Palabra 6 de mayo de 2018

DOMINGO 6 de mayo de 2018 / Núm. 364

Por José Carrillo Cedillo Pá

Florecer Por Karla Bañales Página 2

Cortesía

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Florecer

Dirección General Enhoc Santoyo Cid

*Licenciada en Música.

dentro, la voz del pensamiento es la que más necesitamos cuidar pero sobre todo, escuchar. Verdaderamente escucharnos.

La intención de las palabras

La introspección es un acto que también requiere valor, sabiduría y belleza para no juzgarnos y ser amables con nosotros mismos, hacernos conscientes que lo que sentimos es importante y que las palabras que nos decimos, aún mas.

Cada frase está rodeada por emociones y contiene una intención clara; por eso, aprender a conectarnos nos dará las herramientas para que el diálogo interno sea cada vez más sensato y menos exigente; la fuerza que desarrollamos dentro no es sólo para crecer en volumen sino también en vitalidad, esto se consigue a través del agua que tomamos, el alimento que nos da la tierra y por el que transitamos diariamente al caminar pero sobre todo el aire que respiramos; hay veces que se nos olvida inhalar y exhalar de manera consciente, a pesar de que sea algo involuntario no significa que lo dejemos así en automático, ni siquiera las plantas lo pasan por desapercibido.

Podemos encontrar inspiración en cada paso, incluso aquí y ahora para respirar profundo hacia dentro, hacia el centro de nuestras emociones y conducirlo a cada célula. Si continuamos de esta manera, tal vez un día despertemos y encontremos que la planta que hemos cuidado ha florecido, sobre todo gracias a la intención de nuestras palabras.

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unca me había sentido tan sorprendida frente a la magia que tienen las plantas, hasta hoy. Cada día es un encuentro especial, ahora lo considero primordial y es sumamente esencial vivir rodeado de todas ellas. Tanta belleza, sabiduría, pero sobre todo, fuerza.

La fuerza es lo que me conmueve más y de esta verdad nos enseñan cada día de manera interrumpida.

Todo el potencial de vida concentrado en tan sólo una semilla, verlas germinar en tierra para luego dedicarse a crecer hasta tener pequeñas raíces que les dan el impulso necesario para iniciar su viaje en vertical, buscando el Sol en cada oportunidad pues para ellas es vital; así como el agua que esperan con paciencia mientras van haciendo su interior cada vez más fuerte.

Se nutren de todo lo que les rodea, incluso del aire y de las palabras que les decimos sin pensar cuando nos acercamos a observarlas, definitivamente lo perciben; y aquí inicia un punto sumamente interesante donde me gustaría detenerme.

El poder de las palabras es tan gigante que ni siquiera nosotros podemos intentar detener el efecto que causan y el alcance que tienen por tiempo indefinido. Es así que, cuando decimos algo audible formado de sílabas entonadas, el receptor recibirá esa información junto con nuestra intención, siempre.

Y cuando me refiero a entonación no lo digo sólo en el sentido musical sino también en la manera en que enfatizamos algo, en la intensidad del volumen y la altura de ese sonido. Es muy importante reflexionar sobre ello. Oímos tantos murmullos y ruidos cada día, desde que nos despertamos hasta altas horas de la madrugada que nos llegamos a sentir abrumados, quisiéramos callarlo todo y huir hacia el silencio, pero incluso así a veces es imposible porque la voz que seguirá hablando aún más fuerte es la que llevamos

Suplemento Cultural de Periódico

“El poder de las palabras es tan gigante que ni siquiera nosotros podemos intentar detener el efecto que causan y el alcance que tienen por tiempo indefinido. Es así que, cuando decimos algo audible formado de sílabas entonadas, el receptor recibirá esa información junto con nuestra intención, siempre”.

Ka rla Ba ña les y

Por Karla Bañales*

Palabra

Director Editorial Gerardo Sánchez García Gerente Administrativo Alfredo Tapia Burgoin Coordinadora de publicidad Luz Mar Bárcenas Editora Estefania Ibañez Coordinadora Diseño Ana Salgado de Anda Diseño Pablo Villavicencio Salgado Críticos / Colaboradores Hugo García Michel, Minerva Muñoz, Gerardo Sánchez, Rolando Ísita Tornell, José Carrillo Cedillo, Miguel Nuñez, Isaac Rosas, Rodrigo Cardoza, Sofía González, Liz Durand, Álvaro Díaz, colaboradores de la UNAM, José de la Rocha, Marco Moreno Corral, Leslie Mejía y Rod Moro.

Correo electrónico palabra@elvigia.net Teléfonos para publicidad 120.55.55, ext. 1030 publicidad@elvigia.net Ensenada, B.C. México.

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Por Rolando Ísita Tornell*

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os efectos más lamentables de la ausencia de una educación sexual a temprana edad, de los tabúes sociales sobre el sexo, son las enfermedades relacionadas con la sexualidad, que pueden ir desde infecciones bacterianas, micosis (hongos), hasta las amenazantes enfermedades causadas por virus, como el de la Inmunodeficiencia Humana y el del Papiloma Humano, entre otros.

Asimismo, la deficiente educación en cuanto a la equidad de género, malos usos y malas costumbres machistas inculcados desde casa por padres, madres, hermanos y parientes, terminan cebándose en la salud de las mujeres, sumada la ignorancia fomentada por los tabúes sobre la sexualidad.

Una de estas lacerantes afecciones que impactan en la salud de las mujeres son las enfermedades causadas por el Virus del Papiloma Humano, que es transmitido y adquirido por contacto sexual, con el agravante que los hombres suelen ser portadores asintomáticos y, con base a las detestables costumbres machistas de “cualquier hoyo es trinchera”, la carencia de una conciencia responsable e informada sobre las relaciones sexuales, diseminan el virus en los genitales de las mujeres pudiéndoles causar desde verrugas genitales, condilomas (crestas) hasta cáncer en el cuello del útero, en la vagina, la vulva y el ano.

Maquinarias genéticas invasoras y esclavistas

El reto que representan los virus para la ciencia es que se trata de maquinarias moleculares muy distintas de los seres vivos, como las células o los hongos; son una suerte de naves nanométricas con un fuselaje de proteínas y un ácido nucleico como tripulante (ribonucleico o desoxirribonucleico). Sería difícil decir que son “seres vivos”, no tienen forma de replicarse.

El del Papiloma Humano (y otros virus) carecen de enzimas para replicar su ADN,

así que utilizan la maquinaria de la célula a la que asaltan para que ésta sea la que reproduzca otros virus. Las células de los humanos tienen una proteína con un programa para disparar la muerte de la célula; el virus lo neutraliza, le impide morir y explota a la célula a producir virus hasta su agotamiento, ¡y a la que sigue!

Otra estrategia de estas máquinas genéticas, y reto para la ciencia, es que son capaces de camuflar su fuselaje (cápside) para engañar al enemigo y no lo detecte.

La evolución ha dotado a los seres vivos de sistemas de defensa contra ataques de seres extraños, los humanos tenemos un sistema de defensa (inmunológico) muy bien organizado, capaz de detectar el ingreso de cuerpos extraños al organismo, echar a andar su sistema de alarma, localizar, atacar y destruir. A veces ese sistema se estropea y es capaz de atacar al organismo propio, como la artritis reumatoide, no distingue entre estructuras propias y extrañas, y desata inflamaciones contra tejidos propios por error, como las articulaciones, que son atacadas como si fueran extraños.

Lo que el organismo hace es detectar estructuras moleculares desconocidas, extrañas; una vez identificada esa estructura forajida diseña el ataque y su destrucción; pero los virus, como el del Papiloma (y otros), súbitamente cambian su diseño externo, o estrategias como el de la Inmunodeficiencia ¡que se deja atacar!, es su manera de entrar en las células de defensa y las esclaviza, utilizando la maquinaria genética de la célula para reproducir virus.

Poderosa arma

Los retos de la naturaleza, el azar y la necesidad, nos proveyó del magnífico y eficiente órgano del cerebro. La mente humana, crítica, científica (que todos poseemos pero no desarrollamos) ha sido muy creativa, preguntona, respondona y capaz de entender cómo funciona nuestro organismo, cómo funcionan las enfermedades, cómo funcionan los seres

extraños que invaden al cuerpo que desatan la enfermedad y diseñar sustancias para ayudar a nuestro cuerpo a defenderse de invasiones extrañas y mitigar las dolencias aparejadas.

Gracias al sorprendente invento del microscopio, primero nos pusimos a encontrar errores y defectos en los tejidos de los telares, aguijones de abejas, estructuras de moho y dimos el salto a cazadores de microbios, protozoarios y bacterias. Por allá a finales del siglo XIX encontramos una nueva forma de agente infeccioso que no era hongo ni bacteria, y que ese agente sólo se multiplicaba en células vivas en división; es más, se pensaba que era “líquido” y por eso al principio se le llamó “germen viviente fluido” (del latín contagium vivum fluidum), finalmente quedó en “virus”.

De formas microscópicas a estructuras químicas

En sólo unas cuantas décadas hemos dejado atrás la forma de los organismos microscópicos, y pasamos a analizar y entender sus estructuras atómicas, reacciones químicas y sus interacciones con la química de nuestro organismo, con instrumentos no sólo microscopios ópticos sino más potentes como el electrónico y el de tunelaje; además, supercomputadoras y programas de cómputo.

Una joven investigadora, venezolana de origen, Lizt Osorio, se integró al Centro de Nanociencias y Nanotecnología de la UNAM, en Ensenada, ella está empeñada en desmenuzar la estructura molecular del Virus del Papiloma Humano (VPH) para contribuir a su derrota. Su instrumento de investigación es un programa de cómputo y una supercomputadora.

Hay alrededor de 300 especies de VPH y cerca de 200 infectan al humano y es responsable del 90% de los cánceres cervicales. Hemos visto anteriormente que los virus modifican el fuselaje de la nave en la que se mueven, su “cápside”, sus modificaciones son moleculares que pueden ser en un gran número, hasta 104 mutaciones,

además de las modificaciones que causa su interacción con las células que invaden.

Esta joven investigadora ha corrido hasta 96 horas en la computadora las variables posibles de estas mutaciones y ha encontrado que, independientemente de las mutaciones, hay una estructura secundaria que se conserva, entre otras, una proteína E6, que también se conserva en los cambios de la célula. Ella sospecha que ahí está el flanco débil del virus para derrotarlo, pronto tendrá resultados (lo deseamos).

Vacunarse desde temprana edad

Más de 40 tipos de VPH infectan superficies mucosas del organismo humano, incluido el cuello uterino, la vagina, la vulva, el recto; la uretra y el pene en los hombres, y el ano en ambos sexos.

Tan sólo en Estados Unidos hay 20 millones de infectados entre los 15 y 49 años. Cerca de la mitad de infectados son adolescentes sexualmente activos y adultos jóvenes entre 15 y 24 años.

Existen vacunas para prevenir el ataque del VPH. EL Gardasil protege contra cuatro tipos de VPH, que son responsables del 70% de cánceres de cuello uterino y hasta el 90% de verrugas genitales.

La vacuna se administra mediante tres inyecciones intramusculares durante seis meses (0-2, 4 y 6).

La vacuna debe proporcionarse preferentemente a niñas entre los 11 y 12 años, e incluso hasta de 9 años. También se recomienda para las mujeres entre 13 y 26 años que no han recibido o completado la serie de vacunas. La vacuna debiera inocularse antes del inicio de la actividad sexual.

Aunque la vacuna es importante para la prevención, no deben dejarse de lado las pruebas de detección de cáncer del cuello uterino (Papanicolau) o una conducta sexual responsable, sin riesgos, porque la vacuna no protegerá contra todos los tipos de infección genital por VPH. *Comunicación de la Ciencia UNAM-Ensenada.

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“He mencionado en ocasiones que estas colab una supuesta erudición. Mi intención es contri los principios de lo que es el arte y ayudar a qu la vida. Tan es así, que hay países en que la ed

*Artista plástico y docente

Propondré un breve análisis de este tipo de manifestación, pero enfocado en la pintura de los grandes maestros Por José Carrillo Cedillo*

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as artes plásticas se desarrollan en un terreno fascinante y extraño. Un terreno que puede caminar quien así se lo proponga y encontrará recompensas sumamente agradables.

He mencionado en ocasiones que estas colaboraciones no pretenden, ni son escritas con base en una supuesta erudición.

Mi intención es contribuir a divulgar y con ello hacer más comprensibles los principios de lo que es el arte y ayudar a quienes estén interesados en iniciar esta forma de ver la vida.

Tan es así, que hay países en que la educación artística es el eje del currículo educativo.

Iniciaré diciendo que las artes plásticas se dividen en dos grandes canales de expresión: el plano y el volumen.

El plano lo constituye lo plástico y lo gráfico, es decir, el dibujo, el grabado y la pintura.

El volumen, la escultura y los relieves.

Aparentemente podríamos decir que el color define a la pintura, pero el color está también en algunos grabados y muchas esculturas.

Por otra parte, todo esto se subdivide dependiendo de la técnica elegida por el artista, aspecto que todo en la vida, ha ido evolucionando sorprendentemente.

Hablé ya del grabado, en esta ocasión abordaré el tema de la pintura y en su momento escribiré cómo se inició ésta.

He hablado de que el concepto de arte que manejamos es muy reciente, apenas del siglo XVIII a la fecha. En realidad, esto alcanza su más amplio significado cuando logramos comprender que el arte, en cualquiera de sus manifestaciones, constituye en sí un verdadero lenguaje testimonial del contexto social que lo rodea, y esto es de tal importancia que reconocemos a muchas culturas que alrededor

del mundo nos han precedido, por los vestigios que han llegado hasta nuestros días, del arte que desarrollaron. Y aquí, es necesario subrayar para la mejor comprensión de este concepto, en un aspecto de fundamental importancia “la absoluta libertad creadora del artista”.

Esto parece ser una exageración pero muy por el contrario, es esa libertad justamente lo que permite la originalidad y multiplicidad de expresión del lenguaje artístico.

De esta forma el artista plasma en su obra todo un bagaje de símbolos que conforman un abecedario que utiliza de forma personal y que, incluso hasta subliminalmente, trasmite toda la problemática de una comunidad, y esto nos permite relacionarnos como especie.

Visiones diferentes

Los museos de pintura poseen, además de su valor como documento y patrimonio, una personalidad modelada por circunstancias de la historia cultural, política, económica y social.

Las colecciones albergadas en dichos museos son resultado de un proceso de selección en el que influyen factores diversos que son dados en su época, tales como consideraciones estéticas y el museo es en sí mismo, el reflejo de la sociedad que le ha dado vida y es un relato de su evolución histórica.

También es el resultado de una cadena de decisiones que tienen su origen en el artista. Si echamos una ojeada al pasado, el papel decisorio ha de atribuirse a la realeza, la nobleza y el clero. Por lo que entonces, una obra artística, no constituye un fenómeno aislado sino que es el resultado de un contexto temporal muy preciso vinculado al pasado y con proyección en el futuro, por ello su examen requiere un proceso de valoración y relación opuesto, por ejemplo, al de las ciencia exactas y naturales, en las que el factor subjetivo es inexistente; en cambio en la pintura, se dice que es el espec-

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boraciones no pretenden, ni son escritas con base en ibuir a divulgar y con ello hacer más comprensibles uienes estén interesados en iniciar esta forma de ver ducación artística es el eje del currículo educativo”.

e con más de 50 años de trayectoria.

tador el que concluye el cuadro, el que cierra el círculo.

Y todo esto es en función de vivencias personales, de tal modo que la obra es tan sólo un catalizador del proceso de comunicación entre el artista y el espectador.

El arte, no admite aplicación de nuestra lógica de la vida real, aunque si tiene sus propias leyes que en su momento abordaremos.

Dice Juan García Ponce, en su libro Imágenes Plásticas “…no creo en la realidad más que como una fuerza que al darnos la existencia también nos desintegra, si hemos de obedecer a la ausencia de sentido que la determina en cuanto fuerza; creo en el poder del arte como un conjuro que utiliza la misma fuerza de la realidad para convertirla en una forma desde la cual, sin que pierda sus atributos esenciales y su tendencia a la dispersión, podemos encontrarla de una manera tal que en esa contemplación hallamos nuestra propia coherencia. Viva, sin lugar a dudas, dentro de nosotros, como algo más que una pura fuerza, como una forma –la de nuestro propio cuerpoen la que se encierra esa fuerza; la realidad tiene que estar afuera. Y esto es lo que el arte logra, sin que en él intervengan ninguno de los preceptos ni de las normas éticas o morales con las que se pretende encausar esa fuerza.

“Al contrario, el arte es siempre un espejo de la libertad en el cual se hacen visibles tanto la vida como la muerte, tanto la razón como la locura, tanto la inteligencia como los sentimientos, tanto la pasión como la indiferencia y también, tanto la virtud como el vicio, porque no los sustituye ni los juzga, sino que los obliga a mostrarse”.

Ante una obra, no hay dos personas que opinen de la misma manera pues será su experiencia personal la que determine su juicio pero habrá que considerar que hay factores que sobrepasan el gusto personal y estos hay que entenderlos como

los medios que el artista usó para comunicarse con nosotros. Por otro lado, hay que considerar que cada artista verdadero tiende, generalmente, a buscar su estilo personal, que en ocasiones, deviene de su maestría en la técnica elegida. De tal manera que el maestro Willem de Kooning dijo en una ocasión que los artistas sólo estamos de acuerdo en una cosa: que todos somos diferentes.

Aportación de los grandes maestros

Un indicador del desarrollo del arte en occidente es el desarrollo de las diversas técnicas pictóricas, su examen da como resultado datos más fundamentales sobre la historia del arte y surgen muchas preguntas ¿por qué se pintaron paisajes durante 500 años sin llegar al impresionismo? La respuesta no es la inspiración, sino la técnica.

El gran maestro Rembrandt utilizaba grandes capas de óleo que sobresalían de la tela, tanto que uno de sus biógrafos dijo que un cuadro de él se podía tomar por la nariz y por ello fue criticado por sus contemporáneos y él contestaba “Soy un pintor, no un tintorero”, quizás algunos de ustedes ignoren las razones de los pleitos entre Gauguin y Van Gogh, cuando vivieron juntos en Arles.

Desde luego los conflictos que se originaban al vivir en el mismo cuarto durante mucho tiempo, encontraban cualquier pretexto para explotar el globo. Un tema del que discutían era que Gauguin criticaba que Van Gogh utilizara tanto óleo en sus pinceladas (lo que es la vida, ahora, se podría decir que eso es una característica que enriquece el estilo de Van Gogh, que por cierto, fue rechazado por sus contemporáneos y nunca vendió un cuadro; básicamente porque su estilo era muy diferente al estilo que prevalecía en su época).

Se dice que el maestro Jan Van

Eyck inventó la pintura al óleo y con ello consiguió la felicidad de muchos artistas, lo demostró en su brillante retrato del matrimonio Arnolfini. Antes del maestro, los artistas pintaban frescos y temples y con el óleo se consiguen asombroso efectos, por lo que el óleo se convirtió en el medio preferido de los artistas occidentales.

Otro ejemplo son los pintores de la escuela de Venecia como el Tiziano, Tintoreto, Giorgione, Veronese, Bellini, Canaletto, Bellotto, etc. Tenían grandes dificultades pues pintaban al fresco y la excesiva humedad de la hermosa ciudad de los casnales dificultaba su secado, de tal modo que cuando conocieron el óleo fue motivo de gran felicidad.

Tiziano comenzó en una edad avanzada a experimentar con estilos más reflexivos y dejando de limitarse a reflejar el mundo visible y se permitió, al final de sus obras, el uso de más materia quedando visibles sus pinceladas perturbando la ilusión.

Rembrandt encontró el placer altamente sensual del óleo. Podremos trazar una línea evolutiva de Rembrandt, Van Gogh, hasta terminar con Jackson Pollock, pero habrá que subrayar que el revolucionario estilo de Rembrandt está fundado como resultado de la práctica de muchos, muchos años.

Los artistas hemos aprendido que el acierto en la técnica, es igual a permanencia.

Quizá la mejor contribución de los artistas sea revelar el mundo en formas inesperadas, descubrir un nuevo significado y ver y sentir todas las maravillas que nos rodean.

“Si un pintor desea ver la belleza que lo extasía, cuenta con el poder para crearla. Si desea ver lo grotesco… o lo risible, o lo patético, será ello amo y señor.. Cuando existe en el Universo -en esencia o en la imaginación- es primero especie de su mente, después obra de su mano”.

Con estas palabras ensalzaba Leonardo Da Vinci el ámbito infinito de su profesión. Y, aunque han transcurrido 400 años desde que las expresó, todo aquel que recorra la Historia del Arte, comprobará su eterna validez.

El resultado práctico de esta división es muy interesante ya que incide en el plano vocativo del artista.

José Carrillo y cortesía

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Por Lesli Mejía*

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e vuelve cada vez más urgente para mí hablar y escribir sobre la violencia que vivimos en México. Nótese que, aunque me refiero a dos verbos diferentes, ambos se refieren al acto de comunicarnos con otros a través del lenguaje. Después de todo, una cosa es saber qué está sucediendo, es decir, ser conscientes de la realidad; pero otra muy diferente es ponerlo en palabras y transmitirlo a los demás.

El 19 de marzo, 3 estudiantes de cine en Guadalajara fueron secuestrados en una casa a donde fueron a hacer tarea. Más de un mes después se reveló que fueron asesinados, sus cuerpos disueltos en ácido. El caso hace eco con los normalistas desaparecidos en Guerrero hace casi 4 años, así como con muchos otros casos de terrible violencia, entre los cuales hay que destacar los feminicidios de Graciela y Sol Cifuentes, de Lesvy Osorio y de tantísimas mujeres más, sobre todo en el Estado

de México.

Vivimos en un país cuyo nuevo orden es la abyección; un país donde los estudiantes son violentados por una sistema que quieren cambiar y cuyas muertes, productos de excesiva tortura, representan lo brutal de esta abyección. Todo esto provoca tristeza, rabia, incredulidad, pero sobre todo impotencia. ¿Qué podemos hacer al respecto? ¿Cómo ayudamos sin exponernos a la violencia también? ¿Cómo obtenemos la justicia que merecen?

Faltan respuestas

Las preguntas sobran; las respuestas faltan.

Sin embargo, es certero que un primer paso para crear un cambio es hablar (y escribir) sobre esto: es representar lo que parece irrepresentable, usando un poder que todos compartimos: el lenguaje.

Eso hace Diana del Ángel en Procesos de la noche. En este libro, la autora narra su experiencia acompañando a la familia de Julio César Mondragón durante la exhumación del cuerpo de este

joven, quien era uno de los normalistas desaparecidos en Guerrero y uno de los pocos cuyo cuerpo fue encontrado. Su cuerpo sin piel en el rostro tenía un mensaje claro inscrito: “Miren de lo que somos capaces. Sientan miedo y dolor. Y quédense callados o les haremos lo mismo”.

Del Ángel revela la incompetencia y la negligencia burocráticas y legales en México, pero también nos cuenta sobre Julio: sobre su familia, su personalidad, sus pasatiempos, su infancia y sus sueños; sobre quién era él. Así, busca subvertir aquel mensaje en su cuerpo para que más bien diga: “Tenemos que hacer algo ya. Julio César merece justicia. Esto no puede seguir así”.

Procesos de la noche nos recuerda que Julio César Mondragón era estudiante, hijo, hermano, esposo, padre, amigo: era un ser humano... pero eso no suele enseñarse.

Suele enseñarse que los muertos y desaparecidos en México son sólo cifras; simples delincuentes, revoltosos o carne de carroña. Pero de

“Vivimos en un país cuyo nuevo orden es la abyección; un país donde los estudiantes son violentados por una sistema que quieren cambiar y cuyas muertes, productos de excesiva tortura, representan lo brutal de esta abyección.

Todo esto provoca tristeza, rabia, incredulidad, pero sobre todo impotencia. ¿Qué podemos hacer al respecto? ¿Cómo ayudamos sin exponernos a la violencia también? ¿Cómo obtenemos la justicia que merecen?”. *Estudiante de Literatura Inglesa y escritora.

cada quien depende desaprender eso y evitar desensibilizarse y deshumanizar a las víctimas. Y ciertamente, como este libro demuestra, en eso la literatura nos puede ayudar mucho.

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ATERRIZAJES

LOS HIJOS COMO MONEDA DE CAMBIO JULIO RAMÓN RIBEYRO, en su cuento “Interior L”, nos muestra no sólo la pobreza, la indignación y la falta de oportunidad de cierto sector de la población de muchos países de Latinoamérica, si es que no de cualquier parte del mundo, evidencia el comercio que, desde la familia, se hace de los hijos.

Es un cuento genial en la construcción de la línea de tiempo, que nos habla desde un falso presente, nos hace viajar hacia el pasado, volver a ese falso tiempo presente, para anunciarnos el presente real del tiempo narrativo, y Ribeyro evidencia la triste realidad por la que ha tenido que pasar Paulina, la hija de un reparador de colchones.

Una familia que ha sufrido esas pérdidas que en la pobreza ocurren por enfermedad, que arrebató a la esposa, o por accidente como el que les quitó al hijo varón.

Sólo quedan el colchonero y su hija Paulina, de apenas 15 años, que meses atrás fue violada, quedó embarazada, por vergüenza decidió dejar la escuela, y ha ocultado lo sucedido a su padre, quien a punta de golpes le saca la verdad.

La ignorancia del colchonero hace que vaya por el barrio contándoselo a todos, mientras bebe en la cantina, buscando la opinión de sus vecinos para saber cómo proceder contra aquel violador, que no puede negar le asusta por su físico: “un zambo fornido y bembón, hábil para decir un piropo, para patear una pelota y para darle un mal corte a quien se cruzara en su camino”. Azuzado por su compadre decide

Poema

Cortesía

Por Adán Echeverría*

“Julio Ramón Ribeyro, en su cuento “Interior L”, nos muestra no sólo la pobreza, la indignación y la falta de oportunidad de cierto sector de la población de muchos países de Latinoamérica, si es que no de cualquier parte del mundo, evidencia el comercio que, desde la familia, se hace de los hijos”. *Escritor y editor.

enfrentarlo, pero bastó tenerlo de frente para recular y decidir que su hija Paulina había sido la única culpable: “tuvo delante suyo a un gigante con las manos manchadas de cal, el rostro salpicado de yeso, y la enorme pasa zamba emergiendo bajo un gorro de papel”; que impulsado en la hombría le gritó: “¡Ella me buscaba!”.

Diversión colgada en la ironía

Asustado, y decaído, consulta un abogado: “¿Su hija tiene sólo catorce años? Entonces hay presunción de violencia. Eso tiene pena

de cárcel. Yo me encargaré del asunto.” Ahora, el colchonero, envalentonado decidió encarar de nuevo al violador, al grado de que éste y su jefe, el ingeniero de la obra, se presentaron en su domicilio para ofrecerle un trato que dejara a los jueces y abogados afuera. Acuerdo que los tres hombres, y hasta la pequeña Paulina, celebraron bebiendo cerveza: “Ella también bebió un dedito y los cuatro brindaron por el acuerdo”.

Un “alto de billetes”, señala el escritor era lo que el ingeniero y el violador de la menor dejaron en la mesa al retirarse.

“Se dieron el lujo de admitir un perrito”, señala el escritor con esa ironía con que decidimos adquirir lo innecesario.

El colchonero dejó de trabajar durante “más de quince días”, viviendo en la felicidad y la juerga con sus amigos de vecindad. Mientras que Paulina a los ocho meses de embarazo tuvo un aborto en la soledad, sin aquel su padre que tanto quiso defender su honra, pero que a la hora del dolor se hallaba de juerga en el hipódromo.

El “alto de billetes” termina de gastarse en medicinas para salvar a Paulina. El padre vuelve al trabajo, maldiciendo su pobreza, añorando aquellos días que pudo gozar en algo la economía de la vida: “Y si ese tiempo pudiera repetirse… ¿era imposible acaso?” Y entonces el colchonero recapacita en el cuerpo del que ahora goza su Paulina: “su espalda amorosamente curvada, sus caderas anchas. La maternidad le había asentado”, se dice el colchonero sin dejar de pensar, en que después de todo, no sería mala idea que su hija volviera a salir con aquel hombre que la había violado, y le pregunta a su hija ¿por qué no lo buscas?: “Mañana no estaré por la tarde”. ¿Qué nos deja el cuento “Interior L? ¿Acaso las hijas son monedas de cambio para mejorar nuestra economía? El machismo de este personaje queda bien retratado por el escritor peruano, y nos tiene que llamar a la reflexión, a la diversión colgada en la ironía, en que nos damos cuenta de que este espantapájaros jamás se preocupó por su hija, como tampoco se preocupó por su hijo que muriera en la pobreza, o por su mujer. Y esto queda bien retratado al mirar al colchonero dejar de trabajar cuando le cae ese “alto de billetes” que el autor bien alcanza a dibujar en la historia. Reconozcamos siempre el bien superior de los menores.

Oscuro Infinito

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Isaac Rosas

ÓPERA Mujer paseando por las terrazas exteriores de la Ópera, en Oslo en Noruega.

SUEÑO Escena desde una área verde del centro de Ensenada.

CALMA Un cuervo reposa sobre una antena en los momentos previos a una lluvia de otoño, en Akita, Japón.