SERIE ENTREVISTAS - ENTREVISTA AL DR. JORGE NORBERTO CORNEJO

PUBLICACIONES BIOÉTICAS DE FUNDACIÓN JAIME ROCA

SERIE ENTREVISTAS

ENTREVISTA AL

DR. JORGE NORBERTO CORNEJO

Entrevistamos al Dr. en Ciencias Físicas Jorge Norberto Cornejo, autor principal del trabajo “LA BIOÉTICA EN LA FORMACIÓN DEL INGENIERO” con el que obtuvo la 2a Mención Premio Bioética 2014 Fundación Dr. Jaime Roca, donde señala la ausencia de formación bioética en ingenieros, cuando cada vez con mayor frecuencia deben desarrolar la ingeniería asociada a temas médicos. Fueron coautores: Prof. Haydée Beatriz Santilli, Ing. Carmen Raquel Barrero, Lic. Ana María Martín, e Ing. María Beatriz Roble. Actuaron como colaboradores: Ing. Blanca Condorí, Ing. Juan Ignacio Suárez Anzorena Rosasco e Ing. Marcos Oscar Solá.

¿CÓMO ELIGIÓ EL TEMA DEL TRABAJO? Es una síntesis y una mirada global, interpretativa, de los resultados obtenidos en el proyecto de investigación “La bioética en la formación del ingeniero” y el Premio dio la oportunidad de presentar en forma coherente el proyecto en su conjunto.

EL INGENIERO QUE DISEÑA Y CONSTRUYE UN PUENTE LO HACE CON RESPONSABILIDAD, A FIN DE QUE LAS PERSONAS QUE LO UTILICEN GOCEN DE FÁCIL ACCESO, TRÁNSITO Y SEGURIDAD. ¿QUÉ SE AGREGA CUANDO ESAS APLICACIONES TECNOLÓGICAS ACTÚAN SOBRE LOS CUERPOS DE SERES HUMANOS?

Por Eduardo Darío Beccar* y Eduardo Piluso*

¿CUÁL HA SIDO SU FORMACIÓN Y CÓMO HA INFLUIDO EN SU INTERÉS POR LA BIOÉTICA? Los integrantes del grupo presentamos distintas formaciones, pero todos provenimos de la Ingeniería o de la Física. Todo comenzó con el estudio de los efectos biológicos producidos por las radiaciones ionizantes; ello nos condujo a la tecnología médica, y de allí a la bioética no hay más que un paso. Me gustaría aquí citar una frase de Houssay: “Puede asegurarse que no existe tema de las Ciencias Fisiológicas al cual la contribución del ingeniero no pueda alcanzar un relieve definitivamente original”. Ahora bien, así como la contribución del ingeniero a las ciencias de la vida es muy importante, también es trascendente su responsabilidad frente al ser humano, ya que las tecnologías que diseñe se aplicarán, directa o indirectamente, sobre aquel.

¿DE QUÉ MANERA TUVO CONOCIMIENTO DE LA CONVOCATORIA AL PREMIO FUNDACIÓN DR. JAIME ROCA? Nos lo sugirió una asistente al Congreso Iberoamericano de Historia de la Ciencia y de la Tecnología, realizado en Buenos Aires a fines de 2013, luego de comentarle la encuesta que estábamos realizando acerca de la opinión de la comunidad académica no-médica sobre la ética en medicina, el cumplimiento de los protocolos de investigación y el consentimiento informado.

En el ejemplo propuesto, el ser humano no es depositario directo y necesario de la tecnología sino un usuario, y la tecnología será “segura” en tanto el diseño y la construcción hayan tenido en cuenta los factores de riesgo, y las normas de uso seguro hayan sido explicitadas claramente. Aquí termina la responsabilidad del ingeniero. El usuario se enfrenta a ellas en situaciones cotidianas, hasta algunas veces placenteras, y conserva la autonomía para utilizar o no esa tecnología (o sea, que conoce otras alternativas). Tomemos como ejemplo la decisión de usar la escalera en lugar del ascensor, o de viajar o no en avión, pues se pueden usar otros medios de transporte.

En cambio, las intervenciones tecnológicas relacionadas con la medicina: A) Actúan directamente sobre el cuerpo humano.

B) El ser humano se enfrenta a ellas en situaciones emocionalmente adversas: la enfermedad.

C) Es el médico quien se lo propone al paciente, luego de analizar diversas alternativas en particular, actuando como intermediario entre la tecnología y el paciente.

D) Si bien el paciente conserva la autonomía para aceptar o rechazar lo propuesto, es común que deposite su confianza en el médico -“el que sabe”-, y esto limita su libre albedrío.

E) También ocurre que el médico no despliega ante el paciente todas las alternativas posibles; esto es lógico, pues el paciente no cuenta con un conocimiento de las tecnologías médicas como para poder decidir y, además, está sometido a stress, por angustia, miedo, inseguridad.

F) La responsabilidad por el diseño y la construcción del equipo (ingeniero, fabricante) no termina con la provisión del aparato/instrumento al centro de salud.

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Se prolonga con sucesivos controles, calibraciones, reposiciones, etc., durante la vida útil del aparato. Estos controles adquieren mayor relevancia en los modernos equipos automatizados, y en cuya operación interviene software informático.

G) Surge así una zona de “responsabilidad compartida” entre ingeniería y medicina en el uso adecuado de la tecnología, cuál se utilizará, disponer de equipos adecuados a la prescripción médica en el tiempo necesario, hasta el estado de mantenimiento del equipo finalmente utilizado y las maniobras correctas del operador.

H) Esta “responsabilidad compartida” es aquello a construir, concientizando tanto a ingenieros como a médicos, formándolos en sus respectivas carreras y en las nuevas que ocupan los espacios curriculares que surgen (ingeniería biomédica, bioingeniería) en un ideario y un lenguaje común, basado en la preservación de la dignidad humana frente a toda intervención tecnológica sobre el ser humano.

Todo producto tecnológico que se introduzca en el cuerpo humano tiene un riesgo incorporado muy alto, ya sea desde el punto de vista de la contaminación, posibles malformaciones en la descendencia, etc., efectos que se ven a largo plazo. El ingeniero debe comprender que trabaja sobre un “dispositivo” que actuará sobre un ser humano o será una “pieza” que se incorporará y formará parte de ese cuerpo. Si bien existen protocolos que deben cumplirse, no siempre son suficientes y es allí donde el profesional formado en bioética tendrá otra mirada sobre tales productos.

Si al ingeniero le corresponde estar en contacto directo con el paciente, deberá poder comunicarse adecuadamente con él o ella en términos claros. Los sentimientos, la fragilidad del paciente ante la situación de estudio y/o uso, deberían ser considerados como una variable más.

Un paciente, al llegar a ciertas instancias de diagnóstico o tratamiento suele estar muy vulnerable y sensible y necesita rearmar su autoestima y su unidad corporal.

En estas instancias suele estar a solas con el profesional.

Por lo tanto éste debería ser claro en sus explicaciones y, sin crear falsas expectativas, lograr una empatía con aquél; no mostrar tan sólo un interés supremo por la parte afectada de su cuerpo ya fragmentado a través de diferentes estudios previos. Tener en cuenta que el objeto de estudio es una persona atravesando una problemática específica y no un órgano aislado que se le presenta en un envoltorio con forma de cuerpo humano al que sólo debe atravesar para llegar al problema.

El componente psicológico, que puede ser fuertemente

impactado por la aplicación de una tecnología, también debería ser considerado. Aún cuando, en general, la participación de los ingenieros en cuestiones médicas es indirecta, al diseñar una technic de uso médico debe tener en cuenta los conceptos vertidos previamente.

Además, en el diseño debe buscar que la aplicación tecnológica sea en lo posible no invasiva; si emplea radiaciones, que requiera la dosis más baja posible; que sea no limitante; que priorice la calidad de vida; que no tenga efectos adversos; que su mantenimiento sea lo más rápido y sencillo posible (la necesidad de mantenimiento recurrente puede ser un obstáculo en la eficacia de los tratamientos); en el caso de prótesis, que sean funcionales y se adapten a quien las va a utilizar, tratando de minimizar aspectos negativos en lo que respecta efectos estéticos; con respecto a un aparato-equipo para estudio, tener en cuenta en su diseño la confortabilidad y accesibilidad del mismo; que la intervención tecnológica en el ser humano, enn la medida de lo posible, sea para definir o llevar a cabo un tratamiento y no sólo para diagnosticar algo que no tiene una cura o tratamiento efectivo todavía.

LA BIBLIOGRAFÍA INCLUÍDA EN EL TRABAJO MUESTRA EL PROGRESIVO INTERÉS DE VARIADOS AUTORES EN LA NECESIDAD DE UNA MIRADA BIOÉTICA EN LA INGENIERÍA APLICADA A LA MEDICINA. ¿CÓMO ES LA SITUACIÓN ACTUAL EN LA ARGENTINA? En el trabajo de Asmatulu et al. (2010), en un análisis acerca del rol de la biotecnología y la bioética en la formación de los ingenieros, se afirma que el número de revistas y proceedings de congresos publicados sobre bioética se incrementa año tras año. Por el contrario, si nos referimos específicamente a la Argentina, debemos reconocer que la presencia de la bioética en las publicaciones sobre investigación educativa en ingeniería es muy baja. Al respecto, hemos efectuado una revisión en las principales instancias sobre investigación en enseñanza de la ingeniería que pueden encontrarse en la Argentina. Las mismas comprenden el Congreso Mundial de Ingeniería 2010, los Congresos Argentinos sobre Enseñanza de la Ingeniería (CAEDI), 2006 y 2008; la Revista Argentina de Enseñanza de la Ingeniería, la Revista Argentina de Bioingeniería, los Congresos de la Sociedad Argentina de Bioingeniería y la Revista Argentina de Ingeniería, esta última en sus dos primeros números, publicados durante 2013.

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A) En el Congreso Argentino de Educación en Ingeniería (CAEDI) 2006: sobre un total de 151 ponencias, ningún trabajo sobre el tema.

B) En el CAEDI 2008: sobre 188 trabajos, hay 5 sobre bioingeniería, que refieren a cuestiones técnicas de la disciplina o a problemáticas educativas de la misma, pero ninguno menciona explícitamente la ética o la bioética.

C) En el Congreso Mundial de Ingeniería 2010: sobre 352 trabajos, hay sólo dos vinculados con la bioingeniería, de los cuales uno refiere a la bioética.

D) En la Revista Argentina de Enseñanza de la Ingeniería, desde septiembre de 2000 hasta julio de 2010 no hay ningún trabajo sobre el tema. El primero es de marzo de 2012, referido a la enseñanza de la matemática en bioingeniería, al que siguió otro en marzo de 2013, acerca de la enseñanza de la mecánica en la referida disciplina.

En diciembre de 2013 se publicó un trabajo consistente en un análisis de tres casos históricos sobre bioingeniería.

E) Consultamos los índices de la Revista Argentina de Bioingeniería, desde 1995 hasta el presente. Encontramos dos trabajos que remiten específicamente a la bioética: “El desarrollo tecnológico y la responsabilidad médica” (septiembre 1995) y “Reuso de dispositivos biomédicos” (noviembre 2000). Hay tres trabajos más, vinculados con la educación en bioingeniería: uno que trata sobre las diferencias de género en la carrera (junio 2012); otro sobre la enseñanza de la biomecánica (octubre 2007) y el restante sobre la generación de un hospital-escuela para ingenieros (noviembre 2000). En ninguno de los trabajos el término “bioética” aparecía explícitamente en el título. Al colocarse el vocablo “bioética” en el buscador interno de la página web de la revista, no se obtuvo ningún resultado.

F) revisamos los proceedings de los Congresos que la Sociedad Argentina de Bioingeniería realiza bianualmente, desde 1999 hasta el presente. No encontramos ningún trabajo que en su título empleara explícitamente el término “bioética”. Hay trabajos sobre educación y presentaciones que rozan, sin mencionarla, el tema de la bioética, tales como cuestiones asociadas con bioseguridad, protección radiológica y desarrollo de métodos diagnósticos no-invasivos.

G) En la Revista Argentina de Ingeniería, primer número, hay un apartado fijo para bioingeniería, que contiene 1 artículo técnico sobre el tema, que no menciona la bioética. Existe un artículo específico sobre la relación entre bioética y tecnología en el segundo número de esta publicación.

¿CUÁLES CONSIDERA UD. LOS MÉTODOS Y ESTRATEGIAS MÁS ADECUADOS PARA INCORPORAR LA ENSEÑANZA DE LA BIOÉTICA EN CARRERAS DE INGENIERÍA? De acuerdo con nuestra experiencia, la presentación de casos históricos que relacionen bioética y tecnología permite acceder, por un lado, a una adecuada conceptualización de la naturaleza de la ciencia y de la tecnología y, por otro, es una vía útil para incorporar y llevar a la práctica la enseñanza de la bioética en carreras de Ingeniería. Sin embargo, si bien la investigación nos permitió efectivamente confirmar el valor del análisis de casos históricos, también demostró que no resultan útiles las presentaciones efectuadas en forma general, sino que deben analizarse casos relativos a cada una de las especialidades de la carrera de Ingeniería.

Esta es una tarea que aún nos resta realizar.

¿CÓMO PASAR DE LA ENUNCIACIÓN A LA PRÁCTICA? Como siempre, es el punto más difícil. Hemos conseguido una cierta capacitación “interna” entre los ingenieros que forman parte del proyecto, y difundido a través de distintas publicaciones la imbricación existente entre ingeniería y bioética. Pero, por ahora, todo esto es a nivel extracurricular. El desafío que nos resta es lograr la incorporación de contenidos bioéticos a nivel curricular en todas las especialidades de Ingeniería.

¿QUÉ POSIBILIDADES ACTUALES EXISTEN PARA ESA APLICACIÓN PRÁCTICA? No creemos que pueda llevarse a cabo en lo inmediato.

Por ello, nos parece que el trabajo a realizar en este

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sentido es uno de “pequeños pasos”, realizando diversas actividades, generando conciencia, difundiendo la bioética entre los ingenieros.

¿Y CUÁLES LAS PRINCIPALES DIFICULTADES A SUPERAR? La principal dificultad es que se necesita un cambio de actitud, básicamente un cambio en la orientación del pensamiento. Hasta ahora, la mayoría de los trabajos sobre ética de la ingeniería estaban centrados en la cuestión de la relación del personal con las empresas, y en la actitud del ingeniero respecto de las cuestiones económicas asociadas con su profesión. Ahora, es necesario pensar la ética de la ingeniería en forma bioética, es decir, cómo las technics habrán de influir sobre la vida humana en general, y el cuerpo humano en particular.

¿CUÁLES SON LOS PROYECTOS LIGADOS A LA BIOÉTICA DEL GRUPO QUE CONFORMAN LOS AUTORES DE ÉSTE TRABAJO? El grupo ha desarrollado dos proyectos UBACYT, aprobados y subsidiados por la Universidad de Buenos Aires, en referencia a este tema, a saber: “La bioética en la formación del ingeniero” (2012-2014): Partimos de la premisa que la formación del ingeniero presenta una dicotomía entre el dominio de la racionalidad técnica y la consideración de cuestiones éticas y sociales que siempre están presentes, y que se vuelven fundamentales al desarrollar ingeniería asociada a temáticas médicas.

La bioética es una disciplina que tiene en cuenta no sólo los derechos del paciente o el bienestar de los seres humanos y de la vida en general, sino también la evaluación de las tecnologías y el control de calidad de los equipos utilizados en medicina. Por ello, la bioética debería incluirse en todo programa educativo que contemple los aspectos ético-sociales en la formación de ingenieros, y que promueva valores tales como la responsabilidad social en el desarrollo y la operación de nuevas tecnologías. En este proyecto, investigamos: A) En qué medida la bioética se encuentra incorporada en las currículas de Ingeniería de las universidades públicas y privadas de la Argentina.

B) Qué posturas, opiniones e ideas sostienen los estudiantes, docentes y graduados de Ingeniería respecto de los problemas centrales planteados por la bioética y que, en su carácter de profesionales de la tecnología, actuales o futuros, les competen.

C) Efectuamos una revisión crítica de la forma en que la tecnología es considerada por el cuerpo teórico de la bioética, y de la manera en que las cuestiones vinculadas con la salud humana son tratadas en los estudios sociales de la ingeniería.

D) Elaboramos una base de datos de casos que involucren problemas bioéticos asociados al empleo de la tecnología, o que se vinculan de alguna manera con la profesión del ingeniero.

Los resultados de la investigación fueron presentados en el Premio Roca de Bioética 2014, y a partir de ellos se obtuvo la Segunda Mención. “La bioética en la formación del ingeniero – II Parte” (2014-2017):

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Una de las conclusiones del proyecto referido previamente fue que el estudio de la relación bioética-ingeniería conduce a una problemática más amplia, centrada en la concepción de tecnología sostenida por los ingenieros, y en el sustento ético que debe apoyarla. Consideramos que la bioética puede ser el punto de partida para un análisis global acerca de la ética de la ingeniería. Por ello, en esta segunda parte buscamos determinar: A) ¿Qué ideas acerca de la naturaleza de la tecnología, de su acción sobre los seres humanos, y de las problemáticas éticas asociadas poseen estudiantes, docentes y graduados de Ingeniería?; B) ¿Cuáles son las responsabilidades bioéticas específicas concernientes a cada una de las especialidades de la carrera? ¿Cuáles son los temas de bioética a ser incluidos en el currículum de cada especialidad?

C) ¿Cuáles son las concepciones que los ingenieros presentan acercan del cuerpo humano, de su naturaleza

y significación, biológica y simbólica? ¿Cuáles son las estrategias más adecuadas para desarrollar una imagen del cuerpo humano apoyada en bases bioéticas, en los estudiantes de Ingeniería?

D) ¿Qué acciones pueden tomarse para, partiendo de la bioética, generar un mayor desarrollo de los estudios éticos y sociales en Ingeniería?

E) ¿A través de qué acciones didácticas pueden introducirse en la formación de ingenieros contenidos que excedan el marco de la capacitación profesional específica, y coadyuven a la construcción de una formación integral, caracterizada por un pensamiento multidisciplinario sustentado en un concepto amplio de lo social? Los resultados de la investigación serán utilizados para establecer qué métodos y estrategias deben utilizarse para incorporar la problemática ético-social en las materias básicas de carreras de Ingeniería. Este proyecto se encuentra actualmente en sus primeras etapas de realización.

Entrevistadores Eduardo Darío Beccar. Médico. Miembro del Comité de Bioética de Fundación Jaime Roca.

Eduardo Piluso. Médico. Miembro del Comité de Bioética de Fundación Jaime Roca.

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