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Ruta Cultural Ciudad Mural Getsemaní

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ÍNDICE

1.

Plaza de la Trinidad

2.

Calle de San Juan

3.

CALLE LARGA

4.

PLAZA DE LA INDEPENDENCIA

5.

CALLE DE LA SIERPE

6.

PLAZA DEL POZO

Plaza Maria Mulatade la

Autor: Yurika

TRINIDAD

PLAZA DE LA TRINIDAD

Una vez terminados los trabajos de la iglesia de la Santísima Trinidad, fundada en 1643, inmediatamente la plaza tomó el nombre que actualmente conocemos. Sin embargo años más tarde, cuando Cartagena asumió la personería de sus derechos de ciudad libre e independiente de corona española, como dicha plaza constituía el lugar de cita de los patriotas de barrio que tomaron parte en la gloriosa jornada del 11 de noviembre, el Cabildo dispuso de la plaza tomará el nombre de “La Libertad”, en testimonio de los esfuerzos que los habitantes del barrio desplegaron en beneficio del movimiento emancipador del año de 1811, y que traería como consecuencia la firma del Acta de Independencia.

También se cuenta que, en el célebre atrio de la iglesia, los oradores de entonces dejaron oír su palabra revolucionaria, que exhortaban al pueblo enardecido. Entre ellos merece recordarse al doctor Ignacio Muñoz, conocido por algunos como “Tuerto Muñoz”, (también yerno Pedro Romero), distinguido revolucionario, hombre dotado del sentido de la oratoria. No fue un gran político, pero su deslumbrante carácter, conducta y temperamento y sobretodo pasión por la libertad, llevaron a defender y pelear por la ciudad aquel enardecedor día de independencia.

MARÍA MULATA

Autor: Yurika

Representa al ave más típica de la ciudad de Cartagena: la María Mulatatt y rindió un homenaje, con una aproximación a su estilo pictórico, al maestro Alejandro Obregón, quien en vida fue muy cercano a la Heroica. El artista también incluye ciertos elementos típicos del grafiti como flechas y contornos en la obra.

Calle SAN JUAN

CALLE DE SAN JUAN

La calle de San Juan viene a ser parte de la calle que arranca de La Sierpe y desemboca en la calle Larga, frente al callejón Vargas. En la relación que hacemos acerca de la calle de San Antonio, explicamos por qué estas vías del barrio Getsemaní llevan los nombres de San Juan y San Antonio.

Todos los años los vecinos de Getsemaní preparaban grandes festividades con motivo de cumplir el 13 y 24 de junio las fechas en que los feligreses recuerdan a los ilustres varones de la Iglesia de San Antonio y San Juan. En cada respectiva fecha, el vecindario de Getsemaní hacía derroche de piedad y alegría. Parece que terminen las fiestas, en la casa del vecino más serio y acomodado se depositaban las imágenes de los santos a que hacemos referencia. Y esta costumbre subsistió hasta que quedó terminada la Iglesia de La Santísima Trinidad.

LA PALENQUERA Y EL PÁJARO

Autor: Sem.

Represttenta a una de las emblemáticas palenqueras de Cartagena y un pájaro típico de la ciudad. La obra, además, está ambientada con elementos y contornos de la estética grafiti.

EL JOE Y LA TORTUGA

Autor: Kops

Un homenaje, al fallecido cantante cartagenero Joe Arroyo y a su conocida canción “La Tortuga”.

Calle LARGA

CALLE LARGA

Su nombre se remonta a los tiempos de la Colonia, porque en aquella época era la calle más extensa de la naciente ciudad. Esta es una de las calles principales de Getsemaní, primero fue conocida como calle de Nuestra Señora de Loreto, por el convento de los franciscanos llamado al principio SantaV Casa Loreto o de Nuestra Señora de Loreto. Luego fue llamada esta cuadra calle de Nuestra Señora del Mar y el nombre de Nuestra Señora de Loreto pasó a la calle de Estanco del Tabaco.

Los concejos municipales han expedido muchos acuerdos cambiando el nombre de esta vía, la segunda cuadra es llamada calle de Nuestra Señora de La Rivera, que es la que corre desde la Calle de San Juan hasta la Calle de San Antonio, en una ocasión el Concejo la rebautizó de D´Elhúyar, en honor del Coronel Luciano D´Elhúyar, ilustre de nuestra independencia.

La tercera cuadra de la Calle Larga, que va desde la Calle de San Antonio hasta la Calle del Pozo se le llamó Calle de Nuestra Señora del Buen Viaje, el cual pudo haber sido puesto por la hermandad de Nuestra Señora del Buen Viaje.

Por último, en 1882 la Junta de Alumbrado Público de Cartagena dio a esta calle el nombre del prócer y mártir Miguel Díaz Granados.

REENCARNACIÓN DE HISTORIAS

Autor: Andrés Montes

Es una representación de la visualización de fotografías de la red social “Instagram”, incluyendo dos personajes de importantes leyendas “La sierpe y la tripitaymedia” que dieron nombre a dos calles de Getsemaní.

ILUSIONES IDENTITARIAS

Autor: Chirrete

El eje temático es el mestizaje como fenómeno histórico de la ciudad y del barrio Getsemaní, en particular. La imagen hace referencia a la importancia de los movimientos que dieron origen a la abolición de la esclavitud y la revolución de las minorías que Vivian en Cartagena, como el cimarronaje y el multiculturalismo.

NO SE VENDE Y BENKOS BIOHÓ

Autor(es): Juan Salazar y Juan Carlos Piedrahita.

La primera obra, No se vende, representa la problemática que presentan habitantes raizales de Getsemaní, que se han tenido que mudar a otros barrios de la ciudad. La segunda, el artista representa de manera mística (cara de león y peinado afro) al líder de esclavos cimarrones Benkos Biohó que obtuvo su libertad en la ciudad de Cartagena.

Plaza de laINDEPENDENCIA

PLAZA DE LA INDEPENDENCIA

Es la plaza más extensa que tiene la ciudad. En sus comienzos, éste no fue precisamente una plaza, sino una calzada necesaria para unir el barrio Getsemaní con el recinto amurallado. Cuando se acondicionó con escaños y faroles de queroseno, resultó un lugar muy adecuado para reunirse grupos de amigos y charlas, gozando del fresco que allí sopla.

A mediados del año 1623 el gobernador ordenó establecer el matadero público, convirtiéndose esto en pésimo vecindario para los religiosos franciscanos, quienes vivían en el Convento de San Francisco; en consecuencia, éstos acudieron en queja al Rey Pomáceo Asquillos, pidiendo la merced de alejar del templo el sobredicho Matadero. Así consideró el monarca, y por real cédula fue dispuesto y retirado hacia Chambacú, viniendo entonces a ocupar el mismo sitio que hoy está emplazado el suntuoso monumento de már-

mol dedicado a los mártires de febrero.

Al conmemorarse para el año 1911 el primer centenario de nuestra emancipación, el cabildo ordenó que la plaza fuera llamada de la Independencia, ya que aquí se hizo la proclamación del bando hecha por el pueblo de Cartagena bajo los tribunales del actual Palacio de Gobierno, fue delante del Templo de San Francisco donde se juntaron los audaces patriotas de Getsemaní con Muñoz y Romero a la cabeza para acudir a la cita patriótica dando ante las arcadas de dicho palacio.

Por último, en el año de 1916, al cumplirse cien años del fusilamiento de nuestros próceres, el Concejo Municipal, como tributo de gratitud hacia esos ilustres varones, ordenó que la plaza se denominará de los “Mártires”.

La historia de este trágico acontecimiento se remon-

ta cuando el Virrey Montalvo (Capitán General), ordenado por Pablo Morillo el cual hizo que se crease un Consejo Militar, para juzgar a los patriotas, dirigió a los cartageneros, el 23 de febrero de 1816 un comunicado comprendiendo la injusticia que asistía a los patriotas y sin embargo en la alocución dijo: “La notoriedad de sus crímenes, el derecho de la guerra y la gravedad de los atentados, me autoriza para haberle hecho morir antes, sin dar lugares a formalidades … la providencia ha querido poner términos a sus maldades y a la autoridad los envía para servir de público escarmiento…”.

La aurora del 24 de febrero, día de luto y llanto para Cartagena, apareció triste. A las diez de la mañana el regimiento de León formaba un cuadro en la Plaza de la Independencia y en el centro de éste se levantaban nueve banquillos. A las once de la mañana salieron del Palacio del Ayuntamiento, entre una escolta de 25 soldados

Los Doctores: José María García Toledo Miguel Díaz Granados Antonio José de Ayos Los Generales: Manuel del Castillo Rada Manuel de Anguiano Los Coroneles: Martín Amador Pantaleón Germán Ribón (hijos de Mompox) Teniente Coronel: Santiago Stuart Ciudadano: José María Portocarreño

Cada uno llevaba un sacerdote a su lado. A todos se les acusaba de asesinos españoles, prisioneros de la inquisición, revolucionarios, traidores y demás acusa-

ciones que se inventaron para poder asesinarlos.

Es así como encontramos nueve bustos ubicados en este Camellón y que luego de colocárselos se le llamó “Camellón de Los Mártires”. La estatua central que representa a Cartagena con la leyenda “Noli me tangere”, fue obsequiada por las damas cartageneras en 1911, para el centenario de la independencia.

Hoy, como en sus inicios, es un lugar donde amigos, colegas, trabajadores, estudiantes, se sientan a conversar o a esperar su transporte urbano; muy bien iluminado y en completa limpieza, es un sitio admirado por los transeúntes.

TAMBORES EN LA NOCHE

Autor: Zas

Esta obra hace un homenaje al poeta y líder getsemanisense Jorge Artel, incluyendo la representación de algunos personajes y elementos de su obra literaria Tambores en la noche.

Calle LA SIERPE

CALLE DE LA SIERPE

El nombre de esta calle se remonta a una curiosa leyenda:

Los vecinos de la calle oían con frecuencia que sobre el pavimento se arrastraba un animal que dejaba oír el ruido de crótalos movidos violentamente. Entonces la ciudad permanecía a oscuras y sin vigilancia policiva. Nadie osaba asomarse por las rejillas de las puertas y ventanas, nadie se explicaba el ruido que se oía todas las noches de las doce en adelante.

A cada mañana los comentarios constituían la comidilla del vecindario. Cada cual expresaba su opinión, pero ninguno podía afirmar categóricamente que producía el ruido que todas las noches percibían.

Al fin, las autoridades tomaron cartas en el asunto y resolvieron vigilar la calle. Un día del año 1608 el alcalde de la ciudad, don Antonio de Victoria, en persona, se dirigió una noche a acabar de una vez por todas con aquel estado de cosas que traía alarmado el vecindario.

Estado en acecho, de pronto ve que del solar en la rinconada de la calle salta una enorme sierpe, de ojos fosforescentes, retorciéndose y moviendo acompasadamente los crótalos o cascabeles que llevaba prendidos en la punta del rabo.

El alcalde, todo un hombre de pelo en pecho, y que en la isla de Santo Domingo había aprendido a exorcizar, trazo en el aire unas figuras especiales, y al cabo de un momento, el reptil fue tomando su verdadero estado: Una mujer. Cuando la “bruja” volvió de su encantamiento, pidió perdón al alcalde, pero éste le condujo a la cárcel. Allí permaneció hasta el año de 1614 en que la Inquisición la condenó a doscientos azotes y destierro perpetuo de la ciudad. La pobre María Ramírez, que así se llamaba la “bruja”, murió a los pocos

días lamentándose que a ella sola la habían castigado, cuando existían otras que sabían el conjuro contra la “Martilla Mala” y echaban la suerte del agua, del rosario y de las habas y se veían todas las noches encima de la popa con las nietas de Juana, la célebre “bruja” de Bogotá.

Lo cierto es que la tranquilidad volvió al barrio de Getsemaní; anteriormente casi nadie transitaba por la calle, y desde esa época la vía tomó el nombre que lleva actualmente, pues el público no olvidaba que en ella habían apresado en forma de serpiente a la “bruja” María Ramírez.

AMOR AFRO

Autor: Dexs

Esta obra hace un homenaje a las mujeres afrodescendientes cartageneras, también incluye un árbol con raíces de colores, para simbolizar los importantes legados que dejan las madres y abuelas a las comunidades que pertenecen.

JUEGA SIEMPRE

Autor: DJLU

El artista un día caminaba por las calles de Getsemaní ,un grupo de niños que jugaban llamaron su atención por su algarabía, su unión y su alegría. Al interactuar con ellos y fotografiarlos, reflexionó en torno al juego como una forma de evasión de la realidad a veces cruda en la que viven y en la lúdica como posibilidad de empoderamiento.

Plaza del POZO

PLAZA DEL POZO

En la era virreinal no se habló nunca de la Plaza del Pozo, sino de la calle del Pozo, pero ocurre que, al penetrar la calzada hacia la Plaza de la Trinidad, antes de llegar a la esquina de la calle de la Tusa, es dos veces más ancha que el trayecto anterior y ese sector con toda lógica, fue conocido como Plaza del Pozo, la cual era de uso público. En el centro del área se encontraba un Pozo que suministraba agua a los vecinos para sus diarios menesteres, el cual siglos más tarde fue cegado.

Para la época de la colonia fue testigo de sangrientas reyertas entre la gente de mar que trabajaba y merodeaba en el Arsenal y Playa de la Barahona. Ya en pleno siglo XIX, ZZel lugar volvió a convertirse en centro de jolgorios bulliciosos, los vecinos del barrio Getsemaní organizaban sus propias festividades haciendo fandangos públicos con música a bordo y recorrían toda la ciudad. Llegado el día cinco de enero, antes de Reyes Magos, aparecía en escena el “carro alegórico” o carroza adornada que transportaba a las más lindas jóvenes a quienes llamaban “diosas”. Estas fiestas fueron desapareciendo poco a poco debido a las disputas políticas que se producían continuamente entre liberales y conservadores, los primeros de la plazoleta del Pozo y los últimos de Chambacú. Con el paso de los años se eliminaron los festejos en dicha plazoleta hasta la actualidad.

MECHA LIBERTARIA

Autor: Cero

El artista hace homenaje al cubano Pedro Romero, personaje legendario e importante en los primeros pasos de la independencia de Cartagena. Reflexiona sobre los comienzos del proceso revolucionario partiendo de una pequeña mecha que se enciende.

MECHA LIBERTARIA

Autor: Cero

El artista hace homenaje al cubano Pedro Romero, personaje legendario e importante en los primeros pasos de la independencia de Cartagena. Reflexiona sobre los comienzos del proceso revolucionario partiendo de una pequeña mecha que se enciende.

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