
2 minute read
Tips de nutrición
TIPS DE
NUTRICIÓN


ESCUELA SOBRE NUTRICIÓN Y ALIMENTACIÓN FUNCIONAL
¿QUÉ SON LOS AZÚCARES?
Por Pilar Serrano Galvis. Nutricionista-Dietista. Directora Técnica Functional Corp. Corporación para la alimentación funcional.
Los hay simples, complejos, naturales, añadidos, refinados, jarabes, cristales, la diferencia está en su metabolismo y el efecto que hacen en nuestro cuerpo.
Muchos adjetivos y sustantivos han venido siendo utilizados en nuestro lenguaje cotidiano para referirse a los carbohidratos que es el nombre técnico que agrupa a los azúcares. También los llaman “harinas” o “dulces” siendo estos sustantivos muy genéricos para intentar agrupar y clasificar alimentos, que más bien deberían ser identificados por los consumidores como alimentos del grupo de los energéticos con base en su función metabólica. También existe otros compuestos con capacidad endulzante que no son azúcares; se trata de pequeñas fracciones de proteínas (aminoácidos) y otros compuestos aromáticos, no clasificados como carbohidratos que dan sabores “dulces” y no por esto se consideran energéticos dado que su capacidad de endulzar o poder endulzante supera en cientos de veces a los carbohidratos por lo cual se requieren cantidades mínimas y su única función es modificar sabor, y no nutrir, como es el caso de la Stevia.


En el cuerpo humano, sólo quienes tienen rutinas deportivas constantes y de intensidad media y alta, tienen reservas de carbohidratos principalmente en los músculos porque son una fuente de energía que se consumen durante el entrenamiento y se reponen en las fases de descanso en la proporción en la que la dieta se los provea. En el cuerpo de personas sedentarias los carbohidratos de la dieta son utilizados ante todo para producir grasa que se ubica debajo de la piel o en el peor de los casos infiltrada entre los músculos y el hígado, en este último sobre todo si hay un consumo excesivo de alimentos indulgentes o si la dieta es muy baja en proteína. Esta condición se conoce como hígado graso.
Independiente de cual sea la forma en que comemos los carbohidratos, si son complejos como los almidones mal llamados “harinas”, o simples como los azúcares, todos llegan a la sangre en forma de azúcar o glucosa. La diferencia está en que, si es un carbohidrato complejo, se demora más por el proceso digestivo; en cambio los simples, que no necesitan digestión, pueden llegar a la sangre, incluso desde que entran en contacto con la mucosa oral, el tejido húmero del interior de la boca. El páncreas: el órgano del que dependemos cuando el azúcar llega a la sangre, pero el mismo que hace que subamos de peso si excedemos el consumo de carbohidratos. Siempre que piense en qué hacer para tener un peso saludable, la respuesta es: aprenda a manejar el cuerpo. La alimentación es un factor ambiental sobre el que tenemos capacidad de selección; a diferencia del aire, o del agua, gracias a las pautas de alimentación funcional podemos aprender a comer cuando entendemos los procesos digestivos y los órganos claves en nuestra forma de relacionarnos con la comida, separando el acto de alimentarnos de las emociones que modulan nuestra conducta alimentaria.
