Entre Yoloczin y alianza CTM-Añorve se definirá la presidencia de Acapulco

Dos fuerzas políticas se enfrentarán en la elección de presidente municipal de Acapulco en el 2024: La que representa la líder del Congreso, Yoloczin Domínguez Serna, con el apoyo de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, más el del líder real de Morena, Félix Salgado Macedonio y el activismo de su partido; contra la fuerza dominante en el PRI de Acapulco del grupo del senador Manuel Añorve Baños, con alguno de los priistas con más renombre, como el líder de la CTM, Rodolfo Escobar Ávila, la diputada Julieta Fernandez Márquez, el exsecretario de Finanzas, José Luis Ávila Sánchez; o el exsecretario de Desarrollo Social, Celestino Bailón.

En el caso de Morena, la presidenta de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso estatal, Yoloczin Domínguez, simplemente no tiene rival en su partido. Con una carrera en ascenso, ha sido electa diputada en dos ocasiones, y ante la crisis que generó el expresidente anterior en el Poder Legislativo, Alfredo Sánchez Esquivel, fue elegida en forma unánime por los diputados de todos los partidos para ocupar ese cargo y resolver los problemas financieros, políticos, administrativos y operativos que se habían convertido en una bomba de tiempo y prácticamente paralizaron la actividad parlamentaria.

En esa ruta, Yoloczin resolvió los problemas, desatoró leyes y nombramientos pendientes, y se ha ganado un prestigio sin precedente en la vida legislativa de Guerrero. Por sus méritos, cuenta con el apoyo total de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, y del senador Félix Salgado, del dirigente nacional de Morena, Mario Delgado Carrillo, y de una creciente cantidad de acapulqueños que han constatado que ella sabe cumplir gestionando obras públicas de beneficio para colonias populares; y la simpatía del presidente Andrés López Obrador.

Y aunque también aspiran a la candidatura la diputada Beatriz Mojica Morga, excandidata del PRD a la gubernatura, y el empresario de seguridad privada y limpieza de oficinas, Joaquín Badillo, no han crecido ni hecho mayor labor entre la gente del puerto, manteniéndose en una zona políticamente gris que desde ahora los mantiene fuera de la competencia electoral.

De esa forma, Yoloczin es efectivamente una precandidata adelantada, pero avanzada en términos de opinión pública, pues aún llevando a cabo sus funciones y la gestoría de muchas obras como diputada, su imagen y su actividad tienen una repercusión extraordinaria donde quiera que va, y se le asocia de inmediato como la próxima alcalde de Acapulco…

Añorvismo en boga…

En el otro lado de la contienda electoral hay dos aspectos importantes:la posibilidad de que el PRI vaya a las elecciones en alianza con el PRD y con el PAN en Acapulco de la mano de un añorvismo en franco ascenso; y que junto con Morena, la mayoría de las aspirantes son mujeres: Yoloczin y Mojica por un lado, y Julieta Fernández y Pilar Vadillo por el partido tricolor.

La posibilidad de que en la elección por la alcaldía compitan mujeres es posible, dado lo que hemos mencionado sobre Yoloczin, para que se enfrente con Julieta Fernández, que tiene amplia popularidad en el puerto, y ha sido tres veces diputada local y federal. Su voz es respetada y aparte de los temas políticos, se ha convertido en una especie de conciencia moral entre la sociedad acapulqueña.

Pero la fuerza electoral la tiene también, y de forma gremial, el líder de la CTM, Rodolfo Escobar Ávila, quien ha sido ya síndico, regidor y ha tenido diversos cargos en el ayuntamiento. Eso y el hecho de que los priistas cetemistas son más del 60% de la fuerza de las bases que conforman la estructura electoral tricolor, lo muestran como uno de los favoritos para obtener la ansiada candidatura.

José Luis Ávila, por su parte es un priista con 50 años de militancia, muy conocido en la administración pública estatal y municipal, cuyos cargos más recientes fueron como secretaria de Finanzas del ayuntamiento porteño, y como exitoso delegado federal del IMSS en el estado. En esos cargos ha obtenido gran prestigio por su don de gentes y por su eficiencia en la dirección de diversas dependencias. Actualmente se dedica a actividades privadas.

Mientras que Celestino Bailón goza también de una larga trayectoria política, administrativa y partidista. Fue secretario de Planeación con tres gobernadores y en el gobierno municipal, revelándose en esas posiciones como un experto en planeación y en el desempeño de dependencias públicas. Actualmente se dedica a la docencia.

Como se ve, todos los aspirantes del PRI están ligados en el presente o lo estuvieron en el pasado reciente con el senador Manuel Añorve Baños, que encabeza un grupo de políticos con experiencia y capacidad probada, y al menos dos de ellos manejaron la administración municipal, logrando mantener una administración pulcra que no dejó cuentas pendientes, y comprobó a cabalidad el buen uso de los recursos ante las auditorías superiores de la Federación y del Estado.

El añorvismo es uno de los principales grupos fuertes dentro del PRI en Guerrero, equiparable al del excandidato a gobernador, Mario Moreno Arcos, y el del exgobernador Héctor Astudillo Flores, quienes compiten por la candidatura al Senado 2024-2030 en un proceso que será la prueba de fuego del tricolor, y en el que la definición del candidato(a) a la alcaldía tendrá mucho que ver…