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Cuerpo&Salud
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Colaboración Olga Maritza Vásquez, psicóloga clínica, terapeuta cognitivo/conductual y asesora familiar/ olma.vasm@gmail.com
¿Por qué nos gusta que nos hagan reír?
RISA. Científicamente está demostrado que sonreír tiene un inmenso poder curativo. Un estudio de la Universidad de Oxford reveló que la risa verdadera y no de compromiso es la mejor medicina, ya que las endorfinas liberadas por el cerebro cuando sonreímos, ayudan a controlar el dolor y promueven una sensación de bienestar de la misma manera que lo hace la actividad física.
Cuando reímos estimulamos la producción de químicos naturales que actúan como potentes analgésicos, así como los centros de placer, creando situaciones satisfactorias que contribuyen a eliminar el malestar general. Por lo que la terapia de la risa es una herramienta complementaria recomendada, debido a los beneficios que genera en la salud integral de la persona. Si para ti no es razón suficiente para responder la pregunta del título o el por qué sigues tantas cuentas o personas graciosas en Instagram o TikTok, sigue leyendo. Una terapia efectiva
La implementación de la risa como herramienta terapéutica se explica por medio de los efectos fisiológicos que genera en el organismo (ejercita y relaja la musculatura y respiración, reduce la hiperreactividad bronquial en pacientes con asma, disminuye la concentración de las hormonas del estrés, aumenta la producción de endorfinas, incrementa la oxigenación tisular, mejora el funcionamiento de los vasos sanguíneos, estimula el sistema inmunitario, eleva el umbral del dolor, la tolerancia y mejora la función mental). Desde la perspectiva psicológica involucra aspectos cognitivos, emocionales, conductuales y sociales (reduce el estrés y los síntomas de depresión y ansiedad, eleva el estado de ánimo, la autoestima y la confianza; aumenta la memoria, el pensamiento creativo y la capacidad resolutiva de problemas; mejora las relaciones sociales, la relación médico-paciente y la calidad de vida; promueve el bienestar psicológico e intensifica y contagia hilaridad). Tenemos la costumbre de escuchar canciones tristes, recordar a personas que ya no están a nuestro lado o ver películas que nos hacen adentrarnos aún más en nuestra tristeza. Haz el ejercicio de obligarte a escuchar música alegre que te invite a bailar, ver películas de humor que te permitan soltar una carcajada, y rodéate de personas positivas y alegres. Trata de ver la vida a partir de lo que tienes, no de lo que te falta. Por último, practica el valor de la gratitud. Al despertar, busca cinco razones para estar agradecido de la vida y esto te ayudará a sentirte feliz y empezar a sonreír con más frecuencia.
Dime cómo te ríes
La risa no siempre se vincula a la felicidad, puede ser también una expresión de vergüenza, alarma, incomodidad o confusión. En otras palabras, una respuesta física del estrés. En un intento por clasificarla cito varias:
* La fingida. Aquella risa hipócrita que se dibuja en las personas, que por compromiso abren sus labios a la fuerza. * La que brota. Esa que sale
espontáneamente ante el estímulo que causa alegría. * La sarcástica. Es una burlona, con el fin de hacer pasar mal a la persona con quien se está interactuando. * La nerviosa. Aquella
provocada por la vergüenza, cuando la persona en público ha cometido algún error. Alguna vez, estando como oyente de algunas personas, se pueden venir unas ganas de reír y no se pueden contener los nervios provocadores de la risa. Este sería otro ejemplo. * Por contagio. Algunas
personas se contagian de la risa cuando ven reír a otras. * La solidaria. La que se hace por consideración y por no hacer ver mal a la persona que quiere hacer reír. * La risa provocada por el contacto físico. Como las
cosquillas. *La coqueta. Se dibuja en personas que se atraen.
CÓMO SER MÁS FELIZ AHORA
1 Vivir nuevas experiencias.
Procurar conocer lugares y crear recuerdos agradables, así como la planificación de estos provoca un aumento de la felicidad debido a que anticipamos los momentos buenos que vamos a vivir.
2 Practicar el agradecimiento.
El ser grato proporciona felicidad.
3 Vivir en el presente.
Evitar la rumiación y la ansiedad que provoca la anticipación de situaciones difíciles que aún no ocurren. Mindfulness.
4 Compartir nuestro tiempo
con nuestros seres queridos.
5 Escuchar y/o hacer música.
Ya sea oyendo nuestras piezas musicales preferidas, tocando o aprendiendo a tocar instrumentos musicales, así se activan regiones de nuestro cerebro que causan placer y promueven un envejecimiento más saludable.
6 Realizar ejercicio.
Al hacer actividad física regular se disminuyen los niveles de estrés y aumentan los de energía. Además, se crean sustancias químicas placenteras como las endorfinas.
7 Compartir con amigos.
Momentos relajados, obviando temas serios, está categorizado como una de las terapias más relajantes y reparadoras.
Risa vs. sentido del humor
Según el psiquiatra y psicoanalista Pedro Horvat, el sentido del humor es la capacidad de convertir en hilarante o en graciosa una situación de la vida cotidiana, personal o de la vida social: “En general, las personas que tienen sentido del humor tienen dos características: por un lado, la inteligencia, y por el otro, la flexibilidad o la permeabilidad de sus defensas, ya que también son un mecanismo de defensa contra el dolor, la angustia y el sufrimiento. Nos permite ponernos en contacto con aquello que nos produce sufrimiento o que está prohibido, pero de un modo distante o gracioso”. Hay personas con más sentido del humor que otras. Es un recurso funcional para adaptarse al medio hostil en el que vivimos. “Para tener sentido del humor o poder contar un chiste hay que tener cierta permeabilidad de defensa. Por ejemplo, si a un niño le contamos un chiste para adultos, probablemente no le haga gracia porque no está en su problemática, no forma parte de su mundo. Pero si pensamos en el humor de los payasos o torpezas, todas esas cosas que experimentan los niños harán que se rían porque ven alejado aquello que les genera angustia. En ese sentido, el humor permite a través de la risa una sensación de alivio, de triunfo, sobre todo aquello que nos angustia”, expresó Horvat. Por otro lado, un estudio realizado por la Universidad de Plymouth y publicado en la revista American Journal of Primatology, reveló que la risa muchas veces no es en respuesta a algo particularmente gracioso. Para los encargados del estudio, reírse es primordialmente una forma de estrechar lazos con otras personas: hay 30 veces más posibilidades de reírse si la persona se encuentra rodeada con otras que si se encuentra totalmente solo, por ende, mantener este tipo de interacciones sociales corresponde a una forma de entablar relaciones.
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SI HACE MUCHO QUE NO SONRÍES, TE RECOMENDAMOS QUE TE PONGAS MANOS A LA OBRA Y COMIENCES A ENTRENAR. COLÓCATE FRENTE A UN ESPEJO DESPUÉS DE LEVANTARTE Y PON UNA MÚSICA DE FONDO QUE TE MOTIVE. TOMA UN LÁPIZ E INTRODÚCELO HORIZONTALMENTE EN LA COMISURA DE TUS LABIOS. DE ESE MODO, OBLIGARÁS A TU ROSTRO A QUE VUELVA A SONREÍR. LUEGO OBSERVA CÓMO TE SIENTES. TE ASEGURO QUE TU ESTADO DE ÁNIMO SERÁ MÁS POSITIVO Y ES FÁCIL QUE HAYAS ESTADO A PUNTO DE SOLTAR UNA CARCAJADA. TAMBIÉN SERÍA BUENO QUE LEAS, VEAS Y ESCUCHES AQUELLO QUE TE HAGA SONREÍR.
