Coordinación general:
Consejería de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes.
Dirección General de Turismo.
Textos, diseño e imágenes:
Dirección General de Turismo.
Fotografía portada Antonio López Gibaja.
Edición:
2024
Ganadería Antonio López Gibaja
LA RUTA DEHESA Y TORO EN EXTREMADURA
La Ruta Dehesa y Toro en Extremadura ofrece la posibilidad de conocer la vida del toro bravo en el ecosistema natural único de la dehesa y vivir experiencias relacionadas con las tradiciones y la cultura taurina.
Esta ruta se encuentra identificada claramente por las dos zonas que cuentan con la mayor presencia de atractivos y empresas especializadas en torno a la cultura del toro en Extremadura:
• En la provincia de Badajoz, destacamos la propia capital pacense y las dehesas del suroeste donde se encuentran los municipios de Olivenza y Táliga, ubicados en la Comarca de Olivenza. Son grandes referentes por contar con la mayor concentración de ganaderías de toros de lidia y una amplia oferta de actividades relacionadas con la temática de la ruta.
Más al sur sobresalen Barcarrota y Zafra. Ya en la Sierra Suroeste, otra de las zonas interesantes de la ruta, se encuentran varios municipios con un gran arraigo taurino: Jerez de los Caballeros, Segura de León, Bodonal de la Sierra, Fregenal de la Sierra y Fuentes de León.
• En la provincia de Cáceres, tienen especial relevancia las dehesas de las comarcas del Valle del Alagón y Sierra de Gata, con Coria, Moraleja y Torrejoncillo al frente, Plasencia como gran foco turístico del norte extremeño y el entorno del Parque Nacional de Monfragüe, donde podremos visitar algunas de las ganaderías y empresas de actividades con más vocación turístico-taurina.
Se trata de dos zonas bien diferenciadas, que podremos recorrer para descubrir las dehesas mejor conservadas e idóneas para la cría del toro y las fincas de ganado bravo más significativas.
Estos dos territorios están conectados por algunos de los municipios más importantes de la región, lugares de obligada visita que cuentan con un patrimonio excepcional y una notable cultura de la tauromaquia. Destacamos: Plasencia, Cáceres, Trujillo, Valencia de Alcántara, Mérida y Almendralejo, sus fiestas, plazas de toros y eventos taurinos son una buena motivación para una completa visita.
Este viaje propone al visitante la observación, aprendizaje y disfrute del toro de lidia, visitando las ganaderías, descubriendo las dehesas y espacios naturales y conociendo el patrimonio taurino. También podrá asistir a las fiestas populares y espectáculos taurinos, degustar la gastronomía de la dehesa y los productos basados en el toro de lidia.
Esta ruta se complementa perfectamente con la visita a otros atractivos de Extremadura: el patrimonio cultural, las rutas gastronómicas sostenibles del Ibérico Dehesa de Extremadura, del Aceite, del Queso y del Vino Ribera del Guadiana; las actividades relacionadas con la naturaleza, como la ornitología, la pesca, actividades acuáticas, etc.
6 Ganadería Antonio López Gibaja
LA CULTURA DEL TORO EN EXTREMADURA
Extremadura es una tierra de gran tradición taurina, que se ve reflejada en las numerosas fiestas y acontecimientos populares que se celebran, entre los que destacan:
Los espectáculos de toros, al igual que en el resto de la geografía nacional, se celebran en los diferentes recintos cerrados que existen en toda la región, algunos de ellos de gran antigüedad y valor arquitectónico, como los de Almendralejo (1843), Cáceres (1846), Trujillo (1848), Barcarrota (1859), Jerez de los Caballeros (1862) y Brozas (1896), entre otros.
Las capeas, los encierros tradicionales y la suelta de reses, entre otros, son un claro ejemplo de la diversidad y riqueza de las expresiones populares. Una tradición de la tauromaquia en Extremadura que ha traspasado generaciones.
Estos festejos taurinos son muy populares en muchos pueblos de Extremadura, siendo algunos reconocidos como Fiestas de Interés Turístico de Extremadura y otros declarados como Festejos Taurinos Populares. Todos ellos están regulados para garantizar su desarrollo normal y la protección de los asistentes y las reses.
Otros importantes indicadores del arraigo de la cultura del toro en Extremadura son:
La Escuela de Mayorales de Moraleja, donde los jóvenes aprenden las tareas propias de una ganadería brava. En torno al 75
por ciento de estos alumnos se han incorporado al mercado laboral y trabajan en la actualidad en más de veinte ganaderías de reses bravas de Extremadura, según los datos de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible.
La Escuela de Tauromaquia de Badajoz forma en la actualidad a un buen número de alumnos. De esta escuela han salido figuras del toreo como Antonio Ferrera, Miguel Ángel Perera, Alejandro Talavante y Javier Solís, entre otros.
El gran número de colectivos taurinos que existen en la región, auténticos impulsores y dinamizadores de la cultura del toro a través de las fiestas, eventos, exposiciones o jornadas taurinas.
Sólo en la Federación Taurina de Extremadura existen más de cincuenta entidades federadas entre asociaciones, clubes y peñas. Se contabilizan más de cien colectivos asociados, federados y no federados, en toda la región.
Por último, pero no menos importantes son los eventos, encuentros, conferencias, charlas y coloquios que sirven para difundir la cultura del toro en la región. Algunos de los más importantes son los «Encuentros de Entidades Taurinas de Extremadura», la Feria del Caballo y el Toro ECUEXTRE de Badajoz, las conferencias de la Feria de San Juan, la Semana Taurina de Badajoz del Club Taurino Extremeño de Badajoz y la Semana Taurina Placentina.
Todos estos atractivos ofrecen al viajero una interesante oportunidad para conocerla oferta de servicios turísticos relacionados con el toro y su habitat natural en el que se cría, la dehesa extremeña.
EXTREMADURA, NATURALEZA BRAVA
En Extremadura el viajero de la Ruta podrá descubrir la «naturaleza brava», encinares centenarios, espacios naturales sorprendentes y los secretos del toro bravo.
La dehesa es la evolución del bosque mediterráneo de encinares y alcornocales, resultado de la interacción del hombre y su ganado sobre un ecosistema natural de tradición milenaria y enorme biodiversidad. Es el ejemplo más palpable de que no siempre la intervención del hombre sobre el ecosistema es perjudicial, sobre todo cuando su continuidad logra un equilibrio ecológico perdurable.
La dehesa en Extremadura ocupa el primer puesto en el sistema productivo extensivo en España. Es un ejemplo destacado de sostenibilidad y conservación de la biodiversidad, donde habitan numerosas especies de vertebrados (ciervo, jabalí, zorro, jineta, meloncillo, águila culebrera, buitre leonado…), aves migratorias como la grulla y numerosos invertebrados. Mención especial merece la presencia de aves emblemáticas como el águila imperial, buitre negro o la cigüeña negra. Un ecosistema que se complementa con un bosque con diversas especies vegetales: encina, alcornoque, madroño, cantueso, jara, brezo, tomillo… Una prueba del valor ambiental de la dehesa es que más del 25% de su superficie se encuentra incluida bajo alguna figura de protección.
La ganadería extensiva, cultivos agrícolas, bellotas, corcho, caza, miel, leñas y carbones, acuicultura en sus charcas y abrevaderos, setas…son sólo algunos ejemplos del aprovechamiento que hace el hombre de ella, una «despensa natural» que se complementa con la cría del toro de lidia, uno de sus más destacados abanderados.
El ganado bravo es uno de los recursos que permiten que perdure la dehesa, hábitat de especies amenazadas, aportando seguridad y garantía de espacio.
ESPACIOS NATURALES
Esta ruta es una buena oportunidad para que el viajero pueda conocer los espacios naturales protegidos más atractivos de Extremadura. Visitas imprescindibles son:
• Los paisajes de bosque y matorral mediterráneo del Parque Nacional de Monfragüe y su Reserva de la Biosfera, uno de los mejores exponentes naturales situado en el noreste de la provincia de Cáceres.
• El Parque Natural y Reserva de la Biosfera del Tajo Internacional, nos descubre sus riberos cubiertos por un exuberante bosque mediterráneo en el curso fluvial del río Tajo, frontera natural entre España y Portugal.
• El Parque Natural de Cornalvo, ubicado próximo a la capital autonómica, Mérida, constituye otro de los tesoros del bosque mediterráneo en Extremadura, junto a la presa romana construida para abastecer de agua a Augusta Emerita.
• La Reserva de la Biosfera de La Siberia da la bienvenida al visitante con sus dehesas, llanuras, sierras y grandes embalses en los ríos Guadiana y Zújar. Se trata de un territorio con una destacada biodiversidad, un verdadero paraíso para los amantes de la naturaleza, la pesca, la caza, los deportes acuáticos, el senderismo y la bicicleta de montaña (BTT).
• El Geoparque Mundial Villuercas-Ibores-Jara. Ubicado en la comarca de Villuercas-Ibores-Jara, nació como el único Geoparque de esta región en 2011, y como uno de los dieciséis que existen en toda España. Comprende diecinueve municipios y ha sido emblema del turismo sostenible basado en la geoconservación.
Otra buena representación de los paisajes de la ruta, son los árboles declarados como singulares de Extremadura. Son ejemplares o formaciones de árboles que merecen ser destacados y protegidos, ya que pueden considerarse únicos por sus características, particularidades o por su interés cultural o histórico. Destacamos los siguientes:
• Encina La Terrona. Con unos 800 años de edad, está considerada la mayor encina de España. Está en la finca La Dehesa, junto a Zarza de Montánchez (Cáceres).
• Encina La Nieta. Situada en el paraje de El Canalón, cerca de Torre de Santa María (Cáceres). Destaca por su tamaño y porte, similar al de un alcornoque.
• Encina de El Romo. En el paraje conocido como El Romo, en Valverde de Leganés (Badajoz). Una de las grandes encinas de España, con 600 años de vida.
• Almendro real. Se sitúa en las cercanías de Valverde de Leganés (Badajoz) y es un ejemplar único en su especie, tanto por su inusual porte como por la espectacularidad de su floración en primavera.
• Alcornoque de la Fresneda. Está situado en el paraje conocido como El Alcornocal de Aldeanueva del Camino (Cáceres). Destaca por sus 21 metros de altura.
• Alcornoque de los Galaperales. Ubicado en el municipio de Bodonal de la Sierra (Badajoz), es uno de los alcornoques mejor conservados de Extremadura, con unos 230 años de vida y una altura de 15 metros.
La encina es la especie dominante en los bosques de Extremadura. Así, podemos encontrar algunos de los encinares extremeños mejor conservados en Las Hurdes, los Riberos del Tajo Internacional, la cabecera del Río Almonte y la Garganta de la Hoz en Villanueva de la Vera, todos ellos en la provincia de Cáceres.
En la provincia de Badajoz, podemos contemplar buenas muestras de encinares en el Monumento Natural de las Cuevas de Fuentes de León y las Dehesas de Jerez.
Continuando en la provincia de Badajoz, concretamente en la comarca de Olivenza, la ruta propone al viajero, y en especial a las familias, una visita por el entorno del Gran Lago de Alqueva. Se trata del mayor lago artificial de Europa, en el curso del río Guadiana en tierras rayanas. Es un lugar para descubrir en familia la naturaleza, la cultura y la dehesa y el toro.
EL TORO BRAVO
El toro bravo o de lidia es uno de los animales más emblemáticos de nuestro país y constituye la mayor aportación española a la cría animal y a la genética mundial.
El origen del ganado de lidia data del s. XVI, cuando los criadores españoles iniciaron los trabajos de selección y cruzamiento de las reses sometidas a pruebas tanto en el campo (tentadero de machos: acoso y derribo, y tienta de hembras), como en las plazas de toros para los espectáculos taurinos. A comienzos del s. XVIII ya las separaban por grupos en dehesas subdivididas en cercados.
El toro de lidia está considerado la joya del patrimonio genético de las razas ganaderas españolas, fruto de esta labor de selección realizada por los ganaderos durante más de tres siglos. Su finalidad es conseguir una raza que reúna las cualidades físicas y la presencia necesaria para la lidia o, lo que es lo mismo, conseguir un toro bravo con trapío: buena planta (atributos físicos) y gallardía (temperamento y bravura).
La cría del ganado bravo es una actividad artesanal asentada en la tradición que en ocasiones se compatibiliza con el uso de las técnicas más modernas de la producción animal. Es un sistema de producción extensivo llevado a cabo por una sucesión de generaciones de familias ganaderas, con sus mayorales al frente como expertos en el manejo, la cría y los cuidados del toro.
EL GANADO DE LIDIA EN LA DEHESA EXTREMEÑA
La raza de lidia es una raza autóctona adaptada al medio natural gracias a su menor tamaño y rusticidad. Dispone de una mayor extensificación que otras razas bovinas y tiene menos impacto sobre su hábitat que otras especies como el cerdo ibérico o la oveja.
El toro bravo está considerado como uno de los guardianes y protectores de la dehesa extremeña. Ejerce un efecto beneficioso para su conservación al rejuvenecer el suelo de la misma, evitando la invasión del matorral y previniendo la erosión y la desertización. Convive en equilibrio y armonía con la flora y fauna autóctonas, donde se ejercita y puede desarrollar los hábitos propios de su raza en condiciones de semilibertad.
Las dehesas extremeñas con algo más de 1.300.000 hectáreas ocupan un tercio de la superficie de la región, según datos facilitados por CICYTEX (Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura).
Desde hace décadas la tierra de encinas y alcornoques de Extremadura ha dado cobijo a estos animales. Las inmejorables condiciones que ofrece nuestra dehesa extremeña, como la pureza de sus pastos, la belleza de su entorno natural y la bondad de su climatología, hacen posible la ubicación de 126 ganaderías de la cabaña brava en la región, que pastan en más de 28.300 hectáreas. Es, después de Andalucía y de Castilla y León, la comunidad autónoma española con más hectáreas de terreno dedicadas a la cría del ganado bravo, según datos de la Unión de Criadores de Toro de Lidia.
Para encontrar las raíces de la historia del ganado de lidia en Extremadura tenemos que retroceder hasta las primeras décadas del siglo pasado.
Entonces, Agustín Mendoza y Montero de Espinosa, VI Conde de la Corte, adquiere la ganadería de la que derivarían otras veinte más repartidas por toda la península ibérica: la Ganadería Conde de la Corte.
El Conde de la Corte fue el pionero en descubrir la dehesa extremeña para el mundo del toro. Así, en 1923 traslada la ganadería desde tierras de Cádiz hasta la finca Los Bolsicos, en Jerez de los Caballeros, donde pastan en la actualidad.
En la década de los 60 hay 5 ganaderías en las dehesas extremeñas. A ellas se une el ganadero madrileño Victorino Martín, convencido de haber encontrado el mejor lugar para la cría del toro bravo.
Hace relativamente poco tiempo, se han trasladado a Extremadura ganaderías de todos los lugares de España. No en vano, más de una docena de figuras del toreo han elegido la comunidad autónoma para establecer su ganadería y preparar la temporada taurina.
Actualmente, en la provincia de Badajoz pastan 18 ganaderías, siendo la zona del suroeste, especialmente la comarca de Olivenza, la que mayor número de ellas concentra. En la provincia de Cáceres existen 24 ganaderías, principalmente repartidas por las dehesas del norte, el Valle del Alagón y la Sierra de San Pedro, según datos de la asociación de ganaderías de lidia.
Ganadería Jandilla/Aprende de Toros
Fotografía IFEBA
EN LA RUTA, NO TE PIERDAS…
MUNICIPIOS CON ARRAIGADA CULTURA TAURINA
En una región con importante tradición taurina, destacan varias zonas o comarcas donde las ganaderías de reses bravas, la cultura en torno al toro y las fiestas tienen su protagonismo.
En la provincia de Cáceres, merecen especial atención las comarcas del norte como el Valle del Alagón, con municipios como Coria; la Sierra de Gata con Moraleja; Plasencia, Navalmoral de la Mata, Trujillo, las dehesas de Monfragüe, la Sierra de San Pedro y la comarca del Tajo-Salor. En la provincia de Badajoz los municipios más taurinos son Badajoz, Olivenza, Táliga, Alconchel, Mérida, Zafra y algunos de la Sierra Suroeste, con Jerez de los Caballeros como epicentro.
De entre todos, las cinco localidades con mayor tradición taurina en Extremadura son: Badajoz, Coria, Moraleja, Olivenza, y Táliga. Unas lo son por su historia y cultura taurina, otras por la dedicación y entrega de sus gentes a la cría y cuidados del ganado bravo, por contar con algunas de las mejores dehesas de España o por sus conocidas fiestas y tradiciones populares que perduran desde hace siglos.
BADAJOZ
Badajoz es sinónimo de cultura y ocio en la frontera. Atravesada por el río Guadiana, es la ciudad más grande de Extremadura y cuenta con una importante oferta de servicios para disfrutar de su estancia.
La historia se respira en su casco antiguo, en su flamante Alcazaba, la fortalea árabe más grande de Europa. Su carácter defensivo determinó su emplazamiento en el Cerro de la Muela, lugar perfecto para disfrutar de las mejores vistas de la ciudad y los mágicos atardeceres sobre el río Guadiana.
Su casco antiguo con estrechas calles es un buen lugar para pasear, realizar compras y tapear en bares y tabernas. Aquí, encontramos algunos de los establecimientos especializados en el arte taurino donde se sirven deliciosos guisos de rabo de toro.
La Plaza Alta, antiguo zoco musulmán de Badajoz, es la cuna del flamenco extremeño donde el baile, el jaleo y el toque llenan sus noches flamencas.
La Feria de San Juan en junio, es la cita más importante del año para los amantes del arte taurino. Durante una semana se celebran espectáculos taurinos en la plaza de toros más grande de Extremadura, congregando a 13.000 espectadores que disfrutan de las mejores figuras del toreo a nivel nacional e internacional. En estas fechas tienen lugar destacadas conferencias y coloquios taurinos.
Badajoz alberga el museo taurino más importante de Extremadura con un patrimonio muy valioso, que lo sitúa entre los mejores de España. Se trata del Museo Taurino de Badajoz, perteneciente al Club Taurino Extremeño de Badajoz, cuya visita debe concertarse previamente.
Disfrutar de la amplia oferta de alojamientos con la que cuenta esta ciudad, es otro aliciente más para vivir una ciudad alegre y hospitalaria que, sin duda, dejará huella en el visitante.
CORIA
Uno de los municipios más importantes de la provincia de Cáceres, situado al noroeste de Extremadura, es la capital del Valle del Alagón. Está perfectamente conectada por carretera por la autovía EX-A1, que le une Navalmoral de la Mata, y desde allí hasta Madrid por la A5.
Disfruta con orgullo de su bien conservado pasado patrimonial y siente viva su riqueza histórica y ecológica.
Esta riqueza natural llevó a los vetones a asentarse en esta esta zona con sus ganados y también atrajo a los romanos hacia estas tierras.
La ciudad de Coria es además de milenaria, monumental. Su casco histórico ha sido declarado Bien de Interés Cultural, destacando el Castillo, la Catedral de Santa María de la Asunción, las murallas de origen romano, el Palacio Episcopal, la Cárcel Real, el Palacio de los Duques de Alba o el Puente Medieval. Un patrimonio con mucho sabor a historia y objeto de una cuidada restauración. Es, además, marco incomparable para la celebración de las fiestas patronales de San Juan.
Sin duda, uno de los atractivos más destacados de Coria son los Sanjuanes. Una de las fiestas más importantes y conocidas en la comunidad autónoma, declarada Fiesta de Interés Turístico y documentada desde el s. XIII.
En estas populares fiestas, destaca la valentía de los mozos y las mozas frente al toro, que recorre libremente las calles de la ciudad antigua. La tradición confiere al toro una simbología mágica que procede de las antiguas culturas celtas, de economía ganadera.
Todo ello sigue presente en los Sanjuanes, donde el respeto, el valor y la festividad confluyen en el solsticio de verano.
MORALEJA
Este municipio está situado al noroeste de la provincia de Cáceres y representa la puerta de entrada a la comarca de Sierra de Gata.
Entre sus atractivos turísticos podemos destacar el enclave natural de la Piscina Natural “La Alameda”. Un bello parque fluvial, que configura un perfecto ejemplo de integración paisajística y urbana del río en el municipio.
Pero si es conocida esta localidad, sin duda es por su relación con el mundo del toro. En particular, la festividad de San Buenaventura se caracteriza por poner en valor la cultura de la tauromaquia, con la celebración de uno de los encierros más originales de la región. De hecho, sus fiestas patronales fueron declaradas Fiesta de Interés Turístico Regional, coincidiendo sus actividades festivas con el fin de semana más próximo al 14 de julio, día en que se celebra misa y procesión en honor al santo.
OLIVENZA
Está situada al suroeste de Extremadura, en la provincia de Badajoz. Se encuentra muy bien comunicada por su proximidad a la autovía que une Madrid con Lisboa y al aeropuerto de la ciudad de Badajoz.
Olivenza, es la cabecera de una comarca con la que comparte nombre y una de las localidades fronterizas más importantes de Extremadura. Precisamente por su situación geográfica fronteriza ha sido centro de incontables disputas entre españoles y portugueses y ahora es símbolo de la convivencia de ambas culturas. Su vasto patrimonio histórico artístico es prueba tangible del mestizaje que ha enriquecido el legado cultural de este municipio.
La historia de esta localidad es larga y sus diversos avatares quedan reflejados en los numerosos monumentos que puede encontrar el viajero paseando por sus calles. Entre otros son notables sus murallas, baluartes, iglesias, conventos o puertas. Destaca su torre del Homenaje, la más alta de toda la raya hispano-lusa, con sus 37 metros de altura, que alberga en su interior el Museo Etnográfico Extremeño González Santana. También sobresalen la fachada manuelina del Ayuntamiento, ubicado en el Palacio de los Duques de Cadaval, la Iglesia de la Magdalena, auténtica joya del manuelino, y la Iglesia Nuestra Señora del Castillo.
La arquitectura popular queda representada en pequeños detalles como la forja de los enrejados, las cornisas, los balcones
o el empedrado de las vías. También en las casas señoriales que en otras épocas pertenecieron a la burguesía y a las clases acomodadas y que hoy muestran el influjo portugués que se respira en cada rincón.
Olivenza y su comarca tienen un gran reconocimiento nacional e internacional por su cultura taurina, representada, principalmente, por la Feria del Toro de Olivenza, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional. Tiene lugar cada año coincidiendo con la inauguración de la temporada taurina nacional, con la presencia de algunas de las mejores ganaderías de Extremadura y las más grandes figuras nacionales del toreo.
TÁLIGA
Localidad pacense, situada en el suroeste de Extremadura. Pertenece a la comarca de Olivenza. Formó parte de Portugal durante más de cinco siglos, hasta su incorporación a España en 1801 en virtud del tratado de Badajoz.
El origen de Táliga se remonta a la época medieval, atribuyéndose su fundación a la Orden de los Templarios. Estos caballeros se asentaron en el castillo de Alconchel y parece ser que repoblaron estos territorios con los moriscos que expulsaron de dicho castillo.
Sus calles de casas encaladas de baja altura, entre las que destacan la calle Grande o la de Huertas, dejan entrever un pasado en el que se mezclan las influencias españolas y portuguesas. Así lo atestiguan sus grandes chimeneas de estilo alentejano y rejas de marcada influencia castellana. El edificio más emblemático de Táliga es la Iglesia Nuestra Señora de la Asunción. Otros atractivos turísticos son las ruinas de la antigua ermita situada en la finca de La Coitada y el Puente Viejo sobre el arroyo de Villavieja.
Hablar de Táliga es hacerlo de un municipio rodeado de hermosos parajes naturales, marcados por la dehesa y las reses bravas, existiendo una importante cultura taurina. En el llamado Valle de Táliga se asienta la mayor concentración de ganaderías dedicadas a la crianza del toro de lidia de Extremadura.
En primavera se celebra el Feria Internacional Dehesa y Toro, un homenaje popular a las señas de identidad del municipio, con el fin de promocionar y difundir el toro de lidia y la gastronomía relacionada con estos recursos.
AGENDA CULTURAL TAURINA
FIESTAS DE INTERÉS TURÍSTICO DE EXTREMADURA
La importancia de la tradición taurina extremeña se ve bien reflejada en las festividades que tienen al toro como eje de sus celebraciones. Cuatro de ellas han sido declaradas Fiestas de Interés Turístico de Extremadura. Por orden de celebración, encontramos las siguientes:
La Feria del Toro de Olivenza (Badajoz)
Tiene lugar a primeros de marzo, abriendo el calendario taurino español con la presencia de las mejores figuras del toreo. Esta Fiesta de Interés Turístico, cada vez más arraigada y popular, ha conseguido para Olivenza una gran proyección a nivel nacional e internacional.
Los Sanjuanes de Coria (Cáceres)
Declarada Fiesta de Interés Turístico, conmemora la festividad de San Juan, el 24 de junio. Tienen su origen entre los siglos XIII y XVI. Los Sanjuanes son abanderados de los encierros extremeños, ya que los toros corren libremente por las calles del Casco Histórico de Coria.
El programa festivo taurino incluye encierros y lidia de toros en las calles y plazas del pueblo, con importantes momentos como la «Vaca de la Rana», «La Quema del Capazo» y el «Encierro de Capeones».
Fiestas de San Buenaventura de Moraleja (Cáceres)
Las Fiestas de San Buenaventura se celebran en la semana del 14 de julio, día de San Buenaventura, patrono de Moraleja, y comienzan con el chupinazo en la Plaza del Ayuntamiento.
Durante cinco días, a las 13:00 horas, tienen lugar unos encierros únicos en Extremadura, en los que seis novillos recorren los 680 metros que separan los corrales y la plaza de toros del centro del pueblo.
Además de los festejos taurinos, esta localidad de Sierra de Gata organiza actividades lúdicas, gastronómicas y deportivas, con la participación de más de 130 peñas.
En 2014, las Fiestas de San Buenaventura fueron declaradas Festejos Taurinos Populares de Extremadura y en 2022 obtuvieron el reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Regional.
Las Capeas de Segura de León (Badajoz)
La festividad de las Capeas de Segura de León, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional, se celebra a mediados de septiembre, coincidiendo con la fiesta del Cristo de la Reja. El fin de semana previo a las capeas se celebra el homenaje a “la tranca”. La tranca es una especie de horquilla de madera que, en el transcurso del tiempo, se convirtió en el símbolo de la concesión anual de capeas por parte de la autoridad. Se celebran varias capeas bajo la consigna de un absoluto respeto al ganado, tal y como contemplan las Ordenanzas Municipales de 1877. Estas prohíben causar daño a las reses con palos o cualquier otro medio, las vacas han de volver íntegras a su lugar de pastoreo. Las mismas ordenanzas prohibían a las mujeres y a los varones menores de doce años estar en la plaza. Una vez que se termina de torear la vaca es devuelta al campo.
En los últimos años se ha añadido una capea para mujeres y otra, en este caso simulada, para niños, que se celebran por las mañanas de los días de fiesta. En cada edición, se llegan a soltar unas 150 vaquillas.
TRADICIONES TAURINAS EXTREMEÑAS
En algunos pueblos extremeños se celebran cada año fiestas de carácter popular en torno a la figura de la res de lidia. Encierros, suelta de reses, capeas, becerradas y otros festejos taurinos se vienen celebrando desde tiempos inmemoriales.
• Torrejoncillo. Sus tradicionales festejos taurinos se celebran durante el mes de agosto, en esta localidad situada en pleno Valle del Alagón, también en el noroeste cacereño. Son dignos de mención la suelta de toros por las calles y los encierros tradicionales e infantiles.
• Bodonal de la Sierra. Pueblo ubicado en la Sierra Suroeste de la provincia de Badajoz, muy cerca de la provincia de Huelva. Hay que remontarse a 1625 cuando se celebró la primera lidia de un toro en la Plaza Mayor del pueblo. Actualmente, continúan con su tradición de casi cuatro siglos, celebrando las capeas que coinciden con sus fiestas del mes de agosto, en honor a Santa María y las de septiembre con sus fiestas patronales.
FERIAS Y FESTIVALES
Feria Internacional Ganadera de Zafra
Por real concesión de Juan II de Castilla, desde el año 1453 se celebra en la ciudad pacense de Zafra la Feria Tradicional de San Miguel, que tiene lugar a finales de septiembre y principios de octubre. Su razón de ser ha sido desde siempre el intercambio de ganado. Desde 1992 se convierte en Feria Internacional Ganadera (FIG). Su fama atrae a miles de personas españolas y extranjeras, que hacen de ella una de las principales ferias ganaderas de España. En su programación nunca faltan los espectáculos taurinos.
Feria Internacional Dehesa y Toro de Táliga
Cada año, a mediados de abril, la localidad pacense de Táliga celebra su Feria Internacional Dehesa y Toro. Este pequeño municipio pacense celebra una fiesta popular en torno a la gastronomía de la dehesa, sorprendiendo a los más jóvenes con encierros infantiles y otras actividades en una jornada lúdico-festiva para la promoción de los principales atractivos de la zona.
ECUEXTRE. Feria del Caballo y del Toro de Badajoz
Se celebra cada año en junio en Badajoz, en el recinto de IFEBA. La oferta de la feria incluye actividades taurinas, ecuestres, gastronómicas, comerciales y de flamenco.
Entre las primeras destacan los tentaderos y la celebración del Concurso Nacional de Faena y Doma de Campo.
Feria Internacional del Toro de la Ciudad de Coria
La Feria Internacional del Toro de la Ciudad de Coria, es un evento taurino, de carácter turístico-cultural y socioeconómico, que ha alcanzado un importante éxito de participación de visitantes, lo que ha convertido a esta localidad en la capital del Mundo del Toro durante la celebración de esta a mediados del mes de marzo.
Fotografía IFEBA
ATRACTIVOS VINCULADOS A LA CULTURA TAURINA
PLAZAS DE TOROS SINGULARES
Extremadura conserva una gran tradición taurina. Como muestra, basta con acercarse a algunos de los numerosos cosos que perviven hoy en día, algunos desde hace más de siete siglos.
Según datos de la Escuela de Tauromaquia de Badajoz, Extremadura cuenta con 34 plazas de toros fijas, de ellas, 18 en la provincia de Badajoz y 16 en la provincia de Cáceres.
Entre las plazas de toros de la provincia de Badajoz, algunas destacan por su historia, arquitectura, antigüedad, singular ubicación, ferias de renombre o el uso de estas. La plaza de toros de Puebla de Sancho Pérez (s. XIV) considerada como el primer vestigio de la afición extremeña por el mundo del toreo, es una de las más antiguas de España. Está unida a una ermita, al igual que la de La Parra (s. XVI). A finales del s. XVIII se inicia la construcción, por suscripción popular, de la plaza de toros de Cabeza la Vaca, declarada Bien de Interés Cultural.
La plaza de toros de Almendralejo (1843), declarada Bien de Interés Cultural y considerada «única y exclusiva en todo el país», alberga bajo el tendido una bodega de vino. De antigüedad similar son las plazas de Zafra (1844) y Jerez de los Caballeros (1862), ésta última declarada Bien de Interés Cultural.
Las plazas de toros de Barcarrota (1859) y Fregenal de la Sierra (1859), son dos joyas taurinas que se encuentran dentro
de un castillo. Otras interesantes para visitar, levantadas en el s. XIX, son las de Fuente del Maestre (1828), Fuentes de León (1881) y Azuaga (1892), estas última declarada Bien de Interés Cultural.
La centenaria plaza de toros de Mérida (1914) es una interesante construcción que mezcla elementos del neomudéjar con la arquitectura del hierro.
Por último, merecen ser mencionadas las plazas de toros de Badajoz y Olivenza que destacan por sus reconocidas ferias taurinas.
Por su parte, en la provincia de Cáceres, los cosos de mayor antigüedad son los de la capital (1846), declarada Bien de Interés Cultural, al igual que la plaza de Trujillo (1848), ubicada en una zona ZEPA (Zona de Especial Protección Aves). La de Plasencia (1882), fue construida en sus orígenes por una pequeña sociedad entre varios placentinos.
La plaza de toros de Valencia de Alcántara (1884) destaca por su historia, al igual que la de Brozas, construida en 1913.
La plaza de toros de Valverde del Fresno (1914) es una de las pocas plazas extremeñas construidas en piedra. La de Santibáñez el Alto es interesante por su forma irregular, su singular ubicación en el interior de un castillo y sus magníficas vistas sobre el embalse de Borbollón, la Sierra de Gata y la dehesa circundante.
Todas ellas son visitas imprescindibles para conocer la historia pasada y presente de la tauromaquia extremeña.
MUSEOS TAURINOS
Entre los museos taurinos existentes en la Ruta de Dehesa y Toro en Extremadura, destacamos el Museo Taurino de Badajoz, perteneciente al Club Taurino de Badajoz, que alberga un patrimonio muy valioso, que lo convierte en uno de los mejores de España. Cuenta con centenares de carteles taurinos que se remontan a finales del siglo XVII. En sus paredes se exhiben fotografías de toreros de todos los tiempos, desde Reverte, con autógrafo del torero, hasta nuestros días. Existe una sala destinada a la dinastía Bienvenida, con documentos oficiales e inéditos de toda la familia, la más célebre de la historia del arte del toreo y originaria del pueblo extremeño de Bienvenida. Hay que concertar previamente la visita.
Es famosa la tradicional «Semana Taurina Pacense» que se celebra en el Museo Taurino de Badajoz. Está considerada la cita cultural más importante del año en torno a la fiesta de los toros, por la calidad de los conferenciantes que asisten a los coloquios y las charlas que se ofrecen.
También son de gran prestigio y solera los trofeos taurinos que otorga el Club Taurino Extremeño de Badajoz a los triunfadores de los espectáculos taurinos pacenses de la Feria de San Juan.
Otro museo taurino importante para rememorar episodios de la historia de la tauromaquia es el Museo de Victorino Martín en Moraleja (Cáceres). En él se reúnen grandes recuerdos del pasado de una de las ganaderías más populares del mundo, a través de muchos e importantes reconocimientos de la sociedad. En este museo podremos conocer al famoso toro Velador, el único indultado en la Plaza de Toros de las Ventas (Madrid).
CENTROS DE INTERPRETACIÓN
Centro de Interpretación San Buenaventura “Fidel Simón”
El Centro de Interpretación de San Buenaventura Fidel Simón se presenta como un espacio moderno e integrador que fusiona las nuevas tecnologías con el arraigo cultural de un pueblo.
La Casa Toril, ubicada en Plaza de Los Toros de Moraleja, es el edificio que alberga este emplazamiento. El nombre del edificio indica que, en estas instalaciones, concretamente en la Planta Baja se encuentran los corrales, lugar donde descansan los animales durante la celebración de los festejos.
A través de una decoración que evoca a una plaza de toros con diferentes paneles y soluciones de NNTT el visitante podrá descubrir el alma de San Buenaventura, sus actividades más singulares, su gastronomía y costumbres con más de 100 años de historia..
EL FLAMENCO Y EL ARTE ECUESTRE
Los toros y el flamenco, declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, son dos artes que van de la mano, unidas por la historia y el sentimiento del ser humano.
La «Plaza Alta» de Badajoz y sus aledaños están considerados foco y génesis del flamenco extremeño.
Son varios los cantaores y muchas las peñas flamencas repartidas, principalmente, por Badajoz y provincia, que viven con pasión y divulgan un arte que tiene sus raíces en el s. XVIII y que evoluciona y se reinventa día a día.
Ganadería Jandilla/Aprende de Toros
EXPERIENCIAS EN LA RUTA DEHESA Y TORO EN EXTREMADURA
La Ruta Dehesa y Toro en Extremadura pretende acercar a los visitantes la gastronomía del lugar, conocer un modo de vida que lleva a la práctica conductas sostenibles y compatibles con la naturaleza, que garanticen un medio sano a las siguientes generaciones.
En la Ruta Dehesa y Toro en Extremadura, la persona viajera tendrá la posibilidad de visitar algunas de las ganaderías con más historia de la Península Ibérica.
Las experiencias o servicios turísticos de la ruta contemplan actividades tales como:
• Conocer cómo es la vida del toro de lidia en la dehesa.
• Recorrer las instalaciones ganaderas.
• Observar los diferentes cercados, plaza de tientas, y las zonas más interesantes de cada explotación.
• Disfrutar de una jornada campera.
• Safari del toro. Captación fotográfica del toro en su hábitat natural.
• Descubrir los secretos de la cría y cuidados del ganado bravo.
• Conocer el patrimonio y el arte de la tauromaquia.
