ENTREVISTA AL DR. CÉSAR PALACIOS GONZÁLEZ

PREMIO BIOÉTICA 2016

PUBLICACIONES BIOÉTICAS DE FUNDACIÓN JAIME ROCA

ENTREVISTA AL DR. CÉSAR PALACIOS GONZÁLEZ GANADOR DEL PRIMER PREMIO

Dialogamos con César Palacios González, Doctor en Ética de la Ciencia por la Universidad de Manchester, Maestro en Filosofía por la Universidad Nacional Autónoma de México, Licenciado en Filosofía por la Universidad Panamericana y que también ha realizado estancias de investigación en la Victoria University of Wellington en Nueva Zelandia.

Nuestro entrevistado obtuvo el Premio Bioética Fundación Jaime Roca 2016 por su trabajo “Ética de las Técnicas de Remplazo Mitocondrial: ¿Existe una Diferencia Moral Entre la Transferencia Pronuclear y la Transferencia del Huso Materno?”

Por *Eduardo Darío Beccar y ** Eduardo Piluso

¿Cómo decidió su participación en la convocatoria de FJR? Decidí participar en el Premio Anual de Bioética de la Fundación Dr. Jaime Roca porque es el más prestigioso de América Latina.

¿Qué lo impulsó a elegir el tema de su trabajo?

Lo que motivo mi trabajo fue darme cuenta que mientras que desde hace unos años se ha discutido si las dos técnicas de reemplazo mitocondrial que se han desarrollado son éticamente permisibles, nadie hasta el momento se había preguntado si una de las técnicas es moralmente superior a la otra. Esto es importante pues enfrentados a dos opciones, todo lo demás siendo igual, hay que elegir aquella que sea éticamente superior.

¿Qué son las Técnicas de reemplazo mitocondrial?

Las técnicas de reemplazo mitocondrial son técnicas de reproducción asistida que previenen la transmisión vertical de enfermedades del ADN mitocondrial. Para entender qué son estas técnicas hay que empezar diciendo qué son las mitocondrias.

Las mitocondrias son los orgánulos celulares que producen la energía necesaria para que las células trabajen adecuadamente. Ellas se caracterizan por tener su propio ADN (el ADN mitocondrial) y ser transmitidas por vía materna. Las mitocondrias pueden fallar por problemas en el ADN nuclear (aquel que está en el núcleo de la célula) o por

problemas en el ADN mitocondrial. Cuando las mitocondrias fallan en gran número por problemas en el ADN mitocondrial, esto ocasiona enfermedades del ADN mitocondrial. Estas enfermedades pueden causar, entre otras cosas, falla cardiaca y de los órganos mayores, demencia, ceguera, síndrome de Leigh y muerte prematura. Dado que las mitocondrias producen la energía que el cuerpo necesita no es raro que las enfermedades del ADN mitocondrial afecten de manera más sobresaliente a las partes del cuerpo que requiere altos niveles de ella, por ejemplo: el corazón, los músculos, el cerebro, etc.

¿Y más específicamente, la Transferencia Pronuclear y la Transferencia del Huso materno?

La Transferencia Pronuclear es la técnica donde se transfiere el material nuclear de un cigoto con mitocondrias mutadas a un cigoto donado con mitocondrias sanas, que previamente ha sido enucleado. La Transferencia del Huso Materno es la técnica donde se transfiere el material nuclear de un óvulo con mitocondrias mutadas a un óvulo donado con mitocondrias sanas, que previamente ha sido enucleado. Al realizar la transferencia del material nuclear, en las dos técnicas, se dejan atrás las mitocondrias que tienen mutaciones deletéreas.

Entendemos que ambas técnicas buscan evitar la trasmisión de enfermedades mitocondriales por vía materna al niño a nacer, algo que a primera vista parece moralmente bueno. Sin embargo, en su trabajo analiza, desde tres miradas, si existe alguna diferencia moral entre la Transferencia Pronuclear y la Transferencia del Huso Materno. Comienza por las modificaciones de línea somática y las de línea germinal. ¿Qué son estas “líneas”?

Una modificación de línea somática es una intervención que afecta a un individuo, pero que no será trasmitida a generaciones futuras. Una modificación de línea germinal es aquella que no sólo afecta a un individuo en particular, sino que será transmitida a generaciones futuras.

Luego lo hace desde la mirada de los actos creacionales y los actos terapéuticos. ¿Cuáles son estos “actos” y cuáles sus características?

Los actos terapéuticos son aquellos que se realizan

sobre un individuo que existe en este momento, por ejemplo si tú o yo nos ponemos una vacuna.

Los actos creacionales, por otra parte, son aquellos que al realizarse crean a alguien. Por ejemplo, la fertilización in vitro. La diferencia entre estos actos, en términos éticos, es que mientras los primeros pueden dañar a alguien, en el sentido de dejarlo peor de lo que estaba; los actos creacionales no pueden dañar a nadie pues la única alternativa es que dicho individuo no hubiera existido. La única excepción a esto es cuando la existencia del individuo es tan terrible que sería mejor para él o ella morir, lo que inglés se conoce como wrongful life.

A diferencia de autores que opinan que la TPN es moralmente superior por ser una instancia terapéutica mientras que la THM es una instancia creacional, Ud. sostiene que no hay diferencia en ese aspecto entre ambas técnicas y que ambas son terapéuticas. ¿Cómo llega a esa conclusión?

Autores como Anthony Wrigely et al. mantienen que la transferencia pro-nuclear es terapéutica, porque al momento de realizarse ya existe un individuo. Esto quiere decir que la técnica puede beneficiar a alguien en específico. Ellos también mantienen, por otro lado, que la transferencia del huso materno es una técnica creacional, porque al momento de realizarse todavía no sabemos que esperma fertilizará al óvulo, y por lo tanto quien se creará. Dada esta supuesta diferencia entre las dos técnicas, estos autores llegan a la conclusión de que hay razones morales – evitar el daño – para ofrecer la transferencia pro-nuclear a los futuros padres, razones que no existen en el caso de la transferencia del huso materno.

Ahora, yo mantengo que estos autores están equivocados. Lo están porque no toman en cuenta que la decisión clínica de recurrir a la transferencia pro-nuclear altera quien va a ser creado. Esto sucede puesto que el tratamiento de reproducción asistida previo a la transferencia pro-nuclear determina qué óvulo y qué esperma entrarán en contacto, y por lo tanto dicha decisión clínica debe de ser caracterizada como un acto creacional. Dado esto, concluyo en que no hay razones morales – evitar el daño – para ofrecer a los futuros padres la transferencia pro-nuclear por encima de la transferencia del huso materno.

También analiza si existe diferencia moral desde la mirada de la destrucción de embriones humanos. ¿Hay destrucción de embriones en alguna de estas técnicas?

Sí se destruyen embriones. Hasta hace poco en la discusión sobre la ética de las técnicas de reemplazo mitocondrial se mantenía que en la transferencia pro-nuclear sólo se destruye un embrión, el embrión creado con el óvulo donado. Ahora, por el contrario, hay quienes defienden, como Mathew Liao, que lo que sucede es que se destruyen dos embriones y se crea un tercero. Esto quiere decir que se destruye el embrión creado con el óvulo de la mujer que desea ser madre genética, y aquél creado con el óvulo donado. Esta diferencia es de suma importancia para aquellos que mantienen que el embrión humano tiene el mismo valor moral que una persona humana adulta que tiene autoconciencia.

¿A qué conclusiones arriba en su trabajo?

La conclusión a la que arribo es que sólo existe una diferencia moral entre la transferencia pro-nuclear y la transferencia del huso materno si mantenemos una postura gradualista en lo que respecta al valor moral de los embriones humanos.

Para dicha postura los embriones humanos tienen valor moral, pero éste es escaso al comienzo de su desarrollo. Esto es así pues la transferencia del huso materno destruye menos embriones humanos cuando contabilizamos tanto la investigación médica como la práctica clínica.

Le solicitamos, a modo de cierre, un resumen y comentario que ayude a la comprensión del lector común.

Las enfermedades del ADN mitocondrial comúnmente causan sufrimiento y reducen la expectativa de vida. Recientemente se han desarrollado dos técnicas de reemplazo mitocondrial para evitar la transmisión vertical de enfermedades del ADN mitocondrial: la transferencia del huso materno y la transferencia pro-nuclear. Aun cuando se ha demostrado que el uso de dichas técnicas es moralmente aceptable, nadie se había preguntado si hay una diferencia entre ellas. En mi trabajo yo me hice esa pregunta y mi conclusión es que sólo aquellos que creen que el valor moral del embrión humano incrementa durante el embarazo, deben de aceptar que la transferencia del huso materno es moralmente superior a la transferencia pro-nuclear. Las otras dos razones que podrían ser utilizadas para diferencia a estas técnicas de hecho muestran que son moralmente equivalente: a) si las modificaciones que se realizan serán transmitidas a generaciones posteriores, o no; y b) si las técnicas son terapéuticas o no. * Eduardo Darío Beccar. Médico. Miembro del Comité de Bioética de FJR ** Eduardo Piluso. Médico. Miembro del Comité de Bioética de FJR