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CEIP Ginés García Martínez


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40 años dejando huella
elaboración de un Proyecto Curricular de Centro en el que se contemplaba la Coeducación en tecnologías audiovisualesnos supuso otro premio del Ministerio. Fueron, pues, dos reconocimientos consecutivos que nos estimularon profesionalmente.
La innovación siempre ha sido una seña de identidad del Colegio Ginés García. Y la línea de trabajo del centro sigue siendo la misma, buscando en la innovación un compromiso con la calidad de la educación que se imparte. En este sentido, hemos introducido la robótica y la programación en todos los cursos de Infantil y Primaria, capacitando a nuestros alumnos para formar parte de la sociedad robotizada en la que ya vivimos. Además, el centro ha implantado la modalidad avanzada del programa bilingüe, que implica que todos los alumnos, desde los 3 años, reciben como mínimo una hora diaria en inglés, lo cual les permitirá adquirir el dominio necesario de esta lengua para desenvolverse en una sociedad globalizada y en un mercado laboral competitivo.
Pero también ha sido nuestra seña de identidad el concebir, o sentir, esta institución como una gran familia, donde la confi anza y el respeto forman parte de las relaciones diarias que aquí se producen, entre maestros, alumnos y familias. Respeto en su más amplio sentido, que implica no solo valorar a






Hace ya 40 años que el colegio Ginés García Martínez abrió sus puertas por primera vez, inicialmente como ampliación del Francisco Caparrós. Un grupo de alumnos de ese centro, según cuentan, fueron una mañana a su Colegio y al mediodía contaron en sus casas que “los habían cambiado de Colegio”, y, sin darle más importancia,continuaron su escolaridad en este otro centro educativo. Esto, hoy en día impensable, en aquellos tiempos no generó ningún tipo de controversia.Y es que, como bien sabemos, las cosas han cambiado mucho en estos 40 años.




Al comenzar la década de los 80, las tecnologías con que contábamos en el colegio Ginés García eran dos máquinas de escribir, un proyector de diapositivas y poca cosa más. A mitad de esa década, nuestro colegio decidió participar en el Proyecto Mercurio. Fue una auténtica innovación en aquella época, ya que implicaba disponer de televisor, reproductor de vídeo,cámara, películas educativas, etc. En dos años dejamos de ser novatos y disponíamos de cierta experiencia: doblajes sonoros, grabación de dramatizaciones educativas, edición de nuestros propios documentales, experiencias en todas las áreas, cinefórum, etc. La labor realizada supuso que en el curso 1987-88 el Ministerio de Educación nos concedió el Premio Nacional a la Experimentación, que recibimos en Madrid de manos de Alfredo Pérez Rubalcaba. Pocos años después, la



















cada cual por lo que es, respetando las diferencias, sino también exigir a cada niño en función de sus posibilidades, motivándoles para superarse a través del esfuerzo, desarrollar su autoestima, fomentar la solidaridad, y en defi nitiva, formar personas con valores, capaces de vivir en sociedad.
Para terminar, queremos mostrar la opinión de nuestros alumnos sobre si los ordenadores o los robots podrán sustituir a los maestros en la escuela. Ellos nos dejaron claro lo que piensan: “que un maestro es mucho mejor que un ordenador” porque los maestros “nos dan cariño”, “nos ayudan”, “solucionan confl ictos”, “son graciosos”, “hacen cosas chulis”,… Y es que hay algo que los dispositivos tecnológicos no pueden proporcionar: ese continuo intercambio de emociones, que convierte la enseñanza en educación.
El claustro de profesores del CEIP Ginés García Martínez les desea unas Felices Fiestas en honor a nuestra Patrona.
El claustro de profesores.












