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Antonio Gonzalez

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Antonio Gonzalez

Periodico el Faro de la Costa Chica es una publicación diaria que se imprime en sus propios talleres con circulación en la región de la Costa Chica de Guerrero, Tlapa y Oaxaca

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Marquelia Gro. Col. ISSTE

Lectura Política

Noé Mondragón Norato MISAEL TAMAYO NÚÑEZ DESPEJAR

La disyuntiva de Marcelo

Para el presidente AMLO la radiografía política está muy clara: si designa al canciller Marcelo Ebrard Casaubón como candidato a la presidencia del país por el Morena para la elección de julio de 2024, implicaría el retorno a la función pública y a carteras clave en el espectro nacional, de personajes priistas, perredistas, panistas y emecistas ya maleados y caídos en desgracia. De hecho, esa es la apuesta opositora de la eventual alianza partidista PRI-PAN-PRDMC: amagar con la designación de un candidato que los represente de manera simbólica en esa elección, pero si queda Marcelo por el Morena apoyarlo con todo para que gane. Es decir, la puesta en marcha del traidor y convenenciero voto cruzado. De ahí se lee lo demás.

AMLO: BLINDARSE. – El actual presidente sabe y evalúa que dejará muchos pasivos políticos pendientes para cuando abandone Palacio Nacional. Resabios políticos de todos aquellos personajes que afectó con su presumible y simulado “combate a la corrupción”, y que buscarán cobrarle la factura. Los puntos que lo explican son elocuentes: 1.- Es muy obvio que la jefa de gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum Pardo es la favorita presidencial para la carrera sucesoria del 2024. De hecho, AMLO la va a inflar lo más que pueda en las encuestas durante los próximos meses para convertirla en inalcanzable por parte de Marcelo Ebrard y Adán Augusto López. La alianza PRI-PAN-PRD-MC espera paciente una eventual ruptura derivada de la inconformidad de Marcelo tras no ser agraciado con la candidatura del Morena, para convertirlo en su candidato a la presidencia. Pulsan que desde dicho bloque opositor Marcelo le puede ganar la presidencia a Claudia. Pero si AMLO se mete a la campaña de esta última —solicitando licencia a su encargo presidencial durante los meses de proselitismo electoral—, el asunto se complica. Por el plus de la popularidad que todavía conserva. 2.-

Claudia Sheinbaum representa el boleto político de AMLO para frenar cualquier tipo de linchamiento o investigación comprometedora en su contra para cuando ya no sea presidente. La disciplina y la obediencia sistemática de Claudia es narrada con profusión de detalles en el libro “El Rey del Cash”, en el cual la autora Elena Chávez afirma que la actual jefa de gobierno capitalino literalmente entregó a su exesposo Carlos Imaz con AMLO por el asunto de los video escándalos perredistas de 2004 —en los cuales René Bejarano El Señor de las ligas y el propio Carlos Imaz reciben gruesos fajos de billetes—, filtrados por el empresario argentino Carlos Ahumada. Se entiende que, por ese bochornoso episodio, Claudia finca su “lealtad y confianza” ganadas a pulso ante López obrador. Y le garantiza sin muchas alteraciones, la continuidad de su proyecto presidencial. No es casual la fiebre política anticipada e inducida a su favor y fraguada deliberadamente desde Palacio Nacional. 3.- De hecho, Marcelo Ebrard se sabe en desventaja. Está consciente de no estar dentro del ánimo presidencial. Pero guarda celosamente esa ficha adversa para cuando el tiempo y la circunstancia lo obliguen a utilizarla. O a guardarla. Es claro también, que el presidente AMLO lo percibe con cierto recelo por la gran cantidad de adherentes panistas, perredistas, priistas y emecistas que tiene regados por todo el país. La mayoría de ellos, enemigos jurados de la 4T. En el probable escenario de que fuera investido como candidato a la presidencia por el Morena, todas esas fuerzas van indiscutiblemente, a intentar acorralarlo. Tratando de recuperar en el menor tiempo posible, todos los privilegios perdidos durante el gobierno de AMLO. Y por supuesto, a escarbar en los sótanos de la corrupción heredada por la 4T para recetarle una dosis de su propia medicina. Por eso la apuesta presidencial natural e indiscutible, es Claudia. Porque sería, además, la primera presidenta mujer en la historia de México en una coyuntura de empoderamiento femenino. Marcelo estaría así, en una inevitable disyuntiva: o se convierte en el pasaporte de retorno de quienes representan el viejo sistema. O de plano, se disciplina y queda a deber a sus simpatizantes. Porque en política todo es absolutamente posible.

HOJEADAS

DE PÁGINAS…

Tratando de asumir como réferi de una pelea sobredimensionada por la alcaldesa de Acapulco, Abelina López, pero que en realidad no es tal, el dirigente estatal del Morena, Jacinto González Varona —como muchos morenistas empoderados— pecó de ingenuo. Porque busca sentar a platicar a la gobernadora Evelyn Salgado con la rijosa alcaldesa de Acapulco por el incidente de sus guaruras. Como si en la entidad no hubiera otros problemas de mayor urgencia que atender, González Varona asume un protagonismo propio de neófitos de la política. Lo cual confirma que el cargo le quedó demasiado grande. No llena ni las mangas. La gobernadora debe, por simple sentido común, ignorar esa “acomedida gestión”.

Es necesario que ocurra una desgracia más en el planeta para recordar que Guerrero es la segunda entidad con más sismos en el país, tan sólo por debajo de Oaxaca. Y dice un dicho que cuando veamos las barbas del vecino cortar, pongamos las nuestras a remojar.

En un escenario de lata sismicidad, como la que registra Guerrero, no hay lugar para sorpresas, pero mucho menos para dormirnos en nuestros laureles.

De acuerdo con el titular de Protección Civil estatal, Roberto Arroyo Matus, Guerrero ha registrado 360 sismos en lo que va de 2023; es decir, que a lo largo de 36 días aproximadamente, tenemos esa pavorosa cifra de sismos; en promedio 10 por día, aunque el rango va de 8 a 12 movimientos telúricos diariamente.

¿Estamos entonces ante un enjambre sísmico permanente? Las autoridades deben determinar, por lo tanto, las zonas de riesgo inminente y actuar. Porque aunque se dice que un sismo es impredecible, sí hay registros que nos deberían a obligar a ser más radicales en la prevención, por ejemplo; pero sobre todo las autoridades deberían ser más rigurosas en la supervisión de construcciones, tanto las que están por desplantarse nuevas, como las ya construidas y que requieren reforzamiento.

¿Por qué insistir en esto? Porque si alguna lección nos dejan los sismos de Turquía y Siria de este domingo (que hasta anoche sumaban la pavorosa cifra de 4 mil muertos y contando), es la facilidad con la que se derrumbaron edificios enteros, que cayeron como polvorón uno tras otro.

Hay videos de cómo a diestra y siniestra los colosos de concreto se iban “sentando” literalmente sobre su propio peso, ante el impacto del sismo de 7.8 grados.

¿Qué significa eso? La deficiente cimentación de las construcciones fue la causa de que casi 6 mil edificios y construcciones en general se vinieran abajo en cuestión de segundos, sin dar tiempo a sus habitantes de salir.

Aunque lo hubieran intentado, imposible que las personas hubiesen podido salir de edificios de 3, 4 o 5 pisos en menos de un minuto.

Las fotografías son impresionantes. Los multifamilares quedaron convertidos en arena un piso sobre otro, y dentro de ellos la gente que dormía a esas horas de la madrugada.

Las autoridades reconocen que, tal como sucedió en Haití en el año 2010, cuando un sismo de 7.5 grados cobró la vida de 300 mil personas (es considerada la catástrofe humanitaria más grave de la historia), en Turquía y Siria se alzan casas endebles por la grave situación económica de la zona, que incluye los años de guerra en el país sirio.

Eso y no obstante que se trata de una zona con alta sismicidad, pues en ese punto confluyen varias placas tectónicas que se empujan unas con otras.

El sismo de Turquía de antier, por ejemplo, fue provocado por el desplazamiento hacia el norte de la placa Arábica. "Al no tener espacio, chocó con la placa de Anatolia. Ese frotamiento reverbera a lo largo de la toda la falla”, explicó un experto.

El epicentro en ese punto, entonces, no es tan importante como la extensión del movimiento telúrico, a lo largo de 100 km. “Eso significa que dentro de ese margen de 100 km a lo largo de la falla, todo” sufre las consecuencias del temblor”, añadió.

Por lo tanto, si como Arroyo Matus dice que Guerrero es la segunda entidad con más sismos del país, la verdad es que no vemos -por lo menos no se conoce- algún programa de gobierno encaminado a la revisión de viviendas.

Esto, de hecho, ya se había recomendado desde el gobierno de Zeferino Torreblanca (2005-2011), cuando se comenzó a hablar de la activación de la “Brecha de Guerrero”, ubicada por Coyuca de Benítez, y en la cual desde 1911 que no ha sucedido un terremoto de alta magnitud, por lo que consideran que hay suficiente energía acumulada para un terremotazo.

Concretamente la Brecha de Guerrero es una brecha sísmica ubicada en el Océano Pacífico, frente a la región Costa Grande del estado de Guerrero, abarcando una extensión de 230 kilómetros, desde el sur de Acapulco hasta Papanoa, municipio de Tecpan de Galeana. Está localizada dentro de la zona de subducción entre la Placa de Cocos y la placa Norteamericana, en donde la primera se introduce por debajo de la segunda.

Hay que decir que en esa zona sí se han registrado sismos, particularmente entre Acapulco y Coyuca de Benítez, pero no de alta magnitud, y de ahí el riesgo del que hablan los expertos.

Por otra parte, los guerrerenses todos deberíamos interesarnos más por la prevención en casa, contar con una mochila de emergencia que contenga los elementos mínimos de apoyo para un posible desalojo del hogar, o bien ubicar dentro de la misma casa las zonas seguras.

Escuelas, edificios públicos, hospitales, industrias, también tendrían que estar haciendo constantes simulacros de evacuación.

No se trata de evitar el sismo, sino que reducir su impacto en cuanto a pérdidas de vidas humanas. Lo material, como quiera se recupera.