ECORumbo / Enero 2017

Número 9

© OC EANA| Eduardo Sorensen

Educación ambiental: Una herramienta para compartir conocimientos y vivir en armonía con nuestro medio

Conservando al Rayadito de Más afuera:

El suelo : Vida bajo nuestros pies

Salvemos la Higuera: El movimiento que busca evitar que un lugar de increíble biodiversidad sea una zona de sacrificio

Una especie endémica en peligro crítico de extinción

EDITORIAL Eco Rumbo B ienvenido y bienvenida a la novena edición de E corumbo , la revista de las organizaciones no gubernamentales (ONG) I sland conservation , O ceana y O ikonos , instituciones que apoyamos la protección del medioambiente .

La mayoría de las acciones humanas pueden tener profundas consecuencias sobre los ecosistemas y las especies que en ellos habitan. Por diversas razones, nuestros antepasados no eran conscientes de los efectos que como especie somos capaces de producir.

Sin embargo, hoy en día el acceso a la información nos hace reflexionar sobre los distintos impactos que como humanidad generamos a nivel mundial.

En nuestro archipiélago, las acciones efectuadas por los primeros habitantes provocaron grandes transformaciones en el paisaje. La deforestación, los incendios y la introducción de especies exóticas invasoras después de su descubrimiento en 1574, siguen generando una disminución de los bosques y, por consecuencia, un aumento de la pérdida del suelo. Hoy en día, la erosión acelerada podría estar provocando consecuencias que aún no hemos podido determinar, incluso afectando a recursos tan importantes como la langosta.

En varias zonas de nuestro país se han producido cambios significativos por la acción humana, atribuyéndose principalmente a los cambios del uso del suelo para la producción de alimentos, de materia prima y generación de energía. Uno de los ejemplos más comunes, son los efectos provocados por la gran industria minera del norte y centro del país, la cual no solo impacta en las áreas de extracción, si no también en sitios de acumulación de residuos o de exportación del material.

A pesar de todos los impactos negativos que hemos causado en nuestro territorio y el mundo, aún estamos a tiempo de mejorar las condiciones de nuestros ecosistemas y seguir aprendiendo, educando y conservando especies que están en vías de extinción.

Si

q u i e r e s h ac e r co m e n ta r i o s , a p o rt e s o p ro -

p u e sta s pa r a m e j o r a r l a r e v i sta , co m u n í c at e co n n o s ot ro s a

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e co ru m b o . j f @ g m a i l . co m

Educación Ambiental, una herramienta para compartir conocimientos y vivir en armonía con nuestro medio E l 26

de enero se celebra el

D ía M undial

de la

E ducación A mbiental ,

un proceso permanente

que busca educar a la ciudadanía para el desarrollo sostenible , generando conciencia y cambios

conductuales para la convivencia armónica entre el desarrollo social , el crecimiento económico y la protección de nuestro entorno .

Tradicionalmente, la educación ambiental se ha enfocado en concientizar sobre la necesidad de proteger a las especies amenazadas y de participar en acciones cívicas destinadas a mitigar impactos en el medio. Existen múltiples iniciativas que se están llevando a cabo globalmente, incluyendo nuestro Archipiélago de Juan Fernández, donde destacan actividades como la erradicación de plantas invasoras, plantación de especies endémicas, la recuperación de aves marinas impactadas por la luz artificial y la limpieza de plásticos en el borde costero.

Sin embargo, este énfasis tradicional de la educación medioambiental se está expandiendo, a medida que el concepto del manejo integral de ecosistemas y la educación para la sostenibilidad va tomando arraigo. Este proceso involucra una vía de doble flujo de información entre todos los sectores involucrados (ciencia, comunidad, desarrollo y política), tanto para recolectar los conocimientos y la información necesaria, como para educar y tomar decisiones. Por ejemplo, muchas personas de la comunidad con íntimos conocimientos del medio, como pescadores y cazadores, contribuyen con conocimientos ecológicos tradicionales que ayudan a cuantificar las condiciones actuales del ecosistema y a constatar los cambios a través del tiempo. Junto a los resultados de estudios y de monitoreo científico, estas observaciones y conocimientos locales de la comunidad proporcionan información útil para entender más sobre los ecosistemas y tomar medidas para su conservación y uso sostenible. Además, este proceso convierte a todos los involucrados en maestros y alumnos a la vez, a medida que unos y otros aprenden y complementan sus conocimientos.

Ejemplos del uso de los conocimientos ecológicos tradicionales para informar el manejo de las especies y los

ecosistemas son muy amplios. Por ejemplo, prácticas tradicionales de pesca han guiado la instauración de periodos de veda e impulsado la creación de áreas de protección con manejo sostenible, como las áreas marinas costeras protegidas de múltiples usos. En otros casos, observaciones de pescadores o naturalistas han permitido identificar nuevas áreas de especies protegidas y cambios en su distribución o abundancia a través del tiempo.

En definitiva, la educación ambiental esta ayudando a diseñar e implementar medidas de manejo sostenible en los ecosistemas terrestres y marinos por todo el mundo.

Con un espíritu de diálogo abierto y con la coordinación de los diversos actores, todos podremos formar parte de una comunidad de maestros y estudiantes, que motiva y apoya la conservación y el uso sostenible de nuestros recursos. Finalmente, esta herramienta educativa ha llevado a comprender la importancia que tiene nuestro entorno y su conservación en el desarrollo de las generaciones futuras.

© O ikonos | H éctor G utiérrez |3

El suelo: vida bajo nuestros pies L as N aciones U nidas

impulsa la celebración del

D ía M undial

del

S uelo (5

de diciembre ), para

promover la mayor valorización de este recurso natural , del cual todos los seres humanos , ani males , plantas , y microorganismos terrestres dependemos .

¡A quí tenemos algunas respuestas !

¿P or qué es tan importante el suelo ?

¿Qué es el suelo?

El suelo es una mezcla de agua y aire (50%), minerales (45%) y materia orgánica (5%), y se define como el medio natural para el crecimiento de las plantas (FAO*).

Los vegetales, los árboles y bosques (lugar de refugio y alimento de animales silvestres), y el forraje (el alimento de animales domésticos que nos dan leche, huevos y carne), dependen de un suelo sano para subsistir.

El suelo no solo es para producir nuestra comida, ¡El suelo tiene muchas funciones! Aquí te mostramos algunas: ¿Como se forma el suelo?

El suelo es el resultado de la interacción entre el clima, los microorganismos, el tiempo, el relieve, los minerales (rocas y minerales originarios), y la materia orgánica que corresponde a restos de seres vivos como plantas y animales que alguna vez estuvieron vivos. Estas interacciones generan el suelo, contando con nutrientes, humedad y espacios de aire entre sus componentes que permiten la absorción de agua, la filtración de desechos, y el crecimiento de raíces. La formación del perfil del suelo demora miles de años, ¡solo 1 cm de suelo en el planeta puede demorar aproximadamente 1.000 años!

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A pesar de este asombroso proceso de generación de suelo, este también puede ser dañado a través de procesos mecánicos: la desertificación (ver artículo de edición anterior de Ecorumbo), la compactación y la erosión. Estos daños afectan la cantidad de aire y la capacidad de absorción de agua en el suelo, restringiendo el crecimiento de las plantas, ¡y también de nosotros y nuestros animales que dependen de forraje! *FAO: Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura

La compactación y erosión, una pérdida de suelo insostenible

El uso intensivo del ganado

La compactación y erosión son procesos mecánicos que producen la “pérdida de suelo” convirtiéndolo en un suelo pobre en nutrientes y débil para cumplir con sus funciones para sostener la vida en la tierra.

El pisoteo del suelo y el ramoneo por el ganado ha producido la compactación del suelo y reducido la capa vegetal. Resultado: no puede absorber agua ni albergar plantas, las cuencas no se rellenan de agua y no pueden crecer plantas y pastos para el ganado.

La erosión del suelo se produce a través de las fuerzas de la lluvia y el viento, que carcomen paulatinamente al suelo. Es un proceso natural, el cual se ve acelerado por actividades de seres humanos. Un resultado de la erosión es la conversión del suelo en polvo o sedimentos sueltos que no sirven para el crecimiento de las plantas.

Además, puede generar derrumbes. Es por ello que es de suma importancia que los suelos cuenten con una capa vegetal (pastos, hierba, arbustos, árboles, entre otros), que sirve para amortiguar la caída directa de la lluvia y cuyas raíces sirven como pegamento para retener el suelo.

Por otro lado, la compactación del suelo se produce cuando hay mucha presión sobre este, achicando los espacios—o poros—entre las partículas. De esta manera, los poros pierden conectividad y se reduce la infiltración del agua en el suelo (el proceso de absorber agua). En vez de absorber la lluvia, los aguaceros escurren sobre la superficie de la tierra, dejando un suelo lavado y seco.

Las Especies Exóticas Invasoras (EEI) Los chivos y conejos han producido un sobreconsumo de muchas de nuestras plantas nativas y endémicas en la isla, y los roedores consumen las frutas/semillas de las plantas. Resultado: no existe una capa vegetal para estabilizar el suelo, el suelo se erosiona y las bahías se llenan de sedimentos.

La deforestación y la plantación de especies forestales generalmente se hace con especies exóticas (pinos y eucaliptus), y en forma de monocultivos (una sola especie). Resultado: no permiten el crecimiento de especies nativas, cambian las características de los suelos, y los secan, haciéndolos más vulnerable a otras amenazas como desertificación y derrumbes.

Actualmente, los suelos en nuestro archipiélago se encuentran degradados debido a actividades humanas, tanto históricas como actuales. Algunas de estas razones son las siguientes: . |5

La erosión es un proceso insostenible, ya que se pierde suelo mucho más rápido de lo que se forma. Se estima que la pérdida de suelo producto de la erosión alcanza un promedio de 0,9 mm por año a nivel global. ¡En tan solo 1 año se pierde lo que tomó 1.000 años crearse! Globalmente, cada año se pierden 50.000 km2 de suelo, es decir, 1.000 veces la superficie de la Isla Robinson Crusoe.

© island conservation Suelo en buen estado y vegetación abundante, buen refugio de fauna silvestre en Alejandro Selkirk.

© island conservation Sector con alta erosión y compactación de suelo: La Vaquería, Isla Robinson Crusoe.

¡Pero no todo está perdido! ¿Qué se puede hacer para frenar la pérdida de suelo?

Aquí te dejamos algunas alternativas para que ayudes a detener la erosión y compactación del suelo de nuestras islas: a.Siembra plantas nativas y endémicas en tu jardín: así ayudarás al suelo a retener agua y aire, y a estabilizarse mejor. b.Mejorar las praderas: entregando nutrientes al suelo (abono y compost) y aireándolo, permitirás generar más y mejor alimento para tus animales. c.Usa los caminos disponibles: no te salgas del camino, utiliza los senderos y vías habilitadas para caminar. Nosotros también producimos compactación y erosión del suelo.

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d.Utiliza composteras: ¡La tierra generada en el compost tiene nutrientes! Espárcela en tu pradera o jardín y estarás devolviendo nutrientes al suelo y generando más suelo. e.Evita el movimiento de especies exóticas invasoras: antes de ingresar al Parque, revisa bien tu ropa y suela de zapatos para evitar la introducción y propagación de semillas de forma accidental. Las especies exóticas cambian las características del suelo, lo secan, y lo hacen vulnerable a otras amenazas como incendios y derrumbes.

Conservando al rayadito de Más afuera: una especie endémica en peligro de extinción El rayadito de Más Afuera (Aphrastura masafuerae) es un ave de la familia Furnariidae que vive exclusivamente en la isla Alejandro Selkirk del Archipiélago de Juan Fernández.

En el año 1866 fue descrito por primera vez como una especie nueva y distinta al rayadito del continente. Habita en la zona más alta de la isla, sobre los 800 metros sobre el nivel del mar, generalmente entre bosques de helecho arbóreo (Dicksonia externa) y canelos endémicos (Drimys confertifolia). Es más común en áreas cercanas a los cursos de agua, donde los helechos pueden llegar a una altura de 5 metros.

El Ministerio del Medio Ambiente catalogó a esta especie como “en peligro” y “rara”, debido al bajo número poblacional (se estimaron solo 140 individuos en el año 2002) y a las amenazas generadas principalmente por las especies exóticas invasoras (ratas, gatos, chivos) y la modificación de su hábitat.

En 2013, en el marco de las actividades del Proyecto GEFPNUD “Fortalecimiento de los marcos nacionales para la gobernabilidad de las Especies Exóticas Invasoras (EEI): Proyecto Piloto en el Archipiélago Juan Fernández”, la ONG Oikonos Ecosystem Knowledge junto a Island Conservation y la Corporación Nacional Forestal (CONAF), instalaron 81 casas anideras de plástico para ofrecer nuevas zonas de nidificación al rayadito.

Durante la revisión de las casas anideras, en enero de 2015 se tuvo acceso al primer nido natural con polluelos para esta especie, registrando dos polluelos en su interior. El nido había sido registrado anteriormente por los guardaparques de CONAF, pero sin las crías. El nido estaba construido con

© O ikonos | H éctor G utiérrez plumas de fardelas (Pterodroma longirostris y Pterodroma externa) y pequeñas ramas de helecho arbóreo, muy abundante en el sector.

La revisión de las casas anideras al final de la temporada reproductiva en 2014, 2015 y 2016, arrojó que el rayadito de Más Afuera no utilizó las cavidades artificiales de plástico. Sin embargo, en el verano de 2016 se instalaron 10 casas anideras de bambú, de las cuales dos fueron utilizadas por la especie en su época de reproducción.

Paralelamente, y durante los últimos tres años, se han instalado grabadoras acústicas para registrar la presencia o ausencia del rayadito en varios sectores de la isla, las cuales han arrojado mayor presencia de la especie en sitios como Tres Torres, Inocentes Alto y la Quebrada del Guatón.

Agradecemos a la comunidad de la isla Alejandro Selkirk por su compromiso por la conservación de esta ave y el apoyo en las acciones realizadas en terreno. |7

Salvemos La Higuera: el movimiento que busca evitar que lugar de increíble biodiversidad sea convertido en zona de sacrificio H ace años fueron tres termoeléctricas . H oy los proyectos minero - portuarios D ominga y C ruz G rande amenazan nuevamente un área prioritaria para la conservación . L a campaña “S alvemos L a H iguera ” busca evitar la pérdida del patrimonio natural que sustenta a su comunidad .

B allena minke ·

©O CEANA | Eduardo Sorensen

La Higuera es una comuna de la Región de Coquimbo, conformada por varias localidades de pequeños agricultores y pescadores, y que ha vuelto a ser noticia por los proyectos Dominga y Puerto Cruz Grande que pretenden instalarse en ella.

No es primera vez que la zona debe enfrentar amenazas de este tipo. Hace años, sus reservas marinas estuvieron amenazadas por tres termoeléctricas: Farellones (de Codelco), Barrancones (Suez Energy) y Cruz Grande (CAP).

La comunidad se organizó para evitar su instalación. Farellones fue la primera en caer luego de que Codelco decidiera retirarla por la desconfianza de los habitantes.

Luego se anunció la inminente instalación de Barrancones, por lo cual se formó el conocido movimiento “Salvemos Punta de Choros”, que generó una amplia repercusión mediática a nivel nacional. La presión de la ciudadanía fue tan grande que el en ese entonces presidente Sebastián Piñera, se vio obligado a detener la iniciativa. A principios de 2011, CAP retiró también la termoeléctrica Cruz Grande. La Higuera estaba a salvo.

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Sin embargo, en 2012 CAP ingresó a evaluación ambiental el proyecto minero portuario Cruz Grande. Un año más tarde, Andes Iron procedió con Dominga, la que considera la construcción de dos minas a rajo abierto para la extracción anual de 12 millones de toneladas de hierro y 150 mil toneladas de concentrado de cobre. Mientras la minera se encuentra en la última etapa de tramitación ambiental, Puerto Cruz Grande, que contempla el acopio de 13,5 millones de toneladas de hierro al año, está en tribunales ambientales de Santiago en estado de reclamación. Para evitar la devastación medioambiental que provocarían ambos proyectos, la comunidad local junto a organizaciones como Oceana, Modema y Chao Pescao, levantaron la campaña “Salvemos La Higuera”.

Recientemente, un estudio realizado por expertos para Oceana detectó que Andes Iron subestimó el área de influencia marina, y no consideró desde un inicio el impacto en el ecosistema de las embarcaciones que transportarán el mineral. Esto luego de tres años de iniciada la evaluación ambiental y tras reiteradas observaciones de las autoridades. Recién en octubre de 2016 la minera se hizo cargo de considerar dicho aspecto.

L a H iguera es uno de los 34 hotspots (“ puntos calientes ) de biodiversidad del mundo , y uno de C hile

los lugares más importantes de surgencia en el centro norte de

“Es inconcebible que a estas alturas del proceso identifiquen nuevos impactos sobre el medio marino, ya no es posible evaluarlos correctamente”, señaló Liesbeth van der Meer, directora ejecutiva de Oceana.

El amplio rechazo que ha despertado la minera y el puerto no es casualidad. La Higuera es uno de los 34 hotspots (“puntos calientes”) de biodiversidad del mundo, y uno de los lugares más importantes de surgencia en el centro norte de Chile, lo que significa que la Corriente de Humboldt genera el movimiento de masas de agua ricas en nutrientes desde las profundidades hacia la superficie, convirtiéndola en una zona altamente rica y productiva.

De acuerdo a la época, se han identificado entre 352 y 560 especies marinas, que dependen de este ecosistema para su alimentación, reproducción, crianza, y/o descanso. Varias se encuentran en estado vulnerable o en peligro de extinción, como el pingüino de Humboldt, chungungo, pato yunco, ballena azul y ballena fin.

El área se ha convertido en un gran atractivo turístico precisamente por sitios como la Reserva Marina Islas Choros y parte de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt, donde reside casi el 80% de la población mundial de esa especie. Un sector considerable de la localidad se encuentra sin protección, a pesar de que se ha calificado como un sitio prioritario para la conservación por Sernapesca y Conaf. Los pueblos costeros de la zona han convivido de manera armónica con sus recursos naturales, que se han transformado en su soporte económico, social y cultural.

A través de actividades turísticas, la agricultura, la pesca artesanal, y la extracción de machas y de locos, han creado fuentes de empleo sostenibles. “¿Vale la pena arruinar de manera irreversible este ecosistema por una minera que tendrá una vida útil de apenas 22 años? Darle el vamos a proyectos minero-portuarios en La Higuera sería un grave error, demostraría que nuestras autoridades están dispuestas a sacrificar para siempre una zona de incalculable valor medioambiental, por un proyecto que tiene fecha de vencimiento”, concluyó van der Meer.

C hungungo ·

© OC EANA| Eduardo Sorensen

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ECONOTAS entrevista a Carol Chamorro,

Ex encargada de unidad de gestión medioambiental, Municipalidad Juan Fernández (2014-2016) Especie endémica favorita: Michay (Berberis corymbosa) Lugar favorito de Juan Fernández: El cordón de Michay

“L os isleños ya visualizan la importancia de ser responsables con sus animalitos y sé que quer rán ser parte de la solución y no del problema . E stá en su ADN el sobrellevar localmente los desafíos de la naturaleza .” ¿Cómo llegaste al tema medio ambiental y cuál es en una ordenanza municipal sobre la tenencia respon-

tu relación con la isla?

Puedo decir que tengo una relación sanguínea con las islas. Soy “Chamorrita”. Atesoro algunos veranos de mi niñez recorriendo bosques, playas y diferentes rincones de Robinson Crusoe. En estas exploraciones me topé con personas del área científica que encendieron en mí una vocación por el área

¿Qué se ha hecho en la isla en relación a laTenencia responsable de animales?

Para saber qué se ha hecho debemos partir preguntándonos por qué, y en este escenario Juan Fernández no ha estado libre de problemas doméstico- ambientales con las mascotas. Havce años hubo un brote del virus distemper canino que llegó a la población, afectando a perros, fauna silvestre y a especies endémicas en grave peligro de conservación. En temas de tenencia responsable, recuerdo a un humorista en un festival de la langosta, ¡embromando sobre la presencia de más perros que personas en la velada!

Para solucionar este problema, además de aumentar el conocimiento en la comunidad, se comenzó a trabajar

sable de animales, la cual tuvo como principal objetivo el resguardar nuestro medio ambiente y fauna endémica de la isla, así como la salud humana y de los mismos animalitos domésticos. Para echar a andar la ordenanza comenzamos con un registro municipal, el cual ya está casi completo. Este 2017 ya comienza a regir, y además se continuará con la inscripción de las mascotas nuevas.

¿Qué fortalezas crees que tiene la comunidad isle-

ña para enfrentar este desafío?

Los isleños ya visualizan la importancia de ser responsables con sus animalitos y sé que querrán ser parte de la solución y no del problema. Está en su ADN el sobrellevar localmente los desafíos de la naturaleza. A mi parecer, el próximo paso es masificar la importancia de que las mascotas se encuentren sanas con sus chequeos veterinarios al día, y sobre todo bajo la vigilancia de sus dueños, para evitar accidentes y transmisión de enfermedades que puedan arriesgar la salud y bienestar de todos los habitantes del archipiélago: los niños, adultos, otras mascotas, el ganado, y toda nuestra preciosa fauna endémica. | 11

ECOFICHAS Spheniscus humboldti familia spheniscidae

© OCEANA | Eduardo Sorensen

© OCEANA | Eduardo Sorensen

pingüino de humboldt|

distribución: Chile y Perú estado de conservación: Vulnerables tamaño: entre 67 y 72 cm. descripción

En Chile vive la población más grande del pingüino de Humboldt a nivel mundial: un 81,3% de estas aves marinas habita en las islas costeras de las regiones de Atacama y Coquimbo. Las colonias más grandes se encuentran en las islas Chañaral de Aceituno, Pan de Azúcar, Grande, Pájaros 1, Tilgo y Choros. Se caracteriza por su cabeza negra así como por su cuello también negro en la parte posterior y blanco en la anterior. Además, presenta sobre su pecho blanco una “U” negra invertida, y una línea blanca que se extiende desde el cuello y detrás de la zona auricular, pasando sobre el ojo hasta la frentecaza, mortalidad accidental, contaminación (por ejemplo la instalación de industrias) y la disminución de su alimento (sardinas y anchovetas), han llevado a esta frágil especie a un estado de conservación vulnerable, acercándola al peligro de extinción.

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amenazas

Factores como la pérdida de su hábitat, caza, mortalidad accidental, contaminación (por ejemplo la instalación de industrias) y la disminución de su alimento (sardinas y anchovetas), han llevado a esta frágil especie a un estado de conservación vulnerable, acercándola al peligro de extinción.

Así como sucede con las fardelas en Juan Fernández, los pingüinos de las islas continentales se ven afectados por especies invasoras (EEI) que compiten por su hábitat y degradan sus lugares de nidificación.