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Juan Luis Larrea Sarobe
Extraordinariamente satisfechos de la Selección
Juan Luis Larrea Sarobe Presidente de la Real Federación Española de Fútbol
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La selección española va a disputar otro partido fundamental en la búsqueda de la clasificación para la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018. Esta vez el escenario volverá a ser Alicante, y el adversario, Albania. Será el noveno de los partidos de una ronda que España ha manejado de una manera absolutamente impecable: ocho triunfos y un empate. Esa carrera nos ha proporcionado unos frutos espléndidos: el equipo nacional es cabeza de grupo con tres puntos de ventaja sobre Italia, ha marcado 29 goles y ha encajado tres. Tenemos que estar extraordinariamente satisfechos de los jugadores que lo han hecho posible y del cuerpo técnico.
A la vista de todo ello, hemos de ser también optimistas de cara a los dos encuentros que restan y que decidirán el resultado final de esta larga carrera. Tres días después de enfrentarnos a Albania en el estadio José Rico Pérez nos mediremos a Israel, en Jerusalén, partido que cerrará la fase clasificatoria. Con los tres puntos de ventaja de los que gozamos ahora debería bastar con un triunfo en uno de los dos partidos que restan para asegurarnos el billete a Rusia. Y no conviene dejar las cosas para otro día si se pueden hacer antes. Quiero decir que mucho de ese futuro cercano pasa por vencer a Albania en Alicante, un campo donde, por cierto, nunca ha perdido España: ocho partidos jugados y uno empatado, precisamente el primer día que España pisó la ciudad alicantina, allá en el lejano 1977, tablas (1-1) ante Hungría. Este de Alicante será el séptimo enfrentamiento con Albania. El resultado de los anteriores encuentros, seis victorias, ninguna derrota, es fiel reflejo de la superioridad española, la última de ellas el pasado 9 de octubre de 2016, 0-2 en Shkodër, de clasificación para el Mundial. Nada de esto debe llevarnos, sin embargo, a engaño. Los partidos se juegan para ganarlos, pero nadie regala nada. Hemos de cuidarnos, pues, ante el que ya tenemos encima y hay que hacerlo por razones que no se le escapan a nadie: en Alicante va a vivirse uno de esos choques esenciales en la historia de una selección, el que, de hecho, puede asegurarnos la clasificación para la Copa Mundial de la FIFA 2018. Los tres puntos que van a jugarse en el José Rico tienen un enorme valor, porque, de hecho, obtenerlos significaría poner los dos pies en Rusia 2018.
La soberbia trayectoria de la selección nacional, que se basa en hechos al alcance de todos y no en supuestos, avala la esperanza que alberga toda la afición. España ha demostrado con creces hasta ahora la calidad de sus jugadores y el temple y el acierto de los técnicos que dirigen el equipo nacional. Confiamos por ello que en Alicante, ciudad que siempre ha recibido al equipo con los brazos abiertos, debe sellarse otra presencia de España en un Mundial. Sería la undécima consecutiva desde 1978.
Estamos, por tanto, ante otra gran noche.
