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Opinión
Palabras Mayores
Perredistas de la Tierra Caliente del Estado de México están marcando una ruta que podrían seguir militantes del Sol Azteca en otras entidades, de cara a los comicios federales y estatales de 2024.
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Aurelio Rojo Ramírez, exalcalde del PRD en Tlatlaya; Zeferino Cabrera Mondragón, exalcalde de Luvianos; y José Félix Gallegos Hernández, exalcalde de Amatepec, hicieron pública su renuncia ayer, para adherirse a la campaña de la candidata de Morena al gobierno del Edomex, Delfina Gómez.
Ya antes otros perredistas habían tirado la toalla amarilla, para sumarse a Morena, bajo el liderazgo de Delfina Gómez, junto con otros miembros de la dirigencia perredista.
Argumentan que su partido perdió su rumbo ideológico para sumarse al PRI, partido que ha gobernado al Edomex de manera continua, mediante el poderoso Grupo Atlacomulco, imponiendo un alto costo para los municipios mexiquense, sobre todo los del sur, que colindan con nuestro estado de Guerrero, y que están en condiciones deplorables, siendo esa entidad una de las más ricas del país por su alto nivel de industrialización.
Así, mientras Los Chuchos andan tomados de la mano con Alejandro Moreno, el líder del PRI; y con Marko Cortés, el dirigente nacional del PAN, en busca de migajas, como parte de una alianza cuyo único objetivo es contener el avance del lópezobradorismo en el país, el partido se les sigue desmoronando, fragmentando.
candidatas, ambas mujeres, en lo personal. Ellas en lo individual no son tan importantes como lo que cada una representa. Alejandra del Moral, el continuismo de una clase política rancia cuyos nietos y bisnietos están ahora gobernando. Delfina, más que al lópezobradorismo y su cuarta transformación, es la única oportunidad que tienen los habitantes del Edomex para marcar la alternancia, como lo hicimos en Guerrero en 2005.
Y dirán que eso no importa, que al fin son los mismos, pero no es así. Tampoco es mejor bueno por conocido que malo por conocer. La alternancia siempre será mejor que los cacicazgos políticos perpetuados de generación en generación, formando clanes de familiares y amigos rolándose el poder y, por ende, quedándose con el dinero.
Si los del Edomex resienten el abandono de sus gobernantes, que nos pregunten a los guerrerenses, que vivimos en una entidad con mucho menos desarrollo, con graves carencias, un alto grado de migración interna, nacional e internacional, pero con gruesos cacicazgos encima, rotándose el poder, hablando de “relevos generacionales” y esos conceptos, que no son otra cosa que traspasar el poder de sus feudos a sus hijos -ahora también cuentan las esposas, por aquello de la equidad de género-. Es decir, cero democracia.
Alcalde de Acapulco gasta millones en jolgorios, pero abandona la seguridad
Dise O Gr Fico Y Redes Sociales
Antonio Gonzalez
Producci N Y Taller
Antonio Gonzalez
Periodico el Faro de la Costa Chica es una publicación diaria que se imprime en sus propios talleres con circulación en la región de la Costa Chica de Guerrero, Tlapa y Oaxaca preventivos municipales de Acapulco, porque los alcaldes tienen la responsabilidad de prevenir la comisión de delitos, son de hecho la primera línea de defensa ciudadana contra toda clase de malhechores, pero no cumplen su cometido. Pero tal como lo han denunciado los mandos de las fuerzas armadas, los policías de Acapulco NO participan en los operativos, descuidan la vigilancia y no intervienen en incidentes violentos. Para colmo, Abelina –y por defecto, Norma Otilia- distraen con sus pachangas los recursos públicos que podría usar para fortalecer con materiales y equipamiento a sus policías.
Los que hoy se van son parte del llamado “Grupo de Sur” en el PRD mexiquense, que fueron los primeros en oponerse al Grupo Atlacomulco en los años 90. A diferencia de lo que hicieron los luchadores sociales de Guerrero incrustados en el partido amarillo, que primero se inclinaron ante el priísta Ángel Aguirre Rivero y posteriormente se hincaron ante el PRI, llevando como líder precisamente a un personero del Aguirrato, los sureños del Edomex pintaron su raya.
Esto no deja de ser esperanzador para los grupos de izquierda que aún prevalecen en los estados, fundadores y precursores del Sol Azteca, el partido que nació bajo la égida del cardenismo, pero que poco a poco se fue envileciendo, hasta hacerse uno con los que desde hace casi 100 años se amafiaron para envilecer al pueblo.
Lo vimos apenas con la gira de la senadora Beatriz Paredes Rangel por Guerrero, donde fue arropada por los priístas, quienes se encerraron en un diálogo de sordos, señalando las deficiencias de un incipiente gobierno estatal, pero obviando su propia historia.
El único sensato en esas terturlias fue el ex gobernador Héctor Astudillo Flores, pues mostró congruencia y señaló que se vería muy mal si criticara la gestión de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, pues Guerrero es una entidad muy difícil de gobernar. Parafraseando a René Juárez Cisneros, “Guerrero no es Disneylandia”.
Mientras que la alcalde de Acapulco, Abelina López Rodríguez gasta millones de pesos y pone todos los recursos humanos y materiales del ayuntamiento al servicio de sus fiestas callejeras, como el reciente Jolgorio 2023 en el que se presentaron artistas y se realizaron bailes, los acapulqueños han vivido sin vigilancia policiaca y dependiendo de las fuerzas estatales y federales, porque la edil no cumple con su obligación constitucional de dar seguridad a la población. Abelina, al igual que su homóloga de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández Martínez, gusta de los bailes y de los conciertos para mantener distraída a la población de sus corruptelas s ineficiencia, y para tratar de ganar la simpatía de los electores para ganar su voto en alguna posible elección de un nuevo cargo. Pese a que tienen todo en contra en su partido, Morena, donde ya se sabe que no les darán nuevas candidaturas en 2024, precisamente por sus malos gobiernos y su deslealtad.
Pero inexplicablemente Abelina mantiene pasivos a sus preventivos, a los que sólo se ve en eventos en los que participa la alcalde, como el Jolgorio, como antes lo estuvo en el llamado Fandango, en la feria decembrina, lo mismo que en el desfile del Día de Muertos, y así.
Marquelia Gro. Col. ISSTE
Cierto que los ex alcaldes del Edomex no han sido los primeros que se zafan de esta simulación, pero sí son los que conservan su estatura moral y el mejor de los argumentos para oponerse a la agenda de Los Chuchos en esa entidad, sumándose a la candidatura de Delfina Oliva.
Y no estamos hablando de las
Y bueno, a diferencia de Delfina, que está recibiendo adhesiones importantes en el Estado de México, en Coahuila, otra entidad que está pro cambiar su gobierno estatal, al candidato morenista, Armando Guadiana, no le está yendo nada bien. Apenas ayer, en el primer debate de los candidatos, el candidato del Partido del Trabajo, Ricardo Mejía Berdeja, le mostró evidencias de sus nexos con los Moreira y el priato en esa entidad, llamándolo farsante.
Pensando mal, para acertar, quizás por eso Mejía Berdeja fue enviado como Caballo de Troya, a reventar la candidatura de Guadiana. Pues es mejor tener en el poder a un verdadero priísta, que a un priísta disfrazado de morenista.
Pero su búsqueda personal de popularidad tiene un precio: descuidan la seguridad pública y dejan ese vacío para que tengan que hacer su tarea la Policía Estatal y elementos del Ejército, de la Marina y Guardia Nacional, que así se distraen de otras tareas que estratégicamente se les asignan. Y ni siquiera atrae al turismo foráneo.
El asunto es grave, tomando en cuenta que la estrategia dispuesta por la gobernadora
Evelyn Salgado Pineda en las reuniones de la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz. En sus planes de vigilancia y combate al crimen se incluye a los policías
De esa manera, la edil acapulqueña desvía recursos, escatima inversiones en seguridad –evita gastar en gasolina para patrullas, por ejemplo-, se queda con el dinero del presupuesto destinado a la contratación, capacitación y equipamiento de las plazas de nuevos policías que no ha repuesto… y se recarga pachuconamente en las fuerzas estatales y federales para que le hagan la chamba de la seguridad.
Por lo que, ante tanta omisión y corrupción en la operación de una policía preventiva municipal casi inexistente, el Congreso Estatal debe llamarla a cuentas, y nosotros los ciudadanos debemos exigirle a Abelina que haga su trabajo y cumpla su responsabilidad de dar seguridad al municipio de Acapulco…