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El Milagro del maná

10 DICIEMBRE 2021

50 | EL MILAGRO DEL MANÁ PARA ROMPER EL HIELO

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¿Recuerdas si en algún momento de tu vida has pasado hambre? ¿Por qué llegaste a pasar hambre? ¿Recuerdas a algún amigo que está pasando hambre en estos momentos?

¿Qué estás haciendo por él? ¿Ya lo has alimentado? ¿Qué está impidiendo que lo alimentes?

INTRODUCCIÓN

El maná fue uno de los tantos milagros de Dios para sustentar y alimentar a su pueblo en el desierto. El pueblo de Israel recibió el maná por espacio de cuarenta años sin interrupción alguna.

Los organismos internacionales no estarían preparados para alimentar a unos dos millones de personas por tan prolongado tiempo, es lo que se estima que sería el pueblo de Israel que salió de Egipto. Pero no hubo problemas en la producción ni hubo fallas en el transporte.

La Biblia simple y llanamente dice que el maná nunca faltó hasta que entraron a la tierra de Canaán: “Y enviaste tu buen Espíritu para enseñarles, y no retiraste tu maná de su boca... los sustentaste cuarenta años en el desierto”. (Neh. 9:20, 21).

TEXTO PARA EL ESTUDIO

(Éxodo 16:21-27) “Y lo recogían cada mañana, cada uno según lo que había de comer; y luego que el sol calentaba, se derretía. En el

sexto día recogieron doble porción de comida, dos gomeres para cada uno; y todos los príncipes de la congregación vinieron y se lo hicieron saber a Moisés. Y él les dijo: Esto es lo que ha dicho Jehová: Mañana es el santo día de reposo, el reposo consagrado a Jehová; lo que habéis de cocer, cocedlo hoy, y lo que habéis de cocinar, cocinadlo; y todo lo que os sobrare, guardadlo para mañana. Y ellos lo guardaron hasta la mañana, según lo que Moisés había mandado, y no se agusanó, ni hedió.

Y dijo Moisés: Comedlo hoy, porque hoy es día de reposo para Jehová; hoy no hallaréis en el campo. Seis días lo recogeréis; más el séptimo día es día de reposo; en él no se hallará. Y aconteció que algunos del pueblo salieron en el séptimo día a recoger, y no hallaron”.

INTERPRETANDO EL TEXTO

A la luz de este pasaje de las Escrituras, es muy importante señalar que el milagro del maná fue usado por Dios para enseñar a su pueblo grandes verdades sobre el día de reposo. El sábado fue dado a Israel antes de la promulgación formal de la ley en el Sinaí.

Dios había proporcionado a los israelitas alimento por el cual no habían trabajado, pero no quería que se volvieran holgazanes. Debían recoger cada día a fin de tener algo para comer. Además, debían levantarse temprano porque el maná se derretía cuando “el sol calentaba”.

Aun cuando no había campos que arar ni cosechas que recoger, el hecho de que debían levantarse temprano para obtener su alimento muestra que Dios había planificado cada detalle de este fenómeno para beneficio y educación del pueblo. La pobreza y la necesidad son el pago de los que duermen hasta tarde (Prov. 6: 9-11).

TEMA

Realmente, este es un milagro triple, que nos deja ver a un Dios amoroso, interesado en suplir las necesidades físicas y espirituales de su pueblo.

a. Que caiga maná del cielo es un milagro. “Así comieron los hijos de Israel maná cuarenta años, hasta que entraron a tierra habitada; maná comieron hasta que llegaron a los límites de la tierra de Canaán”. Durante cuarenta años se les recordó diariamente mediante esta milagrosa provisión, el infaltable cuidado y el tierno amor de Dios. Conforme a las palabras del salmista, Dios les dio “trigo del cielo; pan de ángeles comió el hombre” (Salmos 78:24, 25); es decir, alimentos provistos para ellos por los ángeles. Sostenidos por el “trigo del cielo”, recibían diariamente la lección de que, teniendo la promesa de Dios, estaban tan seguros contra la necesidad como si estuvieran rodeados de los ondulantes trigales de las fértiles llanuras de Canaán. (PP. 269)

b. Que el maná que se guardaba del viernes para el sábado no se dañaba es otro milagro. La experiencia durante la semana había mostrado que cualquier cosa que sobrara se echaría a perder antes de la mañana. “La porción necesaria para el sábado se conservaba dulce sin descomponerse, mientras que, si se guardaba los otros días, se descomponía”. (PP. 268)

c. El tercer milagro es que el sábado no descendía maná para los hijos de Israel. “Moisés comprendió que Dios había concedido el maná en tal forma que resultara santificado el sábado. La indudable ignorancia del pueblo acerca del sábado, junto con las instrucciones de Moisés acerca de él, y el hecho de que algunos intentaron buscar una provisión fresca de maná en sábado a pesar de las instrucciones de que no caería, muestran que, durante su permanencia en Egipto, los israe-

litas en gran medida habían perdido de vista el día santo de Dios. Los rigurosos requerimientos de los capataces habían sido la causa principal de ese relajamiento en la observancia del sábado” (PP. 263).

CONCLUSIÓN

Jesús dice que “vuestros padres comieron el maná en el desierto y murieron” (Juan 6:49), indicando con esto lo temporal y transitorio de dicho alimento. Era tanto así que Dios les dio instrucciones exactas para que el maná fuera recogido para cada día, dada su condición perecedera.

La generación del maná murió en el desierto. El consumo durante todo ese tiempo no les prolongó la vida. Ahora Jesús revela uno nuevo, un “maná” que quien lo come no morirá jamás. Jesucristo es el Pan de Vida. Él es el alimento del alma. Vengamos a él y a su Palabra para satisfacer nuestra hambre espiritual y gozar de vida eterna.

ACTIVIDADES

Ofrezcan a la junta de Acción Local del barrio un programa que beneficie a la comunidad del sector. (Expo-salud, Expo-familia, etc.)

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