) cómo estas nuevas características socio-económicas e incluso culturales representarían un pliegue, es decir, un doblez que entendemos en su tercera acepción como astucia y en su segunda acepción como señal.

[4] La historia de la “231” la tendrán que escribir sus propios creadores, como verdadero acto de justicia y equidad. Simplemente acoto que empecé a vincularme a la “231” por Hildy Quintanilla que ya venía tratando desde la XXV Muestra Nacional de Teatro Peruano (Huancavelica, 2013) y últimamente por el Coloquio que organizamos como parte del colectivo Pasión Crítica en Pueblo Libre, en donde ambos asumimos ―sin explicitarlo en ningún momento― de que cada uno de nosotros iría a las actividades del otro como acto de reciprocidad. Claro, los jóvenes dirían que establecimos “redes”: y bueno, aceptémosla por el momento. Entonces, a esa figura queremos cargarla con una metáfora: ambos establecimos un punto de encuentro fuera de los ámbitos en que nos movíamos. Por lo tanto, no es exagerado afirmar que ambos migramos hacia un centro (común) y establecimos nuevas periferias.

Pero, esa parte de la historia no interesa mucho por ahora. Finalmente, acotar que si bien es cierto la “231” es el proyecto de HQ, también lo es de todos aquellos que sacan adelante sus propios proyectos: por ejemplo, el Cinecleta con las hermanas Campaña y Lucero de la Red de Cultura de Independencia, las publicaciones “Hazlo Pirata” con Luis y Silvia, la fabricación de pan con la uruguaya María Eugenia, el hip-hop con la chica de apellido López, y de otros como Silencio, la chica de los malabares, el Teatro de CCSS de San Marcos, etc.

[5] Para el Diccionario de la lengua española descentrar, “centro” implica aquel lugar en donde cualquiera encuentra “bienestar y sosiego”.

[6] Si tuviéramos que analizar la conferencia de RD como si fuera una representación teatral tendríamos que apelar a la clasificación que hace Umberto Eco sobre las distintas modalidades de aquella. Así pues, podríamos señalar que fue un show, ya que fue notorio que pese a la tensión que le generaba que el tiempo le quedara corto, nos llegó a mostrar una doble realidad: por un lado, de cómo partió del “paisaje sonoro” para arribar a la “ficción sonora”, y por otro lado de cómo evidenció a una joven y apremiada estudiante que al exponer ante sus demás compañeros no deja de ser ese “personaje”: una “estudiante” que pretende demostrar que conoce el tema, y de hecho lo consigue. Sin embargo, la tipología que más se le acerca es la de performance, pues a través de “las características de su ejecución” podemos reconocer la conferencia de RD como una representación teatral; es decir, no había “personaje” en el sentido de “otro”, sino que RD era el “personaje”, y el nerviosismo y la tensión que mostraba no era ficcional, sino más bien real.

[7] Ver con los oídos es un ejemplo de sinestesia.

[8] Recordé cómo en los ¿años ‘90s? pasaron por la televisión una miniserie sobre Vallejo interpretado por el actor Carlos Gassols y cómo el leif motiv lo constituía el agua de la lluvia y que se haya presente en algunos de sus poemas.

[9] Uno de esos es Hans-Thies Lehmann quien sostiene:

31

Cróticas de “La Trueka 2015”

(Lehmann, 2013: 27) [10] Sin embargo, la planteo en ésta crótica. A RD le quería preguntar si con respecto a la ficción sonora o radio-novela se estaba produciendo un fenómeno análogo al que se produce en las artes escénicas en donde formas ―que el alemán Hans-Thies Lehmamm define como “posdramáticas”― niegan algunos principios básicos de lo dramático [por ejemplo, el estatuto de ficcionalidad, el estatuto de personaje, las unidades de tiempo, espacio y acción, la condición de mímesis y de representación, y la fábula como “estructura narrativa de la historia” (Pavis, 1998: 197)]. Es decir, si hay algo que podría definirse como pos-ficción sonora o pos-radio-novela.

[11] Entiéndase por aparatos registradores los celulares y tablets con cámara, y también las propias filmadoras de a mano. En ese sentido, la revolución tecnológico-digital ha democratizado el uso de estos aparatos, pero también ha inducido un uso banal y hasta irresponsable.

[12] Escribió McLuhan: Hay un principio básico que distingue un medio caliente corno la radio, de otro frío como el teléfono; o un medio caliente como la película de cine de otro frío como la televisión. (El medio caliente es aquel que extiende, en «alta definición», un único sentido. La alta definición es una manera de ser, rebosante de información. Una fotografía es, visualmente, de alta definición.

La historieta es de «baja definición- simplemente porque aporta muy poca información visual. El teléfono es un medio frío, o de baja definición, porque el oído sólo recibe una pequeña cantidad de información.

(McLuhan, 1996: 43; las negritas no aparecen en el original) [13] El dramaturgo español Alfonso Sastre define la “parlatura” como […] lo único que sé hacer, bien o mal, o regular, es literatura, aunque –eso sí– también entre mis habilidades literarias está la de hacer eso que se llama «literatura dramática», y que yo prefiero nombrar con una palabra que todavía no se ha hecho popular, ni acaso se haga nunca, pero que yo la uso; esa palabra es «parlatura», que no es otra cosa que la literatura que se escribe para el teatro y la literatura que algunos hacemos –y por eso se nos llama autores, al menos todavía– para que otros (los actores) la hablen y la maticen o la interpreten o la recreen sobre los escenarios. (Diálogos para ser parlados: parlatura. Diálogos y monólogos que también, en su fondo, son diálogos, pues que las palabras son siempre dialogales).

(Sastre, 2003) [14] Esta idea (polémica) de “la reproducción mecánica de la obra de arte” le pertenece al alemán Walter Benjamin (1892-1940) [desde ahora, WB] y que podemos leer en su artículo “La obra de arte en la época de su reproductibilidad mecánica” (1936). En él, WB se queja de cómo la técnica reproductora de imágenes, la fotografía por ejemplo, le quita/expropia a la pieza su condición de única y que al multiplicarla en un sinfín de copias, le hace perder su “aura”.

[15] Cf. Nicolás Casullo, Itinerarios de la modernidad. Corrientes del pensamiento y tradiciones intelectuales desde la ilustración hasta la posmodernidad, Buenos Aires: EUDEBA, 1999, 376 pp.

Reproducimos a continuación la cita de la que hicimos mención:

32

Cróticas de “La Trueka 2015”

La vanguardia artística es básicamente una experiencia grupal que se da en el campo del arte, de artistas relacionados con ideas políticas, con sus propias experiencias estéticas; que pueden estar constituidas por gente que esté en un único medio de expresión estética, plásticos, escritores, cineastas; o que también pueden cruzar sus experiencias estéticas.

Las vanguardias artísticas sabían que nacían para morir. Su grito de protesta, su cuestionamiento crítico desde el arte a un mundo de razones dados, va a ser tan enérgico contra las formas institucionales del arte, que su propio espíritu las obliga a pensarse circunstanciales, de efímero recorrido, rechazantes de cualquier tipo de consagración estética al estilo tradicional. Y si no mueren, las matan otras vanguardias. Lo peor que podía pasarle a una vanguardia estética es prolongarse, transformarse en experiencia estética institucionalizada, llevada a la academia y al museo como el resto del arte burgués.

(Casullo, 1999: 68-69) [16] En las participantes, incluida la propia HQ, hay una fuerte presencia discursiva de orden feminista que, por ejemplo, tiende ―en el lenguaje― a sobredimensionar e imponer cierto género, a pesar de que tal uso no está reconocido por el Diccionario de la Real Academia. Sospechamos que este síntoma implica algo más que el mero consenso pragmático de los “actos de habla” (Ullmann, 1977: 17), pues cada comunidad ―en el uso diario que hace de su propia lengua― establece las reglas y pautas gramaticales. En este sentido, se debería debatir, por lo menos internamente, la relación entre lenguaje y género.

[17] Empleamos la palabra “juguete” en su tercera acepción que alude a la idea de composición breve y ligera y que por lo general se aplica a la música y al teatro, pero que no tenemos reparos en pretender que también se aplique a la poesía.

[18] Lo decimos basados en la experiencia de estos años de cronista en las artes escénicas. Es tan competitivo el medio que los instructores temen que alguien sistematice y se apropie de su trabajo que remite ya de por sí a una sistematización previa, por más simple que esta sea, aunque también muchos temen algo peor: que descubran sus chapucerías y su poco o nulo conocimiento. Y es que en un medio en donde la formación técnico-artística brindada por las escuelas formales no es garantía de nada, el medio está saturado de talleres en donde entusiastas, autodidactas y de estafadores, se disputan un mercado que cada vez se comprime; mercado en donde sin embargo aquellos ―sin saberlo conscientemente― aplican leyes pragmáticas al quehacer técnico-formativo que se aplican según el siguiente principio: “si nos comportamos de una determinada forma se obtienen determinados resultados” (Grotowski, 1988: 125). Por último, señalar que no todo autodidacta y entusiasta es un estafador y un comerciante: aunque sus doxas (opiniones) no alcancen el nivel de epistemes (conocimiento), por lo menos se basan en conocimientos verdaderos.

[19] El sango o “sanguito” como lo llegamos a conocer a mediados de los años ‘60s, tiene una larga historia en la ciudad de Lima. Ya en 1797 se le incluía como una “vianda criolla” de los afrodescendientes (Romero, 1988) que tuvo dos modos de prepararse: el primero como guiso “y otro que era dulce y llevaba abundancia de pasas” (Benvenutto Murrieta, 1932: 261).

[20] (Vallejo, 1988) [21] “Intento ser una actriz que escribe drama no tan dramáticos…”: Esta frase la entendemos como todo un manifiesto “posdramático”, aunque tal palabra le sea a HQ “nueva” y ajena.

33