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España, el mayor importador de HFCs ilegales en Europa
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MERCADO ILEGAL DE GASES REFRIGERANTES: UN PROBLEMA MEDIOAMBIENTAL, ECONÓMICO Y LEGAL
Aefyt se unió en octubre del año pasado a la campaña #SayNoToIllegalHFC, impulsada por el Comité Técnico Europeo de Fluorocarbonos (EFCTC). La campaña busca promover la acción conjunta de toda la cadena de valor de los refrigerantes para erradicar el mercado negro de hidrofluorocarbonos (HFC), que es una amenaza para los objetivos medioambientales en Europa, para la seguridad al no seguir ningún tipo de control ni trazabilidad, para la competitividad de las empresas que operan legalmente y para las finanzas de la Administración.
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� Félix Sanz Adjunto a la Gerencia Aefyt (Asociación de Empresas del Frío y sus Tecnologías)
a campaña mencionada invita a toda la cadena de suministro de equipos de frío a detectar y denunciar los productos ilegales cuando los compran, reparan o venden. Este es un aspecto que consideramos muy importante porque frenar esta práctica es tarea de todos y la denuncia activa es una de las mejores maneras de detenerlo. Precisamente, éste es el ánimo que empujó a Aefyt a crear en el año 2010 un Observatorio de Medio Ambiente donde recoger y reportar a las autoridades pertinentes las malas prácticas que cualquier empresa de la cadena de valor del frío pueda detectar. Nuestro objetivo es canalizar las informaciones recibidas y colaborar con la Administración para hacer cumplir las diferentes normativas y reglamentos que afectan al sector de la refrigeración. Además, trasladamos las denuncias recibidas sobre actividades sospechosas a las autoridades, ofreciendo información al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y al Servicio de Vigilancia Aduanera. La labor de estos servicios es encomiable, pero el volumen del tráfico es tal que es muy difícil de controlar por un solo país.
Punto de inflexión
El incremento del mercado negro de refrigerantes HFCs tuvo un punto de inflexión con la entrada en vigor del Reglamento F-Gas y, concretamente en España, con el Impuesto sobre Gases Fluorados de Efecto Invernadero. En ese momento, detectamos un incremento de la entrada de gases fluorados prohibidos a través de mercados opacos. Aefyt destaca por ser una de las primeras asociaciones que puso cifras al problema. Ya en 2016 calculaba que en España el mercado negro propiciado por la entrada de producto desde otros estados miembros, junto con las importaciones de fuera de la UE no controladas, podían alcanzar valores superiores al 20% del total de los HFC comercializados.
TRISTE RÉCORD. En España se han introducido de manera ilegal más de 4,6 millones de toneladas equivalentes de CO2 de HFC durante los años 2018 y 2019
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El incremento del mercado negro de refrigerantes HFCs tuvo un punto de inflexión con la entrada en vigor del Reglamento F-Gas.
Además, en 2018 Aefyt se unió a las asociaciones europeas EPEE, EFCTC, Area y ADC3R para solicitar una mejor aplicación del Reglamento europeo sobre Gases Fluorados para frenar el problema de refrigerantes importados ilegalmente. Todas estas asociaciones entienden que el control de las fronteras de la UE es condición imprescindible para poner freno a esta práctica delictiva que se desarrolla a través de corredores que conectan China y ciertos países del Este de Europa con el resto del continente. Desgraciadamente, las cifras no invitan al optimismo. Como se manifestó recientemente en un webinar organizado por Aefyt y por el EFCTC, en España se han introducido más de 4,6 millones de toneladas equivalentes de CO2 de HFC -gases refrigerantes que se utilizan en sistemas de refrigeración y en los aires acondicionados de la industria de la automoción, hospitales o supermercados, entre otros- de manera ilegal durante el año 2018 y 2019. Una cifra que sitúa al país como el mayor importador de gases refrigerantes ilegales en Europa en lo que supone un triste récord. De hecho, como se resaltó en dicho seminario, se estima que en España la Agencia Tributaria ha dejado de recaudar alrededor de 50 millones de euros, al evadirse el impuesto sobre los Gases Fluorados.
Un problema que es europeo
En todo caso, el análisis sería parcial si lo centráramos en España. El problema es europeo y está motivado por la falta de control, las bajas sanciones y las discrepancias entre los estados miembros con respecto a las multas a imponer. Por supuesto, el mercado negro de gases HFC alimenta la evasión de impuestos por parte de organizaciones criminales que lavan el dinero en paraísos fiscales, como desveló una investigación realizada por el portal Cooling Post. Otro problema no menos baladí es el negativo impacto medioambiental de esta práctica. Según la investigación llevada a cabo por la consultora Oxera y el análisis de los hallazgos por parte del EFCTC, el comercio ilegal de este tipo de gases podría representar hasta 34 millones de toneladas equivalentes de CO2, esto es, alrededor del 33% del mercado legal permitido en la Unión Europea en 2018. Ello equivaldría a incorporar 25 millones de nuevos coches en las carreteras europeas -más del número total de coches en uso en España en 2018-. Lo peor es que no se ve una solución a corto plazo. El motivo es que es previsible que el tamaño de este mercado negro pueda aumentar con la nueva reducción de cuotas en 2021, si no se toman medidas para frenarlo. Y esto tendría el consecuente impacto en los objetivos medioambientales de la UE. La cuota total de HFC se reducirá nuevamente en 2021 con el objetivo de facilitar la transición a refrigerantes de bajo PCA, pero esto podría causar la escasez de gases HFC y, en consecuencia, el incremento de importación y comercio de gases ilegales, se dijo en el webinar Aefyt-EFCTC. Por lo tanto, la lucha contra el tráfico ilegal de gases refrigerantes está más viva que nunca y los esfuerzos del conjunto de la cadena de valor del frío para denunciar y demandar soluciones firmes deben multiplicarse. El medio ambiente, la economía y la innovación en nuestro sector se juegan mucho en ello.
